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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Amor sin límites - por paola panzieri

Web: http://papan3.blogspot.com

—¡Mira! Aquí hay unas cuantas —gritó Daniel y meneó el trasero como un perro delante de un hueso.

Raquel escondió el móvil entre la ropa sucia del cesto y se acercó al hermano que permanecía inmóvil, a cuatro patas, con la cabeza metida en una esquina del sótano.

—¿Las ves? —preguntó Daniel indicando una baldosa del suelo. Sacó un recorte de revista del bolsillo y se puso a leer: “Son bolitas pequeñas, como manchas marrones viscosas de tamaño diminuto…”

—¡Muy bien! Te has ganado la galleta. ¿Y ahora qué? —preguntó Martina resoplando.

Daniel se sentó, se quitó el casco y apagó la linterna adherida en la parte superior.

—Hemos superado la fase uno, con éxito —dijo asintiendo con ojos cerrados—, ¡están aquí y quieren guerra!

—¡Eso ya lo sabíamos, Daniel! Te dije que “demostrarlo científicamente” era una pérdida de tiempo.

—¡En la guerra las cosas se hacen bien y en este caso la estrategia se basa en tres fases muy claras.

—Vale, ¿pero podemos pasar de una vez a la a la fase dos? —gritó Raquel.

—Esa fase implica el inicio de la batalla. ¿seguro que está preparada?

—¡Pues claro, idiota! Si no, no estaría aquí —contestó la hermana y se giró— ¡La cruz de tener hermanos pequeños…!

—El deseo de mamá fue que se acabaran las cucarachas del sótano —replicó Daniel apartando un mechón pelirrojo que le tapaba los ojos—. Ahora, si no quieres ayudarme… como papá ya no está… ¡tendré que hacerlo yo solo!

Martina llenó los pulmones de aire y lo dejó escapar de un soplido.

—¡No te pongas así! Estoy aquí, ¿no? aunque siga opinando que para demostrarle amor a mamá podríamos haber buscado otra cosa. ¡Pero venga, acabemos de una vez!

—¿Acabar? ¡Si estamos empezando! —protestó Daniel y miró a su hermana con ojos grandes— Está bien, sigamos. La fase dos es la de las bombas químicas.

—¿¡Te has vuelto loco o qué te pasa!?

—¡Tranqui! —cortó el chico— no son peligrosas. El hermano de Jaimito me ha explicado cómo se usan y sabré manejarlas. Pero mamá no debe enterarse porque las mujeres no entienden de estas cosas y podría asustarse.

Martina encogió el cuello y levantó los hombros.

—¡Tú todavía no eres una mujer! —añadió Daniel al ver que la hermana abría la boca y las manos a la vez — tú aún ves las cosas bastante claras…

El chico salió al jardín murmurando a media voz que Martina ya no era la misma.

Mientras Daniel colocaba las bombas de humo contra la pared del sótano, su hermana abría puertas y cajones en el interior, jurando que sería la última vez que hacía caso a ese mocoso.

Llegados a ese punto, solo quedaba esperar el resultado.

—La fase dos no ha funcionado del todo —susurró Daniel entrando en el cuarto de su hermana, unas horas más tarde—, la hierba se ha puesto amarilla y los rosales están chamuscados pero en el sótano las cucarachas siguen bailando hip hop como si nada.

—Te lo dije, Daniel. ¡Ven aquí y no te deprimas… por lo menos lo hemos intentado!

—Si no funciona la fase dos hay que pasar a la tres ¡y no necesito carantoñas! —contestó Daniel cruzando los brazos sobre el pecho, luego sacó su recorte y leyó— “Mezcla una parte de ácido bórico, una parte de cacao y azúcar. Coloca esto en la parte posterior de los armarios, debajo del fregadero y dondequiera que vayan las cucarachas”.

—¡Ohhhh, ya está bien! Yo me rindo, hermanito —contestó Martina—. ¡Y que sepas que el amor también tiene límites!

—¿Sabes qué? Que me he equivocado contigo, ¡ya no ves las cosas ni claras ni nada! —contestó Daniel y se fue tras dar un portazo.

A las tres de la madrugada se oyó un grito que provenía del subterráneo.

—¿Se puede saber qué está pasando ahí abajo? —gritó la madre mientras se asomaba a la escalera del sótano, envuelta en una bata y con un pesado bastón en la mano.

