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La no vida - por Amilcar Barça

Web: http://caminodefierro.blogspot.com

Extraigo de mi fondo de armario la siguiente elucubración, acorde con los días pasados:
Es el gran fracaso y la gran cabronada de la vida. Leí en algún sitio que solo los valientes mueren una vez, en tanto los cobardes, mueren en innumerables ocasiones. Yo tengo mucha práctica. La realidad es que hablamos de la muerte con una facilidad que acojona. Bueno, acojonar es poco. Es normal escuchar "por qué no me moriré" o "qué hago aquí ya", "estoy hart@ de vivir"… palabras en vano. Postureo, palabreja que está de moda últimamente. Cuando la gente le ve las orejas al lobo, se olvida de todas aquellas frases lapidarias. Cuando me muera quiero que hagan esto o lo otro y lo de más allá… Postureo; cuando te mueras, has dejado de existir, no vas a estar allí para controlar que se haga todo como tú estableciste. Te harán las mil y una perrerías y tú, que en vida eras un bulldog que se comía a la gente cruda de aperitivo, ni te inmutarás. Y suerte si la palmas en tu cama, si lo haces un poco a la intemperie, los forenses disfrutarán contigo cual matachín el día del mondongo. Habrás podido ser el mayor santo del mundo o el asesino en serie más cabrón de la historia; puede que se acuerden de ti, pero tú, no lo verás. No hace mucho hablando del tema un pariente decía que lo que hubieras hecho aquí quedaba y tal… ¿y a ti qué mas te da si no lo vas a ver, si ya no existes? Muchas veces he meditado si la vida tiene algún fundamento y que para qué existimos todos en este mundo. A más a más, para qué existe el mundo. El mundo existe porque existo yo. Miles de antepasados, hermanos, hijos… nunca tendrán la posibilidad de plantearse esta quimera. Podría tenerlo si hubiera una continuación antes o después de la existencia terrena, pero ya vemos en qué queda ésta cuando nuestros seres queridos desaparecen. (Nada falta en los funerales de los ricos, excepto alguien que sienta su muerte). Si fuéramos antropófagos, veríamos como en la carnicería podríamos comprar filetes de muslo o cualquier otra parte del cuerpo humano, (realmente sería difícil elegir porque una vez muertos, ciertas partes del cuerpo humano pierden mucho y yo las prefiero crudas, vivitas y coleando, al natural) lo mismo que hacemos con un/@ poll@, una ternera o un cerdo. Y no pasaría nada, igual que cuando asamos unas chuletas de cordero a la brasa. Pienso en que a mí podría ocurrirme algún percance y palmarla echando leches, hasta el punto de no darme ni cuenta de ello (sería ideal). Y una mierda, puto postureo. Pues de todo aquello que tengo dispuesto hagan conmigo, no me enteraría, aunque tardaran quince días en echarme en falta. No estaría aquí para ver cuando me hallaban, ni tampoco en lo alto del cerro de san Ginés cuando arrojen mis cenizas al viento. Y en dos generaciones, nadie se acordaría ni de que había existido. De los abuelos se enteran los primeros nietos en nacer, de los bisabuelos, casi nadie. Cuando repasan la historia de la Tierra y dicen que tiene no sé cuántos millones de millones de años, da risa escuchar a esos que se ponen a hacer discursos sobre el ser humano y olvidan que muchos millones de años antes existieron una formas de vida sobre ella que, si bien el hombre mientras no se demuestre lo contrario es la forma de vida más inteligente conocida, no podemos saber si antes no existieron otras civilizaciones tan adelantadas o más que la actual. Sobre todo porque el homo sapiens tiene poca historia y sapiens no está demostrando serlo en demasí; de lo contrario esto sería un paraíso y no una mierda dominada y gobernada por criminales. (Solo mirar quienes dirigieron el FMI y donde están ahora, ilumina bastante el asunto; y no menciono a tantos y tantos dictadores sanguinarios).

