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SELECCIÓN DE PERSONAL - por DavidRubio

Web: http://elreinorobado.blogspot.com.es/

¿Se puede matar a quien solo has conocido media hora antes? Me lo pregunto cuando aún tengo las manos entumecidas, observando al tipo que yace en el suelo del ascensor con los ojos todavía abiertos. Una voz administrativa informa, a través del intercomunicador, que se ha resuelto la incidencia y el servicio se reanuda. Resopló.
Planta 11. Siento un sudor frío. El ascensor se había detenido faltando veinte plantas para llegar a las oficinas, donde me harían la última entrevista. Hacía años que no lograba ir tan lejos en unas pruebas de selección de personal. He ensayado mil veces el apretón de manos inicial y la pose segura pero cercana. Necesito este trabajo. Miro hacia el suelo. ¿Por qué aguanté la puerta a este imbécil? Ya había marcado la planta. Hubiera bastado con mirar el móvil y las hojas se habrían cerrado. Pero no, tuve que escucharlo, verlo correr y poner la mano para evitar el cierre. Sí, eso hice. Y también lo estrangulé.
Planta 15. ¿Habrá cámaras? No creo. La voz que anunció la reanudación del servicio sonaba normal. Nadie me ha visto hacerlo. Al llegar, podría salir y dirigirme con la cabeza bien alta a la oficina. ¡Estúpido! El portero nos vio y seguro que en el vestíbulo sí que hay cámaras de seguridad. Cuando descubran el cadáver revisarán las imágenes y saldrá mi cara de perdedor, risueña, mientras impido que la puerta se cierre. Podría decir que se murió de súbito. ¿Tal vez un ataque al corazón? El hombre estaba nervioso por haberse quedado encerrado y eso puede pasar. Eso diré gritando, asustado.
Pero… ¡Maldita sea! Me arrodillo junto al tipo. Corro el nudo de su corbata y le desabrocho el botón de la camisa. Observó la marca morada que rodea su cuello. Joder, cualquier forense confirmará que fue estrangulado. Me condenaran. Por más que les explique que la culpa no es mía, sino de la empresa que había decidido dar la misma hora a los dos aspirantes al puesto.
Planta 25. Quizá fue el ascensor. Estoy convencido de que si se hubiera parado solo un cuarto de hora no habría sucedido nada. Tal vez quería que lo matara. Esperó a que lo odiara lo suficiente. Y ese arrogante se lo merecía. Si hubiera estado callado, seguiría paseando su condescendencia por las calles. Pero no, tuvo que decir que este trabajo, del que depende el futuro de mis hijos, no era para él nada más que algo transitorio, mientras estuviera en la ciudad. Me restregó su preparación, mostrándome con sutileza que yo no tenía ninguna opción. Si hubiera sabido que el banco iba a desahuciarme a lo mejor habría sido más discreto. Pero no lo sabía. Y ahora está muerto.
Soy víctima de una traición del destino, aunque este cliché no servirá a la policía. Ni al juez. El diccionario tiene una palabra para definir en lo que me he convertido: asesino. Iré a la cárcel. Mi mujer tendrá que explicar a los niños por qué su papa ya no vive con ellos. He de huir. Quizá no haya nadie cuando arribe a la planta 30. Podría marcharme por las escaleras. ¿Quién podría negar que él seguía vivo al bajarme? Hay mucho loco por ahí. Tal vez tuvo la mala suerte de encontrarse con uno.
Nos detenemos. Lleno los pulmones de aire. Las hojas se deslizan lateralmente.
Un hombre trajeado y sonriente aparece frente a mí.
—El señor Sánchez, ¿verdad?
Me recibe con normalidad. ¿Acaso no ve el cadáver?
—Sí, soy yo —respondo con la misma naturalidad.
—Buenos días, soy el adjunto a dirección. Le estábamos esperando.
Ha mirado adentro. ¿Por qué no muestra un mínimo signo de asombro?
—Disculpe mi tardanza. Nos hemos parado…
—No se preocupe, conocíamos la incidencia.
Le sigo hasta el despacho de dirección. Me abre la puerta. Tras una mesa, la persona que decidirá mi futuro me sonríe mientras dobla un periódico deportivo.
—Siéntese, por favor.
Tomo asiento, el tipo que me acompañó permanece de pie. El director me acerca un documento con un bolígrafo encima.
—Bienvenido. Este es su contrato.
—Pe… pero ¿así? ¿Sin entrevista?
—No hace falta, ya ha demostrado tener lo necesario para este trabajo. —El director mira detrás de mí, dirigiéndose a su adjunto—. ¿Se ha solucionado ya la incidencia del ascensor?
—Sí, señor. El personal de mantenimiento se ha encargado de ello.
Se me pasan muchas cosas por la cabeza, pero ya no son importantes.
Tengo el trabajo.

