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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Sombras - por ÁNGELL

Existen sombras y sombras. Unas navidades, Scrooge notó la presencia de sombras por todos lados. Otro tipo de sombras. ¿Sabes a cuáles me refiero? A las que te persiguen y no te abandonan. Ni de día ni de noche. Sombras que hielan los huesos. Que hablan. Que acarician dejando un rastro mucilaginoso, un hedor insoportable del que no puedes deshacerte. Su rastro no se aprecia por fuera. ¡Está dentro! Scrooge lo sintió muy adentro. Y eso casi lo volvió loco. Tan loco como sólo puede estar alguien que ve, escucha, siente y huele las sombras que produce su conciencia.

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13 comentarios

  1. 1. Don Kendall dice:

    Magnífico trabajo. Me gusta como está narrado con un toque a la segunda persona, dando lugar así a eso que se conoce como «narrador titiritero». Lo sabe todo de la historia, pero no se mete, lo maneja desde fuera dirigiéndose al lector (espectador) directamente. Me gusta el soporte escogido, el personaje de Scrooge de Cuento de Navidad. El trabajo que presentas este mes complementa y enriquece más aún, la descripción que hace Dickens de su personaje : El frío de su interior le helaba las viejas facciones. le amorataba la nariz afilada, le arrugaba las mejillas, le entorpecía la marcha, le enrojecía los ojos, le ponía azules los delgados labios….
    Dicho todo lo anterior, si se me permite un toque tiquismiquis, quizá al final le vendría mejor un cambio en el orden del sujeto y predicado para que no haya duda en la concordancia de número.
    …las sombras que produce su conciencia, tal vez chirríe menos ordenando la frase de otra manera …las sombras que su conciencia produce , dado que el sujeto de produce es su conciencia, singular, y no sombras , plural.
    En fin , como sabes todo esto EMDO. El trabajo es tuyo y solo me queda agradecer tu amabilidad en ponerlo a disposición. Un abrazo

    Escrito el 18 diciembre 2017 a las 12:13
  2. 2. ÁNGELL dice:

    Muchas gracias, Don.
    Viniendo de un maestro de espadas como tú, recojo la montera: «…complementa y enriquece más aún, la descripción que hace Dickens de su personaje…», pedazo de piropo.
    Sí. Había algo que no cuadraba.
    «¿Es posible? Son sólo cien palabras, ¿cómo puedo fallar, dónde?» Escuchaba mi propia melodía: na, na, na… , nabrrrraaa. El dibujo de la pieza era grácil, limpio, descriptivo, pero al final…, como que me quedaba yo con la cosa de que faltaba un trazo; pero, ¿dónde? Al final, sí. ¡Qué miedo! Y si lo rompo todo… Un trazo, nada más. ¿Dónde? Mil vueltas, mil repasos. El final, el final…
    Y ahí estás tú. Olvídate, compañero, no se trata de un «toque tiquismiquis», se trata de la nota, del trazo… Me he vuelto casi tan loco como el otro, pero es que hay que alejarse del cuadro para ver toda su inmensidad. Como el que mira Velázquez a un metro de su obra, ¡pfff! Llevo toda mi vida viviendo de esto mismo y, sin embargo, aquí pico, caigo, fallo. No te puedes ni imaginar la de vueltas que le he dado a la última frase. ¡Lo que busqué la X para resolver la ecuación de esa «concordancia»! ¡Estaba ahí mismo! Tenía que haberme alejado un poco del cuadro.
    Que sepas que lo corregiré como tú dices. Porque es así. Porque es lo correcto.
    Un verdadero placer compartir mi trabajo contigo, con todos.

    Escrito el 18 diciembre 2017 a las 19:10
  3. 3. R.J. Esperanza Pardo dice:

    Querido vecino, Ángell,

    Se me ha pegado ese “rastro mucilaginoso” a la piel, necesito urgentemente un relato que me hable de la dulce navidad, a ver si consigo quitármelo de encima.

    Ese narrador que lo sabe todo y no se mete es muy inteligente. A lo mejor no está manejando la historia desde tan afuera como pretende hacernos creer. Ese narrador se ha metido en la voz de una segunda persona, pero parece la voz de nuestra conciencia. Da mucho miedo.

    Te has servido de la puntuación como recurso estilístico, las pausas marcadas han contribuido a esa sensación de inquietud que nos transmite el narrador. A la vez has logrado un micro “compacto” y una sonoridad muy poética. Como han dicho arriba nuestro compañero, magnífico, en serio.

    Ha sido un placer leer este gran microrrelato. No debemos olvidar a los grandes pilares de la literatura, Sr. Dickens.

    Un saludo, seguimos por aquí, vecino, a ver a qué piso nos trasladan el próximo año.

