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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Puta y señora - por María Kersimon

Web: https://lacartademrtench.wordpress.com

Dicen que todos tenemos un doble en alguna parte. Lo leí en una revista de la peluquería cuando me hacía las mechas, y creo que es cierto porque yo me encontré con mi doble. Todo empezó porque conocí a Milord (le llamo así por la canción de Edith Piaf), un cliente digno, elegante, y triste. No sé lo que hace, a una puta no le dicen lo que son ni donde trabajan. Pero es diferente. Me mira con consideración. Yo le doy un servicio de primera por lo bien que me trata, y al terminar, casi se discupa.

La foto, se le cayó de la cartera cuando me pagó. No le dio tiempo de recogerla antes de que yo la viera. Se dio cuenta de mi asombro. La de la foto se parecía a mí como dos gotas de agua, a mí sin las pestañas postizas, las mechas y la silicona. No sé quién es, pero sé que existe en algún lugar. Su recuerdo me persigue y tal vez la obsesión fue lo que me hizo verla anoche. Hacía la calle bajo los pórticos de la plaza cuando bajó de un coche y se mezcló con el gentío. Iba con el pelo recogido, una falda blanca y una blusa de mangas largas con encaje. Tuve la extraña sensación de encontrarme conmigo misma, con la que hubiese sido si mi padre no hubiese largado a mi madre a su suerte en el arroyo. Traté de seguirla, pero se perdió en la multitud.

Mario llegó tarde a casa hace dos noches —una cena de trabajo—. Se acostó sigiloso pensando que estaba dormida. Un ligero efluvio a perfume barato alertó mi sexto sentido. Creo que me está siendo infiel, a pesar de ser tan atento como siempre. A la mañana siguiente, tomé un brunch con Marifé en el hotel Portofino. El sol de otoño irisaba las hojas ocre-doradas de las plataneras del bulevar. La brisa acariciaba mis piernas cruzadas y me vi transportada a un taburete de barra subiéndome las faldas a medida que los hombres me ponían dinero en la liga. Me venían ahora de manera recurrente estas fantasías. A la tarde, seguí el impulso de ir a mezclarme con el vicio y anduve por las calles del barrio chino. Al bajar del taxi, la vi.

Milord ha vuelto a solicitar mis servicios. Se está encaprichando de mí, esto lo notamos las putas, aunque luego no quieran comprometerse a nada. Necesito saber quiénes son, sobre todo ella. Por esto el otro día le seguí en un taxi y vi como entraba en una finca señorial de La Castellana. La luz se encendió en una ventana. Anoté la dirección y llamé por la mañana, preguntando por la señora. Le dije que quería verla por un asunto relacionado con su marido. Hubo un silencio y luego, con voz trémula, me citó en el hotel Portofino.

El hotel Portofino es un lugar donde las señoras de maridos como Milord se reúnen a pasar la mañana criticándose unas a otras y haciéndose las intelectuales con las boquitas fruncidas. Estaba sentada sola y, al verme, palideció. Nos miramos largo tiempo sin decir nada. Paseó su mirada por mis pestañas artificiales, mi busto talla 100, y finalmente por una mancha congénita que tengo en el cuello bajo la oreja izquierda. Con una mano trémula se bajó el cuello de la blusa y descubrió una mancha idéntica. Me pareció verme en un espejo. Recobró ella primero el uso de la palabra:
—Mi…marido… y usted… —hizo un gesto significativo hacia mí.
Asentí mirándola a los ojos. Se llevó la mano a la boca. La situación era tan violenta e inesperada de por sí que no cabía el menor fingimiento, así que me confesó sus fantasías y su deseo de conocer la lujuria. Le compartí mi afán de poseer cultura y habilidades sociales, de saber lo que era ser “una señora”.

Así fue como acabé instalada en una planta noble de La Castellana, tomando brunch con Marifé (tuve que confesarle mi aumento de pecho y mis extensiones de pestañas). Mario, si notó la diferencia, no lo manifestó, y me sigue dispensando atenciones delicadas… aunque… algunas noches viene tarde a casa (una cena de negocios) y noto en el aire de la habitación una nota… muy muy tenue… a una fragancia de otro tiempo. A veces, cuando quedo con Marifé, muevo las piernas cruzadas y dejo resbalar mi falda a lo largo de mis muslos, como hechizada por un vago recuerdo.

