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Susana esperaba - por Cesar

Susana esperaba.
De los vasos de cartón, todavía caliente, salen hilos de vapor. Descansa sobre el largo madero y la claridad de la mañana se cuela entre las ramas del níspero, con sus tonos rojizos y amarillentos. Su delgado y débil cuerpo es envuelta con un suave calor, se acurruca como un bebé. El árbol desprendió sus hojas y la brisa del remolino las amontona en pequeños colchones. Un hilo de baba le corre por la comisura de los labios, siente un ligero soplo en el cuello y se acomoda el pañuelo. El liso cabello rubio ya peina canas y las arrugas en el rostro se dejan ver más profundas con las sombras bordadas por el amanecer. Las pisadas sobre el terreno cubierto de hojas repiquetean en los oídos de Susana. Ella lo advierte y el parpadeo de las pestañas es intenso y al colocar su mano como visera para poder ver con más claridad, cae entonces un anillo y luego una hoja salpicadas con tinta roja. Las voces como un campanario retumban en su cabeza, presiente que son dirigidas hacia ella pero no distingue que murmuran.
Mientras abre los ojos, ve al grupo de personas que se alejan por el sendero del cementerio. La mujer trata de levantarse pero siente un punzante dolor en un costado, apoya una mano en ese punto y el rostro se desfigura en una ahogada queja que la paraliza. Toma un respiro y retoma la acción para finalmente quedar apoyada en el respaldo del banco. Observa a su alrededor y en frente, cruzando el angosto sendero, hay una capilla muy pequeña. Se mueve muy despacio, su memoria es un túnel oscuro con interrogantes “¿Qué me pasa? ¿Por qué estoy mareada?
Toma aire y logra apoyarse en al banco, le duele pero no le quedan fuerzas para la queja. Camina tres pasos y cae de rodillas, con sus manos en las hojas se arrastra, "a lo mejor pueda llegar hasta la capilla en busca de ayuda". Falta poco, quizás un par de metros o menos… muy débil cae pesada, se desploma y suelta su último aliento.
Pasaron tres horas. Una linda mañana cálida para tomar un expreso, en vaso de cartón.
Mientras la policía junto con los médicos forenses examina el cuerpo sin vida de la mujer, un hombre está sentado en el banco donde Susana tuvo su último amanecer y guarda en su bolsillo una pequeña cajita forrada elegantemente. Toma uno de los vasos de café expreso apoyado en el banco. Una placa en un costado del cinturón refleja la luz del sol. Se coloca un par de guantes de látex y en uno de los “colchones de hojas caídas” revuelve, hasta encontrar un papel manchado con sangre. Hace con él un bollo que guarda en su bolsillo.
Mientras camina hacia el cuerpo sin vida, a su paso, la brisa suave hace remolinos con las hojas caídas. A llegar corre el plástico negro, la observa y en su mirada hay cierta melancolía, pasa el dorso de la mano por el rostro frío, la acaricia.
Busca en un bolsillo del abrigo de aquella dama y halla un sobre de azúcar. Uno de los forenses se acerca y ve como la observa.
-¿La conoce Capitán? Trabajaba en la capilla-
-No.
-Es hermosa, ¿no le parece?

No contesta. Solo se aleja de la escena con pasos lentos con su vaso de café.

En la salida del cementerio toma el sobre de azúcar y lo vierte en su vaso.
Una mirada al cielo y un largo suspiro que parece decir “tarea cumplida”.
Más adelante toma el bollo de su bolsillo y lo extiende. Lee:
“Es inmenso este amor que siento por ti. Tu actitud me parecía muy fría, pero hoy me demostraste, al regalarme ese precioso anillo, cuánto me amas. Parecía lejano el día de tu separación. Te espero en el banco donde nos conocimos
Te amo.”

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8 comentarios

  1. En líneas generales estuvo interesante tu relato. Aunque, de ser sincero, no entendí de qué murió Susana, y por qué tenía el sobre de azúcar en su bolsillo. Hizo falta explicarlo.

    Con respecto a la ortografía y la concordancia debes tener más cuidado. Dijiste: “Su delgado y débil cuerpo es envuelta con un suave calor”, debería decir “es envuelto”.

    En la parte que Susana se pregunta por qué está mareada faltó cerrar las comillas.

    “-¿La conoce Capitán? Trabajaba en la capilla-” En esta intervención no hace falta colocar la raya final. Solo el punto.

    Mi relato es el 51, si puedes léelo y dame tu apreciación.

    Saludos.

