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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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DESEO - por GAIA

DESEO

El anciano encontró la llave en el fondo del mar hace más de cincuenta años. Eso fue para la época que era buzo y llevaba grupos a conocer las profundidades del océano.

La llave estaba dentro de un sobre que a su vez estaba dentro de una pequeña bolsa plástica. También dentro de esa bolsita había una carta que optó por no leer ya que no estaba dirigida a él. Ese día, cuando llegó a su cabaña, la guardó en una gaveta de la mesita de noche.

El anciano había vivido solo siempre. Por ser tan viejo, ya no tenía fuerzas para nadar y pasaba la vida releyendo con una lupa, libros y periódicos viejos. Se alimentaba de frutas y legumbres de su huerto y del agua de los cocos que caían de las palmeras que rodeaban su morada.

Siempre se acostaba antes del anochecer y se levantaba al primer canto del gallo. Como no tenía con quien conversar, hablaba para escucharse y comprobar que todavía estaba cuerdo y sobre todo, vivo. Su monólogo siempre era sobre lo feliz que había sido en las profundidades del mar.

Cuando sintió que la muerte vendría por él, vino a su memoria la llave que había guardado por tantos años y la sacó de su bolsa. Lloró cuando vio que el tiempo la había conservado intacta. Se atrevió a leer la carta que decía: esta llave abrirá todas las puertas por las cuales quieras entrar. Sólo tienes que desearlo.

El anciano a duras penas caminó hacia la puerta de entrada deseando llegar al fondo del mar y lo logró.

Aún conservo la bolsita vacía…

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18 comentarios

  1. 1. Autor dice:

    Bien, es una historia tierna. Desconozco la edad que tienes pero parece un relato escrito por alguien menor. Lo haces muy bien.

    Entonces, a contruir un poco. En la escritura hay una regla de oro: Muestra, no cuentes. Lo cual a mi parecer parece ilogico ya que si escribes es para contar algo. Pero eso es un pensamiento mio, y a decir verdad, en la vida, en la practica, en la aplicaicon dicha regla funciona. Te recomiendo intentar seguirla. Aunque tambien depende de estilos, asi que…. bueno.

    Al final, no se si llego lograr a la puerta o al fondo del mar. No se si es por que la llave lo transporto o que cayo al agua. Son dudas que podrias desarollar mas en una futura version.

    Trata siempre de hacerte preguntas: ¿Porque, cuando, como, luego?, y a raiz de ellas contastarte a ti mimso escribiendo.

    Animo y a seguir adelante.

    Escrito el 17 junio 2016 a las 18:31
  2. 2. Algocar dice:

    Opino más o menos como el primer comentarista, pero exceptuando algún acento aquí y allá, me gusta mucho la historia. Continua trabajando duro pero siempre disfrutando de nuestro vicio común, las letras. Un saludo y lo dicho, buen trabajo.

    Escrito el 17 junio 2016 a las 19:07
  3. 3. Dante Tenet dice:

    Gaia:
    “Lo bueno si breve dos veces bueno”, te han sobrado palabras.

    Linda historia, quizás una línea en el final para hacerlo mas redondo.

    Pues el relator es el que conserva la bolsita vacía, pero nunca se supo que era parte del relato.

    Nos estamos leyendo, estoy en el 67

    Escrito el 18 junio 2016 a las 01:25
  4. 4. beba dice:

    Hola Gaia:Acuerdo con los comentarios anteriores. De todos modos me encantó el ámbito de la historia:lo pintoresco de la vida sencilla del anciano y el clima de ensueño del añorado mar. Nada que empañe la historia.
    Estoy cerca de tu viejo soñador,en el 203.

