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¿INFANCIA? - por MOT
¿INFANCIA?
— ¿Otra vez, Papi?
Una primera lágrima no fue el único fluido corporal que manó del niño, que se le escapó; una oscura mancha crecía en la entrepierna de sus pantalones. Espasmos de terror acompasaron sus rotas palabras, inocente esperanza, mientras su demudada mirada se quedaba fija en un único punto de la buhardilla… "Ese" punto.
Su padre, también de pie, miraba al mismo sitio: un colchón en el suelo, en cuya cabecera se veía un paquete de clínex y una caja de crema Nivea; tras ellos dos, la puerta. Por lo demás, el cuarto estaba vacío por completo; incluso se había condenado el ventanuco superior.
El hombre se dio la vuelta y cerró con llave.
También lloraba, luchaba por dentro. Deseo y odio, asco y placer, impotencia y poder, demente maldad y amor de padre, el hombre y el animal…sabía bien, demasiado bien, quién iba a ganar esa guerra.
Miró a su hijo y contestó:
— Sí hijo, sí. Otra vez.
FIN
Hay temas que aún siendo verdad en el mundo real, cuando se tocan desde la literatura de ficción deben ser necesariamente VEROSÍMILES sino el lector se escapa. La verosimilitud se consigue con la propuesta y acuerdo del narrador con el autor. Así en un relato un unicornio pude ser verosímil aunque no sea verdad si el,lector lo admitió previamente.
Quizá a este trabajo le falte más verosimilitud y le sobren amagos e intentos de sobrevolar un tema escabroso y con muchas aristas.
De cualquier modo es un esfuerzo considerable y es de agradecer la generosidad para que podamos opinar. Gracias
Hola,Mot.
Tu microrrelato desasosiega y deja mal cuerpo. Supongo que era eso lo que querías conseguir.El hecho de presentar al padre llorando, más humano, contribuye al desasosiego. Formalmente, todos los elementos para comprenderlo están ahí, a pesar de la desnudez de detalles. Enhorabuena. Por ponerte un pero, creo que el título da demasiadas pistas. Creo que tendría que ser menos evidente, que el lector descubra por sí mismo a lo que se enfrenta.
Estoy de acuerdo con Chus Galego y yo también le cambiaría el título. Por lo demás, yo no percibo una única interpretación para tu relato. Para mí es ambiguo y eso es un punto a su favor.
Hola Mot: Me impresionó tu relato. Me pareció muy cruda la escena. El texto fluye y es fácil de leer, creo que eso es bueno. No te puedo decir que me gustó, porque me superó el rechazo que me provoca esa escena. Te felicito por adentrarte a un tema tan escabroso. Nos leemos. Espero puedas leer el mio. Soy Piquillín.
Vaya, es un tema muy difícil de mostrar este. Lo has hecho muy bien.
Felicidades.
Un relato que sobrecoge. Me sorprende ese toque de humanidad que le has puesto al padre. Creo que has conseguido lo que pretendías.
Quizás también te diría que pensaras en otro título.
Si quieres pasarte por el mío, es el 107.
Nos seguiremos leyendo.
Saludos.
Hola, Mot:
Un microrrelato nada ameno de leer, por lo sobrecogedor del tema; y, sin embargo, rápido de leer por su brevedad. Como Piquillín, no me ha gustado el relato, por las mismas razones. Imagino que tu intención era esa, provocar rechazo y repulsión ante situaciones tan tristes y abominables como esta escena.
Me gusta que muestres la lucha interna del padre porque, si bien es algo horrible e inaceptable lo que hace, hay quienes tienen una enorme lucha contra sí mismos, sufrimiento por hacer sufrir a otra persona y, sin embargo, incapaz de detenerse; pero, como dice al final, sabe quien, tristemente, va a ganar la guerra.
Has escrito la escena de manera que nos haga intuir lo que pasa.
Como sugerencia, también creo que deberías cambiar el título. Parece bastante obvio.
El reto lo has cumplido sin problema.
Una cosa que me choca es que el niño le llame “papi”. Me parece demasiado cariñoso para la situación, y no creo que el niño sintiera mucho cariño. Una cosa es que sea su padre; y otra, que le tenga cariño.