    Escrito el 17 abril 2017 a las 14:52
  2. 2. José Torma dice:

    Que tal Cesar. ¿Cómo lo llevas?
    Eres el primer relato después del mío, así que entremos en materia. Copié partes de tu relato (utilicé // para notar lo que es tuyo) y sobre él te voy a comentar, utilizaré {esta simbología} Espero no confundirte mucho.
    Yo separo tu trabajo en dos partes. La primera es muy densa, el estilo que utilizas en las descripciones y la elección de las palabras, le dan cierto toque “poético”, que choca bastante cuando entramos con el estilo fluido de la segunda parte.
    La primera sugerencia que te hago es, no mal utilices las 750 palabras que permite el reto, poniendo el título, parece tonto pero un par de palabras, en ocasiones hace una gran diferencia para poder redondear un texto.
    La primera parte esta tan llena de adjetivos, que se hace difícil de leer. Pienso también que una reestructuración, utilizando puntos y comas. Le vendría muy bien. Ayuda leer en voz alta tu texto, para ver si de la manera que está escrito, te permite dar los énfasis como los penaste o si requieren de un segundo más.
    Te mencionan en el otro comentario la congruencia. Esto es importante y muy difícil de percibir (a mí me pasa montón de veces). Ve tu primera frase…
    “De los vasos de cartón, todavía caliente, salen hilos de vapor.”
    ¿Qué es lo que está caliente, los vasos de cartón o el líquido que contienen? A mi entender, y para tener congruencia, la frase, por dejarla como esta, debería leerse así. «De los vasos de cartón todavía calientes, salen hilos de vapor». Notas que eliminé una coma, me parece que se lee mejor. Como este ejemplo, tienes muchos en la primera parte.
    Si tomamos la idea de hacer algo poético, bonito, para describir la situación de la mujer, si me brinco la elección de la palabra “baba”. No va con el resto.
    Sé que cuando estamos escribiendo, las pausas en nuestra cabeza parecen mandar una coma al texto, te sugiero revisar cuales puedes eliminar sin dañar la forma, te puedo asegurar que tu relato ganara en fluidez.

    //Susana esperaba.
    De los vasos de cartón, todavía caliente, salen hilos de vapor. Descansa sobre el largo madero y la claridad de la mañana se cuela entre las ramas del níspero, con sus tonos rojizos y amarillentos. Su delgado y débil cuerpo es envuelta con un suave calor {tal vez poner “Un suave calor envuelve su delgado y débil cuerpo”}, se acurruca como un bebé. El árbol desprendió sus hojas y la brisa del remolino las amontona en pequeños colchones. Un hilo de baba le corre por la comisura de los labios, siente un ligero soplo en el cuello y se acomoda el pañuelo. El liso cabello rubio ya peina canas y las arrugas en el rostro se dejan ver más profundas con las sombras bordadas por el amanecer. Las pisadas sobre el terreno cubierto de hojas repiquetean en los oídos de Susana {Ojo, solo tenemos un personaje, no nos has presentado a nadie más, así que aquí puedes evitar nombrarlo. “Las pisadas sobre el terreno cubierto de hojas, repiquetean en sus oídos}. Ella lo advierte y el parpadeo de las pestañas es intenso y al colocar su mano como visera para poder ver con más claridad, cae entonces un anillo y luego una hoja salpicadas con tinta roja. Las voces como un campanario retumban en su cabeza, presiente que son dirigidas hacia ella pero no distingue que murmuran. {Desde “Las pisadas”, hasta “murmuran” Es un poco complicado de entender, según voy leyendo, me dices que esta acurrucada como bebe, acostada sobre el madero de banca, luego sería difícil poner la mano como visera. El texto debe ser re trabajado, te propongo lo siguiente:
    «Las pisadas sobre el terreno, resuenan en sus oídos. El parpadeo de sus pestañas se intensifica. Coloca su mano sobre los ojos para ver con más claridad y de ella caen un anillo y una hoja salpicada con tinta roja. Las voces, como un campanario, retumban en su cabeza. Presiente que son para ella, pero no distingue que murmuran.»}