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33 comentarios

  1. 1. Marcelo Kisi dice:

    María hola!

    Mil gracias nuevamente por tu comentario a mi relato!

    El tuyo me gustó mucho. Tenés un estilo intimista y profundo, que sabe bucear en sentimientos humanos del tipo inconfesable: sus fantasías secretas, sus sueños de cambio, de ruptura. Lo disfruté de punta a punta y te felicito por la audacia de no explicar la duplicidad: no eran mellizas, no habían sido separadas al nacer, tampoco dobles figuradas, como ocurre en el mío, ni una persona esquizofrénica. Sencillamente dobles. Eso ni siquiera ocurre en “El rico y el pobre”, aunque esta sea la historia de referencia. Me pareció magnífico!!

    Escrito el 18 noviembre 2016 a las 00:26
  2. 2. Martín Sánchez dice:

    Hola María, gracias por pasarte a leer mi relato, y creo que te debía el mismo favor asi que decidí sumergirme en tu texto el cual sin duda fue muy entretenido y pulcro. Puedo percibir que tenés varios años de experiencia en la escritura a diferencia de mí que tan solo llevo algunos pocos. Sinceramente no he notado ninguna falta otrográfica por lo que este relato es un candidato a salir en el libro. Te felicito y sigue así. Seguiré tus textos más de cerca para aprender de ti. Saludos a la distancia.

    Escrito el 19 noviembre 2016 a las 13:09
  3. 3. Marcos dice:

    Hola Sra. Kersimon.

    Fascinante, he visualizado su relato, le he dado una situación cronológica e incluso he pensado en los decorados que usaría de llevarla al teatro.
    Lástima que tan solo nos dejen 750 palabras, porque esta historia tiene para muchísimas más, su escritura es pulcra y sin lugar para las críticas, solo felicitaciones desde mi punto de vista.

    Saludos y espero seguir leyéndola.

    Escrito el 19 noviembre 2016 a las 17:25
  4. Hola, me ha gustado tu relato es muy fluido y creas una complicidad con el lector.

    Escrito el 19 noviembre 2016 a las 20:03
  5. Hola María Kersimon
    Me he deleitado con tu relato. Lo he releído varias veces, no porque no lo entendiera, simplemente por el placer de leer un texto muy bien escrito. Te felicito porque no es fácil encontrar buena literatura, hacer buena literatura, y tú lo logras.
    Los puntos de vista cruzados de las dos protagonistas recrean situaciones que se adentran en los vericuetos de la misma vida. Matrimonio estable con canita al aire de marido respetuoso que simplemente desea revivir un fuego medio extinto y ha encontrado una copia de su mujer de toda la vida pero con la que vive fantasías aparentemente muertas. Mujer, que como todas, las pesca al vuelo pero que decide fantasear por su cuenta. Prostituta encantada con su cliente que decide averiguar un poco más. Un triángulo, un número tres que en este caso no resulta ser tan lúgubre, sino que excita la imaginación de la esposa para darle al marido lo que encuentra en la otra. En fin una trama muy bien urdida y bien contada. La verdad es que nunca decepcionas.
    Felicidades y seguimos leyéndonos.

    Escrito el 19 noviembre 2016 a las 21:20
  6. 6. gaia dice:

    María: tu historia me pareció insuperable! Estoy en el #162

    Escrito el 19 noviembre 2016 a las 22:10
  7. 7. Marazul dice:

    Hola María
    Un título con efecto, unos personajes muy bien caracterizados, una crítica a cierta sociedad hipócrita, un paseo por las pasiones terrenales, un tema tratado con elegancia, una estructura inteligente y un lenguaje impecable.
    El final perfecto: la puta que quiere ser señora y al revés. El tema de las manchas idénticas un acierto porque de esta manera el lector puede imaginar lo que le apetezca, y tú, María, puedes continuar con la historia.
    Un relato excelente. Enhorabuena
    Un abrazo

    Escrito el 19 noviembre 2016 a las 22:30
  8. 8. SBMontero dice:

    La frase “Lo leí en una revista de la peluquería cuando me hacía las mechas (…)”, es simplemente genial. Resume el carácter de un personaje del que aún no sabemos nada de entrada y en sólo una frase.

