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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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El tango de Redondo Oróndez - por Juan Sauce

Web: http://juansauce.desafiosliterarios.com/

Adelino Redondo Oróndez tenía un secreto: estaba enamorado de su vecina, la viuda Humberta Pascual, mujer atractiva y joven que, no sabía por qué, pero a él le parecía que le hacía ojitos cada vez que se encontraban. Sus pulmones suspiraban por cada paso de sus elegantes piernas engalanadas con oscuras medias de seda. Pero estaba seguro de que ella no se fijaría en él a menos que bajara unos cuantos kilos el volumen de su prominente barriga. Pero no era Adelino de los que pudieran renunciar fácilmente cada mañana a un buen plato de huevos fritos con salchichas, cambiándolos por un simple bol de cereales y una naranja. Por eso, pensó, lo mejor sería hacer ejercicio. Aunque dada su aversión por el deporte, se las tuvo que ingeniar para obligarse a practicarlo, usando cada semana una técnica diferente.

Así, durante siete días se dedicó a romper, con un tirachinas, todas las bombillas de la casa. Entonces tomaba una escalera alta y trepaba por sus doce escalones para cambiarlas. Una y otra vez repetía el proceso y, aunque se gastó un dineral en las compras, subió y bajó escaleras más veces que si hubiera visitado la Torre Eiffel en un día que tuviera el ascensor estropeado.

Otra semana compró un ratón, y varias veces al día lo dejaba suelto por el edificio. Así se obligaba a correr detrás de él hasta conseguir atraparlo. Nunca había sudado tanto en la vida, y es que no se podía imaginar que un ser tan escuchimizado como ese pudiera tener tanta energía en las patas para desplazarse de la manera en que lo hacía.

Pero lo que más le alegró el mes fue enterarse de que el tango es un baile que requiere de mucho ejercicio y movimiento. Risueño, invitó a Humberta a su casa para una sesión, pues sabía que ella era una apasionada bailarina. Practicó y practicó durante toda la semana hasta convertirse en todo un experto de la caminata, el corte y la quebrada.

Y llegó el día. La viuda se presentó con un elegante vestido negro de hombros descubiertos, con zapatos, pendientes y gargantilla a juego, y una sonrisa de pintalabios de fuego que derretía la mirada. Él, embutido en un traje de Armani que le costó la mitad de sus ahorros, la recibió emocionado con un par de copas de champán de Moët & Chandon a las que no prestaron excesiva atención, pues inmediatamente conectó el equipo de música y se pusieron pasos a la obra.

Las zancadas, giros y volteretas se volvían cada vez más desenfrenadas. Adelino ya se imaginaba ofreciéndole una alianza como regalo, que había guardado en el bolsillo de su chaqueta, muy cerquita del corazón, como si se tratara de un talismán que atraería a la buena suerte; y de ahí a cuatro días podría decir un sonoro y esperado «sí quiero» en el altar que cambiaría su vida para siempre. Pero sucedió que en una de las piruetas, el trasero del Redondo golpeó sin querer la mesa donde reposaba el tarro que mantenía a su ratón encarcelado. El frasco se quebró a su contacto con el suelo, escapándose el roedor, que le dio por corretear alrededor de los zapatos de la danzante. Humberta, a grito pelado, subió rauda a la escalera que Adelino aún mantenía abierta en un rincón, mientras este corría detrás del endemoniado animal, tratando de atraparlo de nuevo, a la vez que subía y bajaba por la escalera para tratar de consolar a su enamorada.

Hizo ese día más ejercicio que en toda su vida. De hecho, fue tanto que hoy luce un cuerpo esbelto y serrano allá por donde lo lleva. Lo que no puedo decirles es cómo acabó la relación con su vecina. Diría yo que, por los resultados visibles en su cuerpo, debería estar un paso más cerca de conseguir sus sueños de boda con Humberta. ¿O tal vez no?

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18 comentarios

  1. 1. Bea dice:

    Hola Juan:

    Muy divertido tu relato, me ha gustado mucho. Tanto la historia como la descripción de los actos del personaje y sus esfuerzos por conseguir lo que quiere, me han resultado muy acertados.
    Además, la forma en la que encajas las palabras y el reto en si de escribirlo en presente te ha quedado sumamente bien.
    En resumen, muy imaginativo y original, no le cambiaría nada.

    Si te apetece pasarte yo estoy en el 230.

    ¡Felicidades, nos leemos!

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 14:33
  2. 2. Servio Flores dice:

    Hola Juan, gracias por la visita.

    Su relato es muy divertido, la construcción del protagonista es muy buena, con todas sus ocurrencias y excentricidades, una lástima que a la viuda el roedor la haya asustado.

    Si bien el reto no era nada fácil, la forma en como se acomodaron las palabras y la fluidez del relato demuestran el dominio en la construcción de relatos.

    Felicidades, a seguir esforzándonos. Saludos

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 14:59
  3. 3. Juan Sauce dice:

    Hola Bea.¡Muchas gracias por tus palabras tan positivas! En realidad, el reto de escribir en tiempo presente no lo he hecho; tan solo el último párrafo está escrito en este tiempo.
    De nuevo muchas gracias por la visita y comentarios. Cuando acabe de analizar y comentar a los compañeros que van después de mí, pasaré por el tuyo; no lo dudes.