    Escrito el 18 junio 2016 a las 02:24
  5. 5. Marcelo Kisi dice:

    Hola GAia!
    Como a mis anteriores compañeros, me gustó la ambientación de tu historia, y tu estilo agradable para escribir.
    Te agrego dos palabras más sobre el mostrar y contar. Contar es una especie de “hablar general”, y mostrar es “pasar una película”. Decir que cuando joven llevaba grupos a bucear, no es lo mismo que mostrar: “Hizo señas a su grupo de buceo de subir a la superficie y esperarlo en el bote. Él había visto algo brillante en el fondo y quería revisarlo. Bajó, despejó algunas algas, y llegó al objeto brillante. Era una llave bastante extraña”.
    Otra distinción que podemos hacer es entre el “había una vez” de un cuento y el “hasta que un día…” En algunos cuentos suele haber una intro que describe el mundo de la narración: un bosque, una princesa, enanitos, una madrastra que todos los días hacía tal o cual cosa. Toda esa descripción es solo la introducción, y debe ser relativamente corta con la otra parte, donde empieza la acción que viene a cortar la armonía de ese mundo. Fijate que, de los cinco párrafos que tiene el cuento, cuatro están dedicados a describir la parte armónica de su vida, y recién ocurre algo en el quinto. Entonces, hay que abreviar la intro o alargar la acción, para atrapar al lector.
    Espero que te sirvan estas cosas, que te ofrecen una mirada para que avances, porque tenés buenas ideas y mejor potencial! Adelante!

    Escrito el 18 junio 2016 a las 17:47
  6. 6. gaia dice:

    Autor, Algocar, Dante, Beba y Marcelo:
    Muchas gracias por sus comentarios y consejor literarios.
    Los recibo con humildad

    Escrito el 19 junio 2016 a las 14:49
  7. 7. El Graffo dice:

    Hola Gaia,

    Coincido en particular con Marcelo Kisi acerca de mostrar, en lugar de contar. Te ha dejado no solo un buen consejo, sino también un excelente ejemplo.

    De mi parte, te recomiendo que leas (o releas) “El viejo y el mar” de Ernest Hemingway. Tiene excelentes diálogos que retratan la soledad de un anciano.

    Gracias por comentar mi relato! Saludos!

    Escrito el 20 junio 2016 a las 02:43
  8. 8. R.B. dice:

    Hola Gaia,
    Gracias por tu visita en “la llave del tiempo”
    Tu relato me pareció tierno y conmovedor, pero tienes darle mas tiempo a tu relato y tomártelo para contar lo que sucede, no poner todo de una vez y resumir una increíble idea en cuatro párrafos.
    Besos y nos leemos

    Escrito el 20 junio 2016 a las 04:29
  9. 9. Shira M. Collins dice:

    Hola,
    Es una historia que me ha gustado. Corta pero intensa. Y el final no me lo esperaba, el narrador que de repente es parte de la historia me ha sorprendido.
    Enhorabuena.

    Escrito el 20 junio 2016 a las 15:51
  10. Hola GAIA:
    Un bonito relato de soledad. Lo importante es la historia, con el tiempo lo de mostrar te saldrá solo. Convierte tu idea en una película que solo tu ves en tu mente; describe cada escena, pon en movimiento a cada personaje y todo estará hecho.
    P.D: Gracias por tu comentario en mi relato. No leemos en la próxima.

    Escrito el 20 junio 2016 a las 17:01
  11. 11. Eduardo Tapia dice:

    Hola Gaia:

    A mí también me ha gustado tu relato, cuentas una vida de forma sencilla y corta, resulta una narración muy agradable.

    Yo te voy a señalar solo un par de detalles en tu elección de palabras. Me han sonado un poco raro “Cabaña” y sobre todo “el primer canto del gallo.” Verás, cuando hablas del primer canto del gallo, aunque sea una frase hecha y no haya que tomarla literal, la realidad es que me alejas de tu construcción de playa paradisíaca y me llevas a una granja. Creo que en la casa del anciano realmente no había gallos ¿verdad? pues yo hubiera intentado evocar un amanecer de otra manera más apropiada para una isla desierta, algo así como “despuntando el Sol en el océano” me mantendrías en ese amanecer playero digno de una postal, en vez de la granja de pollos de mi abuelo.
    La de “cabaña” ya es más discutible, realmente es perfectamente aceptable que lo llames cabaña, pero eso me recuerda también a un refugio en mitad del campo, un sitio en la montaña, al leerlo a mi mente le dio por pensar que ya no estaba en el mar donde comienza la historia, sino muy lejos de allí. Yo hubiera elegido choza o chamizo para evocar la típica casa improvisada junto al mar.

