anécdota real - por Masterger

Anécdota real

Hacía dos semanas que se sentía mal de salud.
Alceo creía que el motivo era que había incurrido en una falta a su propia palabra, la cual había empeñado con seriedad y compromiso para dejar de beber alcohol en un periodo de dos meses.
El alcoholismo como desenlace es fatal, dejando antes de ese momento una serie de daños severos y lamentables. Frecuentemente realizaba este tipo de promesas para abstenerse de beber; sin embargo, cada vez le era más difícil cumplir. Había entrado en una etapa en que se decía: “El amor y la misericordia de Dios son tan grandes que él todo lo perdona”, “Dios no castiga pues es un Dios bueno”. Y en esa IDEA justificaba su miedo y cobardía, pues Dios todo perdona ,pero hay reglas que por respeto , por amor, por temor, o simplemente por sentido común se deben cumplir y pensar lo que se puede ocasionar con acciones irreverentes e irresponsables como las que Alceo acostumbraba cometer.

-Sí, ¿ quién habla?
-Buen día Dr. Soy Alceo, he estado bebiendo en exceso y me he sentido mareado y nervioso desde hace tres días, quisiera ver si me puede recomendar algo para mejorar estos síntomas, desde luego si me hace favor por este medio.
-Sí, claro Alceo, debe ser estrés y cansancio, ponte unas inyecciones de Dexabión que son vitaminas y con eso te compondrás.
-Está bien Dr. Así lo haré, y le agradezco como siempre las atenciones.
-Yo también me he llegado a sentir así. Alceo. Una vez sentí un vértigo tan fuerte que me era imposible ponerme en píe, de hecho tomo de vez en cuando medicamento para ello. En otra ocasión pensé que era lo mismo pero en realidad se me había subido la presión más de lo normal. En tu caso , seguramente es sólo vértigo o el mismo exceso de trabajo, y más si nunca has padecido de la presión alta.
Esa tarde Alceo llegó a su casa y lo primero que hizo fue ir a saludar a su mamá como lo hacía cada tarde en que llegaba de trabajar.
-Me siento mareado, me siento como si perdiera el equilibrio y me fuera de lado, no sé qué pueda ser.
-Yo igual, pero en mi caso es la presión alta y tomándome el medicamento se me pasa, en el caso tuyo está raro pues eres joven para ya ser hipertenso.
-Sí, pero como he bebido más de la cuenta y estando en una promesa de no hacerlo, me origina más preocupación.
-A ver te tomo la presión con este aparato que tengo aquí.
-¡Estás elevado!
Alceo se preocupó.
-Dr. Le comento que me tomé la presión arterial y estoy elevado.
-Tómatela tres días seguidos a la misma hora para saber qué pasa .
Alceo se tomó la presión arterial por tres días consecutivos y el resultado fue prehipertensión. Ahora tendría un tratamiento de cuatro días tomando medicamento para la presión alta, con la esperanza de que disminuyera.
Era necesario un cambio radical en sus hábitos y estilo de vida.
En realidad Alceo había abusado de la buena salud que había tenido siempre y que nunca supo valorar. Tampoco había sabido realizar las metas que se había trazado hacía años.
Tenía años que se había propuesto escribir una novela, y en casi trenta años era poco lo que tenía escrito. Y así otros objetivos quedaban sin florecer.
Sentía enojo y frustración en cuanto a su vida familiar porque la suya era hermosa con una bella esposa en todos los aspectos y no le había sabido corresponder. Con sus tres hijos se sentía pequeño pues creía no haberles dado el lugar preponderante que se les debe dar a los hijos. Ellos eran magníficos como hijos. Hoy tenía tres hermosos y sanos nietos, dos excelentes nueras, un trabajo exitoso y el reconocimiento de la sociedad que lo conocía ¡Qué más pedir!
Tenía que empezar a administrar medicamento a su organismo, eso no le agradaba.
Era momento de tomar la decisión, pero ahora sin volver a fallar.
Como hombre de fe y convencido del arrepentimiento de su grave falta y de todas las actitudes vergonzosas que había cometido, las cuales le hacían sentir terriblemente mal, eligió dejar esa vida de desorden y falsa felicidad en la que estaba muriendo poco apoco como si hubiera estado por mucho tiempo encerrado en un ARMARIO, llenando sus cajones con sus miedos ,sus inseguridades y traumas, desperdiciando inútilmente la hermosa vida que el Creador le había concedido.