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Los girasoles - por Leosinprisa

El vehículo discurría por una antigua carretera estatal. Hace años era un lugar transitado por multiples coches y camiones, al unir las principales ciudades de la región con un intercambio constante de mercancías y viajeros.

Ahora, eso había acabado. La vía, abandonada a su destino, estaba cuarteada y, en algunas partes, impracticable. Era complejo moverse por ella, obligándoles a circular con precaución y evitar los frecuentes baches y corrimientos en los que el tiempo había dejado su huella.

En los márgenes, una tupida vegetación delimitaba ambas zonas: la de la maltrecha carretera y los campos de girasoles. Los tallos se alzaban orgullosos, con sus flores orientadas en la dirección del sol y ajenos a cuanto les rodeaba. Aunque los integrantes del vehículo sabían que esa apacible apariencia, la bucólica calma que los rodeaba, era falsa.

Los vigilaban. Una perversa inteligencia seguía sus movimientos, en la espera de cualquier descuido que pudiera aprovechar en su beneficio.

Se encontraban a solo cien metros del refugio. Un muro alto, oscuro y sucio, con un portón grueso, esperaba abrirse en el momento en que ellos se acercaran. Había una explanada abierta, hasta los cincuenta metros a partir de dicho muro, una tierra de nadie, ennegrecida, abrasada por el uso de ácidos y combustibles. El lugar donde se habían librado duras batallas y se esperaban otras nuevas.

El motor empezó a renquear, tras una pequeña explosión. Un espeso humo señalaba que el radiador no aguantaría mucho más. Iban avanzando, poco a poco, hasta que se detuvo por completo.

—Esto es el fin —dijo Vargas. Era un hombre mayor, cuya pierna, herida por un encuentro en desafortunadas circunstancias, no le permitiría correr con presteza.

—¿Tienes una bala? —preguntó Elena, la joven con la cabeza rapada, mientras Manuel, el otro acompañante que los había escoltado durante esa salida, estudiaba el tramo hasta el refugio. Confiaba en que su juventud y la de la muchacha pandillera fueran suficientes para superar los pocos metros que les quedaban.

Vargas asintió con pesadumbre, no permitiría que lo cogieran vivo. Los dos jóvenes podían tener una oportunidad, él ya estaba condenado.

—Vamos a salir a mi señal. El viejo que se quede en el vehículo —habló Manuel con aire despreocupado. Elena lo miró airada, pues apreciaba a Vargas y le dolía dejarlo en aquella situación, quería ayudarlo, pero su compañero prefería salvar su propio pellejo a intentarlo todos. Por su culpa, había sido herido y parecía no importarle las consecuencias de sus actos egoístas.

—Deberías venir con nosotros —Elena no se sentía cómoda con esa situación.

—No, sería una carga. Tenéis mucha vida por delante —dijo el hombre herido con un gesto sereno.

—Ya has oído al viejo. Vámonos, ¡ahora! —Manuel la cogió por la mano, arrastrándola de forma inesperada fuera del coche.

Los girasoles se volvieron hacía ellos. Un crujido resonó a su alrededor y las plantas empezaron a moverse. Las raíces giraban y ondulaban en el suelo, como cientos de tentáculos agitándose en un frenesí desesperado.

Corrieron la decena de metros, justo al límite de la zona de seguridad. Fue cuando Elena notó una dolorosa punzada en los tobillos. Una raíz la había enganchado, otras muchas se dirigían hacía ella. Manuel la soltó, abandonándola, e intentó llegar a la zona quemada. Varias raíces lo cogieron, arrastrándole hacía otras para envolverlo y, como si fuera un capullo, introducirlo hasta el campo de girasoles. Allí se escuchó un crujido y un chorro de sangre, caliente y oscura, brotó hacía el cielo como un géiser.

La joven sintió como la empujaban hacía la muerte, mas algo cortó las raíces y la cogió con violencia. En unos breves instantes, la levantaron del suelo para arrojarla a la negra explanada. Pudo ver por un momento a Vargas, antes de que dirigiera la pistola a su cabeza y disparará la única bala que le quedaba. Luego, las raíces se llevaron su cadáver.

Los lanzallamas situados en el muro actuaron, unos atrevidos girasoles ardían pero, pocos y aislados, no suponían un peligro para la muchacha. Los veía consumirse con agrado y en su interior, ardía igual un odio profundo y una sed de venganza, que se juró a si misma satisfacer.

Alzó su mano, con el puño cerrado, contenida su furia en ese gesto y se levantó, dolida por el golpe y en su orgullo, hacía el portal que se abría para acogerla. No permitiría que esa derrota la afectase.

La guerra contra la naturaleza transgénica acelerada por el hombre, continuaría.

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13 comentarios

  1. 1. IreneR dice:

    Buenas, Leosinprisa.