    La forma de contrapunto, el introducir a una, u otra, sin dar explicación, ni aviso no sólo no chirría, es que le va como un guante, me ha recordado mucho a Una Canción para Carla, de José Luis Correa.

    Tiene algún defectillo de forma, pero sin importancia, nada reseñable, o que no se arregle con alguna bagatela.

    El relato es exquisito.

    Sigue escribiendo… por favor.

    Un saludo.

    Escrito el 20 noviembre 2016 a las 14:43
  9. Muchas gracias a todos por vuestros generosos comentarios. Marazul, me quitas las dudas acerca de si el tema resultaba “fuera de tono” y me haces sentir bien escribiendo desde la crudeza en ocasiones. Manuel, me haces ver que se entienden los matices a pesar de los recortes de extensión y que has captado el movimiento circular que fue adoptando el relato casi sin querer. Marcos y Martín, muchas gracias. Marcelo, siempre tan positivo. Gaia, pasé a visitarte. SBMontero, me quitas la duda que tenía sobre la comprensión debido al contrapunto abrupto. Además de todo soy consciente de los puntos flacos y de lo mucho que tengo que seguir puliendo, así que nos seguiremos ayudando a mejorar. Gracias.

    Escrito el 20 noviembre 2016 a las 16:12
  10. 10. Demetrio Vert dice:

    Hola María.

    Un cuento precioso y bien narrado.

    Por apuntar algo, he tenido cierta confusión cuando el relato cambiaba de personaje. Es cierto que hay que dejar al lector adivinar, pero si hay que releer (con placer en este caso) un cuento para cuadrarlo no lo veo pertinente.

    Por otro lado, una estructura perfecta. Presentación, nudo y desenlace clavados. Y dos conflictos muy potentes que se resuelven satisfactoriamente. El clímax, en el punto justo. Ya digo, muy, pero que muy bien estructurado.

    En cuanto al argumento, ¿por qué iba a ser demasiado fuerte? A mí no me lo parece en absoluto.

    Enhorabuena.

    Escrito el 20 noviembre 2016 a las 19:46
  11. 11. Leonardo Ossa (Medellín - Antioquia) dice:

    Hola María, me ha parecido muy bien presentada toda la escena. Describes hasta hacernos ver sus vestidos, formas, trajes y hasta los «decorados» como dice nuestro compañero Marcos.
    También, espero seguir leyendo tus futuros relatos. Estoy muy agradecido con la lectura y comentario a mi participación de este mes.
    Saludos.

    Escrito el 20 noviembre 2016 a las 21:51
  12. 12. beba dice:

    Hola, María:
    Un placer haberte leído. Tu relato es original y dinámico. Me gusta el juego de roles que intercambian las protagonistas. Tu estilo destila inteligencia, habilidad profesional y mucha emotividad.
    Un aplauso.

    Escrito el 20 noviembre 2016 a las 23:20
  13. 13. ANNA dice:

    Hola! Tu relato me ha echo meterme enseguida en la historia a través de las dos narraciones, se me ha echo muy corto y sin duda me he quedado con ganas de más. Me ha gustado mucho tu forma de crear un “vínculo” con el lector”.

    Escrito el 21 noviembre 2016 a las 01:29
  14. 14. María Esther dice:

    Hola María Kersimon,tu relato está impecable,escrito con naturalidad y fluidez,no tiene desperdicio;me encantó.
    Sorprende un poco, cuando el narrador protagonista se pone el traje antagónico,pero es eso nada mas,al instante, sin problemas te lo calzas y listo.Esa parte está genial, porque lo haces tan bien, que
    es como estar mirando una película.
    Me gustan las descripciones, con un lenguaje pulcro y sencillo.
    Gracias,por disfrutar la lectura,fue un placer.

