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Los girasoles - por Sophie

Web: http://anapalaciosv.es

Como cada mañana, Manuel se dirigió torpemente hacia la ventana que le mantenían unido al mundo exterior. Los años pesaban como losas y, aunque su mente permanecía lúcida, pequeños pero repetidos ictus le habían dejado secuelas irrecuperables.
Con la maestría que el tiempo le había otorgado, se colocó en la posición adecuada para contemplar su particular y reducido mundo. En la actualidad ya estaba habituado a la silla; no fue así al comienzo, cuando su mera visión ponía de manifiesto su dependencia.
Con el dulce sabor del éxtasis, se dispuso a recapitular una pequeña parte de su vida; era la manera de mantenerse vivo, de volver a sentir y, a su vez, era el medio de liberarse de trabas.
Nunca sabía qué parte de su vida afloraría. Tenía la sensación de que las vivencias decidían por si mismas cuándo deseaban manifestarse y cuándo preferían seguir ocultas. Era como un juego de magia en el que los recuerdos emergentes perdían la parte emocional que los oscurecía y él sanaba su corazón y vaciaba la mente de contenido superfluo. El perdón y la comprensión hacían posible el milagro.
Ya había repasado su dura infancia, siendo el mayor de seis hermanos, en una familia falta de recursos. Revisar los años de su difícil juventud fue más costoso, pues las lágrimas afloraban, recordando los miedos y las angustias de aquella adolescencia perdida entre disparos y envuelta en soledad: La evocación de las trincheras, el sonido de los devastadores bombardeos, el derrumbe de dos puentes de su querida tierra…
Fue llamado a filas, junto a otros jóvenes, para incorporarse al campo de batalla. Por su corta edad, eran conocidos como la “Quinta del biberón”. Manuel pudo comprobar en más de una ocasión como la muerte pasaba sin rozarle por su lado, pero recopiló en su memoria escenas imborrables de un conflicto bélico absurdo, que nunca debió existir. A este cruel escenario había que añadir la añoranza de su entorno familiar, la responsabilidad de su propia supervivencia y, más tarde, las consecuencia de pertenecer al bando perdedor.
Refugiado en sus recuerdos, desde hacía un tiempo, se negaba a escuchar noticias, no podía entender que el resultado de su sacrificio y el de muchos otros, fuera el panorama social y político que había ahora. Por suerte, todavía conservaba un ápice de esperanza gracias a la labor encomiable de un voluntario, de la Asociación “Los Girasoles”, que ya se había convertido en su confidente y amigo. A veces, le preguntaba detalles de aquellos difíciles años y él contestaba gustoso esperando que el joven comprendiera lo absurdas que son las guerras, así como la imposibilidad de volver a unir a una sociedad fragmentada.
En su recapitulación diaria, algunas veces sonreía, otras las lágrimas se deslizaban por las curtidas mejillas, pero al terminar siempre se sentía mejor, como si llevase menos carga, como si se reconfortara su corazón.
Las campanadas del viejo reloj de cuco del salón llegó a sus oídos y dando un profundo suspiro volvió a la realidad. Era la hora del mediodía, el momento de compartir junto a su familia la humeante y sabrosa comida que tendrían preparada.
Mañana, aunque sentado en su inseparable silla, volvería a sentirse libre durante un tiempo. Mañana, si llegaba, sería otro día…

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15 comentarios

  1. 1. Don Kendall dice:

    Hola Sophie,
    Alguna cosa se podría comentar pero solo sería mi EMDO, así que aporto la canción a propósito de uno de los del biberón que no volvieron “Justo” hermano de la abuela de Rozalén
    https://youtu.be/Jy_7Ufwgv6Y
    Un abrazo y gracias por el aporte

    Escrito el 17 septiembre 2018 a las 19:21
  2. 2. Sophie dice:

    Kendal, solo puedo decirte que me están cayendo las lágrimas. No conocía esta canción y me ha emocionado muchísimo.
    Te contaré, aquí en la intimidad, que el protagonista del relato es mi padre, que ya nos dejó, pero me gusta, de vez en cuando, hacerle protagonista de mis relatos.
    Muchísimas gracias, por pasarte, comentar y por la canción.
    Un fuerte abrazo

    Escrito el 17 septiembre 2018 a las 21:48
  3. 3. Toñi Avila (Vibe) dice:

    Hola Sophie:
    Con el relato trasmites el horror de una guerra, pero no durante su transcurso, si no las dolorosas secuelas que quedan después de tantos años en los mismos reclutas y en sus familias.
    Todos tenemos familiares que vivieron, murieron o fueron hechos prisioneros durante esa etapa tan dura e injusta. Yo como tantos otrostambién los tengo.
    Me has hecho volver a investigar sobre la “Quinta del biberón”…la guinda del pastel de las injusticias.

    Muy buen relato.

