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El poeta - por Jerónimo Guillén Devís
EL POETA
Suena el teléfono.
—¿Diga?
—¿Ricardo?
—¡Marcos!¿Qué tal?
—Bien, gracias. ¿Te molesto?
—No, por favor. Tú nunca. ¿En qué puedo ayudarte?
—Verás. Tengo que escribir un relato corto titulado "El Poeta" y quería ofrecer una visión que contraste con la idea que tenemos de ellos, de los poetas, quiero decir…
—Pero yo soy físico.
—Ya. Mi idea es mostrar, de algún modo, que la poesía no es exclusiva de los que trabajan con las palabras para componerla. Me gustaría describir la belleza que puede haber en una fórmula matemática o el entendimiento de los procesos de la naturaleza. Había pensado en Fibonacci o el hombre que nos sacó de las tinieblas con tan solo 23 años: Newton… La verdad es que no he reflexionado mucho sobre el contenido…
—Entiendo…
—Es una tarea ardua. Los científicos eligieron el camino difícil al pensar distinto a sus épocas y algunos hasta se rebelaron contra lo establecido… Darwin, por ejemplo.
—Lo sé…
—Muchos descubrimientos contradicen lo que nos dictan nuestros sentidos y eso no lo entiende todo el mundo. No os hace falta nada sobrenatural para fascinaros por el misterio y sobrecogeros ante el Vacío. La curiosidad y la incertidumbre constante os hace valientes para enfrentaros a lo desconocido. Luego, cuando comprendeis, es como una palmada en la frente: ¡claro! Y, aún así, nunca dais nada por sentado. Es…es fascinante poder predecir un eclipse, saber que muchas de las estrellas que vemos por la noche llevan siglos muertas, conocer su composición por el comportamiento de los átomos o avanzar en medicina a través de la genética…
—Marcos…
—…descubrir los caprichos de las proporciones matemáticas en la naturaleza, desde las conchas de los nautílus hasta la distribución de las semillas del girasol. Odio la excusa de "yo soy de letras" para no intentar comprender la ciencia o "yo soy de ciencias" para no molestarse en explicarla, en…, en buscar un lenguaje llano para llegar a todos. Pienso… que deberíamos derribar las fronteras mentales que hace que separemos la ciencia de la espiritualidad y debemos dejar de creer que, por conocer la verdad, perderemos el sentido de la maravilla. Cuanto más conocemos, más preguntas nos hacemos y más misterios se presentan ante nosotros…
—¡Marcos!
—¿Qué?
—No te hago falta. No creo que haya poema que lo abarque o verso que lo describa sin quedarse en solamente una mínima aproximación a la verdad. Lo que intentas expresar es un gran poema, el poema del Todo, y eso es algo que no escribes solo, sino con todos los seres y todas las cosas que existen. Y la palabra con la que comienza es: humildad. Humildad al mirar al cielo y saberse una pieza más del Universo. De ese Universo ni favorable ni hostil sino indiferente, y estar tranquilo con esa idea…
—Gracias, Ricardo. Eso es exactamente lo que quería oír.
—De nada, Marcos… ¿ Qué haces el sábado?
—No tengo plan.
—Rosa y yo tampoco. ¿Hace un chino en casa?
—Claro.
—Trae a tu chico.
—Seguro. Yo me encargo del vino.
—Hecho. A las nueve.
—Okey. Un abrazo,Ricardo.
—Un beso, Marcos. Hasta el sábado.
—Hasta el sábado. Ciao
—Ciao.
Humildemente dedicado a Carl Sagan, Richard Feynman y tantos hombres y mujeres que buscan un mundo mejor.
Jerónimo Guillén Devís,
Es un relato, bastante original y realista. Me gusta tu propuesta de querer unir las ciencias con las letras, normalmente son áreas que se repelen. Describes la importancia de las ciencias y cómo se podría expresar su belleza en letras.
El hecho de que sea un diálogo, hace que sea fluida la lectura. Mi apreciación personal, es que hubieron tres intervenciones en las que Marcos conversa bastante, sin intervención de Ricardo y esas porciones me costo un poco leerlas, por lo largo. De resto, me encantó.
Espero que puedas pasar a leer mi relato, el 154, y contar con tu apreciación.
Jerónimo, muy original, sí señor. Nunca se me hubiera ocurrido, cómo os estrujáis el magín.
Por cierto, ¿no estarás en Cataluña, verdad? Cuando he visto que estabas en el 155, es lo primero que se me ha ocurrido. (Si es así, no te enfades, no es cosa de broma) salu2
Jeronimo,
Gracias por los comentarios que dejaste en mi relato.El tuyo está muy bien escrito, rallando en lo filosófico. Muestras la pequeñez de nosotros los humanos y al mismo tiempo lo grandioso del conocimiento que algunos han aportado. Un sencillo relato de lo cotidiano que me ha dejado pensando. Felicidades
Amilcar Barça, no es para tomarselo a broma pero sí con humor y me ha hecho mucha gracia tu comentario. Ya decía que me sonaba extrañamente familiar el número pero sin saberlo con precisión hasta ahora. Jaja. Gracias.
Sara Sierra: gracias por tus palabras y captar el significado que le quería dar.
Saludos!
Hola, Jerónimo.
Aunque escribo en este taller, provengo del mundo de la ciencia, por lo menos esa ha sido mi instrucción académica.
Tu relato me pareció fantástico, acuerdo que no hay mayor poesía que contemplar el universo, porque de eso se trata también la poesía.
Gracias por comentar mi relato.
Saludos.
Hola!
Enhorabuena por tu original relato. Ciertamente el hecho de ser de letras o de interesarse por las humanidades no impide que uno se fascine con la ciencia. Tu relato deja traslucir la pasion que se pone en ella y ¿qué hay más humano que la pasion?
Muchas gracias por tu comentario a mi relato. Me alegró muchisimo que te gustase. 🙂
Hola Jerónimo.
Me siento identificada con tu relato. El mío también lo protagoniza un físico que habla de “soy de letras” y, de entrada, me cayeron palos.
Tu idea de que haya un diálogo hace el relato muy fluido.
Tal vez porque me has hecho ver mis limitaciones, me ha encantado tu relato.
Felicitaciones.
Hola Jerónimo
Gracias por leerme, aprecio tus aportaciones.
Me ha gustado mucho tu relato, por su originalidad y estructura. Me parece difícil crear una historia dialogada. Un texto ágil y fluido.
Con un contenido muy interesante. “Yo soy de letras” pero me fascina contemplar y tratar de entender el universo….
¡¡Enhorabuena!!
Un saludo Gloria