    Escrito el 21 noviembre 2016 a las 02:32
  15. 15. campanula dice:

    Hola María, gracias por haber pasado por mi relato, acá estoy decubriendo que tenes un texto magnifico, muy bien escrito y con una narración que te hace deslizar como entre las olas del mar, los dos personajes muy bien logrados y la curiosidad que las enlaza y las lleva a descubrirse en la otra magnifica.

    Coincido en que quizás en un punto se confunde el cambio de personas, pero la verdad tampoco sé como podría hacerse de otra manera, de resto me ha encantado leerte y espero poder continuar haciéndolo.

    Feliz día

    Escrito el 21 noviembre 2016 a las 14:42
  16. 16. Don Kendall dice:

    Hola María
    Una escena perfecta para recrearse con ella en un taller de escritura. Me gusta mucho su lectura porque la ambigüedad tan bien escogida permite a un lector imaginativo recorrer cualquier camino. He pasado de Edith Piaf a la gran olvidada Anna Marly y su “Canto de los Partisanos” y ya sin querer a Joseph Kessel y su “Belle de jour”. Bueno son enrrolles míos para decir que se soltaron emociones y eso es el arte de la escritura y por extensión cualquier arte. Has tenido gran valor en utilizar un narrador invisible, y su consecuencia es que el posible lector (yo en este caso) dejo de ser “lector explícito” y lo paso a ser “implícito”. Entro en ese campo donde el “autor implícito” (la María Kersimon escribiendo esta escena concreta) mueve las emociones sin problemas y hace que la/s narradora/s sean también narrataria/s. En resumen, me ha gustado mucho, está muy bien trabajado y desde luego me gusta más que “Belle de Jour” de J. Kessel ;-))
    Gracias por este trabajo y por mostrarlo.¡Ah , genial leerlo con el “Milord” de Piaff de fondo.
    Un abrazo

    Escrito el 21 noviembre 2016 a las 20:31
  17. 17. Yolareina dice:

    Hola María, entro por primera vez a las escenas, la tuya me atrapó, para nada confunde el paso de un personaje al otro. Pienso que está todo muy bien tratado. Gracias

    Escrito el 21 noviembre 2016 a las 22:04
  18. 18. María Kersimon dice:

    Agradezco muchísimo todos los comentarios de los compañeros.Me hacen sentir que vale la pena seguir trabajando en ello y seguir disfrutando de su grata compañía. Es inmejorable el compañerismo que encuentro en esta pequeña comunidad de aprendices de escritores y me motiva a tratar de hacerlo cada vez mejor para que les guste. A los que no les he leído, les leeré y les dejaré un comentario. A los que me devuelven la visita, mil gracias por ser tan positivos pero también valoraría alguna crítica para poder avanzar. Un abrazo.

    Escrito el 21 noviembre 2016 a las 22:45
  19. 19. María Esther dice:

    Olvidé dejarte mi seudónimo,porque tu opinión me interesa.Gracias.
    Maritel 140

    Escrito el 22 noviembre 2016 a las 03:07
  20. 20. Wolfdux dice:

    Un relato magnífico, me ha gustado mucho. El cambio de identidad me parece la guinda de un buen y rico pastel. Solo hay dos cosas que me han sacado de sitio: “discupa” y “hacía”. Por lo demás, ¡chapó!

    Un saludo. ¡Nos leemos!

    Escrito el 22 noviembre 2016 a las 11:50
  21. 21. David Rubio dice:

    Hola María,
    Un relato precioso, el uso de la figura del doble perfectamente integrada en la historia. Qué complicada es el alma humana, ¿verdad? Nunca estamos satisfechos con lo que tenemos…
    La visualización de las imágenes, el desarrollo del relato, la comprensión. Poco que objetar y mucho que alabar.
    Sí me gustaría dejarte un par de observaciones por si te resultan de utilidad:
    1. El relato se narra en casi su totalidad en primera persona. Excepto un único párrafo en el que el punto de vista es el de la “señora”. No afecta a la comprensión pero creo que el pensamiento de la señora podría mostrarse de otra manera sin ese cambio de narrador a mitad del relato. Podría mostrarse en el encuentro del final, podría verse a través de los ojos de la “puta”. Con ello tendríamos un relato contado por un único narrador. Otra opción es que se fueran intercalando las intervenciones de una y otra, de esa forma la estructura estaría más equilibrada. Tal cual está parece un párrafo un tanto extraño. No sé si me he explicado, es un poco tarde, si no me lo comentas.

