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LA OTRA CARA DE LA LUNA - por CARMELILLA

LA OTRA CARA DE LA LUNA

Luna Volvió su mirada hacia su cara opuesta a la tierra
—¡Hola Luna! ¿qué hay de nuevo?
—¡Hola Cristobal! Lo nuevo está llegando— dijo Luna, sabiendo que Cristobal no esperaba esa respuesta—.¿Dónde está…?
—¿Dónde va a estar? dónde siempre…por ahí, buscando algo para observar—contestó con desdén.
Luna vio llegar a Galileo con paso lento, los brazos cruzados sobre su espalda y negando suavemente con la cabeza.
—¡Hola Luna! Otro día más sin hacer nada, no creo que sea provechosa mi estancia en tu hogar, sinceramente—insistió un día más.
— Luna me ha dicho que algo nuevo está llegando—intervino Cristobal—. Aunque no espero que sirva para que esta cabezota entre en razón.
—Siempre quejándote. Podías agradecer la oportunidad que te brindo…
—¿Oportunidad, dices?—contestó irritado Galileo—. “Oportunidad” son aquellas circunstancias que suceden y que las podemos usar para hacer algo, ¿te parece que algo, ni parecido, ocurre en tu hogar?
—Por supuesto, cada día, cuando vuelvo la mirada, estáis vosotros y nada me hace más feliz que poder conversar con personas tan relevantes. Galileo, tú me observaste, aunque no el primero, ese fue Copérnico, pero tú fuiste el primero que tras observarme, te atreviste a dejarlo por escrito y a defender tus teorías hasta la muerte si era necesario.
—Luna, navegar y llegar a tierra virgen tampoco creo que te deba eclipsar, como parece que así ha sido—intervino Cristobal.
Un golpe seco, interrumpió la conversación. Luna sonrió abiertamente y observó la reacción de Cristobal y Galileo.
Levantándose de la superficie lunar y limpiándose el polvo del traje, estaba un hombre algo largirucho, delgado, con oscura y poblada barba y grandes orejas. Este sintiéndose observado y mientras recogía del suelo un objeto negro, al que también sacudía el polvo, dijo:
—Buenas noches caballeros, o quizá tendría que decir buenos días ya que nos cubre un manto nocturno realmente oscuro y sin embargo, estamos perfectamente iluminados…perdonen mi descortesía—dijo, dirigiéndose hacia los hombres y extendiendo su mano hacia uno de ellos—: me llamo Abraham. Abraham Lincoln.
—Buenas noches caballero—contestó Cristobal a la vez que estrechaba su mano con la del recién llegado—: soy Cristobal Colón.
—Buenas noches y bien venido—intervino Galileo, sin dejar de mirar el objeto que Abraham acababa de recoger de la superficie lunar—: yo soy Galileo Galilei.
Abraham completamente impactado, tardó en reaccionar y con su sombrero de copa en la mano al fin pudo articular palabra:
—¡Dios mío…Cristobal Colón! No puede ser…usted descubrió el Nuevo Mundo. Usted…¡Descubrió America! Mi país, del que soy presidente…bueno o lo era—Y dirigiéndose a Galileo emocionado—: ¡Y usted, uno de los mejores científicos del mundo…!—y reflexionando en alto dijo—: ¡pero ayer me dispararon y hoy…había muerto!
— Si, amigo, aquí estamos los tres, eso sí, muertos—dijo Cristobal—, pero Luna, cabezota y caprichosa, cree que personas tan relevantes como nosotros debemos hacerle eterna compañía, y aquí estamos, esclavos de sus deseos.
Abraham torció el gesto, mostrando su malestar por lo que acababa de oír y se dirigió a Luna que observaba la escena con fascinación:
—Luna, he muerto por defender la libertad y la diginidad: ¿acaso te gustaría ser esclava de la tierra?
—¡jamás, no he sido ni seré exclava de nada ni de nadie!—contestó con rotundidad.
—Pues del mismo modo que no quieres ser exclava, no seas ama.
Luna recibió la respuesta y le pesó como si hubiera caído sobre ella un gran meteorito. Comprendió que no podía dar gusto a sus caprichos por muy intensos que fueran y tras un rato sin hablar, rompió el silencio:
—Está bien, si preferís que vuestras almas se pierdan en la nada os propongo devolveros allí. Subir sobre mis pestañas y en un abrir y cerrar de ojos, volveréis al lugar del que mi influjo os atrajo, volveréis a estar solo en el recuerdo de los hombres.
Y así fue como Abraham Lincoln, Cristobal Colón y Galileo Galilei, subieron a las pestañas de Luna, esta abrió y cerró sus ojos, y aquellos resbalaron cayendo al espacio oscuro e infinito. Abraham aun pudo gritar:
—¡Mi sombreroooo…!
Luna vio sobre su superficie el sombrero de copa que Abraham había traído consigo. Caprichosa como era y enfadada como estaba, pensó: «este se queda aquí conmigo, seguro que nunca pedirá su libertad».
Y Luna volvió su mirada a la tierra, mostrando su cara de plata. Observando y conteniendo, no se sabe por cuánto tiempo, su carácter caprichoso.