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22 comentarios

  1. 1. Rinconillo y Cortadete dice:

    Hola, DavidRubio. Me parece un buen relato, bien escrito y muy bien estructurado. El final entra dentro de la lógica del relato.
    Aunque no lo hayas señalado, creo que cumple con el reto de suceder todo en un ascensor. Enhorabuena.

    Escrito el 17 marzo 2016 a las 17:23
  2. 2. Manoli VF dice:

    Hola David.
    Suspense, análisis psicológico de la condición humana, ambición…como un thriller cuyas piezas encajan. Hacia más o menos la mitad del texto se hace un poco espeso, cuando el personaje divaga sobre lo que ocurrirá, pero esto queda subsanado con el final, revelador y sorprendente. Te comento lo que he visto:
    -Ese resopló, creo que se te paso cuando querías poner: “resoplo”.

    -“Siento un sudor frío. El ascensor se había detenido” creo que tendrías que marcar una inflexión más larga, bien con un punto de aparte o una frase introductoria: “Siento un sudor frío. Todo pasó demasiado rápido: el ascensor se había detenido…”

    -Creo que toda la estructura ganaría si separases un poco los bloques de los diferentes párrafos.

    Encantada de leerte, como siempre. Un abrazo.

    Escrito el 18 marzo 2016 a las 22:35
  3. 3. charola dice:

    ¡Hola DavidRubio! Gracias por comentar mi relato, allí te resuelvo algunas dudas acerca del mismo. Bien… acerca del tuyo, me parece un muy buen relato, empieza un poco lento, pero el final está excelente, donde se definen las cosas, creo que preparadas por los mismos jefes.
    En cuanto a la forma haya algunos errores de tildes:
    observo la marca … sin tilde
    Me condenarán… lleva tilde
    papá… lleva tilde.
    No estoy segura, pero los números deben ir escritos de esta manera: Planta once, planta quince, etc.
    Por lo demás encantada de leerte. Saludos.

    Escrito el 19 marzo 2016 a las 06:57
  4. 4. María Kersimon dice:

    Hola David,
    Has manejado la intriga y la tensión de una forma magistral. El primer párrafo es clave para enganchar al lector y has introducido las palabras obligatorias con naturalidad. Se lee con total fluidez de principio a fin manteniendo el interés en todo momento. Como es un thriller, se comprende que es todo acción y que no hay profundidad psicológica alguna. Así lo quiere el género. Es totalmente visual; uno cuando lo lee era viéndolo. Un buen thriller,; has captado mi interés. Un saludo.

    Escrito el 19 marzo 2016 a las 10:08
  5. 5. Cesar A. Martín dice:

    Hola David:
    Muy buen relato. Un inicio muy conseguido, contundente, breve y atractivo. Me encanta como partiendo del asesinato vas desplegando toda la historia. Manejas muy bien el lenguaje para transmitir sus dudas y miedos, y de paso marcas el ritmo del relato. Desde sus reflexiones nos describes al personaje y el conflicto sin que existan añadidos o acotaciones forzadas.
    Y la crítica a la situación actual la filtras como un elemento imprescindible para el desarrollo, nunca de forma gratuita.
    Lo único que no me cuadra con la naturaleza práctica del señor Sánchez es “Soy víctima de una traición del destino, aunque este cliché no servirá a la policía. Ni al juez. El diccionario tiene una palabra para definir en lo que me he convertido: asesino.” Seguro que quieres transmitir algo que se me escapa, pero siguiendo el pragmatismo del protagonista parece un pensamiento muy abstracto.
    Magnífico trabajo y enhorabuena.

    Escrito el 19 marzo 2016 a las 11:35
  6. 6. Daphne dice:

    Me encantan los thriller, en especial esos que traen consigo cosas que dentro, son impredecibles. Tiene un buen desarrollo, un buen e impredecible final. Las palabras obligatorias estan escritas y redactadas de forma natural, sin ser obligadas a meterlas. Sabes manejar bastante bien el suspenso, mas bien, lo que el protagonista imagina al haber hecho tal acto, lo que supone que irá a suceder, los planes para “escapar” y no terminar en la cárcel; para mi da como un brillo al final porque es inesperado tanto el resultado del trabajo como la prueba de este.

    Bien, si tendría que remarcar errores, sería los tildes, pero ya otra persona hizo el trabajo; se me adelantaron, pero por lo demás, esta perfecto <3

    Escrito el 20 marzo 2016 a las 02:27
  7. 7. Emma dice:

    Un buen relato David. Has conseguido que me vea dentro del ascensor viviendo las sensaciones del protagonista. Muy bien redactado.
    El final genial. Al igual que el protagonista, había pensado que todo estaba perdido para él, pero has conseguido darle la vuelta y sorprenderme.
    Las correcciones que podría hacerte, ya te las han comentado así que no voy a ser reiterativa.Me ha gustado leerte.
    Un abrazo, hasta el próximo taller.
    Te agradezco mucho que hayas pasado por mi relato (41) y dejado tus comentarios.