—Estoy admitiendo una amarga derrota, mamá. La segunda en un solo día. Pero la guerra no ha terminado aunque haya perdido a los aliados. ¡Eso sí!, mientras tanto, elige un deseo que se pueda comprar en el super. Y ahora, si no te importa, me voy a la cama, y es que los vencidos también se merecen un descanso.

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20 comentarios

  1. 1. IreneR dice:

    Buenas, Paola.

    Me ha gustado tu relato. La pasión del chico por cumplir el deseo de su madre es entrañable.
    Creo que lo has sabido llevar muy bien, aunque si la escena se centra en Daniel y su hermana Martina, la otra hermana, Raquel, puede ser eliminada. Aparecen todos de golpe y puede ser un poco lioso.

    Hay un par de errores que espero no te moleste que te marque:

    “—Vale, ¿pero podemos pasar de una vez a la a la fase dos? —gritó Raquel.”, se ha colado un a la de más.

    “—Esa fase implica el inicio de la batalla. ¿seguro que está preparada?”. La frase acaba en un punto, por lo tanto, la siguiente debe empezar con mayúscula.

    “—¡No te pongas así! Estoy aquí, ¿no? aunque siga opinando que para demostrarle amor a mamá podríamos haber buscado otra cosa.”. Si no hay una coma, el punto de interrogación del no actúa como punto normal, por lo que la siguiente palabra tiene que empezar en mayúscula.

    “—¿Acabar? ¡Si estamos empezando! —protestó Daniel y miró a su hermana con ojos grandes— Está bien, sigamos. La fase dos es la de las bombas químicas.”. Está bien lo pones en mayúscula, pero delante no hay ningún punto que lo indique.

    “—¡Tú todavía no eres una mujer! —añadió Daniel al ver que la hermana abría la boca y las manos a la vez — tú aún ves las cosas bastante claras…”. Entre el parlamento del narrador y el segundo guión de diálogo se coló un espacio.

    “—Si no funciona la fase dos hay que pasar a la tres ¡y no necesito carantoñas! —contestó Daniel cruzando los brazos sobre el pecho, luego sacó su recorte y leyó— “Mezcla una parte de ácido bórico, una parte de cacao y azúcar.”. De esta no estoy del todo segura, pero diría que tras leyó y el guión de diálogo faltan los dos puntos :

    Buen trabajo. Nos leemos.

    Un saludo.

    Escrito el 17 noviembre 2018 a las 22:33
  2. 2. Menta dice:

    Buenas noches paola panzieri: Me ha gustado tu relato. Has cumplido los retos que nos han propuesto este mes muy bien y el amor del hijo por la madre está muy logrado. Es una pena que no haya conseguido hacer desaparecer a las cucarachas, porque a mí me dan también mucho asco como a su madre.

    Estoy de acuerdo con las indicaciones que te apunta IreneR.

    Un saludo, menta

    Escrito el 17 noviembre 2018 a las 23:10
  3. 3. M.L.Plaza dice:

    Hola Paola.
    Me ha parecido una historia entrañable. Daniel es todo un personaje y su parlamento final es maravilloso, aunque yo le hubiera dado un tono más coloquial: “…los vencidos también nos caemos de sueño”, o algo parecido.
    Supongo que Raquel es un lapsus, porque parece que toda la acción recae en Martina y Daniel.
    Me he quedado con ganas de saber más de tus personajes. Ha sido un placer leer tu relato.
    Saludos

    Escrito el 18 noviembre 2018 a las 02:28
  4. Hola Irene, Menta y M.L.Plaza gracias por vuestros comentarios y aportaciones, las tendré en cuenta.

    Efectivamente, Raquel es un lapsus, solo hay dos personajes. Dudé tanto entre los nombres que al final, los puse los dos y no me di ni cuenta al corregir. Vaya cabeza la mía!

    Escrito el 18 noviembre 2018 a las 10:23
  5. Estimada colega. Eso no es un lapsus y si lo es como dices, cambia el cuento y deja que tu narrador se exprese a ver que pasa con esos desdoblamientos de personalidad. ¿Se convirtió Raquel en cucaracha? ¿Y la madre golpeando con el bastón? ¿Las bolitas, eran seres de otro planeta?
    si no eres capaz de plantear eso, olvídate del lapsus e inicia un viacrucis penitente por tenernos mordiendo las uñas, intentando adivinar que coj… hacía el repelente Daniel con el culo en pompa.
    Un abrazo

    Escrito el 18 noviembre 2018 a las 20:52
  6. 6. Laura dice:

    Hola Paola.
    Me gustó tu relato, muy gráfico, más allá de los detalles que te han señalado y de Raquel-Martina.
    Fue algo extraña la imagen del niño meneando el trasero como un perro, creo que se necesita gran fuerza de los mùsculos dorsales, pero… tal vez sea posible.
    Me han encantado los dos hermanos y el fina,.
    Mis saludos y hasta la próxima propuesta.