    Mientras abre los ojos, ve al grupo de personas que se alejan por el sendero del cementerio. {Nadie se interesa o pregunta… ¿Qué hace una mujer mayor, acurrucada sobre una banca, se sentirá bien, necesitara ayuda? A los paseantes parece no importarles, por lo que me dio la impresión de que tal vez, la mujer fuera un fantasma.} La mujer trata de levantarse pero siente un punzante dolor en un costado, apoya una mano en ese punto y el rostro se desfigura en una ahogada queja que la paraliza. Toma un respiro y retoma la acción para finalmente quedar apoyada en el respaldo del banco. Observa a su alrededor y en frente {Enfrente. Una sola palabra}, cruzando el angosto sendero, hay una capilla muy pequeña. Se mueve muy despacio, su memoria es un túnel oscuro con interrogantes “¿Qué me pasa? ¿Por qué estoy mareada?
    Toma aire y logra apoyarse en al banco, le duele pero no le quedan fuerzas para la queja. Camina tres pasos y cae de rodillas, con sus manos en las hojas se arrastra, “a lo mejor pueda llegar hasta la capilla en busca de ayuda”. Falta poco, quizás un par de metros o menos… muy débil cae pesada, se desploma y suelta su último aliento. {Justo aquí, en el cambio de narrativa, requieres un punto y aparte, que separe la idea anterior y nos ponga, con ese pequeño brinco, en guardia para lo que viene.}
    Pasaron tres horas. Una linda mañana cálida para tomar un expreso, {esta previa, es una coma que yo eliminaría y no perjudica su ausencia en lo más mínimo} en vaso de cartón.
    Mientras la policía junto con los médicos forenses examina {n} el cuerpo sin vida de la mujer, un hombre está sentado en el banco donde Susana tuvo su último amanecer y guarda en su bolsillo una pequeña cajita forrada elegantemente. Toma uno de los vasos de café expreso {expreso ya lo has utilizado, tan seguido suena raro} apoyado en el banco. Una placa en un costado del cinturón refleja la luz del sol. Se coloca un par de guantes de látex y en uno de los “colchones de hojas caídas” {no se la intención de las comillas aquí} revuelve, hasta encontrar un papel manchado con sangre. Hace con él un bollo que guarda en su bolsillo.
    Mientras camina hacia el cuerpo sin vida, a su paso, la brisa suave hace remolinos con las hojas caídas. A llegar corre {é} el plástico negro, la observa y en su mirada hay cierta melancolía, pasa el dorso de la mano por el rostro frío, la acaricia.
    Busca en un bolsillo del abrigo de aquella dama y halla un sobre de azúcar. Uno de los forenses se acerca y ve como la observa.
    -¿La conoce Capitán? Trabajaba en la capilla- {solo un punto final, no guion largo}
    -No.
    -Es hermosa, ¿no le parece?
    No contesta. Solo se aleja de la escena con pasos lentos con su vaso de café.
    En la salida del cementerio toma el sobre de azúcar y lo vierte en su vaso.
    Una mirada al cielo y un largo suspiro que parece decir “tarea cumplida”.
    Más adelante toma el bollo de su bolsillo y lo extiende. Lee:
    “Es inmenso este amor que siento por ti. Tu actitud me parecía muy fría, pero hoy me demostraste, al regalarme ese {éste} precioso anillo, cuánto me amas. Parecía lejano el día de tu separación. Te espero en el banco donde nos conocimos
    Te amo.”//
    Así terminas, dejando más preguntas que respuestas, pareces indicar que el capitán la mato, pero no hay indicios que sustenten el hecho que puedan ser de la misma edad o que pudieran tener algún tipo de relación. La nota está escrita en presente pero sabemos que es anterior, entonces… ¿Quién la mató?
    Bueno, lo anterior fue en el aspecto formal. Creo que tienes muchas áreas de oportunidad que espero haber mostrado, recuerda que mi intención es ayudarte y no fastidiar. Muchas de las cosas que te comento, me fueron mencionadas a mí y espero haber mejorado.
    Ahora te diré que me pareció una historia interesante, vas sembrando datos que al final nos llevan a un desenlace que no llena, nos deja pensando si algo nos faltó de leer en el camino. No sé qué tan nuevo o veterano seas en esto de contar historias, pero me parece que tienes buenas ideas, ahora solo hay que colocarlas de manera que cuentes una historia congruente, que envuelva y que al final nos sorprendas con un final de lujo.
    Te reitero mi respeto y espero mis comentarios y sugerencias los tomes como fueron hechos, con ganas de ayudar.
    Saludos.
    José

    Escrito el 18 abril 2017 a las 19:44
  3. 3. José A. Algarra dice:

    Hola, César, soy el 54
    Bonito relato. Independientemente de pequeños fallos de puntuación o algún tiempo verbal desbocado, me ha encantado como vas contando la muerte de Susana, así como la revelación final. También me parece muy acertado lo circular del el inicio y el final con un vaso de café.
    Nos seguimos leyendo. Un saludo.

