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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Eclipse de Tierra - por Elvis Christie

Por fin había llegado el día y Abraham Hernández se encontraba preparado para el momento mas importante de su vida y, probablemente, de la de todos los selenitas: el Acta Fundacional de la Luna como estado independiente de la Tierra, asociado en pie de igualdad al resto de estados y federaciones terrestres con reconocimiento explícito de sus singularidades.

Habían pasado más de ciento veinte años desde que la Luna fuera colonizada por el ser humano y a lo largo de ese tiempo el satélite había sido protagonista involuntario de incontables guerras, todas ellas libradas en el suelo de la Madre Tierra. Desde la primeras disputas por la explotación de la moondrita hasta las más recientes por el establecimiento de estaciones de atraque y espera para las expediciones espaciales, la vida de los selenitas -o lunmoonitas, como preferían ser llamados en su particular idioma, creado con una curiosa mezcla de inglés, chino y ruso- había discurrido, en cambio, por cauces pacíficos. Era la ventaja que les otorgaba la distancia. Sin embargo, la vida era dura en Lunamoon. Si en los primeros tiempos el principal problema fue la necesaria importación de tecnología y alimentos, una vez superado éste con fábricas y granjas autóctonas sobrevino el no menos importante de la cada vez más abundante población (nativa e inmigrada) que, unido al pago de tributos a las organizaciones nacionales terrícolas y la esquilmación llevada a cabo por las corporaciones mineras, reclamaba unos recursos que el satélite producía a duras penas.

Pero un hombre, un nativo, tuvo el altruismo, el carisma y la decisión y visión suficientes para, primero, alzarse como gobernante y representante del casi millón de lunmoonitas que poblaban la Luna cuando lo eligieron siete años terrestres atrás; y, segundo, para haber sabido negociar con los representantes de los gobiernos terrícolas un aceptable Acta de Independencia. Abraham Hernández era ese hombre y faltaba menos de una hora para el momento culminante de todo ese proceso y de su vida. Esa tarde se celebraba en el Parlamento Lunar una reunión excepcional del Congreso Mundial donde se daría lectura a la Constitución de la Luna y Abraham, como máxima autoridad anfitriona, pronunciaría el discurso inaugural y leería el primero de sus artículos: «Lunamoon se constituye en una nación libre que, integrada en la Confederación Mundial de Estados Democráticos, proclama como valores superiores de su ordenamiento la libertad, la igualdad, la justicia y el pluralismo social y político».

Abraham aprovechó los últimos minutos que le quedaban antes de acudir a la Sala de Recepciones (a un acto protocolario donde se limitaría a dar apretones de manos a los dignatarios presentes) para repasar sus notas del discurso y, sobre todo, de las respuestas que había preparado para las preguntas que pudieran hacerle en la posterior rueda de prensa. Cuando consideró que era el momento de salir se observó brevemente en el espejo de su despacho y, como tantas otras veces, sonrió divertido ante la imagen que aquél le devolvía, ataviado con el traje ceremonial típico de los cargos políticos lunmoonitas, cuyo elemento más característico era el sombrero de copa con el que se cubría en recuerdo de la primera obra teatral que se representó en la Luna por los colonos en el antiguo teatro que hoy era el edificio del Parlamento Lunar.

Aproximadamente una hora más tarde Abraham Hernández se encontraba de pie ante el estrado de oradores con quinientos pares de silenciosos y expectantes ojos fijos en él (y otros diez mil millones que se presumían ante consolas y dispositivos audiovisuales) y comenzó su discurso:

—Excelentísimos señores y señoras presidentes y representantes de las naciones de la Confederación Mundial de Estados Democráticos —comenzó diciendo en su lengua materna que, por convención popular, se había convertido en una suerte de idioma común, conocido por la práctica totalidad de la Humanidad. Hizo una pequeña pausa y continuó: —Ciudadanos y ciudadanas de todo lugar de la Tierra, la Luna o cualquiera de las Colonias habitadas de…

No pudo continuar. En ese momento apareció en su frente, un centímetro por debajo de la línea que dibujaba el ala frontal del sombrero de copa, un círculo oscuro del que inmediatamente comenzó a brotar sangre y su cuerpo de desplomó hacia delante, rebotando en el atril y cayendo al suelo donde quedó inmóvil. Ni siquiera dio tiempo a que cundiera el pánico pues por las puertas del inmenso hemiciclo que era el Parlamento Lunar comenzaron a entrar en tromba incontables individuos armados que mantuvieron en sus estrados a los presentes.