    Qué relato más original, jamás se me habría ocurrido escribir algo parecido.
    Me ha gustado, está bien escrito y creo que lo has sabido llevar muy bien.

    ¡Un saludo-1

    Escrito el 17 septiembre 2018 a las 20:22
  2. 2. JUANA MEDINA dice:

    Salud Leosinpris!
    Excelente conflicto entre la naturaleza, no siempr benéfica, y los seres humanos. Muy original, muy bien nerrado con exclente ritmo y una mirada que uno no espera quizás por los propios prejuicios. Me ha gustado mucho.
    Saludos

    Escrito el 17 septiembre 2018 a las 21:40
  3. 3. Fuciños dice:

    Hola Leonsinprisa
    La historia me sacó de la comodidad con ese viraje que diste al final. El texto bien escrito. Mi relato el 59

    Escrito el 18 septiembre 2018 a las 00:29
  4. 4. Laura dice:

    Hola Leosinprisa.
    Vaya historia que nos has dejado. No podìa imaginar lo de los girasoles en el inicio pero ya luego entraron de lleno en la batalla.
    Muy bien escrito. Mis felicitaciones.
    Hasta la pròxima propuesta.

    Escrito el 18 septiembre 2018 a las 11:07
  5. 5. ANGEL CLIMENT dice:

    Hola Leosinprisa, Bueno, en tu linea, cada mes mejoras más. Que decirte después de todo lo dicho. Me gusto mucho y lo disfrute. Saludos – nos leemos

    Escrito el 18 septiembre 2018 a las 11:28
  6. 6. Auxi Morata Alegre dice:

    Hola Leosinprisa!
    Madre mía no me lo esperaba para nada, me he quedado un rato mirando la última frase con algo que solo se podía describir como “wow”. Enhorabuena por sacarme de todos los moldes habidos y por haber xD. Muy buen trabajo de verdad.
    Soy la del 87, por si te quieres pasar 🙂
    Un beso! Nos leemos!

    Escrito el 18 septiembre 2018 a las 22:01
  7. 7. Amadeo dice:

    Leosinprisa:
    Muy original e interesante lo de los girasoles carnívoros y caminantes. (Hace años escribí un cuento infantil sobre un árbol que caminaba, porque no quería hacer sombra). Me gustó y activó mi imaginación, párrafo a párrafo, al suponer comos seguiría y lo que le pasaría a los personajes.
    Felicitaciones

    Estoy en el 157 por si quieres leerlo y comentar

    Amadeo, Argentina

    Escrito el 21 septiembre 2018 a las 01:46
  8. 8. Taiga dice:

    Hola Leosinprisa,

    La verdad, tanto en la forma como en el contenido, este texto me parece estupendo. Por el estilo y el ambiente, me recuerda a los cuentos cortitos norteamericanos.
    A mí no me gustan los géneros de acción y ciencia ficción, pero está tan bien escrito, tan realista y lleno de suspenso que me encantó.
    ¡Excelente trabajo!

    Taiga

    Escrito el 21 septiembre 2018 a las 09:07
  9. 9. Yoli dice:

    Hola, Leosinprisas.
    Me encantó tu relato. Me ha gustado mucho que los girasoles no fueran la tipica imagen bucolica, que fueran “los malos de la pelicula”. La verdad es que es muy original que fueran ellos los que causan la guerra. Muy bueno.

    Si quieres leer el mio, soy el 56.

    Te seguiré leyendo.

    Saludos.

    Escrito el 21 septiembre 2018 a las 11:25
  10. 10. Menta dice:

    Hola Leosinprisa: Te debía la visita porque me hiciste un comentario el mes pasado a mi relato, y no te la devolví porque estaba de vacaciones, y como es normal cansadísima y sin fueras para trabajar. La vida del turista es muy dura.

    Tu relato me ha gustado mucho, me parece muy original que los girasoles sean los protagonistas de tu guerra y por el ritmo rápido en el que plasmas todas las acciones.

    Por el final he comprendido la frase:

    “Aunque los integrantes del vehículo sabían que esa apacible apariencia, la bucólica calma que los rodeaba, era falsa”

    He pasado miedo cuando he leído:

    “Los girasoles se volvieron hacía ellos. Un crujido resonó a su alrededor y las plantas empezaron a moverse. Las raíces giraban y ondulaban en el suelo, como cientos de tentáculos agitándose en un frenesí desesperado”

    Dos cosas más:
    “múltiples” lleva acento.
    “hacía” no lleva acento y está puesto en dos hacias.

    Enhorabuena por tu relato. Un saludo, Menta

    Escrito el 21 septiembre 2018 a las 16:12
  11. 11. K. Marce dice:

    Saludos, Leosinprisa,

    Este mes no participo pero me he propuesto a leer a algunos de los relatos de este mes.