Hace años hablaba del tema con un compañero de trabajo ¿Y si nosotros formáramos parte de un ente del cual no tuviéramos noción de ello? Sin darnos cuenta, en nuestro cuerpo, diariamente millones de células y bichos ajenos nacen, viven y mueren sin que nosotros nos percatemos. Y hay un hecho irrefutable: nadie, absolutamente nadie, ha vuelto para dar fe si hay un Más Allá o un menos acá. Alucinaciones que el ser humano quiere creer porque se resiste a desaparecer definitivamente.

En aquel momento, parecía una buena idea.

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9 comentarios

  1. 1. Patricia Redondo dice:

    Caramba Amilcar, ¡que monólogo tan original ! Reflexiones profundas en realidad (puede haber algo más profundo que pensar sobre la vida y la muerte y el semtido de la existencia ?). Pero en un tono tan coloquial que resulta muy amena la lectura del texto. Me gusta incluso el tono atropellado y aparentemente desordenado del discurso. No es exactamente un relato con inicio nudo y desenlace pero igual tampoco hace falta que lo sea. En fin , que me ha gustado.

    Un saludo, nos seguimos leyendo!

    Escrito el 17 noviembre 2017 a las 12:43
  2. 2. Estel Vórima dice:

    Una reflexión cruda y directa. Me ha gustado eso de “mientras no se demuestre lo contrario” y lo de “sapiens no es en demasía”. Desde luego eso la Historia lo corrobora.
    La reflexión que has hecho sobre el postureo está muy bien, ahora abunda eso del postureo y no solo sobre la muerte.
    Lo único que el signo @ no me termina de quedar bien en textos literarios. Pero es una opinión personal.
    Buen trabajo.

    Escrito el 17 noviembre 2017 a las 21:14
  3. 3. Laura dice:

    Hola Amilcar.
    Gracias por tu comentario a mi texto.
    Con respecto al tuyo, ya Patricia te ha dejado su opinión. Vaya momento que estás pasando. Puede que tengas razón, puede que no la tengas. Lo único cierto es que hasta ahora nadie ha vuelto del otro lado, y lo que aquí tenemos es por ahora todo lo que tenemos.
    Por supuesto que lo he leído de la forma en que lo deber haber escrito, de un tirón, sin pausas.
    Desde lo formal, exceptuando que no es un relato, por supuesto que se lee con gran interés.
    Nos encontramos en la próxima propuesta.

    Escrito el 17 noviembre 2017 a las 23:58
  4. Hola Amílcar.

    Siempre me paso por tus reflexiones a sabiendas que no es un relato “al uso”. Pero me da igual, se te puede reconocer en tus devaneos, tan mordientes y sagaces. Ole tú.

    No te falta razón, el homo sapiens es de todo menos sapiens.

    Nos leemos.

    Un abrazo.

    Escrito el 18 noviembre 2017 a las 14:04
  5. 5. Don Kendall dice:

    Hola Amílcar,
    Me gusta el estilo y el modo como afrontas el trabajo.Y como comenté en otra ocasión, creo que que podías sacar más partido tú y disfrutar más el lector si el punto de vista viniese con un narrador en segunda persona. En esta ocasión casi lo bordas. Es más, haces un muestrario completo de los tipos de narrador en segunda persona, tanto desde la segunda persona aparente como la segunda persona plena. Creo que aquí tienes una veta para explorar y experimentar.
    n español hay una gran tradición de este estilo y con sinceridad te digo que merece la pena que des un par de vueltas para decidir a qué tipo de narrador se lo encargas.
    Desde el modelo de Antonio Gala y sus conversaciones con Troyko a un clásico que a mí me encanta y que leyéndote a ti, parece que lo tengo delante. Te pongo un ejemplo :

    Una de las palabras cuya explicación ocupa más lugar en el diccionario de mi amigo Nuño es la voz política, y su adjetivo derivado político. Quiero copiarte todo el párrafo; dice así:

    «Política viene de la voz griega que significa ciudad, de donde se infiere que su verdadero sentido es la ciencia de gobernar los pueblos, y que los políticos son aquellos que están en semejantes encargos o, por lo menos, en carrera de llegar a estar en ellos. En este supuesto, aquí acabaría este artículo, pues venero su carácter; pero han usurpado este nombre estos sujetos que se hallan muy lejos de verse en tal situación ni merecer tal respeto. Y de la corrupción de esta palabra mal apropiada a estas gentes nace la precisión de extenderme más.

