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GIRO DE CIENTO OCHENTA GRADOS - por lectora70

Se giró al escuchar el grito. Lo que el primer atracador vio le sorprendió y le asustó a partes iguales. El dueño de la joyería les increpaba mientras les apuntaba con un arma. El joyero se mostraba en apariencia tranquilo y su tono de voz era firme y conciso. Parecía como si estuviera acostumbrado a este tipo de situaciones. En cambio su compinche, el segundo ladrón, mostraba demasiada excitación y agresividad. Él solo tenía que meter las joyas en la bolsa y sin embargo había sacado el cuchillo y obligaba a la chica a abrir los expositores donde se encontraban los relojes de oro. Ella se negaba a cumplir sus exigencias por eso le propinó un puñetazo que la hizo caer.

Se suponía que solo estaría la empleada porque el propietario iba por las tardes que era cuando más personas entraban en la tienda. Lo sabía porque llevaba varias semanas vigilándoles en el horario comercial. Además él mismo lo comprobó cuando estuvo en la joyería y compró ese anillo que tanto le costó. Aquella tarde entraron bastantes clientes y aprovechó la ocasión para observar detenidamente el interior del local, la disposición de las vitrinas y los mostradores, la existencia de cámaras de seguridad y todo aquello que tuviese una especial relevancia para su propósito. En aquel momento el plan le pareció fácil de llevar a cabo. Nada podia salir mal. Ahora todo aquello le resultaba lejano. Se sentía estúpido e iluso, como si fuera un principiante en su primer trabajo. Aunque la adrenalina mantenía su cuerpo en alerta y preparado para entrar en acción ante el peligro supo, desde el mismo momento en el que se dio la vuelta, que algo iba a salir terriblemente mal, porque a pesar de que iba armado no tenía pensado disparar. La pistola era un elemento disuasorio para asustar a la empleada y llevarse el mayor botín posible y no para matar a nadie. Pero claro, ahora la situación había dado un giro de ciento ochenta grados. En sus planes nada de esto debía ocurrir pero estaba sucediendo.

La hija del joyero sabía que cuando alguien te amenaza con un arma de cualquier tipo hay que hacer lo que sea que te digan que hagas. Su padre se lo repitió un millón de veces al empezar a trabajar con él unos seis meses antes, pero eso le costaba y mucho. No quería abrir ni los expositores ni las vitrinas ni ponérselo fácil aun cuando su vida estaba claramente en riesgo. Por eso recibió aquel puñetazo en plena cara. El malnacido no paraba de gritarle que la rajaría allí mismo. Intentó mantener la calma a pesar de estar al borde del llanto. La cara le ardía no tanto por el dolor del golpe como por la rabia y la impotencia de no poder hacer nada. Iba a decirle que haría todo lo que le pidiese cuando de pronto oyó la voz de su padre.

Cuando el dueño de la joyería les gritó, uno de los ladrones se volvió hacia él con la pistola en la mano. El otro amenazaba a su hija con un cuchillo. No era la primera vez que entraban a robar. En una ocasión le habían herido en una pierna mientras forcejeaba con un muchacho para arrebatarle el arma y tuvo mucha suerte porque podría haberle matado. Por eso solicitó una licencia de armas. De eso hacía ya tres años y medio y en este tiempo solo dos veces tuvo que sacar el revólver para evitar el robo. Por suerte nunca tuvo que hacer uso de él. La sola presencia de él entre sus manos era suficiente para que salieran de allí a la carrera. Pero hoy era diferente porque la vida de su hija estaba en juego. Sentía un terror como nunca lo había experimentado. Era más que miedo. Era un sentimiento que se apoderaba de él y le apretaba tan fuerte que le ahogaba. Estaba aterrado pero debía mantener la cabeza fría. La tensión crecía por momentos y al ver que el otro atracador golpeaba a su hija de nuevo, ya no tuvo duda. Disparó las cinco balas del cargador. Al que estaba con su hija le alcanzaron dos de los disparos en el abdomen. Profirió un aullido desgarrador cayendo hacia atrás sobre el expositor vertical que se rompió en mil pedazos dejando todos los relojes tirados por el suelo. El otro asaltante recibió los tres balazos restantes cuando se giró al escuchar el grito.