    Otras cositas más puntuales:
    1. La foto,(esta es una coma asesina, entre el sujeto el predicado) se le cayó de la cartera cuando me pagó.
    2.Milord ha vuelto a solicitar mis servicios. Se está encaprichando de mí, esto lo notamos las putas, aunque luego no quieran comprometerse a nada. Necesito saber quiénes son, sobre todo ella. (Aquí el tiempo verbal pasa a un tiempo presente o pasado cercano, cuando toda la narración se cuenta en pretérito perfecto. De hecho, es contada cuando la “puta” ha adoptado ya el rol de esposa. Creo que esta acción debería alejarse en el tiempo)
    3.Paseó su mirada por … (te propongo paseó la mirada. El uso de los posesivos es más del inglés. En esto caigo continuamente por eso me he fijado)

    Espero que estas observaciones te sean de utilidad.

    Ha sido un placer leerte

    Saludos!

    Escrito el 23 noviembre 2016 a las 02:02
  22. 22. María Kersimon dice:

    Muchas gracias David por tus sugerencias. Repasaré los tiempos verbales y trataré de encontrar otra solución para el párrafo en cuestión. De hecho aquí yo también me cuestioné si había una manera alternativa, porque, como bien observas, convendría que el relato fuese contado enteramente desde la mirada de la antagonista y este párrafo ahí queda un tanto extraño.
    Gracias por las aportaciones. Nos leemos.

    Escrito el 23 noviembre 2016 a las 12:46
  23. 23. Aimée dice:

    Hola María,

    Un título sencillo pero impactante, la curiosidad me ha hecho leer tu relato y debo darte mi enhorabuena. Me ha encantado de principio a fin. Felicidades por la originalidad de la trama, por unos personajes tan bien caracterizados que permiten a cualquiera imaginárselos y por la capacidad de haber introducido otro narrador de una forma tan natural y sin que se fuera al traste el relato.

    Sobre esto último, veo que dices que convendría que fuese una única narradora, supongo que por el reto opcional, sin embargo, sin tener en cuenta el reto opcional, pienso que podrías haber intercalado más a las dos narradoras, seguro que la señora tenía mucho que decir. Pero entiendo también que estamos limitados a 750 palabras y que igual se hubiera convertido en un partido de tenis perdiendo la fluidez y la sonoridad que has conseguido.

    Es mi segunda participación en el taller por lo que no te había leído antes pero espero leerte en muchas más escenas.

    Un saludo

    Escrito el 23 noviembre 2016 a las 22:18
  24. 24. K. Marce dice:

    Saludos María:

    Muchas gracias por leer y comentar mi relato de este mes.

    Estoy avanzando de a poco con los que me han comentado y ya ha alcanzado la madrugada (o en unas horitas el amanecer) leyendo a unos pocos, así que me voy a la cama a dormir con el tuyo (que no se me convierta en sueño, porque no quiero ponerme pestañas postizas, ni trabajar de…)

    Un relato bien llevado, vi que participaste en el reto, pero no le veo el antagonismo a la historia, las dos mujeres hasta se hicieron cómplices… y un error de dedo en la palabra “discupa” asumo que la L quedó por fuera. Algunas frases serían más ligeras sin el corte de las comas.

    Por lo demás, me parece una buena historia, muy bien hilada, el personaje que narra es muy veraz. El descenlace del cambio entre las mujeres, me pareció muy rápido; pero no por ello le resta a la historia…la pregunta sería ¿volverán a cambiar?
    ¡Nos leemos!

    Escrito el 24 noviembre 2016 a las 10:36
  25. 25. Cryssta dice:

    Hola María, muchas gracias por pasarte por mi relato y comentar.

