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El mentiroso - por Raymond Carr

Me resultará muy fácil terminar el relato de este mes. Tengo una lista muy buena, cada vez fluyen mejor las ideas. En la puerta de la biblioteca hay un grupo de estudiantes, fuman y hablan al sol. Son chicos y chicas. Se comtemplan unos a otros. Parece que esa es su forma de descansar. Me gusta esta biblio, hay muy buena luz, el techo es alto y el aire es muy limpio. En la mesa que me siento hay una muchacha que tiene abierto un diccionario de latín. Parece mentira que alguien pueda estudiar latín hoy en día. Aunque bien mirado, dentro de pocos años todo lo que están estudiando estos no servirá para nada. Esta biblioteca no será la misma. Dentro de diez años ¿habrá alguien que se ponga a leer un libro de papel? Dentro de diez años habrá escritores, sí, pero ¿escribirán libros o guiones para producciones multimedia? O mejor todavía ¿el escritor se convertirá en un artista multimedia?

Delante de la chica del diccionario de latín se sienta otra con un velo negro, despliega encima de la mesa una cantidad hojas y libretas con dibujos de coordenadas y ecuaciones. Coloca una calculadora financiera a su derecha. Se pone a pasar unos apuntes a limpio. Contesta a un chat por su teléfono móvil. El chat le encanta, se lo está pasando bomba. Lleva unas gafas de concha de esas tan grandes y modernas, de esas que parecen un antifaz. Le queda muy bien el contraste del velo con las gafas modernas.

Abro el portátil azul y se dispara una notificación. La del diccionario me mira de cierta manera. La del velo ni se entera, sigue enganchada en el chat. En mi portátil cabe toda esta biblioteca. Y qué. Los griegos con solo mirar al cielo, al mar y a la línea del horizonte tenían tantos conocimientos como los que podemos tener hoy en día con toda esta información. Y no sólo eso, además fueron felices. No tuvieron que presenciar la agonía del planeta, como nosotros. Me pregunto qué cantidad de información le hizo falta a Einstein para elaborar sus teorías. Tiene gracia que me esté comparando con Einstein, vamos es para partirse de risa, si me oyera alguien, qué vergüenza.

El móvil zumba. Es mi novia, que dice que el viernes por la tarde se viene al cine conmigo. En la empresa donde trabajo me han regalado dos entradas por llegar a los objetivos. Cuando me lo dijeron no me lo creía. Es la primera vez que consigo cobrar incentivos. La dinámica entre la empresa y los trabajadores ha cambiado. Los directivos utilizan el márketing para entenderse con los empleados. Lo bueno del caso es que hay trabajadores que prefieren esta relación. Que prefieren perder derechos y obtener privilegios. No se entiende que de la universidad salga gente que esté dispuesta a cobrar 500 EUR sin rechistar y que acepte activamente este nuevo paradigma. Sólo una mente ifantil, sólo un cerebro moldeado para ser exclusivamente consumidor, cliente o usuario puede darse por satisfecho con este papel. Dónde están los asturianos de braveza, los vascos de piedra blindada, los valencianos de alegría y los castellanos de alma labrados como la tierra y airosos como las alas; dónde están los andaluces de relámpagos nacidos entre guitarras y forjados en los yunques torrenciales de sus lágrimas; dónde están los extremeños de centeno, los gallegos de lluvia y calma… A este pueblo ya no le embargan yacimentos de leones ni desfiladeros de águilas ni cordilleras de toros con el orgullo en el asta… Este pueblo manso se ha dejado poner el yugo de la troika. Este pueblo ha muerto vestido de humildad y olor a cuadra.

Bueno voy a ponerme con el relato. El mentiroso. Qué curioso, ahora no encuentro nada convincente en la lista. Qué rabia, todo ha volado. No tengo nada. Sólo dispongo de tres horas antes de entrar a trabajar.
Rajoy. Sí, eso es. Si hay alguien que encaje en un relato que lleve por título "El mentiroso" es Rajoy. Sólo Fernando VII fué capaz de mentir más y de tratar peor al pueblo, de despreciarlo tanto. Se supone que esto es un relato de ficción pero da igual, hablaré de Rajoy, no hay nadie tan mentiroso como él. No existe ningún ser ni real ni imaginario que haya mentido tanto —y que lo dejen seguir mintiendo.

El mentiroso. Vaya título ¿a quién se le habrá ocurrido?

Crepúsculo de los bueyes está despuntando el alba.

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10 comentarios

  1. 1. Ocitore dice:

    Suena como un razonamiento en la antesala de este concurso, los preparativos previos a la propuesta Nº 42 del literautas. Bien contado, pero se queda uno con la curiosidad de cuàl será el verdadero cuento.