    »Políticos de esta segunda especie son unos hombres que de noche no sueñan y de día no piensan sino en hacer fortuna por cuantos medios se ofrezcan…

    (continúa).

    Tal parece tu factura ¡a qué sí!!. Pues bien, es de José Cadalso. Es el inicio de una de sus Cartas Marruecas la nº 51 concretamente. José Cadalso (1741-1782) usó el seudónimo literario de Dalmiro y su obra «Cartas Marruecas», novela del género epistolar, fue publicada en 1789. Te recomiendo, en general la recomiendo leer a todo el mundo , de forma seguida, a saltos, como se quiera porque hay mucho que aprender. Además está accesible sin problemas en la Wikipedia : https://es.wikisource.org/wiki/Cartas_marruecas

    En resumen Amílcar o Dalmiro son seudónimos tras lo que hay un trabajo literario atractivo y muy parecido. Merece la pena experimentar en esa ruta estimado colega de taller. Un abrazo

    Escrito el 19 noviembre 2017 a las 15:45
  6. Don Kendall, estimo en lo que valen tus consejos. Todo esto de los narradores ha sido nuevo para mí hasta caer en esta web. He sido y soy autodidacta cayendo en lo naïf. Me aficioné a escribir -mejor llenar folios- cuando trabajando por la noche debía mantener despierta la mente pues los ojos se negaban. Intentaré seguir tus consejos, pero mirando a Vargas Llosa y su decadencia, se me cae el alma al suelo; me planteo si sirve tanto esfuerzo para acabar haciendo el ridículo. salu2

    Escrito el 19 noviembre 2017 a las 18:41
  7. 7. Osvaldo Vela dice:

    Que tal Amilcar: de tu texto, lo primero que llamó mi atención fue el título. Enseguida me topé con un párrafo tan largo como la vida misma y deduje que había un trabajo filosófico en ciernes.

    Una gran bocanada de oxigeno llegó a mis pulmones preparándolos a una lectura que podría causarles problemas. Increíblemente no sucedió. Mi mente se vio llena de verdades y deambulares filosóficos que padecemos con frecuencia y la lectura se volvió clara: el respirar se transportó a un segundo termino y lo ahí escrito había sido de tema de conversación en otros encuentros culturales.

    La deducción de muchos de los participantes era que necesitaríamos existir en otras vidas para encontrar respuestas. Recuerdo que esa vez mi contribución fue que yo como escritor, cada vez que escribo una historia vivo otra vida y todavía no encuentro la respuesta.

    La reflexión que queda de tu trabajo es el ¿porqué poseer una mente tan liberta cuando estamos atados a una incógnita sin solución?

    Te felicito. Profunda faena la tuya.

    Escrito el 21 noviembre 2017 a las 16:51
  8. 8. Servio Flores dice:

    Hola Amilcar.
    Que texto tan más filosófico y a la vez tan fácil de digerir.
    Siento que plantea mucho de lo que en algún momento de la vida todos nos hemos preguntado.
    Me recuerda mis días de universidad hablando temas existenciales con mis amigos más cercanos. “Destruyamos el mundo y volvamos a construirlo” decíamos y así pasábamos horas hasta dejar el mundo a medias…
    Únicamente haría una observación, el uso de la @ en algunas palabras. Aunque estoy a favor del lenguaje incluyente siento que desconcentra un poco.
    Lo disfruté. Saludos

    Escrito el 29 noviembre 2017 a las 18:45
  9. 9. Amilcar Barça dice:

    Servio, escribir directamente una polla, podría haber generado discrepancias, o no.

    Escrito el 30 noviembre 2017 a las 14:50

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