    Escrito el 18 noviembre 2018 a las 23:38
  7. 7. jose maria dice:

    hola Paola me gusta tu relato los compañeros te señalan los fallos que as cometido para corregirlos ,yo me quedo con la historia entre hermanos ,de distinto ,sexos y formas de actuar y el amor a su madre lo que es verdad que sobra un personaje ,pero nadie es perfecto y para eso estamos para mejorar entre todos .un saludo

    Escrito el 19 noviembre 2018 a las 14:38
  8. 8. JUANA MEDINA dice:

    Hola Paola Panzeri:
    Me gusta mucho la relación familiar que planteas, el cariño con cierta rivalidad entre hermanos de distinto sexo y edad, el amor de ambos a su madre, el clima general y ¡hasta las cucarachas! De verdad yo también les tengo cierto asco, pero Daniel las describe casi con simpatía.
    Lo leí de un tirón y siempre sonriendo con un poco de nostalgia.
    Lo que te han señalado se corrige muy fácilmente. Son gajes del oficio.
    Gracias por tu visita y tus comentarios.
    Nos seguiremos leyendo en el 2019. !Buenas Fiestas!

    Escrito el 19 noviembre 2018 a las 15:59
  9. 9. miguel_madriles dice:

    Hola Paola. Tu relato me ha gustado mucho, la la voluntad, intensidad o cabezonería de Daniel son el motor de tu relato. Claro que si le damos la vuelta, podemos ver lo peligrosos que es hacer caso de cualquier persona que venga con ideas disparatadas, cualquier mesías.
    Por otro lado, los comentarios de Luigi Callieri son para tener en cuenta…
    Gracias por tu visita y tus comentarios, que siempre ayudan.

    Escrito el 19 noviembre 2018 a las 17:36
  10. 10. Tavi Oyarce dice:

    Hola Paola.
    Una pequeña historia de adolescentes a la le has sacado con habilidad partido. No es fácil escribir una historia creíble en base a diálogos y lo has conseguido. Solo me queda felicitarte.
    Estoy de acuerdo en revisar la puntuación y gramática de los diálogos. Tu relato lo merece y en cuanto a la confusión de personajes, a veces de tanto revisar, pasan sin que unos se de cuenta. Cosas que pasan.
    Te volveré a leer el próximo año si envías algunos de tus aportes.
    Saludos

    Escrito el 19 noviembre 2018 a las 19:46
  11. 11. beba dice:

    ¿Qué tal, Paola? Me encantó tu relato con todo y los lapsus; ¡Cuánta ternura e inocencia en este chico!Ni hablar de la mamá cuando vea los rosales chamuscados. Un saludo.
    Este mes se me pasó la fecha de envío; si quieres leerme, he subido el cuento al blog: https://ahorayodigo.blogspot.com/2018/11/radioteatro-noctambulo.html

    Escrito el 19 noviembre 2018 a las 23:16
  12. 12. Leosinprisa dice:

    Hola Paola, me ha gustado tu relato de dos jovenzuelos que intentan batir a su secular enemigo, las cucarachas. Aunque la victoria no les alcance uno siente simpatía por ellos y sus argucias por intentar complacer a su madre de una manera u otra.

    Me ha confundido lo del cambio de nombres, aunque ya lo tengo aclarado (a todos nos ha pasado), por lo demás me parecido un texto muy ameno con sus dos personajes en continua disputa.

    Agradecerte el comentario de mi texto (sí, son demasiados personajes), ha sido un placer leerte. Un saludo.

    Escrito el 20 noviembre 2018 a las 09:03
  13. 13. Conrad Crad dice:

    Hola Paola,

    Tus relatos, los que he leído,se suelen desenvolver en el ámbito de lo cotidiano, en el barrio, en la familia. Me encanta la capacidad que tienes de sacarle jugo a las pequeñas cosas. Me gusta como manejas los diálogos con humor, con ironía, con un poquito de maldad a veces. A mí por ejemplo me cuestan mucho.