    Escrito el 19 diciembre 2017 a las 22:56
  4. 4. Blue Flamingo dice:

    Muy buenas, Ángell:

    La aportación de Don Kendall me parece fantástica para un relato como el tuyo. Me ha gustado mucho. Y ese pequeño matiz del final que dice es un acierto; pero es eso, un matiz, porque lo que has escrito es estupendo.
    Es un narrador con el que yo me siento muy cómodo, tanto escribiendo como leyendo. Y lo escribes muy bien.
    Tu microrrelato me ha recordado al “silencio” de El nombre del viento (Patrick Rothfuss), con sus diferentes tipos de sombras, que se pueden llegar a sentir de esa manera.
    Enhorabuena.

    Un saludo.

    Microrrelato 53. Nómada Azul.

    Escrito el 20 diciembre 2017 a las 11:29
  5. 5. Everett Russo dice:

    Hola ÁNGELL,

    Tu relato y comentario posterior me llevan a pensar que controlas el ritmo como muy poca gente por aquí lo hace. Por eso me he detenido a comentarte. Es una delicia leer algo así. Yo, personalmente, no tengo ningún pero que ponerte. Fantástico texto.

    Saludos y felices fiestas!

    Escrito el 23 diciembre 2017 a las 00:01
  6. 6. Héctor Romero dice:

    Excelente, genial, fenomenal, magnifico, exquisito, ayúdame con más adjetivos ANGELL, me ha gustado al exceso. Me gusta cuando los literautas homenajeamos de alguna manera a los grandes clásicos de las letras. Enhorabuena y desde ya Felices fiestas! Tu vecino 182.

    Escrito el 23 diciembre 2017 a las 04:59
  7. 7. ÁNGELL dice:

    Blue Flamingo, Everett Russo, Héctor Romero… Muchas gracias por vuestra visita y comentarios elogiosos.
    Desde hace días me encuentro pateando por los montes de la Sierra de Francia oreándome, pillando vitamina D a puñaos, oxigenando el estro. Por «desgracia», la cosa del éter y la covertura andan un poco locas y desganadas por aquí. Voy a esperar, pues, a mi regreso para devolveros la visita . Os ruego paciencia.
    Hasta ese momento: un abrazo, FELICIDADES y salud, mucha salud, para el nuevo año que asoma ya el hocico. A vosotros y a todos y todas las paginas que componen este magnífico libro de Literautas.

    Escrito el 24 diciembre 2017 a las 14:37
  8. 8. ÁNGELL dice:

    Un problema digital —de dedo— me llevó a escribir «covertura» en lugar de «cobertura»… Empecé a escribir cien veces «cobertura» en la pizarra, pero el robot de Literautas se lo ha comido todo, ¡qué cosas tengo! En su lugar me he impuesto como penitencia ayuno y abstinencia a base de polvorones y roscones de vino, uno de cada al día, nada más.
    Por aquí llueve y el sol lucha por hacerse ver. Hoy no me he tirado al monte, por si el cuaderno se me moja. Ardo en deseo de coger el cálamo de nuevo y llenar de jeribeques el papel con el nuevo embite del día uno.
    ¡Mas madera!

    Escrito el 25 diciembre 2017 a las 11:22
  9. 9. María Jesús dice:

    Hola: Me ha parecido un relato oscuro, que te deja sumido en esas sombras que describes. Voy a intentar salir a la luz para decirte que que a pesar de eso, el micro es soberbio, se nota que dominas el arte de escribir. Saludos.

    Escrito el 25 diciembre 2017 a las 12:38
  10. 10. Laura dice:

    Hola ANGELL.
    Gran micro, sin fallas de consideración en mi humilde opinión. Un placer leerte, como siempre.

    FELICES FIESTAS Y EXITOSO 2018.

    Escrito el 26 diciembre 2017 a las 00:21
  11. 11. Servio Flores dice:

    Hola Ángell.
    Gran trabajo, complementario de un relato que es de los más reconocidos universalmente.
    En la brevedad del micro revela una faceta nueva del viejo Scrooge y lo hace de tal forma que gusta.
    Bien hecho.
    Saludos.

    Escrito el 29 diciembre 2017 a las 15:39
  12. 12. Charola dice:

    Muy bueno Angell.

    Quizás no hubieses repetido tanto la palabra “sombras”, Tal vez el título lo cambiaras para no redundar tanto y ese “sólo” con tilde, le quitaras de un manotazo aquello que le sobra para quedarse “solo”.

    Soberbio. Felicitaciones.

    Feliz 2018. Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 30 diciembre 2017 a las 22:18
  13. 13. ÁNGELL dice:

    Hola, Charola.
    Tomo nota de tus observaciones.
    Muchas gracias por dejarte caer por aquí y leerme.
    Una saludo afectuoso. Nos leemos el año que viene.

    Escrito el 31 diciembre 2017 a las 11:51

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