    ¡Ánimo!

    Escrito el 20 junio 2016 a las 22:01
  12. 12. gaia dice:

    Eduardo, gracias por tu comentario. Vivo en una isla caribeña y los gallos viven felices en la ciudad igual que en el campo; unos en granjas y otros en el patio del vecino. Le llamamos cabañas a apartamentos o chozas frente al mar, inclusive habitaciones especoales en hoteles o casitas con vista al mar. Así somos los caribeños. Debí especificar. Te agradezco la observación.

    Escrito el 20 junio 2016 a las 23:47
  13. 13. María Esther dice:

    Gaia, muchas gracias por pasarte por mi relato.
    He leído el tuyo y me gustó.
    Es sencilla,pero tiene como la magia de los cuentos infantiles.
    Lo del canto del gallo,es muy bonito.Quizás sí,suene raro en una playa,pero como tu dices que vives en una isla caribeña donde ellos viven en libertad,claro para ti es algo natural.
    Suerte, nos seguimos leyendo.
    Maritel

    Escrito el 21 junio 2016 a las 01:09
  14. 14. Luis Rivas V dice:

    Hola Gaia, soy Luis Rivas V Del 130. Gracias por tus comentarios.

    Esta cuento me fascino, en todo el sentido de la palabra, siento que siempre que se hace empatía en un personaje mayor se tiende a ser muy nostálgico (¿será que así estaremos en años futuros?) la verdad tu historia tiene todo para un cuento, pero coincido con los demas en cuanto a mostrar (soy nuevo en la escritura, también tengo que perfeccionar este tema)

    Nos seguimos leyendo

    Escrito el 21 junio 2016 a las 08:04
  15. Hola Gaia:
    Has hecho un cuento muy bonito. Me he quedado con ganas de más. Quizá contar algo que le hubiera pasado en la vida. Para mi gusto, sobra la parte de la alimentación y hubiera añadido algún temor o fobia por lo que no abrió la carta. También el final lo veo confuso. No veo claro quien conserva la bolsa, aunque pienso que es el narrador testigo. Tampoco se sabe que pasó con la llave, si la llegó a usar.
    Felicidades y un saludo
    Gracias por pasar por mi relato

    Escrito el 21 junio 2016 a las 12:48
  16. 16. Beluis dice:

    Hola Gaia!
    Gracias por leer mi relato. En cuanto al tuyo me ha gustado mucho y como bien dice alguien por ahí, lo bueno si breve dos veces bueno.
    Felicidades!!!
    Nos leemos. Salud!

    Escrito el 21 junio 2016 a las 16:28
  17. 17. Wiccan dice:

    Buenas Gaia,
    Haces una narración muy bonita y pausada en el relato, reflejando esa calma de final de la vida del anciano, sin embargo, estoy un poco de acuerdo con algunos compañeros, el final es confuso, no se sabe quien habla ni porqué participa en la historia ni se llega a saber que pasa con el anciano, queda demasiado en el aire, podría ser que hubiera muerto, que “mágicamente” hubiese podido volver al oceano pero no hubiera muerto, que hubiese decidido suicidarse en el oceano y por eso volvió a él. Ese final tan abierto es lo que me desconcierta un poco, porque como lector no tengo claro como sentirme al terminar de leer el texto.
    En cuanto a la forma, solo indicarte que yo pondría una coma en después de la y en “cuerdo y sobre todo, vivo”.
    Pese a ese desconcierto final, un relato muy bonito. Gracias por compartirlo.
    Un saludo!!!

    Escrito el 25 junio 2016 a las 12:45
  18. 18. Aman DeMort dice:

    Hola Gaia

    Bueno tu texto es muy cortito, y pese a eso esta bien escrito. Usas bien las palabras, se me hizo un poco raro lo del gallo en la playa quizás por que en mi país no es común verlos en la playa tal vez en otros países si, así que esta bien.

    Sobre el final me hubiera gustado que lo describieras un poco mas, no quiero decir que este mal de echo me gusto pero me quede con ganas de leer un poco mas.

    En resumen me pareció un bonito relato sobre la soledad del anciano, no vemos después vale 🙂

    Escrito el 29 junio 2016 a las 22:23

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