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7 comentarios

  1. 1. Patricia Redondo dice:

    Hola!!

    me sigues en orden asi que me toca comentarte 🙂

    Emmm a ver , tal y como yo lo veo:
    La idea es buena y cumple el reto. Además esta bien estructurado , hay inicio , nudo , desenlace, y además hay una situación de conflicto, algo que genera tensión, dramatismo. Hasta ahí todo bien.
    Pero, para mi gusto, el texto es demasiado plano, demasiado explicativo. No sé muy bien como decirlo. Cuando se escribe la máxima es mostrar, no contar, y tu texto cuenta mucho y muestra poco. Habría que darle más ritmo.

    Por ejemplo cuando dices esto:
    Aunque la adrenalina mantenía su cuerpo en alerta y preparado para entrar en acción ante el peligro supo, desde el mismo momento en el que se dio la vuelta, que algo iba a salir terriblemente mal,

    Podrías contarlo igual pero metiendo más emoción:

    Sentía que la adrenalina le mantenía en pie pero por la frente empezaron a resbalarle gotas de sudor y notó que las manos le temblaban. De repente notó una sensación extraña, una especie de pálpito en el estómago: algo iba mal.

    o meter dialogos por ejemplo, algo que haga el texto más dinámico, menos autoexplicativo.

    Te comento esto por que es un error muy común entre los que empezamos a escribir (a mi también me pasa!!) y es muy necesario pulirlo para atrapar al lector.

    Seguimos aprendiendo!! Si te apetece leerme , soy tu vecina de arriba 🙂

    Nos leemos!

    Escrito el 18 enero 2017 a las 11:25
  2. 2. lectora70 dice:

    Gracias Patricia por tu comentario!

    Tienes toda la razón. Es un error de primero de escritura… jajaja. Me resulta complicado aplicar la teoría aunque la sepa.

    Espero ir corrigiendo estos defectos a medida que vaya escribiendo.

    Un saludo.

    Escrito el 19 enero 2017 a las 13:47
  3. 3. Marián dice:

    Hola lectora70. Estoy de acuerdo con el comentario de Patricia. La historia es buena y la veo bien planteada pero… me parece que resulta un poco lenta o sin emoción. Y creo que es porque está muy contada (ese precisamente es mi eterno problema).
    No me transmite la tensión que debería siendo la historia que es y supongo que es por no “mostrar”.
    Saludos,

    Escrito el 19 enero 2017 a las 18:11
  4. 4. María Esther dice:

    Hola lectora 70, creo que muchos adolecemos del mismo mal, tenemos que mostrar mas y contar menos. Supongo que con el paso del tiempo y la práctica lo iremos superando, porque se trata de encontrar las expresiones que hagan sentirse involucrado al lector en la situación planteada, que lo conmuevan, lo sacudan. Es como tu dices resulta complicado aplicar la teoría aunque la hayamos comprendido.
    Por lo demás estoy de acuerdo con Patricia en lo referente a la estructura del cuento y su desarrollo.
    Seguimos trabajando y leyéndonos.
    Saludos Maritel en el 98

    Escrito el 20 enero 2017 a las 02:00
  5. 5. Jean Ives Tibauth dice:

    Hola Lectora.

    Coincido plenamente con las otras compañeras.
    Quizá tenías que haberte centrado más en miradas, en acciones concisas, en la concentración de la escena…yo creo que cuando leas un texto que debes revisar, en cuanto notes que el narrador te esta enumerando hechos y se llena mucho espacio de tiempo en pocas líneas, directamente tacha todo el párrafo y empieza de nuevo.
    No es fácil pero a base de insistir te saldrá, seguro.

    Yo además apuntaría el exceso de personajes en la historia. Hay cuatro y me ha costado seguir el hilo de los dos atracadores. Igual es porque son muchos o porque no están bien definidos y se solapan en uno sólo. Hay que hacerlos diferentes entre si, con rasgos fácilmente identificables.

    Espero que te sirvan de ayuda mi aportaciones.

    Nos seguimos leyendo.

    Te invito a que despellejes el mio a gusto:
    https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-40/6901

    Escrito el 22 enero 2017 a las 12:35
  6. 6. Mauro D. Barbosa dice:

    Hola lectora70.
    Me gustó mucho tu historia. Me pareció entretenida y la verdad no sabía qué podría hacer para mejorarla.

    Luego leí los comentarios y creo que aprendí junto contigo. El tema de mostrar en lugar de decir, es muy interesante.

    Nos leemos por aquí!

    Escrito el 23 enero 2017 a las 13:44
  7. 7. lectora70 dice:

    Gracias a todos por vuestros comentarios, me son de gran ayuda. Intentaré mejorar para el próximo texto.

    Un saludo!

    Escrito el 23 enero 2017 a las 16:42

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