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8 comentarios

  1. 1. Frida dice:

    Hola Elvis. Un buen relato. Como siempre, los humanos, llevando nuestros problemas y nuestro más oscuro yo incluso a la luna. Desde el principio, Abraham me ha suscitado cierta similitud con Martin Luther King. Inexplicablemente, tenía la sensación de que iban a acabar matándolo, porque cuando alguien ofrece un sueño que se puede materializar, se convierte en peligro para el avaricioso.
    Muy bien introducido el reto en la narración. He podido ver perfectamente esa sociedad de la que hablas, se me ha semejado un poco a la gente que pululaba por Firefly o por Farscape. Me he imaginado la luna colonizada al estilo de estas dos series.

    En cuanto al aspecto técnico, tan solo comentarte una cosilla.
    “el momento mas”, aquí, se te ha escapado la tilde de más.

    Escrito el 17 abril 2016 a las 19:54
  2. 2. Elvis Christie dice:

    Gracias por tus palabras, Frida. Me animan a empezar y no quedarme sólo en eso, pues -como quien dice- acabo de llegar al umbral de la escritura. Hasta ahora no había hecho otra cosa que algún microrrelato de 100 ó 200 palabras y este reto de 750 me pareció ideal para darme un pequeño empujón.

    PD.: Lo de la tilde fue un lapsus por escribir a vuelapluma y enviar sin revisar casi.

    Un saludo.

    Elvis

    Escrito el 17 abril 2016 a las 20:47
  3. 3. Luis Oliveira dice:

    Elvis, esto es grandioso.

    Como dice Frida, hallaste la manera más idónea de representar a los seres humanos: trayendo la guerra y la discordia.

    Sinceramente me gustaría leer una continuación, si existiese alguna.

    Escrito el 18 abril 2016 a las 17:42
  4. 4. Elvis Christie dice:

    Gracias,Luis:

    Si la próxima entrada lo permite, intentaré dar continuación al relato. Me lo tomo como un reto adicional.

    Y, efectivamente, cada vez que salimos de nuestros límites territoriales exportamos lo peor: las enfermedades, la guerra…

    Escrito el 18 abril 2016 a las 21:33
  5. 5. Caciba dice:

    Hola, Elvis Christie

    Perdona por la tardanza en pasarme por tu relato y gracias por tu aclaración sobre los guiones.

    Con respecto a la forma y contenido: tu relato está muy bien escrito y es coherente. Has mostrado la Luna como si fuera cualquier otro país de la Tierra, eso está bien porque allí donde vaya el ser humano arrastrará también su mochila de miseria.

    Enhorabuena y un saludo

    Escrito el 26 abril 2016 a las 10:07
  6. 6. SyVy dice:

    ¡Hola! ¿ Qué tal? Veo por los comentarios que es tu primer relato, ánimo y continúa escribiendo, que vas por buen camino 😉

    En cuanto al relato me ha gustado y me recuerda intensamente a lo que ocurre por aquí jaja ;p.

    Creo que el relato es equilibrado y no abusas de extenderte en ninguna parte lo cual se agradece dado que es como una especie de introducción a una historia más compleja ,¿no?

    El principal problema que le encuentro es la estructura en las descripciones, pues es un pelín caótica, me explico; deberías usar más puntos y tener cuidado en la combinación pues algunas partes pierden coherencia y se hacen abruptas y farragosas en la lectura ( creo que si repasas el relato entenderás lo que digo ) .

    No obstante , buen relato y ánimo para las próximas entregas, que las leeré con gusto.

    Te invito a leer el mío a ver si te gusta 🙂 . Es el 109.
    ¡Un saludo!

    Escrito el 28 abril 2016 a las 08:08
  7. 7. Elvis Christie dice:

    Gracias por vuestros comentarios, Caciba y SyVy.

    En efecto, tras haberlo releído se me aparece más como una introducción (al menos los primeros párrafos) que como un relato. Error de principiante, espero.

    En cuanto a la estructura, es mi principal fallo; lo sé: frases largas y, para colmo, con subordinadas, que hacen fácil perderse. Es un gaje del oficio (soy abogado, para mi desgracia).

    Lo dicho, agradezco vuestros comentarios.

    Escrito el 28 abril 2016 a las 18:05
  8. 8. Elvis Christie dice:

    Luis:

    He recogido el guante y para mayo ya tengo preparada una continuación del relato. Y, la verdad, estoy emocionado ante la perspectiva de que salga de aquí algo de más envergadura. Lo llamaré (muy originalmente) Eclipse de Tierra, capítulo 2. ya tengo el borrador y nada más le meta un poco de tijera y corrija errores de la vuelapluma lo envío.

    Gracias por tu envite.

    Escrito el 5 mayo 2016 a las 18:02

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