    Tu relato me ha gustado mucho, me ha parecido muy interesante pues creo que todos tenemos una parte que escondemos a los demás y en muchas ocasiones hasta a nosotros mismos.

    En cuanto a lo mejorable:

    – tengo dudas cuando dices “Todo empezó porque conocí a Milord”, no sé si es eso exactamente lo que querías decir o era “cuando conocí” o “al conocer”, es que no me acaba de convencer ese “porque”

    – “Yo hacía la calle bajo los pórticos”, como acabas de hablar de la otra creo que es mejor poner ese “Yo”, para dejar claro quién hacía la calle

    – “con la que hubiera sido si mi padre no hubiese…” para no repetir “hubiese”

    – “de manera recurrente” debe ir entre comas porque es una aclaración

    – cuando hablas del “barrio chino” he pensado en Barcelona, pero cuando dices “La Castellana” he pensado en Madrid, ¿dónde sitúas la acción? (es curiosidad)

    – “las mujeres de hombres como Milord” o mejor aún “las esposas de hombres como Milord”

    – los números en los sujetadores indican el contorno y las letras la copa, es decir, una mujer puede tener una talla 100 y tener poco pecho; si lo que quieres es hacer notar el resultado de la silicona tendrías que poner “mi busto talla 100 D” por ejemplo, A y B sería poco, C algo más equilibrado

    – “con mano trémula” al decir “mano” ya se sabe que es una

    – dices “Mario, si notó la diferencia” la tuvo que notar a la fuerza, puede que se le escapara lo de las pestañas pero no el aumento de pecho (no conozco a ningún hombre al que se le escape algo así), sería mejor decir “notaría la diferencia pero no lo manifestó”

    – “muy, muy tenue”

    Espero haberte ayudado con lo que te he dicho. Felicidades por tu trabajo.

    Un beso.

    Escrito el 24 noviembre 2016 a las 12:47
  26. 26. Jean Ives Tibauth dice:

    Hola María.

    Gracias por trernos este texto. Bajo mi punto de vista está perfecto. Te envuelve, te transporta sin esfuerzo al mundo de esas dos mujeres. Y lo de ese marido que calla porque esta conforme… Un golpe de gracia.

    Los compañeros ya han comentado suficientemente los pequeños fallos así que yo no voy a aportar nada mas interesante. Espero llegar a tiempo la próxima vez.

    Nos seguimos leyendo.

    Relato numero 18.

    Escrito el 24 noviembre 2016 a las 12:50
  27. 27. María Kersimon dice:

    Gracias Aimée por abordar la trama del relato y sugerir alternativas. A lo mejor lo reescribiré de otra manera para ver si mejora.
    KMarcé: si, claro, volverán a cambiar. De hecho han cambiado ya varias veces, por eso tienen reminiscencias…
    Cryssta. gracias por anotar las cosas mejorables; intentaré reescribirlo incorporando mejoras.
    Jean Ives Thibaut: gracias por leerme y hasta la próxima.

    Escrito el 25 noviembre 2016 a las 20:15
  28. 28. Vespasiano dice:

    Hola María Kersimon:
    Primero gracias por leer y comentar mi relato.
    Tu historia me ha recordado (salvando las diferencias) la trama de la película “Belle de jour”, tal com dice Don Kendall.
    La he encontrado muy bien escrita y nos muestra el comportamiento de una persona insatisfecha sexualmente. Los motivos no son perceptibles a primera vista, pues el hombre parece que funciona bien; no es mala persona ni violento.
    Ella por la deriva que toma su vida no parece que sea mojigata ni que le amargue un dulce. De ahí que yo no entienda, de momento, el comportamiento de ambos.
    Pudiera ser que la esposa fuera más recatada a la hora de revolcarse con el marido y la puta fuera más efusiva y teatrera, de ahí que el hombre se sintiera más viril con ella y desarrollara técnicas más sofisticadas con la prostituta, que se dejaba hacer cualquier filigrana.
    No lo sé.
    Ahora, desde mi punto de vista, creo que sería más comprensible el orden cronológico del relato si intercalaras algunos párrafos.
    No quiero darte ningún ejemplo de cómo me parece a mí, pues sé que tienes suficiente talento para ello, y por otro lado “más sabe el loco en su casa que el cuerdo en la ajena”.
    ” A la tarde, seguí el impulso de ir a mezclarme con el vicio y anduve por las calles del barrio chino. Al bajar del taxi, la vi”.
    “Al bajar del taxi, la vi”. No me encaja bien esta escena. Porque a pesar de estar escrita antes de la conversación que mantuvieron las dos mujeres en el hotel, se supone que esto está pasando por la tarde después de que ambas hubieran cambiado sus papeles y por tanto no sé podrían haber visto ya que una estaría en la casa “ejerciendo de señora” y la otra “haciendo la calle”.
    Bueno, no me hagas mucho caso si no te cuadra lo que te digo.
    Enhorabuena por escribir una historia que me ha hecho pensar.