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8 comentarios

  1. 1. Guiomar de zahara dice:

    Carmelilla hola:
    Tu relato me ha gustado y lo he leído de un tirón.
    Me ha encantado la manera de relacionar varios ilustres genios – cada cada uno a su maneras – en un lugar: la luna. El diálogo bien construido, y el final del sombrero …¡Sensacional!
    ¡Hasta la próxima!

    Escrito el 17 abril 2016 a las 09:28
  2. 2. Don Kendall dice:

    Hola Carmelilla,
    Una idea ocurrente la que planteas en este relato. La luna caprichosa atrayendo las ¿”almas”? de algunos personajes históricos.
    FORMAL: Inicias con una mayúscula en “Volvió”. Repites en dos ocasiones “exclava”.Hay un ¡jamás…, que tal vez debería ir con mayúscula. Alguna tilde como en “Cristobal”.
    En cuanto a la forma de desarrollar la idea original que planteas: Parece que propones como “personaje principal” y a su vez el personaje en el que está el “punto de vista” el relato es la Luna. Como lector quizá me hubiese conocer el cómo y por qué se resuleve el conflicto entre el capricho y la facilidad de la Luna para hacer y deshacer a su antojo.
    En fin, un relato entretenido, con ese matiz que no acabo de asimilar de tener a la Luna como personaje y como contexto, que siendo posible es harto complicado.
    Gracias por tu trabajo

    Escrito el 17 abril 2016 a las 15:15
  3. 3. Cryssta dice:

    Hola Carmelilla, muchas gracias por pasarte por mi relato y comentar. Con gusto te devuelvo la visita, además tu relato es uno de los que me toca comentar así que allá voy.

    Lo he tenido que leer dos veces porque la primera vez no me enteré muy bien con tanto personaje famoso. Me parece muy original el relato que has hecho, el tema que nos han propuesto era complicadillo.

    Te diré las cosas que he visto que se pueden mejorar y que no te han dicho los compañeros:

    – si no he contado mal dices “Luna” catorce veces, son demasiadas

    – “volvió la mirada”

    – “la Tierra”, cuando se está hablando del planeta es siempre con mayúscula

    – “¿Qué hay de nuevo?”

    – repasa la entrada que han en el blog donde se explica cómo se ponen los guiones en los diálogos

    – “tras observarme” va entre comas porque es una aclaración

    – sobra la coma tras “un golpe seco”

    – “había un hombre algo larguirucho” en este caso es mejor usar el verbo “haber” que el “estar”

    – “sintiéndose observado” entre comas

    – sobra la coma tras “y sin embargo”

    – “estrechaba la mano del recién llegado” ya se sabe que la estrecha con su mano así que sobra decirlo

    – “completamente impactado” entre comas

    – ¡Dios mío!…¡Cristóbal Colón!

    – “América”, te olvidaste la tilde

    – “bueno, o lo era”

    – “y hoy…estoy muerto” aquí mejor usar el verbo “estar”

    – “dignidad”, se te coló una “i”

    – “subid sobre mis pestañas” es un imperativo, no un infinitivo

    – “aún” lleva tilde porque equivale a “todavía”

    Espero que mis correcciones y te hayan servido y leerte el próximo mes. Un abrazo.

    Escrito el 18 abril 2016 a las 08:06
  4. 4. L.M.Mateo dice:

    Hola, Carmelilla:

    Un relato de lo más alocado y divertido. Me ha encantado.