    Escrito el 17 marzo 2017 a las 20:33
  2. 2. Raymond Carr dice:

    Hola Ocitore gracias por tu comentario. El cuento es ese mismo. Un chico que tiene una idea para escribir un cuento y en el último momento lo tira a la papelera para describir la realidad en la que vive. Una relidad que no le gusta, que es injusta, etc. O si lo prefieres olvida el cuento simplemente para vivir.
    La próxima vez me saldrá mejor.
    Hasta pronto.

    Escrito el 18 marzo 2017 a las 13:38
  3. Hoa Raymond, soy el vecino del 76. Buena intro a la escena de éste mes de LIterautas, una vuelta que encontraste para escribir acerca de “el mentiroso” tirando verdades. Muy asututo y reflexivo. Quizá haya también algo personal en esas líneas, no lo sé, pero al menos al narrador se lo lee muy convincente.

    Felicitaciones. Espero leerte de nuevo.

    Sl2

    Escrito el 18 marzo 2017 a las 16:01
  4. 4. Raymond Carr dice:

    Hola Fernando, gracias por tu comentario.
    Por su puesto que hay no sólo algo sino mucho de personal en el texto. En realidad igual que en todos los textos de todos los autores.
    Por otra parte, aunque a ti no te lo parezca, el narrador está convencido de lo que hace.
    Hasta pronto.

    Escrito el 18 marzo 2017 a las 17:16
  5. 5. Laura Blanco dice:

    Hola, Raymond.
    No se si te acuerdes de mi, pero en el reto pasado participé como Luz de Luna. Hoy te he buscado por todas partes hasta que te encontré y vaya que ha valido la pena. Muy original tu propuesta, en verdad. Me la he leído de un tirón.
    Si te apetece estoy en la casilla 67.
    Abrazos.

    Escrito el 20 marzo 2017 a las 15:52
  6. 6. Raymond Carr dice:

    Hola Laura, gracias por tu comentario.
    Me alegro de que te guste. Es la segunda vez que expongo el tema de la procastinación en este taller y la verdad es que estoy contentillo con el resultado y me estoy animando a seguir sacándole partido. Me lo pensé antes de meter a Rajoy en esto, pero de verdad te digo que es lo primero que se me vino a la cabeza cuando leí la propuesta.
    Hasta pronto.

    Escrito el 21 marzo 2017 a las 01:35
  7. Hola Raymond.

    Muy interesante tu propuesta de este mes. Perfilas las inquietudes del protagonista de manera muy amplia. ¿El protagonista eres tú? Podría serlo, ¿verdad?.

    A mí, y es algo muy personal, no me gusta que la voz del autor puede verse con tanta facilidad. Creo que es una intromisión. Para eso existen otros formatos.

    La historia en sí me parece mas bien flojilla porque se queda en una especie de intento. Sin embargo me han gustado los devaneos mentales del protagonista. Bien podría ser la cabeza de cualquiera de nosotros ante el papel en blanco.

    He de decirte que, al menos, la bravura de los asturianos se ha quedado encerrada en los chigres en donde aún se puede oler el aroma de la sidra y de una buena fabada. 😉

    Te invito a que pases por mi relato y lo despellejes a gusto:
    https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-42/7408

    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 21 marzo 2017 a las 12:12
  8. 8. Raymond Carr dice:

    Hola Jean Ives, gracias por tu comentario.
    ¿Que si soy yo? Pues claro que soy yo, pero ¿quién soy yo, Raymond Carr? Y “eso” qué es. Estas son las ventajas de adoptar una identidad virtual. Me estoy dando cuenta de que es un buen laboratorio.
    Por otra parte, los de Literautas aconsejan que no nos autocensuremos a la hora de escribir. Como ya le he dicho a otra compañera, es la segunda vez que me decido por el tema de la procastinación. En esta historia he intentado ir un poco más lejos, he querido mostrarlo no como un obstáculo que surge a la hora de escribir sino como un mal bastante extendido. Por lo que veo por vuestros comentarios comprendo que no lo he logrado. La próxima vez saldrá mejor.
    Hasta pronto.

    Escrito el 22 marzo 2017 a las 00:09
  9. 9. Laura dice:

    Hola Raymond Carr.
    Has logrado un buen texto, no totalmente narrativo, más bien descriptivo, íntimo.
    Me ha parecido maravilloso cómo describes las diferentes etnias, grupos? españoles.
    Y el final es grandioso.
    Sigue escribiendo!!!

    Escrito el 23 marzo 2017 a las 11:34

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