    Escrito el 20 marzo 2016 a las 10:56
  8. 8. Werchy lam dice:

    Enhorabuena David. Me has mantenido interesada de principio a fin. Y me ha sorprendido. Casi corría en busca del final. Es cierto lo que te dice alguien de los párrafos o alguna tilde. Sobre todo en ese “Siento un sudor frio” pero por lo demás, estupendo.
    Además ese final no del todo cerrado abre un click en la mente para preguntarse cómo es posible que eso que sucede estuviera preparado por la empresa.
    Un abrazo y también te espero en el próximo taller.
    Soy el 82 por si quieres pasarte.

    Escrito el 20 marzo 2016 a las 12:13
  9. 9. Emma dice:

    Hola David. Como doy por supuesto que no vas a volver a visitar mi relato, te aclaro aquí una duda que me planteas. Es referente a tu comentario en mi texto sobre la frase: “Perdóneme, usted no tiene la culpa de mi destino.”
    Te aclaro: Efectivamente, él no le ha reprochado nada a Claudia, pero ella sí le reprocha a él que vaya al piso 416, mientras que su destino es el sótano menos diez. De ahí su disculpa.

    ¡Ah! Quisiera pedirte un favor: ¿Podrías decirme como consigo las comillas españolas en mi teclado? Como siempre, agradecida por todo. Un saludito.

    Escrito el 20 marzo 2016 a las 14:16
  10. 10. José Torma dice:

    Amigo David, que gusto verte de nuevo por estos lares.

    El reto te vino como anillo al dedo, la accion se desarrolla vertiginosa, pero lo magistral es lo poco que requieres para llevarnos por una montaña rusa de emociones. Esa paranoia, mezclada (en mi caso) con un poco de claustrofobia, le da al relato un ritmo trepidante.

    Me espanta la descripcion del trabajo, ese giro final es genial.

    Muy logrado, te felicito y agradezco tus palabras a mi relato.

    Saludos

    Escrito el 20 marzo 2016 a las 20:39
  11. Hola David, bienvenido de nuevo.
    Me ha encantado, no tengo palabras, me has dejado prendida frente a la pantalla desde el primer párrafo.
    Solo señalarte ese “Resopló” que intuyo es un resoplo, pero soy la menos acertada para poner pegas ortográficas…
    Gracias por pasarte por mi relato.
    Un saludo y un placer leerte de nuevo.

    Escrito el 21 marzo 2016 a las 09:25
  12. 12. Paola dice:

    Hola David

    Ya te lo han dicho todo.
    Me ha parecido bien escrito, original y muy actual. Sorprendente.
    Me ha enganchado y no me esperaba el final.

    Escrito el 21 marzo 2016 a las 13:08
  13. 13. Isolina R dice:

    Hola, DavidRubio:
    Escribes muy bien y el texto me ha gustado. Aunque le voy a poner un pequeño pero.
    La primera persona en presente puede ser un poco peligrosa si no hay interlocutor.
    El narrador protagonista está un ascensor en el que se ha cargado al otro aspirante al puesto y empieza su monólogo. No se trata de un diálogo con otro personaje (en el ascensor no hay nadie más). Así que no puedo creerme, como lector, que soy el narratario al que se dirige la narración en presente. Por lo tanto deduzco que es un monólogo. El protagonista está pensando sobre lo que acaba de hacer. Pero, ¿alguien que está pensando se informa a sí mismo de sus propias acciones a palo seco? ¿Alguien que está pensando se informa: “Miro hacia el suelo”, por ejemplo? No pensamos así. Podemos sentir ira, dudar, temer, preguntarnos, intentar adelantar el futuro, tratar de escapar… Pero la información a secas en un monólogo nos presenta a un protagonista un poco lerdo. Se nota demasiado que es una información para el lector (del que se supone que no está en el lugar de los hechos” mientras están ocurriendo)
    Las soluciones pueden ser varias:
    1. Meter un interlocutor, de modo que todo lo que le pasa por la cabeza al protagonista se lo vaya contando a otro.
    2. Cambiar todo al pasado. Ahí ya no hay problema para que el lector se considere narratario de la historia.
    3. Desdoblar al protagonista y que se hable a sí mismo todo el tiempo en 2ª persona.
    4. Revisar todo el texto y cambiar aquellas oraciones de información a secas para que el prota no quede como un imbécil.
    Espero que mis sugerencias te sirvan.
    Saludos.