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 15:20
  4. 4. Juan Sauce dice:

    Hola, Servio. Muchas gracias por tu visita, también. Y, de nuevo, gracias por tu comentario. Sí, el reto no era fácil y quería que todas las palabras tuvieran sentido en la historia. Pero aprovechando que se trataba de un relato humorístico, me permití exagerar un poco. Quizá los que leen no se hayan dado cuenta: una escalera con doce escalones… ¡Ese tipo tiene un techo extremadamente alto!

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 15:34
  5. 5. Ane dice:

    Hola Juan:

    Me ha gustado tu relato. Está mi bien construido y narrado, con un lenguaje muy fluido y poético.

    Te felicito.

    Un saludo

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 19:04
  6. 6. Juan Sauce dice:

    ¡Muchas gracias, Ane, por tu comentario! ¡Me anima mucho!

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 21:02
  7. 7. Oda a la cebolla dice:

    ¡Hola, Juan! Buen relato y buena narración, con amor y humor. En la forma, alguna frase se alarga por el exceso de comas. En cualquier caso, te felicito. Se palpa una atmósfera muy poética y cuidada. saludos y hasta la próxima. ¡Buenas noches!

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 21:13
  8. 8. Oda a la cebolla dice:

    ‘Saludos’, con mayúscula… La prisa del teclado. ¡Buenas noches!

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 21:15
  9. 9. Edu SC dice:

    Hola Juan Sauce, muchas gracias por tu visita y tus amables palabras.

    Me ha encantado tu relato. Cuentas una historia divertida, con un personaje entrañable, Adelino, dispuesto a mil y una ocurrencias en su afán por obtener el amor de la viuda Humberta. No me he aburrido en ningún momento, has sabido atraparme para querer continuar y averiguar como acabaría la historia. Además, consigues mostrar los hechos, de manera que se visualizan perfectamente. Lo dicho, te felicito.

    Sólo te haría un par de apuntes en el aspecto formal. Por un lado una repetición de la palabra “pero” en el primer párrafo.

    pero a él le parecía que le hacía ojitos cada vez que se encontraban. Sus pulmones suspiraban por cada paso de sus elegantes piernas engalanadas con oscuras medias de seda. Pero estaba seguro de que ella no se fijaría en él a menos que bajara unos cuantos kilos el volumen de su prominente barriga. Pero no era Adelino…

    Por otro lado, comparto la apreciación del compañero sobre la longitud de alguna frase. A mi principalmente me ha parecido que esta frase no funcionaba del todo:

    Él, embutido en un traje de Armani que le costó la mitad de sus ahorros, la recibió emocionado con un par de copas de champán de Moët & Chandon a las que no prestaron excesiva atención, pues inmediatamente conectó el equipo de música y se pusieron pasos a la obra.

    En todo caso son pequeñeces. Muy buen trabajo.

    Nos leemos.

    Edu SC

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 23:48
  10. 10. Juan Sauce dice:

    ¡Gracias por tu comentario, Oda a la cebolla! ¡Lo tengo en cuenta!

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 06:52
  11. 11. Juan Sauce dice:

    Muchas gracias, Edu SC, por tu análisis. Mira que suelo ser meticuloso con eso de las repeticiones, pero tienes razón: demasiados peros…
    Gracias también por las otras observaciones.¡Las tengo en cuenta! Y me alegro que te haya gustado.

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 06:56
  12. 12. John Doe dice:

    Buenos días, gran trabajo, muy buen relato. Me gusta el personaje y el ritmo, es una historia entretenida y divertida, con un personaje que genera empatía y situaciones llenas de gracia y humor. Nos leemos en otra ocasión. Si quieres pasar por mi relato estoy en el 232. Un abrazo

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 14:30
  13. 13. Juan Sauce dice:

    Muchas gracias, John. Tus palabras me animan. Nos leemos.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 06:36
  14. 14. Lady N dice:

    Buenas noches Juan! Impresionante, me he reído muchísimo con tu texto. La extravagantes formas de hacer ejercicio de nuestro protagonista me han encantado, de verdad :’).

    Que decir del acontecimiento final? El pobre protagonista se queda sin los quilos pero me da a mi que la enamorada después de la historia del ratón como que no estará muy perceptiva jajajaja.

    En fin, ha sido un verdadero placer leerte, muy felices letras! ♡

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 23:16
  15. 15. Juan Sauce dice:

    Muchas gracias, Lady N. Un verdadero placer que hayas disfrutado. Escribir algo que guste no siempre es fácil y comentarios como el tuyo alegran muchísimo. De nuevo, gracias.

    Escrito el 22 febrero 2017 a las 06:15
  16. 16. María Esther dice:

    Hola Juan,he leído tu divertido relato y me ha gustado. Eres ingenioso y sabes conducir el relato para divertir.
    Estuvo buena la idea de tomar el tango y llevarlo al centro de la escena.Muy bien descrito.
    Saludos. Maritel, si deseas pasarte por mi relato estoy en el 3

    Escrito el 24 febrero 2017 a las 04:28
  17. 17. Juan Sauce dice:

    Muchas gracias por tus palabras, María Esther. Por supuesto que pasaré por tu relato.
    Cuando leí las doce palabras del reto, vi que la del tango sería, para mí, la más difícil de ubicar de una manera natural. Así que decidí que ese sería el tema principal. Y a partir de ahí, lo demás…

    Escrito el 25 febrero 2017 a las 01:46
  18. 18. María Esther dice:

    Hola aquí estoy nuevamente Juan, porque se me había olvidado tu nombre.Claro que te había leído y comentado.

    Escrito el 26 febrero 2017 a las 00:58

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