    Sin embargo, en el aspecto formal hay que mejorarlo bastante. Como Cryssta y Kendall ya te han marcado los errores que he detectado, no voy a repetirme.

    Un abrazo.

    Escrito el 20 abril 2016 a las 01:20
  5. 5. Otilia dice:

    Hola Carmelilla,
    Me ha gustado tu relato, es original y se lee fácilmente.
    En cuanto a la forma, los compañeros anteriores ya han dicho todo.
    Nos seguimos leyendo. Saludos

    Escrito el 21 abril 2016 a las 11:13
  6. 6. Victor Hugo Montenegro dice:

    ¡Hola Carmelilla!

    Un relato muy divertido, me gustó eso de ver a Copérnico y Galileo en el mismo estrado. Indudablemente tienes un gran manejo de los diálogos porque la trama se va desarrollando con cada línea. El final muy original. En todo caso trata de dejar más delimitado el manejo de la luna porque a mí también me pareció que en algunas líneas se puede entorpecer el proceso de interpretar la historia por no dejar delimitado el concepto de la luna que estuvo bajo el contexto y al mismo tiempo como personaje dentro de la trama de la historia.

    ¡Buen trabajo!

    ¡Un abrazo!

    Escrito el 22 abril 2016 a las 19:01
  7. 7. Wiccan dice:

    Buenas Carmelilla,

    Tu relato es un derroche de imaginación y te felicito por ello. Creo que lo has estructurado muy bien, que has llevado muy bien los diálogos y el desarrollo de la historia.
    A nivel formal, lo único que te puedo señalar es que en varios momentos del relato hay mayúsculas que no deberían ser o faltan en lugares que si deberían (ese “volvió” incial, en la frase “¿Dónde va a estar? dónde”, el segundo dónde creo que debería ser mayuscula), son temas de revisión, lo se, pero es por ponerle algún pero al texto.
    A nivel contexto también me ha gustado, lo que más, esa forma de introducir el sombrero con Abraham Lincol para introducir un personaje que haga que la Luna se replantee lo que está haciendo, me ha parecido algo muy natural dentro de lo fantástico del relato. Lo que si me habría gustado es un inciso de Luna explicando porqué Cristobal Colón o incluso Abraham Lincol; Galileo lo veo más entendible por esa relación con el espacio, pero en cuanto a los otros dos la sensación es que podrían haber sido cualquiera. Puede que fueran ellos por un casual o que los eligiera por algo, pero al terminar el relato me quedé con las ganas de saber porqué ellos, sea cual fuera la razón.
    También creo que has hecho muy buen trabajo al caracterizar a la luna, que de caprichosa y egoista me ha caido mal.
    Reto conseguido y una historia original, imaginativa, fantástica y con mensaje, te vuelvo a felicitar.
    Muchas gracias por pasarte por mi relato y por dejar tu comentario, espero seguir leyéndonos.
    Un saludo!!!

    Escrito el 22 abril 2016 a las 20:37
  8. 8. Oliver Sierra dice:

    Hola Carmelilla,

    un relato original y con un desarrollo bien llevado hasta el fin. Los diálogos se hilvanan de manera que fluye el relato. Me gusta.

    Ahora, los peros:
    cuando Abraham dice que su pais es América, debo confesar que eso siempre me suena como un intento de colonizar el continente entero. Son los Estados Unidos, no América. Supongo que fue una primera maniobra suya para extender la globalización.
    Luego Abraham añade que Galileo es uno de los mejores científicos del mundo, pareciendo que fuesen coetáneos. Creo que quedaría mejor decir que fue uno de lo mejores científicos de la historia, aunque personalmente, prefiero destacarlo como el padre de la ciencia moderna ( perdón, pero soy un hombre de ciencia)

    Por otra parte, me resulta confuso como interactúan los personajes con Luna, puesto que no se si aparece para ellos como un ente, o como una voz en off del propio satélite. Comparto lo que se ha comentado de la excesiva reiteración de la palabra Luna.

    Otro punto es cuando Abraham comenta que no sabe si decir buenas noches o buenos días. La cara oculta de la Luna recibe insolación como todo el satélite, de modo que cuando está expuesta a ella, desde su supercifie no es posible observar el cosmos, ergo me resulta confusa esa frase.

    Un relato divertido de leer ante todo.

    Espero sea de ayuda,
    un abrazo

    Escrito el 29 abril 2016 a las 18:10

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