    Es muy original esa guerra contra las cucarachas del relato. Si te pones a pensarlo es una de las guerras más cruentas y crueles llevadas a cabo por el hombre. En la guerra contra las cucarachas está permitido todo, incluidas las armas de destrucción masiva y no he escuchado a ningún antibelicista, a ningún defensor de los derechos de los animales, ni tan siquiera a la Onu posicionarse al respecto. Debe ser porque es una guerra silenciosa que la tenemos perdida de antemano.

    Nos leemos, Paola. Un abrazo.

    Escrito el 20 noviembre 2018 a las 17:04
  14. Ya veo Paola que no soy la única despistada mundial, a mí se me cortó tres cuartas partes del relato, y a ti se te coló tu Raquel 🙂
    Lo que más me gusta de “Amor sin límites”, es que es dinámico y ágil, no es para menos, son niños, así que has hecho bien en darle rapidez al cuento. ¿Cómo lo has conseguido?, pues veo un montonazo de verbos de acción. Y por fortuna, los niños hablan como niños, con las voces justas, a veces cometemos el error de hacer bobos a los niños, o lo que es peor, ponerles a hablar como adultos.
    Pues esas son las dos premisas que te alabo de tu aventura dialogada Paola, y el hacer, como muy bien dice el compañero Conrad Crad, del mundo cotidiano con sus pequeñas cosas armar una historia creíble y visual.
    Hasta pronto compañera.

    Escrito el 20 noviembre 2018 a las 19:39
  15. 15. LUDIKA dice:

    Buen trabajo, me gustó tu relato. Creo que logras un buen manejo de los diálogos (particularmente me parece muy difícil de conseguir).
    Creo que me faltó un poco de información sobre el móvil del chico para querer cumplir ese deseo de su madre, no justifica demasiado el porqué y al final lo desestima.

    Felicitaciones a seguir escribiendo!

    Escrito el 21 noviembre 2018 a las 12:56
  16. 16. Osvaldo Vela dice:

    Hola Paola, tu texto atrajo mi atención porque resalta el amor de dos hermanos, con diferencia de edad que causa enfrentamientos entre ellos, por su madre. A cualquier trivialidad la vence el solo mencionarla.
    Tras ver los resultados de los experimentos del chico por erradicar las cucarachas que su madre odia, me doy cuenta que estos animalejos estarán aquí, sin importar el mundo cambiado que les dejemos. Su poder de sobre vivencia es única y se seguirá hablando de ellas.

    Te felicito.

    Un saludo y que la Navidad llegue a tu familia con todo tipo de bonanzas y bendiciones.

    Nos leemos de nuevo en enero.

    Escrito el 22 noviembre 2018 a las 18:54
  17. 17. dopidop dice:

    Buenas Paola,

    Primero, darte las gracias por visitar mi relato y por tu comentario que es para tener en cuenta y por supuesto que me ayuda.

    En cuanto al tuyo, nos traes un relato tierno, familiar y cotidiano. Me resulta entrañable la relación entre los hermanos (y que el niño se llame igual que mi hermano pequeño, todavía más). Me encantan las imagenes de Daniel planeando sus ataques contra las cucarachas y de su hermana pasando de él. El texto engancha desde el principio y es muy ameno de leer.

    Mi problema es con el final… no me queda claro que es lo que ha pasado, que es lo que ha ido mal, me gustaría mas información y sobre todo, la última frase de Daniel, la veo demasiado “formal” para un niño que está haciendo travesuras a las tres de la madrugada.

    Por lo demás, un buen trabajo. Gracias por compartirlo.

    ¡Un saludo!

    Escrito el 23 noviembre 2018 a las 11:13
  18. 18. Paola Panzieri dice:

    Hola a todos

    La aparición (por error imperdonable) de una nueva hermana y el consejo de Luigi de convertir a Raquel en cucaracha, han dado un giro inesperado al desenlace de la trama de la historia.

    Corregido, además, con las indicaciones que me habéis dado, el relato verá la luz en mi blog en breve.

    Os agradezco a todos las aportaciones que, como siempre, son esenciales para “colgar” algo decente.

    Un abrazo

    Escrito el 23 noviembre 2018 a las 13:25
  19. ¿En serio? ¿Raquel en cucaracha?… eso no me lo pienso perder 😉

    Escrito el 23 noviembre 2018 a las 14:32
  20. 20. Marisa y Arnool dice:

    Hola Paola,
    Un relato original, que cumple con reto de una manera interesante y bien pensanda y que atrapa desde el inicio.

    Como siempre, un gustazo leerte.

    Escrito el 24 noviembre 2018 a las 12:04

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