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ATRAPADO EN EL FUEGO - por lectora70

Roberto dormía con el libro de su poeta favorito entre las manos cuando sonó el teléfono. Escuchó con atención mientras una arruga se iba formando en su frente.

—Roberto, aquí Diego. Se ha declarado un fuego en la zona norte. Hay dos frentes que avanzan muy rápido y tememos que llegue al núcleo urbano. Estoy llamando a todos los compañeros para que os incorporéis lo antes posible.
—Claro. Ahora mismo voy.

Se puso la ropa de trabajo y corrió escaleras abajo. No había tiempo que perder. Los neumáticos del coche chirriaron sobre el asfalto cuando salió en dirección a la central.

En el centro de coordinación se palpaba la tensión. Inmediatamente partió con el resto de agentes forestales hacia el monte. Cuando llegaron, varios equipos de bomberos junto con las autobombas luchaban por sofocar el incendio que devoraba una amplia zona de bosque.

El retén, que controlaba Roberto, subió por la parte posterior de la ladera afectada para realizar allí un cortafuegos. Él mismo ascendió en primer lugar. Pero el viento comenzó a soplar con fuerza y las llamas llegaron hasta ellos mucho antes de lo previsto. Retrocedieron apresuradamente colina abajo para evitar que les alcanzasen. En la retirada uno de sus compañeros se quedó enganchado en unos matorrales y cayó. Los demás siguieron corriendo. Mientras Roberto escapaba miró hacia atrás y vio a Miguel intentando zafarse de las ramas. No dudó ni un segundo en trepar de nuevo por el monte para rescatarle. El calor sofocaba. Apenas podía respirar por el humo. Sacó su navaja del bolsillo y cortó el trozo de pantalón enredado. Miguel estaba medio desmayado y casi perdiendo el conocimiento. Como pudo le incorporó, le pasó un brazo por la cintura y tiró de él hacia abajo. A pocos metros del suelo Roberto se sintió sin energía y se dejó caer con Miguel.

Una ambulancia les trasladó al hospital más cercano donde permanecieron unas horas antes de poder volver a sus casas.

A la mañana siguiente todo el mundo le felicitó por su arrojo y por poner en peligro su propia vida para salvar la de Miguel. Le daban palmadas en la espalda, apretones de manos e incluso abrazos y todos reconocían su valentía proclamándole como héroe. Él, que se consideraba un chico tímido y de pocas palabras, no creía tales afirmaciones y las rechazaba negando con la cabeza. En lo más profundo de su corazón sentía que había hecho su trabajo, eso sí, un buen trabajo. Además había realizado esto otras veces y sus compañeros ya debían estar acostumbrados. Por eso no comprendía el revuelo que se había formado.

Cierto día, Roberto realizaba tareas de inspección por el monte. Caía la tarde y el paisaje adquirió unas tonalidades entre anaranjadas y rosáceas. Hacía bastante calor y soplaba viento, lo cual se traducía en una sensación de bochorno, pero a él eso no le importaba. Se acordaba de su niñez en el campamento de verano, de las noches alrededor de la hoguera, de la música de la guitarra y de las historias de miedo. Siempre le gustó explorar zonas poco accesibles, por eso, acompañado por sus recuerdos, se dirigió hacia una sima poblada de retamas y abedules y rodeado de pinos. Con paso lento pero firme caminó bordeando los dos cerros entre los que se encontraba el barranco. A medio camino escuchó un ruido y se detuvo en seco. Miró a su alrededor y aguzó el oído conteniendo la respiración por unos momentos para estar seguro de lo que oía. Estaban en época de incendios y había mucho pirómano suelto, por lo que extremaba la vigilancia. No percibió ningún sonido distinto de lo normal y continuó su marcha. Al llegar al barranco lo inspeccionó con cuidado y observó de qué lado soplaba el viento. Ya notaba la adrenalina fluyendo por sus venas, el corazón latiendo a mil por hora y la sensación de estar cayendo en esa especie de trance maravilloso que lo alejaba de la realidad. Sus pupilas se dilataron al máximo y la sonrisa le llegó sin querer. Lentamente sacó una caja de cerillas, encendió una y la tiró sobre unos matorrales. Quedó inmóvil, absorto y cautivado viendo crecer las llamas mientras le abandonaba toda la tensión acumulada momentos antes. Sentía tanta liberación y tanto bienestar que no quería marcharse, no podía dejar de mirarlo. Haciendo un gran esfuerzo volvió sobre sus pasos hasta donde tenía aparcado el todoterreno y llamó para avisar de la aparición de un fuego.

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7 comentarios

  1. 1. Wyrell dice:

    Hola lectora70, cómo va?