    Escrito el 18 septiembre 2018 a las 21:43
  4. 4. Gina dice:

    Hola Sophie

    Me ha gustado mucho tu relato pues ver la guerra a través de los ojos de quienes la vivieron en carne propia es más impactante.
    También me ha gustado que el protagonista no esta amargado sino que incluso busca dejar huella con sus recuerdos.
    Gracias por escribir!

    Escrito el 18 septiembre 2018 a las 23:47
  5. 5. Sophie dice:

    Gracias Toñi y Gina por vuestros comentario. Desde la parte emocional me alegra que os guste, porque como ya comenté a Kendal, Manuel era mi padre. Pero he echado a faltar los fallos que sin duda tiene el escrito. Por lo demás, solo puedo estar agradecida.
    Un cariñoso saludo.

    Escrito el 19 septiembre 2018 a las 07:38
  6. 6. Laura dice:

    Hola Sophie.
    No puedo decirte nada que revisar. Me ha encantado tu relato.Mis felicitaciones.
    Gran detalle lo del quinto del biberòn.
    Mis saludos.
    Hasta la pròxima propuesta.

    Escrito el 19 septiembre 2018 a las 12:39
  7. 7. Osvaldo Vela dice:

    Hola Sophie, antes de llegar a contribuir con mi opinión pasé por los comentarios y simplemente el de Don K. me gustó. Me encantó su sensibilidad para otorgar el conocimiento de una canción, que hizo fluir lagrimas de mis ojos.

    Cuando un escrito como el tuyo puede despertar emociones como tal, me doy cuento que quienes te hayan convencido a unirte a un blog y escribir también notaron la sensibilidad de escritora que posees.

    Te profetizo que entre mas vivas y goces de la vida mas pródigas se volverán tus letras. te auguro algo bonito. nunca cejes en tu esfuerzo por lograrlo.

    Enhorabuena y adelante.

    Tu texto simplemente me rebasó.

    Escrito el 20 septiembre 2018 a las 18:15
  8. 8. Sophie dice:

    Gracias, Osvaldo. No esperaba unas palabras así. A mí también me rebasó tu comentario.
    Nos seguiremos leyendo.
    Un abrazo

    Escrito el 20 septiembre 2018 a las 20:47
  9. 9. Charola dice:

    Muy sentido tu relato Sophie.
    Me encantó.
    Un abrazo.

    Escrito el 21 septiembre 2018 a las 02:55
  10. 10. Vespasiano dice:

    Hola Sophie:

    Gracias por pasarte por mi relato y dejar tu comentario.

    Emotiva y llena de imágenes impactantes es la historia que nos has traído este mes para que recapacitemos sobre los horrores de la guerra en general y dirigida muy particularmente a los compañeros españoles que directa o indirectamente sufrimos o conocimos los daños colaterales de esa contienda.
    Escribí estas líneas antes de haber leído los comentarios de los compañeros para no sentirme influenciado. Pero cuando los he leído no he tenido más remedio que tragar saliva para deshacer el nudo que se me había formado en la garganta al conocer la identidad real del protagonista y escuchar la canción de Rozalen, sentido homenaje para aquellos reclutas, casi niños, que se los llevó la maldita guerra.

    Felicidades por tu relato. Sentido y sincero recuerdo para tu padre.

    Escrito el 21 septiembre 2018 a las 16:23
  11. 11. Amilcar Barça dice:

    En este momento me siento como un zaborro a punto de darse un tozolón. Me gustaría más parecerme a una amapola pero realmente un ababol refleja a quien tengo delante. salu2

    He visto tu blog y sin duda eres una escritura con fundamento. En ellos, reflejamos nuestro estado de ánimo aunque algunos no hayamos sido capaces de superar a aquél mequetrefe de la escuela unitaria que decía a sus compañeros “verus” a cascala. Adelante

    Escrito el 21 septiembre 2018 a las 19:23
  12. 12. Sophie dice:

    Jajaja.¡Qué palabras tan entrañables!
    Amilcar, yo estoy en párvulos y no sé si tendré tiempo de pasar a un curso superior; tampoco me importa mucho, porque disfruto jugando con las palabras, aunque reconozco que me gustaría dominar el arte de la escritura, pero, quizás nacimos demasiado pronto…
    Nos seguiremos leyendo.
    Un abrazo

    Escrito el 22 septiembre 2018 a las 08:06
  13. 14. Amilcar Barça dice:

    O he cometido un error o ha sido eliminado un comentario que he escrito antes, lo cual de ser cierto, me hará cambiar de proceder. Puesto que se trataba sobre un enlace sobre amapolas, ha tenido que ser aquí donde lo he escrito.

    Escrito el 22 septiembre 2018 a las 23:11
  14. 15. Sophie dice:

    Amilcar, gracias por tu hermoso regalo. Un abrazo

    Escrito el 24 septiembre 2018 a las 16:49

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