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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Entre cazadores - por Leosinprisa

¿Quién soy? Bruma y escarcha me llaman. De entre las tinieblas de los muertos emerjo, de la propia oscuridad, de donde las voces calladas ansían liberarse y los ojos nunca cierran sus párpados. Allí camino sin posar nunca mis pies en el polvo del sendero o en el cenagoso barro, huyendo de vuestras miradas, pasando inadvertido, esperando mi momento.

Soy una sombra, la pálida luz que se refleja por un instante allá donde nunca prestáis atención. Tras la puerta, bajo vuestro lecho, siempre fuera del campo de visión, siempre un poco más lejos de cuanto los sentidos alertan. Ese olor escurridizo, el ruido inadvertido que desaparece nada más escucharlo, el reflejo de algo que corre, que se esconde, que os acecha.

Ahí estoy yo. Atento, aguardando ese precioso instante. Pobres criaturitas, tan frágiles, tan simples. Tan impotentes.

—Busca, busca. —Las palabras salen de mi interior, me animan a daros caza. Trepo por la ordalía de metales entrecruzados que se interpone a mi paso, un bosque de muerte que espera, por un mal movimiento, atrapar una nueva víctima que habrá de acompañar a muchas otras que se marchitan. Cadáveres resecos, huesos desnudos, mordisqueados y despojados de cuanto tuvieron en vida. Blancos, relucientes, calaveras de gestos vacíos con sus mandíbulas abiertas por un último grito que nadie escuchó.

—Sigue, sigue. —Mis palabras resuenan en el aire. Un ambiente denso y maloliente el cual no me importa atravesar. Todo este lugar es una tumba y las voces de mi interior escupen órdenes que sigo con fidelidad. Buscar. Encontrar. Matar.

Es un viejo credo, el único en el que confió y encuentro satisfacción. Una caza sin tregua, sin descanso, sin día o noche que me importunen. Cazar. Cazar. Cazar.

Un mar de artefactos se interpone en mi camino. Viejas máquinas que un día tuvieron vida propia y ahora languidecen, inanimadas, en un largo cementerio que recorre una abandonada senda. No sé cuándo murieron, ni tampoco me importa. Aún huelo sus fluidos al acercarme y pasar entre ellas, las antiguas esencias que les dieron vida por un breve tiempo, su química cuya composición conozco al instante. Desprecio su tosca ingeniería, las rudas redondeces sobre las que se desplazaban. Su falta de identidad propia. Eran esclavos. Ellos no son mi objetivo, tengo otras prioridades mucho más gratas. Me gusta cazar. Os debo cazar.

—Justicia, justicia. —Me estremezco por un instante, la venganza llena mi ser. Vivo para complacer mis instintos. No pienso fracasar, detengo mi marcha cuando algo llama mi atención.

Allí, a doscientos movimientos, está uno de vosotros. Una, es una hembra. Reanudo la marcha, acercándome con cautela hasta donde tenga una posición ventajosa. Me alejo del reflejo delator de las maltrechas torres de cristal que antaño construisteis. Vuestra vanidad no tenía límites y vuestro orgullo apenas podía contenerse. Siempre os creísteis mejores. Siempre creísteis ser dioses. Cuan amargo debió ser vuestro despertar.

No sabe de mí. Se mueve confiada, segura en su pequeño mundo de que no le va a alcanzar mal alguno, pero su suerte se ha acabado. La he encontrado. Solo queda esperar, me deleito aguardando el momento. Avanzó de nuevo, con sigilo, como si fuera un trozo de seda que el viento empuja. Es un movimiento elegante, con pequeñas pausas. No queda mucho hasta alcanzar el lugar desde el cual pueda terminar con mi presa.

Llego al punto establecido. El contador empieza una rápida cuenta atrás. Las cuchillas emergen para rasgar y amputar. Hoy deseo entretenerme, la muerte llegara con lentitud. Quiero oírla gritar. Tal vez, con un poco de suerte, alguien intente ayudarla. Será divertido. Ya ha llegado la hora.

—Matar, matar. —Las palabras emergen, una vez más, solas. Me abalanzó a toda velocidad, rugiente, desafiante. Cortaré los tendones de brazos y piernas. Será un bonito juguete en el que depositaré toda mi atención.

Justo cuando la tengo a mi alcance, se mueve y evita mi ataque. Lleva algo entre las manos. Un destello reluce y siento que me desplomó en el suelo. La miro. Ella sonríe…

Los brutales ojos rojos, las lentes de la bestia metálica, se apagan. Minerva suspira aliviada, ha faltado poco para que la atrapara, un certero disparo de su arma bastó en detenerla para siempre. La IA enloquecida brindará valiosos repuestos que la peligrosa ciudad, abandonada y perdida como todas, ofrece con graves riesgos.

La valiente joven atraviesa cautelosa con su trofeo la calle, llena de vehículos destrozados.

—Estúpidas máquinas sin corazón —dice al viento. Y en sus ojos, un brillante fulgor rojo se ilumina buscando.

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15 comentarios

  1. 1. Dante Tenet dice:

    Buenisimo!!!!