    Escrito el 27 noviembre 2016 a las 22:51
  29. 29. J. Colmarias dice:

    Muy buenas María Kersimon,

    EL título de por sí ya invita a entrar y leer. Un buen relato empieza precisamente ahí. Me ha encantado el intercambio de narradora, aunque hay más de la puta que de la señora. Las descripciones, lo que sienten y la forma en que dicen lo que dicen los protagonistas es excelente. Quizá me quedo con más ganas de ver la intriga en los personajes al descubrir que tienen un doble. Al menos de preguntarse de donde han salido antes de intercambiar vidas. Te felicito por el relato, es de los pocos que he leído que la historia invite a desarrollarla más extensamente.

    Un saludo!

    Escrito el 28 noviembre 2016 a las 01:18
  30. Me ha gustado mucho el relato. Está muy bien escrito y eso se agradece. El estilo con el que desarrollas la trama es muy atractivo. Espero seguir leyendo tus aportes. Saludos.

    Escrito el 30 noviembre 2016 a las 00:45
  31. 31. Wanda Reyes dice:

    Hola Maria, gracias por leer mi relato.¿Que mas podría decirte?, solo que concuerdo con todos en que es un relato muy bien logrado. Me gusta mucho como hiciste el personaje de la protagonista porque te ayuda a crear una imagen muy viva de su aspecto.Tienes un gran talento.

    Escrito el 30 noviembre 2016 a las 23:09
  32. 32. Isan dice:

    Hola María:

    Un poco tarde, pero yo voy a mi ritmo (lento). Al leer tus brillantes comentarios a otros relatos, se despertó mi interés por conocer el tuyo y no me ha defraudado pero sí sorprendido más de lo que ya intuía.

    Antes que nada, si lo vas a publicar en tu blog que he fisgoneado, corrige la última palabra del primer párrafo que se le ha perdido una ele.

    No soy muy sagaz a la hora de interpretar qué quiere decir cada autor, sobre todo cuando tengo que analizarlo en profundidad, cuestión de práctica, así que he vuelto a leer el texto y algunos párrafos varias veces. Te puedo asegurar que cada lectura me ha gustado más porque he descubierto lo que me ha parecido que era el propósito, aunque cada uno es libre de interpretarlo a su manera.
    Esa alternancia entre la mujer de la calle y la refinada me ha parecido genial. También cómo cada una cuenta su historia cada una en su momento. Los pequeños detalles que por aquí y por allá adornan el texto me han encantado. Siempre me han gustado porque denotan calidad y dominio. Como el comienzo de la peluquería que ya te han comentado.

    Ha sido un placer leerte y espero seguir haciéndolo.

    Escrito el 10 diciembre 2016 a las 23:59
  33. 33. Isan dice:

    Hola de nuevo:

    Se me olvidaba comentar sobre las 750 palabras justas que tiene tu relato, algo que más participantes (yo incluido) solemos hacer como reto personal o divertimento. En el próximo relato me ha costado un montón arreglarlo por la dificultad que entrañaba cambiar la frase cuando había un verbo SER.

    Así que, nuevamente felicidades.

    Escrito el 11 diciembre 2016 a las 00:10

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