    Segundo relato que comento tuyo en estos talleres, debo decir que este me ha gustado un pelin más que el anterior.
    Paso a desmembrar el texto:

    En lo que a lectura se refiere, es fácil de seguir la mayor parte del tiempo, realmente disfruté cada párrafo. Bien armados y con errores fácilmente corregibles (ya pasaré por esta parte)
    La historia me entretuvo y el final realmente inesperado, por un momento creí que daría un giro y de repente la trama sería de género fantasia o ciencia ficción donde el protagonista viaja en el tiempo o algo por el estilo (tengo una imaginación muy suelta xD). Me alegra que no haya sido así, no porque hubiera sido algo malo sino más bien porque, en mi opinión, tuvo el final perfecto. Roberto, tal vez por necesidad de atención o un gran ego, acabó convirtiéndose en el antagonista. Muy interesante lo que se puede sacar de aquí.

    Respecto a los errores, no soy mucho de nombrar errores pequeños, dejaré esto para los más expertos. Yo, en cambio, te diré lo que, a mi parecer, entorpeció un poco la lectura: en el párrafo donde Roberto se aventura para rescatar a su compañero en apuros, noto demasiados puntos seguidos donde tranquilamente podrían haber sido reemplazados por comas.
    un ejemplo: “Él mismo ascendió en primer lugar(COMA)pero el viento comenzó a soplar con fuerza y las llamas llegaron hasta ellos mucho antes de lo previsto.”
    Esta parte me costó un poco porque tuve que frenarme en cada punto para intentar comprender por qué estaban allí. Un pequeño fallo que se puede solucionar.

    Nada más que aportar por mi parte, como conclusión final repito que el relato me gustó mucho. Acción, drama y un desenlace perfecto para lo que la historia ofrece.

    Un saludo y espero seguir leyendo tus relatos.

    Escrito el 17 diciembre 2016 a las 01:06
  2. 2. Jorge Luis Acosta Torres dice:

    Me gusto tu historia. Tiene un interesante giro al final. ¿Tendrá segunda parte?

    Si te interesa leerme, mi relato es el 33.

    Escrito el 17 diciembre 2016 a las 23:26
  3. 3. Jean Ives Tibauth dice:

    Hola Lectora.

    Me encanta leer cuando las palabras fluyen con facilidad. Es muy de agradecer no tener que releer para comprender el sentido de las frases.

    La historia,bajo mi punto de vista,era al principio un poco aburrida, pero luego dio un giro final inesperado que le hizo remontar. Sin embargo hay un fleco suelto al que, sin embargo, se le da mucha importancia. El hecho de que se le trata como un héroe y el no lo entienda. Francamente, si es porque en realidad es el pirómano, veo un poco forzada la relacion.

    Nos seguimos leyendo.

    Te invito a que despellejes el mio a gusto:
    https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-39/6752

    Escrito el 17 diciembre 2016 a las 23:43
  4. 4. amadeo dice:

    Lectora (Escritora)

    La primera mitad del texto me gustó, fácil de leer, pero larga: llegó un momento que me dije: Basta. La segunda mitad, mejor.
    El final: Excelente, inesperado, bueno
    Me gustó todo el cuento.

    Estoy en el 126. Espero opiniones.

    Escrito el 19 diciembre 2016 a las 20:26
  5. 5. Pilar dice:

    Hola, lectora70

    A mi en cambio me ha enganchado desde el principio, tal vez porque me va el tema forestal, jjjjj
    El ritmo, muy bueno, frenético incluso durante la primera parte. Yo creo que los puntos entre frases cortas aumentan la tensión porque te obligan a hacer una pausa y dilatar el desenlace.
    Me ha gustado el giro que da Roberto pasando de héroe a capullo pirómano, no me lo esperaba, así que, perfecto el desenlace.
    La voz narrativa, buena y con respecto al reto opcional también está logrado pues no he echado de menos el verbo ser ni he visto forzada su sustitución.
    Por lo demás, no encuentro ningún error especialmente reseñable, por lo que solo me queda felicitarte por tu buen trabajo!!!
    Abrazos.
    Pilar, del 173.

    Escrito el 19 diciembre 2016 a las 23:16
  6. 6. Jose Luis dice:

    Hola
    Gracias por leer mi guion
    Interesante y entretenido relato el que has escrito.
    Tiene dos partes bien diferenciadas, y aunque la primera parte se podría haber resumido más para aumentar la segunda, creo que, en general, el cuento está muy conseguido y tiene un final que sorprende bastante.
    Yo estoy a favor de usar frases cortas. Consigues mejor ritmo y es menos difícil equivocarse que usando frases largas e interminables, con demasiadas comas y mezclando muchas ideas en una sola oración. Para cada idea, una frase corta es lo mejor.
    Un saludo

    Escrito el 21 diciembre 2016 a las 12:24
  7. 7. Ane dice:

    Hola lectora70:

    Decirte que tu relato me ha gustado así como la forma en que está escrito.

    El final, el adecuado. Un héroe que en el fondo es un villano, es sacarle punta al personaje. Un personaje que lo pedia a gritos para dar en el clavo. Te felicito.

    Saludos.

    Escrito el 21 diciembre 2016 a las 21:19

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