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El mentiroso - por Anabelle

El mentiroso.

En una de estas tardes de finales del verano sevillano, cuando hace tanto calor que es casi imposible concentrarse, y sintiendo aún más el agobio por los exámenes de recuperación para los que me quedaban días, pensé: -te mereces un rato de descanso, aunque sea martes-.

Después de insistir a varias amigas para tomar una cerveza en la Alameda, sin ningún éxito, y haciendo gala de esa persistencia que me caracteriza por conseguir lo que quiero, abrí Tinder. – Este va a ser mi plan de hoy- y empecé a repartir corazones verdes a todos esos guapos sevillanos que como yo, querían desconectar un martes, un rato.

Y ahí estaba, Juan, con esos enormes ojos verdes que aparecían en su foto de perfil, pero que quedaban eclipsados por esos musculosos brazos bien definidos que se notaban que eran trabajados concienzudamente a diario en un gimnasio. Nuestra conversación fue breve, lo suficientemente banal como para saber lo que buscábamos, aunque sorprendentemente me propuso ver una película, e insistió en comprar también mi entrada de cine.

Sin embargo, mis sospechas se confirmaron cuando entré en la sala y la vi repleta de parejas juveniles, y no tan juveniles, esperando impacientes, casi excitados, a que empezara el espectáculo que prometía ser “Cincuenta sombras de Grey”.

-¡Qué horror!- recuerdo que pensé, pero no dije nada. Me limité a mirar y reírme interiormente de cómo aquellos hombres y mujeres que me rodeaban estaban absortos en la película, seguramente pensando en recrear estas escenas con sus parejas al llegar a casa. Me los imaginé con ropa interior de cuero y un antifaz, imitando la grave voz de Christian Grey mientras decían guarradas a sus parejas, que hasta aquel momento habrían sido pecados para ellos.

No mejor suerte me esperaba a mí, que cuando la película terminó y Juan insistió en venir a mi casa, ya pude intuir a que venía esa invitación al cine.

-¿Te ha gustado la película?- preguntó en tono picarón. A lo que yo respondí inocentemente intentando enfriar el ambiente –si Christian Grey no tuviese tanto dinero, esto del sadomasoquismo se vería como una insana perversión. Pero en fin, supongo que es cuestión de preferencias-. No funcionó.

Caminamos en silencio hasta llegar a mi habitación, casi sin hablarnos, principalmente porque no paraba de besarle, y no sólo porque acababa de descubrir que me encantaba, sino porque lo prefería mucho más, antes que seguir respondiendo preguntas de lo que parecía que era un chico de 16 años en plena efervescencia hormonal.

Cuando de repente, y esto sí que no me lo esperaba, una tal Claudia aparece en la pantalla del móvil de Juan, poniéndole un mensaje que decía: -cariño, te espero esta noche para cenar en casa de mis padres, vamos a darles la noticia-. A lo que Juan nervioso e intentando excusarse, empezó a vestirse a toda prisa. Y yo sin poder contener mi rabia le tiré a la cabeza el diccionario de latín con el que había estado estudiando esa misma tarde.

Y casi no lo recuerdo, pero creo que grité: -como que me llamo Carlos, esto no me vuelve a pasar más-. Y borré Tinder, hasta por lo menos el martes siguiente.

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4 comentarios

  1. 1. Miriam Torres dice:

    Hola Anabelle.
    El texto es ameno y divertido, que cuenta una situación tan real como la vida misma y que puede pasar a cualquiera.
    Como detalles:
    * Para el uso de pensamientos (p.ej: pensé: -te mereces un rato de descanso, aunque sea martes-.) y algunos más que hay a lo largo del texto debes usar comillas en lugar de guiones. También se aplica a la transcripción de textos, como el del mensaje que recibe Juan -cariño, te espero esta noche para cenar en casa de mis padres, vamos a darles la noticia-
    *En los diálogos debes utilizar la raya de diálogo y no guiones, siempre dejando espacios entre los hablantes para distinguir el personaje que realiza la acción.
    * Y casi no lo recuerdo, pero creo que grité: -como que me llamo Carlos, esto no me vuelve a pasar más- ¿Dónde están las exclamaciones que evidencian el enfado?

    Escrito el 18 marzo 2017 a las 19:12
  2. 2. Marikiya dice:

    Hola Anabelle;
    Tu relato me ha gustado mucho. Es ameno, dinámico y divertido.
    Tiene algunas similitudes con el mío, estoy en el 12 por si te apetece pasar.
    El giro final es muy gracioso, sobre todo porque no esperas que sea un hombre el protagonista (o por lo menos a mí me ha sorprendido).
    Cumples el reto introduciendo las palabras fácilmente.
    ¡Buen trabajo!
    Un saludo

    Escrito el 20 marzo 2017 a las 05:51
  3. 3. Cesar Henen dice:

    Hola Anabelle.

    Te han sugerido correctamente los cambios que debes hacer pero no te han dicho cómo usarlos, por ejemplo para mostrar pensamientos de un personaje debes poner comillas españolas Alt+ 174 para apertura («) y Alt + 145 (») para cierre. Después de dos puntos se escribe en mayúsculas

    “Pense: -te mereces un rato de descanso, aunque sea martes-.”

    Pensé: «Te mereces un rato de descanso, aun que sea martes»

    Este no sé si es un dialogo en si u otro pensamiento. Si es diálogo se abre con raya alt+ 0151 (—), además de que a modo de que sea diálogo sobre esa raya entre (hoy e y)

    “– Este va a ser mi plan de hoy– y empecé a repartir corazones verdes a todos esos guapos sevillanos que como yo, querían desconectar un martes, un rato.”

    —Este va a ser mi plan de hoy, y empecé a repartir corazones verdes….

    Otra sugerencia para este párrafo disfrazado de dialogo, aquí escribiste un diálogo directo pero que está mal estructurado.

    “-¿Te ha gustado la película?- preguntó en tono picarón. A lo que yo respondí inocentemente intentando enfriar el ambiente –si Christian Grey no tuviese tanto dinero, esto del sadomasoquismo se vería como una insana perversión. Pero en fin, supongo que es cuestión de preferencias-. No funcionó.”

    Lo conveniente es separar los diálogos.

    — ¿Te ha gustado la película? —Preguntó en tono picaron. A lo que respondí inocentemente intentando enfriar el ambiente.
    —Si Christian grey no tuviese tanto dinero, esto del sadomasoquismo se vería como una insana perversión, supongo que es cuestión de preferencias —No funcionó.

    Sobre tu relato, en sí, me parece divertido muestras el tema de la pareja homosexual que no es muy diferente a una heterosexual.

    ¡Saludos!

    Escrito el 21 marzo 2017 a las 02:40
  4. 4. Anabelle dice:

    Muchas gracias por los comentarios. Es la primera vez que escribo algo y lo enseño, por lo que estaba un poco perdida, pero anotaré todos los consejos que me habéis dado y los aplicaré para el próximo relato.

    Saludos.

    Escrito el 23 marzo 2017 a las 00:14

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