    Ritmo, estructura, argumento y el cierre todo equilibrado.

    Una sola duda, la mujer tambièn era una IA, digo por el comentario final.

    Nos seguimos leyendo

    Estoy en el 160

    Escrito el 17 mayo 2017 a las 19:11
  2. 2. Agustín dice:

    Hola Leosinprisa.

    Guau. Creo que la primera vez que lo he leído he contenido la respiración. Ni que decir tiene que me has enganchado. Tiene un ritmo casi musical, de poesía. Casi he visto a través de los ojos de la máquina.

    Me ha sorprendido el que fuera máquina porque creía que era algo sobrenatural al principio.

    No he entendido el uso de la palabra ordalía. Por el ambiente, y quizá también la sonoridad de esta palabra, no me ha costado hacerme una imagen de lo que querías describir. Pero al leerlo por segunda vez me he ido a buscar la definición al diccionario y eso me ha confundido más todavía.

    Algunos detallitos que he visto: confió en vez de confío; y avanzó en vez de avanzo.

    En “un certero disparo de su arma bastó en detenerla para siempre” creo que tendrías que haber usado el pretérito perfecto compuesto igual que en la frase anterior. Y la preposición “en” no me encaja; creo que debería ser “para”.

    Enhorabuena.

    Agustín, el del 167.

    Escrito el 17 mayo 2017 a las 19:25
  3. 3. Berundgaar dice:

    Olé, olé y olé.

    Nunca decepcionas, pero es que en esta ocasión, te has superado.
    Empieza despacio, casi plácidamente. Poco a poco te lleva, tu ritmo cardíaco sube al tiempo que la trama avanza. Al final, un giro brutal y un placer inesperado.

    Parafraseando a Julia Roberts en “pretty woman” y salvando las diferencias de sexo y por tanto, prenda íntima…

    “CASI ME MEO DE GUSTO EN LAS BRAGAS”

    jajajaja.

    Enhorabuena. Un saludo.

    Este mes estoy en el 70.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 10:45
  4. 4. Yoli dice:

    Hola, Leosinprisa.
    Como siempre, me ha gustado mucho tu relato. Lo he encontrado muy bueno, tanto en las descripciones como en la tensión que pones hasta llegar al final. Yo tampoco pensé que era una maquina y me ha gustado ese giro que le has dado.
    Te seguiré leyendo.
    Si quieres leer el mio, soy el 82.
    Saludos.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 11:08
  5. 5. Juana Medina dice:

    Salud, Leosinprisa
    Qué lenguaje estupendo. El principio sobre todo es maravillosamente poético y también a mí me costó identificarlo con una máquina, pero en este mundo distópico tendremos que acostumbrarnos a todo. No sé qué es IA. Y también me quedó la duda sobre la mujer. Pero está estupendamente escrito, muy bien estructurado y con un ritmo excelente.
    Un placer leerte
    Saludos

    Escrito el 19 mayo 2017 a las 02:05
  6. 6. ANGEL CLIMENT dice:

    Hola, esta es mi visita mensual,
    Bien escrito, interesante, muy contento de leerte cada mes, para intenatar aprender, Gracias por escribir
    Saludos

    Escrito el 19 mayo 2017 a las 12:56
  7. 7. Auxi Morata Alegre dice:

    Hola Leosinprisa! Este mes estoy por el número 84 y quería venir a hacerte una visita porque nunca defraudas.

    Es un relato buenísimo, como viene siendo habitual, me ha encantado el ritmo, los personajes y ese giro final ha estado muy bien, el hecho de que no supieras bien quien narraba la historia te encogía y te pegaba al relato aun más.

    Enhorabuena! Nos leemos! Un beso!

    Escrito el 19 mayo 2017 a las 16:30
  8. 8. yolareina dice:

    Hola Leo: Un placer leerte, manejas muy bien la dramaturgia y eso atrapa y hace que el lector quiera seguir hasta el final, como siempre me sucede con tus relatos.

    Nos leemos

    Escrito el 19 mayo 2017 a las 18:40
  9. 9. Alberto C. dice:

    Hola Leosinprisa.

    El primer párrafo es lo que más me ha gustado: te atrapa y va directo al grano. Aunque el final me ha dejado un poco con un mal sabor de boca; esperaba un poco más. Esto es personal, claro ¿eh?

    Quizá el nivel que tiene tu relato es superior al del final. En todo caso, felicidades. Un gran trabajo. Es un placer volverte a leer.

    Un saludo, estoy en el 36.

    Alberto C.