    Como siempre, me gusta exponer las observaciones y después dar los cumplidos.

    Oraciones/Frases
    > —Esto es el fin —dijo Vargas. Era un hombre mayor, cuya pierna, herida por un encuentro en desafortunadas circunstancias, no le permitiría correr con presteza. -> —Esto es el fin —dijo Vargas. Era un hombre mayor, cuya pierna herida por un encuentro en desafortunadas circunstancias no le permitía correr con presteza.
    * Aquí hemos quitado la puntuación, has puntuado entre comas, “cuya pierna”, porque no es un inciso explicativo. Para saber cuando va, es si al eliminar lo que va entre esas comas, la oración siempre se comprende. También se cambió el verbo condicional permitiría,(supuesto). En este caso de Vargas, siendo que sufrió una herida que le imposibilita la locomoción normal no encaja en un condicional (acciones hipotéticas o posibles).

    > Elena lo miró airada, pues apreciaba a Vargas y le dolía dejarlo en aquella situación, quería ayudarlo, pero su compañero prefería salvar su propio pellejo a intentarlo todos. -> Elena lo miró airada, pues apreciaba a Vargas y le dolía dejarlo en aquella situación. Quería ayudarlo, pero su compañero prefería salvar su propio pellejo a intentarlo todos.
    *Por las mismas razones, que no es un inciso indicativo,(,quería ayudarlo,) se cambia la puntuación.

    > Por su culpa, había sido herido -> Por su culpa había sido herido y, …
    *Se elimina la coma para no perder la continuidad de la idea.

    > el momento en que ellos se acercaran -> el momento en el que ellos se acercaran
    * no colocar ese “él” previo a que, sino se convierte en queísmo.

    > Manuel la soltó, abandonándola, e intentó -> Manuel la soltó, abandonándola e intentó
    *No se usa coma antes de E o de Y

    > un odio profundo y una sed de venganza, que se juró a si misma satisfacer. -> un odio profundo y una sed de venganza que se juró a si misma satisfacer. /o/ un odio profundo y una sed de venganza, la cual juró a si misma satisfacer.
    *No se debe colocar coma antes de QUE, por lo que se debe eliminar o sustituir por cuál cuando es inanimado, o quienes, cuando son personas.

    Repetición de palabras:
    Si bien se permite la licencia de emplear varias veces una misma palabra por factor de énfasis literario, es preferible no hacerlo cuando ésta se repite en una oración o párrafos cercanos, para que no sea obvia.
    En el texto, he encontrado: “poco a poco” la cual es válida. La que más se repite a lo largo de todo el texto es “hacía/hacia”. También en diferentes oraciones/párrafos se encuentran: había, metros, muro, rodeaba, como, zonas, otras, raíces. Esto se corrige usando sinónimos o cambiando la oración, ya sea alternando las palabras, eliminándolas o reestructurando de forma diferente las oraciones.

    Ya te mencionaron sobre la palabra errada “hacía”, debes recordar que se tildará siempre y cuando sea del verbo “hacer” en pretérito imperfecto, y no se tilda cuando indica una preposición de dirección, tendencia o actitud.

    La idea me ha parecido muy buena, se comprende como una escena en si misma, con su introducción, el nudo y el desenlace. Has usado muy bien para realizar una escena que puede estar en medio de otros y que no pierde el interés ni la finalidad de expresar la misma.Tiene su cuota de acción y está bien hilada a los acontecimientos que se presentan en ese momento, sacando a relucir la personalidad de los personajes.

    Me ha llamado mucho la atención que pese a que solo el titulo debía llamarse “Los girasoles” en su mayoría todos han escrito algo en mayor o menor escala como parte del relato. En este son un personaje más del mismo.

    Me ha gustado y entretenido. Espero que las mejoras adjuntas te sean de utilidad. Son entregadas con el mismo respeto que tu trabajo merece.
    ¡Nos leemos!

    Escrito el 22 septiembre 2018 a las 23:51
  12. 12. beba dice:

    Hola, Leosinprisa: Excelente historia, dinámica y ágil, con final imprevisto y muy emotivo. Muy buen nivel de lenguaje y corrección gramatical. Un saludo.

    Escrito el 23 septiembre 2018 a las 13:43
  13. 13. María Jesús dice:

    Hola Leosinprisa: Es la primara vez en este MUE de septiembre que leo un relato que pinte a los girasoles como seres sanguinarios, pero debo decir que tu relato me ha encantado. Es de una originalidad apabullante y se hace muy ameno. Has creado un ambiente opresivo y peligroso con un final inesperado y contundente ¡Chapeau!
    Un saludo.

    Escrito el 24 septiembre 2018 a las 12:33

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