Tras lo dicho, paso a señalarte los errores que he visto, para que puedas corregirlos:
1. “— ¿Otra vez, Papi?”. Dos cosas aquí. Para empezar, la primera palabra debe ir siempre (al comienzo) pegada a la raya larga. En este caso, hay un signo de interrogación. Igualmente debe ir pegado a la raya, sea el signo que sea. Segundo, “Papi” no es un nombre propio, sino un nombre común, por lo tanto, debe ir en minúscula, salvo que fuera la palabra con la que comenzara la frase: “—¿Otra vez, papi?”.
2. “el hombre y el animal…sabía bien…”. Dos cosas aquí también. La primera es que debes separar de los puntos suspensivos de la palabra que le sigue (“sabía”). Y segundo que, al ser una frase independiente, debes comenzar la con mayúscula, ya que no interrumpe a la frase anterior, sino que comienza otra: “el hombre y el animal… Sabía bien…”.
3. “quién iba a ganar esa guerra.”. La tilde de “quién” sobra en este caso, puesto que no es un pronombre interrogativo, ya que el padre no está preguntando quién va a ganar esa guerra, sino que lo sabe: “quien iba a ganar esa guerra.”.
4. “— Sí hijo, sí. Otra vez.”. “hijo” funciona aquí como vocativo, y los vocativos van entre comas: “—Sí, hijo, sí. Otra vez.”.
Una cosa que yo habría marcado es la casilla de +18. Sé que no hay nada explícito, faltaría más en un tema tan delicado y triste como es este. Sin embargo, creo que un niño de 12 o 13 años (y créeme que hay muchos en las redes y en blogs y talleres de escritura) no debería leer algo tan abominable.
Espero haberte ayudado 🙂
Si te apetece pasarte por mi relato, soy el número 45.
Nos leemos!
Hola MOT.
Que puedo decirle que no le hayan dicho ya…
¡Vaya tema, vaya imagen,!
Un relato que pone de forma sutil todos los elementos para descubrir una cruda escena.
Al terminar la lectura queda una incomodidad, un mal sabor, no porque el relato esté mal escrito sino porque plasma una realidad que está ocurriendo día a día y en todas partes.
Bien hecho, muy atrevido.
Soy su vecino en el #1, espero su visita.
Hola a todos.
Quiero agradeceros de corazón, por una parte, el tiempo que me habéis dedicado, y por otra, la sinceridad de vuestros comentarios, a los que gustosamente responderé. Pero antes, con vuestro permiso, algunos comentarios sobre este “polémico” MUE (que de paso explican alguna cuestión planteada).
Tal y como pensáis algunos de vosotros, mi intención era provocar emociones en el lector…asco, miedo, angustia, rechazo, mal cuerpo…; cualquier reacción a tan repugnante e imperdonable tema.
He decidido que fuera corto porque es una escena (una sola escena) que pasó por mi cabeza y la quise plasmar tal cual la veía yo.
Otra cosa a destacar es su sencillez descriptiva, su falta de detalles; pensé en que cada lector se lo imaginara como quisiera, al fin y al cabo en estos casos…¿Qué importan los detalles? Quería que el lector se enfrentara cara a cara con lo atroz de esta cruda e injusta realidad.
Luigi: Gracias por tu honesto comentario. Puede que tengas razón; quizás no acaba de ser lo que debería, quizás peca de inverosimilitud como dices; pero quizás no. Lo he hecho lo mejor que he sabido, y personalmente estoy contento con este relato (aunque el asco y el mal cuerpo me acompañaron demasiado tiempo después de haberlo acabado…), con las reacciones provocadas, porque ese era mi principal objetivo.
Chus: Gracias por tu opinión. Efectivamente, yo también cambiaría el título, pero también por una sola palabra (me gustan los títulos así)… ¿Se te ocurre alguno?
Anaisa: Gracias por leerme. Ambiguo, abierto, elástico… Bien visto.
Piquillín: Muchas gracias, entiendo (y celebro) que no te gustara, pero como dije antes, eso es lo que pretendía.
Lunaclara: Gracias por tu tiempo. La verdad es que es un tema chungo, cierto, pero sentí la necesidad de hacerlo, de aportar mi ínfimo grano de arena para que de una vez por todas desaparezca esta lacra del mundo.
Sophie: Gracias por comentar. Pensé en darle, efectivamente, un sutil matiz de humanidad al padre, al monstruo, pero tenía mis dudas al respecto.