    Escrito el 22 marzo 2016 a las 13:47
  14. 14. Basilisa Nogales dice:

    Hola, DavidRubio:
    Me ha gustado mucho tu historia. Y el título le viene que ni pintado.
    Pero estoy de acuerdo con Isolina R en cuidar la información que se da desde el que piensa en presente. El presente es un tiempo muy adecuado para que el lector vea los hechos mientras están ocurriendo, sí, solo hay que tener la precaución de que parezca un monólogo y no algo que se cuenta a otro.
    Enhorabuena por un texto tan bien escrito.
    Un saludo.

    Escrito el 23 marzo 2016 a las 16:13
  15. 15. Sergio Mesa dice:

    buenas David!
    que gusto leerte. un relato sólido y directo. un placer, como siempre.
    en cuanto a posibles correcciones, creo que los compañeros ya han desgranado todo lo que podía apuntar así que me quedaré con el buen sabor de boca.
    un saludo, amigo
    nos leemos
    Sergio Mesa

    Escrito el 23 marzo 2016 a las 19:38
  16. 16. Wolfdux dice:

    Muy bien escenificado David. La reacción del protagonista me es muy verosímil y ese final inesperado me ha encantado. Como ya te han comentado los otros compañeros los pocos errores que he visto, no me repetiré. Un saludo.

    Escrito el 28 marzo 2016 a las 22:07
  17. Me gustó mucho tu relato. La tensión es palpable desde el inicio y ese final completamente inesperado, como dice Wolfdux, me sorprendió. Buenisimo.
    Felicitaciones, saludos y gracias por tu comentario en mi relato.

    Escrito el 31 marzo 2016 a las 16:26
  18. 18. Peter Walley dice:

    Hola David,

    Buena historia y muy bien contada, se disfruta de principio a fin. El final como te han dicho muy bueno, es de esos relatos que se te quedan mirando. Las palabras diccionario y traición un poco forzadas, aunque era un reto difícil este mes.

    Saludos,
    Peter

    Escrito el 31 marzo 2016 a las 17:27
  19. 19. Roger/NHICAP dice:

    Hola David,
    Me parece una buena reflexión sobre los límites de la competitividad. Y el final es genial, hasta tiene su punto de humor.
    te atreves con el narrador en presente que le viene bien aunque ya te apuntaron algún detalle a mejorar. La narración mantiene muy bien la tensión en espera de la conclusión, donde pones la guinda.
    Buen trabajo y divertido.
    Un abrazo

    Escrito el 31 marzo 2016 a las 19:47
  20. 20. KMarce dice:

    SaludOS David:

    Muy entretenido tu relato, es bastante condensado, ya que las explicaciones del porqué lo mata, solo me indica que esa persona es muy intolerante, bastante sicótica y en definitiva le faltan muchos tornillos, porque nadie normal mataría por un empleo… pero me ha gustado.
    Concuerdo con Isolina, pero no creo que sea un imbécil, o quizá lo sea pero en el término médico, porque ya demostró que está loco.
    Creo que muchos optan por escribir en primera persona, cuando la historia pide a gritos un narrador omnisciente. Por ello dicen que es díficil usar el recurso de primera persona. Sin ponerme más analítica, solo diré que la historia me ha gustado, pese a no sentir empatía por el protagonista.

    A Emma: No sé si funciona en todos los sistemas operativos, pero las flechas se escriben Alt+174 « y Alt+175 ».

    Saludos y ¡nos leemos!

    Escrito el 31 marzo 2016 a las 21:01
  21. 21. Pepe ILLARGUIA dice:

    Aprovecho los últimos instantes antes del próximo reto para las visitas obligadas. Este es un relato que podría haber firmado el mismísimo Kafka, en lugar de Castillo es un edificio donde te espera el adjunto y al final de la espesa burocracia el Director. La frase final parece el guion de un Lalo Azcona de la España más negra, aquel que decía: Los muertos no se tocan, nene.
    Enhorabuena. Un abrazo.

    Escrito el 31 marzo 2016 a las 21:03
  22. 22. Marazul dice:

    La primera parte del relato es buena. Las reflexiones del aspirante/asesino transmiten preocupación y tensión…mucha tensión; pero el final es fantástico. Que el asesinato al final resulte ser una prueba para aspirar al puesto de trabajo y que ello sume puntos, es digno de una mente muy perversa jeje….Precisamente por eso me ha gustado mucho. Y yo me pregunto, David, ¿a qué puesto de trabajo aspiraba el señor Sánchez?
    Un relato muy original, con mucho fondo y una pizca de humor negro.
    Un saludo

    Escrito el 31 marzo 2016 a las 22:13

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