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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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El poeta - por Antaviana

El poeta

Érase una vez un niño que desde muy pequeño, cada día de su vida al llegar la noche y meterse en la cama, escribía las sensaciones del día en un pequeño diario. A veces estaba deseando acostarse para escribir sobre lo que durante la jornada había sido importante para él, sobre cómo se sentía. Ese momento le servía sobretodo para escapar.

Cuando fue un poco más mayor, ya adolescente, descubrió que si escribía mundos nuevos y no se limitaba a escribir el suyo, podía escapar aun más lejos. Al principio eran mundos pequeñitos, universos diminutos que trasladaba al papel. Escribía sobre la lluvia, sobre la mañana o la noche, sobre el mar, las flores o la montaña, sobre el sol y la luna.

Pero pronto los pequeños universos necesitaron crecer y empezó a escribir verdaderos mundos nuevos que le permitían incluso viajar a otros planetas. Disfrutaba mucho en esos viajes, y al menos durante ese tiempo su propia vida no podía atraparle. Porque a él, la realidad que le envolvía no le gustaba. Hacía mucho ruido y le hacía sufrir mucho. Todos los días. Pero eso es otra historia.

Siguió escribiendo cada día sin faltar uno, y años más tarde, ya en la edad adulta, el niño empezó a necesitar aún más. Necesitaba escribir no ya describiendo el mundo, no ya expresando sus sentimientos, sino desde ellos. Y hasta entonces no había podido hacerlo. Así que una mañana, se levantó, respiró profundamente, se situó en su corazón, y esto fue lo que escribió:

“Escribo de puntillas. Como si algo se fuese a romper. Por eso, dejo salir las palabras como un hilo de agua empieza a surgir de un manantial. Un pequeñísimo hilo fresco y transparente que nace tímidamente, pero que llegará donde tenga que llegar. No le hace falta al tierno manantial arrastrar desde el principio con fuerza lo que se encuentre a su paso. Le basta con brotar, con seguir manando. Ya crecerá. Necesita su tiempo, ir encontrando su espacio. Discurrir con suavidad.

Porque ahora soy rio, no tormenta. Rio y no mar. Ni vientos ni tempestades. Sí paz. Manantial de letras que poco a poco encuentra las palabras por las que transcurrir. Palabras que no tienen prisa, que acarician delicadamente con la punta de los dedos, apenas rozando. Que erizan la piel. Sutilmente, casi susurrando. Son palabras en las que abandonarse y mecerse. Palabras sobre las que flotar y dejarse llevar.

Palabras que no cesan, que crecen, que van encontrando su lugar. Río que se va formando y va tomando fuerza, que sigue su curso renovándose a cada instante. Palabras que ya no temen ser escritas, que van surgiendo con firmeza y colocándose en su lugar, encadenandose las unas con las otras, formando una corriente que ya no se puede parar.

Río que ruge ya con fuerza, con ímpetu, con alegría, que baña con gracia y rapidez las piedras que se va encontrando en su camino.

Palabras que ya están preparadas para contar. Y ese cuento dice así.”

Desde entonces, aunque el niño grande no sabe muy bien por qué, le llaman “ El poeta”

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14 comentarios

  1. 1. Lenimer Durán dice:

    Antaviana,

    Describes lo que sentimos los escritores, “descubrió que si escribía mundos nuevos y no se limitaba a escribir el suyo, podía escapar aun más lejos”. Viajamos a distintos lugares e historias a medida que las vamos creando. Haces uso de varias metáforas, pienso que cuando se utilizan distintas a la vez, hacen un poco pesada la lectura e incluso pueden confundir. Como dicen por allí, a veces menos es mas.

    Espero contar con tu apreciación en mi relato, el numero 154.

    Escrito el 17 febrero 2018 a las 05:14
  2. 2. Héctor Romero dice:

    Antaviana, tu relato tiene una maravillosa fluidez que permite disfrutar al máximo su lectura, es tan literario que siento dos obras dentro de una. Además posee un valor didáctico pues puede inspirar a niños lectores. Felicidades. Literauta 24

    Escrito el 17 febrero 2018 a las 05:37
  3. 3. Antaviana dice:

    Muchas gracias Lenimer y Héctor por vuestras palabras, pasaré a leeros !!

    Escrito el 17 febrero 2018 a las 10:26
  4. 4. María Jesús dice:

    Hola Antaviana: Gracias por comentar tu relato. El tuyo es soberbio, un ejercicio poético impecable. Cuando las palabras fluyen como tu describes, es una maravilla porque puedes crear todos los mundos que quieras imaginar. De verdad que me ha encantado tu relato.
    Un saludo.

    Escrito el 17 febrero 2018 a las 13:50
  5. 5. Kathie G. dice:

    Hola Antaviana, muchas gracias por comentar mi texto. Me ha gustado muchísimo tu relato, muy fluido, muy ameno y rico en escenarios.
    Excelente relato. Saludos, y feliz escritura!