Rita: Muchas gracias por tan profundo comentario, que bien contento me ha puesto, pues aparte de pasárselo bien, uno viene aquí a aprender. Vamos por partes:
Nada que objetar a tus pensamientos, lo has dicho todo en tus primeros párrafos, con los que estoy muy de acuerdo.
Respecto a “Papi”: Ahí quería que se entreviera, sutil y fugazmente, una especie de súplica inconsciente, que el padre, al oir lo de “papi”, venciera al monstruo; por eso lo hice así, aunque tienes absolutamente toda la razón, visto a toro pasado quedaría mejor “papá”.
En cuanto a los errores, gracias, tomo buena nota; nunca hay que negarse a aprender y mejorar.
P.S.: Después del clic para enviar el texto, yo también pensé que debería haber marcado esa casilla…Lo siento…
Servio: Agradecido por tu visita y tu sincera opinión. Una vez dicho ya más o menos todo, añadiré que, como bien aprecias, tuve que pensármelo varias veces antes de enviarlo, no me atrevía. Al final me decidí y estoy satisfecho con la elección.
Intentaré pasarme por vuestros relatos, pero no sé cuando voy a poder, ya que me han surgido imprevistos urgentes que resolver. A ver si el finde que viene saco unas horitas…
Saludos a todos y nuevamente gracias…
Jo, MOT, que fuerte tu relato de este mes, al principio confieso que me he quedado “In albis”, no he entendido nada, pero al releerlo otra vez mas despacio he captado toda su esencia, vamos que es como si hubiese abierto una ventana y se hubiese hecho la luz. En una ocasión yo escribí un micro con temática parecida, te lo pego aquí (me tomo esa licencia):
“Hasta aquí.
Cuando se vio sola, sus uñas estaban blancas de yeso, y la colcha con el perfil de la marca de sus dientes. Se puso en pie trastabillando y evitó mirar el espejo para no ver su rostro desencajado. Se había prometido que esa sería la última vez y, obviando las amenazas, tras oír el ruido de la puerta de la calle al cerrarse, se dirigió a la habitación de su madre para sacarla del sueño y explicarle, al fin, qué eran esas marcas que había en la pared de su habitación.”
En fin que tu relato me ha encantado, como siempre, donde dices sin decir, muchas cosas y escrito con un lenguaje muy claro. Muy de mi gusto tu estilo, eso ya lo sabes.
Un saludo afectuoso.
Hola MOT.
Me gustaría felicitarte por varias cosas.
Primero por escribir micro, leerlos me gusta mucho.
Segundo por animarte a transgredir, a veces me pongo a la tarea y casi siempre abandono asqueado o desanimado.
Por último, porque el relato es efectivo y funciona muy bien como revulsivo.
En contrapartida debo decirte que no me dio la impresión de genialidad. Cuando leo algo genial, quedo flipando y con la sensación de que el mago me engañó con su ilusión. No me pasó eso.
Tal vez le faltó sorpresa o le sobró sencillez. Comparto que el título revela mucho y a mí me pasa cuando lo escribo al último.
Que esto no tape tu gran trabajo. Ojalá te ayude a mejorar y si querés leer mi relato te invito al número 42.
Felicitaciones.
Hola MOT.
GUAU. Vaya relato. Terrible. Nada que aportar de significaciòn. Con pocas palabras narras un horror. Felicitaciones por lo que has logrado.
Saludos.
Hasta la pròxima propuesta.
Hola.
Muchísimas gracias por tanta sinceridad, Laura y Diego. Así es como se aprende, escuchando opiniones verdaderas y desde dentro.
Y gracias también por el tiempo dedicado… Saludos
Hola MOT:
Felicidades por el micro: terrible, repulsivo y nada humano, pero de una cruel y aplastante realidad por desgracia.
Creo que has conseguido lo que querías: la desaprobación hacia tan escabroso tema.
Hola, MOT.
El título yo lo tendría clarísimo, “Nivea”.
Es un elemento fundamental que ayuda a entender el relato y que resulta espeluznante en su aparente inocuidad.
Nos vemos en el próximo relato.
Hola Chus y Toñi, gracias por leerme.
Toñi, precisamente buscaba adjetivos de ese tipo…terrible…repulsivo…Gracias por tu sinceridad.
Chus, buenísima sugerencia. La tomo muy, pero que muy en cuenta… Gracias y saludos.