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INVASION - por DIASPORA

INVASION

La noticia corrió por todo el pueblo como hojarasca al viento: cinco personas degolladas. Tres mujeres y dos hombres en la aurora de sus vidas. Ese día, no hubo labios que dejaran de repetir ¿por qué? ¿por qué? Las conjeturas saltaban de un lado para otro. ¿Drogas?, ¿razones pasionales?, ¿fantasías reprimidas? ¿venganza? Pero, quién o quiénes eran los agresores.

Después de las doce meridiano, un rumor tomaba fuerza: Juancito, el brillante estudiante de secundaria, adicto a los videojuegos violentos, se había manchado las manos de sangre. Se supo que actuó solo. El pulpero del pueblo fue el primero en sospechar de él, cuando ese día, muy temprano, el muchacho llegó al negocio pidiendo un jugo de naranja y algo de comer. Cuenta el comerciante, que el muchacho evitada mirar de frente y hasta olvidó retirar el dinero sobrante de su pago.

La mañana siguiente, los psicólogos y sociólogos llenaron de adjetivos técnicos las páginas de los periódicos de la ciudad, describiendo el perfil del criminal. Los habitantes de la barriada, en un lenguaje menos profesional, afirmaban que todo era obra de una oscura alianza con el Diablo.

Lo cierto era que el pueblo campesino despertó de muchos siglos de sueño placentero. Un gigante se abrió camino sigilosamente entre la bruma del tiempo, y con descomunal grito sorprendió a sus habitantes. El “genio” encantado dejó escapar de su frasco todos los nauseabundos vapores de la perversidad. La inocencia y la buena fe del hombre de campo la arrastró este monstruo con su cola. Y desde ese entonces, no hubo embrujo, hechizo o talismán que protegiera al pueblo de tanto desafuero. La bestia había asomado su cabeza.

Si desde la colina más próxima miramos el caserío, fácilmente se observa que aún la casita más humilde soporta en su destartalado techo una antena parabólica, y si nos acercamos un poco más, descubrimos que todos sus habitantes ostentan un móvil de generación reciente, sin tomar en cuenta otros artilugios digitales. Igual que una “aplicación” en su punto óptimo, todo mundo está actualizado. El pueblo comprende que tiene un nuevo cielo y en su atmósfera vuelan aves de estirpe variada opacando la candidez del pasado Para unos ha llegado la luz, para otros, la oscuridad. Un regalo del siglo XX.

La niña de edad escolar mentalmente se adelanta a su edad, y copiando estereotipos importados desafía los principios familiares, adoptando poses de adolescente extraviada. El niño de escaza edad, magnetizado por el acceso a imágenes prohibidas, con su mirada empieza prematuramente a recorrer un mundo lujuriante.

¿Y qué hay de la joven esposa del vecino, la divorciada, o la viuda? De tanto inhalar horas de romance en la televisión, buscan seguir en la vida real el libreto escrito por un profesional en el manejo de las pasiones humanas. Les han mostrado una escalera que conduce a un falso cielo. Hasta muchas abuelas dejaron de tararear sus tangos preferidos para entonar melodías modernas con letras que le hacen competencia a la literatura erótica.

La esposa de Ulises, afirma que internet le robó a su marido. En la escala de gratificaciones ella ocupa un peldaño muy bajo, siendo sustituida por la fantasía virtual. Su amado esposo se obsesionó mirando a diario imágenes y videos explícitos de lo que décadas atrás era un secreto de alcoba.

—Pareciera que todas estas facilidades tecnológicas modernas se han convertido en un roedor de conciencias humanas —decía el maestro de la comunidad— pero, ¡un momento!, tampoco quiero satanizar todo lo que huele a progreso. De muchas maneras la tecnología de la comunicación es un alivio para el hombre de hoy. Son muchos los beneficios, todo depende del uso que le demos al mundo digital.

Entre los que se han dejado llevar por el lado oscuro del poder digital, está Juancito quien un día, para no ser menos que su vecino de enfrente, entre ruegos y chantajes logró que sus padres premiaran su insolencia con una “tablet”. Esta fue la semilla de sus futuras aficiones, hasta que llegó el día en que el fruto de sus inclinaciones descendió del universo virtual a la trágica realidad.

Las cadenas del vasallaje no se pueden ocultar. Todo un pueblo es prisionero. Ahora solo queda pagar tributo al nuevo rey.

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8 comentarios

  1. 1. Francis dice:

    Diáspora, buen trabajo.
    Has desarrollado un relato digno de ser aplaudido. Me ha gustado la manera como has llevado la puesta en escena. Atrapas al lector y no lo sueltas hasta el final. Las 12 palabras del reto están bien empleadas igual que el resto de la gramática. Sólo el lapsus de “escaza edad” que se escapó la “z”.
    Sigue escribiendo y te leeré siempre que te encuentre.
    Saludos desde Sevilla.

    Escrito el 18 febrero 2017 a las 20:13
  2. 2. DIASPORA dice:

    Gracias, Francis. Aprecio tu comentario. Es cierto, lo del lapsus y otras “cosillas” que se filtraron por ahí. Pasaré por tu relato a la mayor brevedad.

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 12:33
  3. 3. Laura dice:

    Guau Diáspora.
    Qué relato tan fuerte has logrado.
    Felicitaciones. No tengo nada que señalarte. Me recuerda un libro que leí hace muchos años ( hace muchísimos años que leo, creo que desde que empecé la escuela), en el que un poblado, por la continua conexión tecnológica, terminaba con que las personas quedaban conectadas desde sus terminales nerviosas en dedos y creo que cerebro con sus ordenadores. No lo recuerdo exactamente. Pero tu relato lo acercaba. En una época en la que la computadora era un artefacto poco usual en una casa.
    Sigue escribiendo

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 16:51
  4. 4. DIASPORA dice:

    Gracias Laura por tus palabras positivas en cuanto a mi relato. Sé que hay algunas “basurillas” por ahí que fácilmente algunos compañeros detectarán al “vuelo”. Quise comunicar una idea, y si lectores como tu han captado el mensaje, enhorabuena. Visité tu historia y te dejé algunas de mis apreciaciones.

    Escrito el 19 febrero 2017 a las 18:15
  5. 5. Selina dice:

    BRAVO! a medida que lo leia se me paraban los pelos! eso es acaparar al lector. Me gustó y esta muy bien llevado.Se nota erudición.Hay frases un poco largas que estiran la secuencia, pero va.que cantidad de palabras usaste?
    Muy Bien 10

    Escrito el 20 febrero 2017 a las 14:05
  6. 6. DIASPORA dice:

    Gracias, Selina. Qué bueno que te agradara mi relato. Pasaré pronto por tu historia.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 03:38
  7. 7. Marikiya dice:

    Hola Diaspora;
    Tu relato me ha parecido una visión muy realista de la sociedad actual.
    Me ha gustado mucho.
    ¡Buen trabajo!
    Un saludo.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 06:22
  8. 8. DIASPORA dice:

    Gracias, Marikiya por tomarte el tiempo para leer mi historia. Agradezco tus palabras.

    Escrito el 21 febrero 2017 a las 17:01

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