    Escrito el 17 febrero 2018 a las 17:20
  6. 6. Roberta dice:

    hola, Antaviana. Gracias por comentar mi relato. El tuyo tiene la fuerza y la belleza de las emociones de los que, humildemente, escribimos. Me encantó. Felicitaciones. Saludos.

    Escrito el 17 febrero 2018 a las 21:16
  7. 7. J. Guillén dice:

    Maravilloso. Leyendo la evolución del niño me ha encantado que derivara en las historias que lo saquen del planeta hacia mundos inventados, ya que considero la ciencia ficcion el máximo exponente de la imaginación y capacidad de un autor.
    Por otra parte envidio la facilidad e inspiración del personaje para inventar. Algo que cuando creces empieza a ser más dificil.
    Estupenda historia. Felicidades.
    Saludos desde el 155

    Escrito el 18 febrero 2018 a las 13:11
  8. 8. P.J Dawon dice:

    Buenas, Antaviana.
    La verdad es que ni siquiera he reparado en los fallos. Me he visto tan reflejada en las palabras escritas por el “niño grande” que solo puedo decir: enhorabuena, un relato precioso.
    Estoy en el 8 por si te apetece pasar y echarle un vistazo a mi relato.

    Escrito el 18 febrero 2018 a las 15:16
  9. 9. dopidop dice:

    Buenas Antaviana,

    Este mes nos traes un “dos en uno” muy interesante.

    Me uno al grupo de los que nos sentimos identificados con tus palabras, escapar escribiendo, esa necesidad de plasmar en un papel lo que sientes por que no puedes mostrárselo a nadie más, y de repente querer llegar mas lejos… y esa sensación cuando nos visitan las musas, derramando todo lo que tenemos en el interior.

    Me encanta que hablas de palabras y de ríos y otra vez de palabras y de nuevo de ríos, y se trata de lo mismo, pero trae ese sentimiento familiar, que me aventuraría a decir que todos por aquí conocemos.

    La parte del niño es fluida, fácil y agradable de leer. La parte de la poesía, es precisamente eso, sentimientos puros, que puedes o no, entender o compartir, pero que sin duda están plasmados de una forma maravillosa.

    Muy buen trabajo, un placer volver a leerte y muchas gracias por tus agradables comentarios en mi relato, que siempre me suben la moral. ¡Nos seguimos leyendo!

    Un abrazo.

    Escrito el 18 febrero 2018 a las 21:06
  10. 10. Jesús López Conesa dice:

    Hola Antaviana, hace mucho tiempo que no comentaba nada tuyo.

    Este relato me ha sorprendido: Me has llevado por un viaje en el que nace un nuevo escritor además de la bonita poesía. La poesía, sobretodo, es lo que más me asombra a mí, porque mientras la leía me ha relajado mucho y ha sido una sensación agradable.

    Muchas gracias por la poesía tan bonita que nos has brindado.

    Un saludo, estoy el 68(creo)si te apetece pasarte te lo agradecería.

    Escrito el 18 febrero 2018 a las 23:18
  11. 11. Antaviana dice:

    Hace pocos meses que participo en el taller y era justo lo que necesitaba para volver a escribir. Y se agradecen muchísimo comentarios como los vuestros compañeros, lo digo de corazón . Son un aliciente importante para mi 🙂
    Jesús y PJ Dawon me paso a leeros.
    Un abrazo!

    Escrito el 19 febrero 2018 a las 08:28
  12. 12. Judith dice:

    Antaviana,

    Qué lindo relato! Me inmuscuí en la gota del manantial, me sentí mecida por ese río y me dejé arrullar por tus palabras. Hace muy poco que empecé a escribir (lo había hecho de adolescente y lo había dejado de lado) y ahora, a mis cuarenta y tantos, por las causalidades del destino y un grupo de amigos que nos unimos por un amor común, lo retomé. Me transmitiste la calma que necesitaba.

    Saludos y felicidades desde el 137.

    Escrito el 20 febrero 2018 a las 02:07
  13. 13. Antaviana dice:

    Gracias Judith, muy parecida historia a la mía 🙂
    Me alegra haberte transmitido calma, paso a leerte !
    Saludos y un abrazo

    Escrito el 20 febrero 2018 a las 08:36
  14. 14. Perla preciosa dice:

    Hola, Antaviana:
    Me ha encantado tu historia. Has hecho una mezcla de poesía y prosa estupenda. El final me ha dejado un poco descolocada, dado que no queda claro si el problema es que el chico se vuelve loco y hace poesía sin querer, por lo cual le llaman el poeta, o es simplemente una forma de llamarlo sin mayor trascendencia. En cualquier caso, has estado muy acertada y me alegra haber pasado por tus escritos por primera vez y haber encontrado tan bellas palabras, sobre todo en lo que a la poesía se refiere. Si te apetece leer el mío, estoy en el 110.

    Escrito el 26 febrero 2018 a las 23:29

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