    Escrito el 20 mayo 2017 a las 09:03
  10. 10. Earendil dice:

    Hola, Leosinprisa.
    Ante todo, quiero agradecerte tu mensaje en mi correo electrónico. Ya había leído en otra entrada que este mes ibas a tener ciertas dificultades para participar en el taller. No te preocupes por no haberlo leído mi llamada S.O.S. a tiempo. Cuando leas mi relato sabrás por qué lo hice.
    ¿Qué puedo decir del tuyo? Es, sencillamente, genial.
    Veo que no has marcado la R del reto. Supongo que habrá sido un error de tipeo porque lo cumples perfectamente.
    No he querido leer ningún comentario anterior, para no verme contaminada de ninguna sensación. Y digo esto porque a lo largo del relato van sucediéndose diferentes emociones según se avanza.
    Has hecho un cambio de narrador justo al final, en los últimos tres párrafos. Era necesario para poder entender la naturaleza misma del personaje, por lo que me parece estupendo este recurso.
    Al principio pensé que la Sombra era algo sobrenatural, incluso la Muerte, pero hay una oración clave que nos da la pista: “Me alejo del reflejo delator de las maltrechas torres de cristal que antaño construisteis.” A partir de entonces leí el resto con otra perspectiva.
    Hay otra frase muy significativa: “La IA enloquecida brindará valiosos repuestos que la peligrosa ciudad, abandonada y perdida como todas, ofrece con graves riesgos.” Supongo que significa que es una unidad fuera de control, como bien afirma la otra IA (que supongo que también lo es), al calificarla de “enloquecida”. Una cualidad muy humana para una máquina del futuro. Me recuerda otros personajes artificiales de películas y libros, aunque en otras ocasiones estas cualidades era para bien.
    En la parte formal tengo algunas sugerencias:
    * “Trepo por la ordalía de metales entrecruzados que se interpone a mi paso,”____La palabra ordalía es una palabra que llama la atención. Yo misma he tenido que buscar su significado. Supongo que querías decir otra cosa, porque solo tiene una entrada en el diccionario y no cuadra con tu contexto. Revísala y busca otra que sí signifique lo que buscabas decir.
    * “Es un viejo credo, el único en el que confió y encuentro satisfacción.”____CONFIO.
    * “Avanzó de nuevo, con sigilo, como si fuera un trozo de seda”___AVANZO.
    * “Hoy deseo entretenerme, la muerte llegara con lentitud.
    Me abalanzó a toda velocidad, rugiente, desafiante.”___LLEGARÁ.
    Precioso trabajo en forma y fondo. Te felicito sinceramente.
    Nos leemos.

    Escrito el 21 mayo 2017 a las 18:29
  11. 11. tyess dice:

    Excelente trabajo.
    La existencia de una “estúpida máquina sin corazón” es un poema. ¡Vaya!
    Seguro que Minerva no lo imaginaría ni en un millón de años. Tampoco creo que la IA esté consciente de que no tiene un corazón ya que, pobrecilla, tiene sensaciones, estados de ánimo, un propósito, una obsesión… ¿un error en el código?

    Por ahí vi que ya te enumeraron los fallos ortográficos. Siempre aparecen, supongo. Corrígelo, porque es un bello relato… en un futuro sin duda horrible.

    Escrito el 24 mayo 2017 a las 16:13
  12. 12. PEPE ILLARGUIA dice:

    Qué decir Leosinprisa, es un relato estupendo, y cuando metes así de sopetón a la diosa Minerva, uno se imagina a los dioses paganos luchando entre ellos como en tu distopía, en un juego en el que solo debe quedar un ganador. Los primeros párrafos son muy buenos, me parece ver a un Hades en movimiento para conseguir sangre fresca para su colección de ultratumba.
    Por cierto esa ordalía de la polémica, parece la prueba que supera Sir Lancelot en medio de un bosque de acero en movimiento, para conseguir un beso de la dulce Ginebra.
    Me quedo con la duda de cuál es el trofeo, un corazón de metal y marcapasos, un chip positrónico…
    Enhorabuena, una bella historia.

    Escrito el 25 mayo 2017 a las 21:27
  13. 13. Charola dice:

    Buenísimo Leosinprisa.

    Bella prosa y cumpliste el reto aunque no pusiste la R.

    Felicitaciones.

    Nos leemos.

    Escrito el 26 mayo 2017 a las 16:24
  14. 14. Baltasar dice:

    Estimado Leo: Permíteme el apócope.
    ¡Magnífico! ¡Magnífico! Tienes una prosa sencillamente deliciosa, que escribes en primera persona, excepto, claro, cuando el personaje, abatido por Minerva, deja de poder hacerlo. Prosa, decía, que lees y relees con verdadero deleite, y que he releído no sé la de veces. Primero por placer, sin importarme qué querían decir tan bellas palabras. Después, tratando de descifrar las dos primeras: «¿Quién soy?». Bueno, «posiblemente la bestia metálica a la que abate Minerva; la máquina sin corazón —que dice al viento—». No sé, no sé. A ver si me tropiezo con la Inteligencia Artificial para preguntarle.
    En cualquier caso, mi felicitación.
    Un cordial saludo

    Escrito el 30 mayo 2017 a las 18:20
  15. 15. Laura dice:

    Hola Leosinprisa.
    Grandioso relato.
    Lo único que me quedó fue el principio, con lo de Bruma y escarcha: Si es el nombre,¿ no sería Bruma y Escarcha?
    Me resulta algo raro la repetición de palabras, pero puede ser algo mío y nada más, no te preocupes.
    Por lo demás, una gran historia.
    Nos encontramos en junio

    Escrito el 4 junio 2017 a las 13:19

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