    Escrito el 18 abril 2017 a las 20:22
  4. 4. Cesar dice:

    Hola José.
    Muchas gracias por leer y por comentar.
    Las correcciones y sugerencias son realmente bienvenidas.
    Voy a corregir y ver como queda.
    Soy principiante en llevar al papel las ideas que tengo en mi cabeza. Me falta “mucho ruedo”, asi es que espero muchas críticas como las tuyas. ¡No te das una idea de lo bien que me vienen!
    La idea de lo que escribí en esta oportunidad es dejar un final abierto, con intriga. Me gustaría provocar en el lector las ganas de saber más acerca del relato.
    saludos.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 11:20
  5. 5. Laura dice:

    Hola Cesar.
    No te tomes a mar las sugerencias.
    Todos tenemos muchas ideas, en el mejor de los casos, y es difícil plasmarlas para que otro las entienda.
    A todos nos pasa. A mí particularmente me ha pasado este mes, que creo que mi relato no ha sido comprendido.
    Pero no desistas. Insiste. Con el tiempo y los aportes de los otros se va mejorando.
    Si deseas, estoy en el 26.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 11:42
  6. 6. Cryssta (Madrid-España) dice:

    Hola Cesar, hay partes de tu relato que me han gustado porque resultan muy poéticas pero la historia en sí cuesta entenderla. No me queda claro si el policía la conoce y es él quien la ha matado.

    Si no la conoce el policía es un auténtico chapuza ¿qué es eso de guardarse pruebas sin ningún cuidado y andar tocando el cadáver?

    Yo te aconsejo que cojas frase por frase y vayas analizando. A mí el primer interrogante que se me abre es ¿el largo madero de dónde es? Hasta bien entrado el relato no he sabido que era de un banco.

    – Estaría mejor poner: “Ella lo advierte y el parpadeo de las pestañas es intenso. Al colocar su mano como visera para poder ver con más claridad, cae un anillo y luego una hoja salpicadas con tinta roja.” Esta escena plantea también preguntas: ¿tenía el anillo y la hoja en la mano y se le cae al poner la mano como visera? en ese caso ¿esta mujer es tan tonta que no se da cuenta de que se le va a caer si abre la mano?

    – Tienes que tener en cuenta que cuando se escriben cosas “poéticas” tienen que tener sentido. Por ejemplo dices: “Las voces como un campanario retumban en su cabeza”, lo que retumba es el sonido de las campanas, no los campanarios.

    – Sería “presiente que están dirigidas hacia ella pero no distingue qué murmuran” aunque si las voces retumban como el sonido de las campanas harían algo más que “murmurar”.

    – Dices “cruzando el angosto sendero, hay una capilla muy pequeña” ¿la capilla está en medio del sendero? “angosto” es sinónimo de estrecho, además es raro que esté “cruzando” estaría mejor al final del sendero, pero este no tendría que ser estrecho, si es una capilla muchos pies habrán hecho que el sendero sea más ancho.

    – Es “logra apoyarse en el banco” y “a lo mejor puede”

    – Dices “Falta poco, quizás un par de metros o menos”, yo quitaría ese “o menos” ya que un par de metros es poco.

    – Decir que “cae” y “se desploma” es una redundancia.

    – Dices que el policía “Toma uno de los vasos de café expreso apoyado en el banco” ¿para qué? Cuando la mujer lo ha dejado estaba caliente, vale, pero dices que han pasado tres horas, ese café está ya helado.

    – Es “ve cómo la observa.

    – “¿La conoce, capitán?”

    – No entiendo cuando dices “Parecía lejano el día de tu separación”. ¿Es que era un hombre casado y le da su anillo de boda al separarse?

    Creo que cuando resuelvas todos los interrogantes te quedará un buen relato. Espero haberte ayudado.

    Un abrazo.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 12:33
  7. 7. Patricia Luna dice:

    Hola Cesar!!!!
    Muy interesante tu relato, ese triángulo amoroso (Susana, el policía y la esposa de éste) que termina en tragedia. Por lo demás, es cuestión de ajustar un poco los detalles de los tiempos verbales y el uso de adjetivos para que no quiten fluidez.
    Continúa escribiendo!!!

    Escrito el 20 abril 2017 a las 02:12
  8. 8. Cesar dice:

    Hola Cryssta.
    Muchas gracias por leerme y tus sugerencias. las tengo en cuenta. Es más estoy siempre, ya hice algunas correcciones y va quedadndo bastante bien.
    Gracias Patricia.
    Nos leemos.
    Saludos desde Buenos Aires

    Escrito el 20 abril 2017 a las 11:41

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