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Urbanización Las Madrigueras bajo el Roble - por IreneR

Web: https://irenerodriguez-escritora.blogspot.com/

En la urbanización Las Madrigueras bajo el Roble el día se presentaba tranquilo. Como ya era tradición, el señor Conejo, con su inseparable reloj de bolsillo, había sacado a la puerta de su casa una mesa, unas cuantas sillas y la baraja de cartas. No había terminado de colocar el tapete cuando su vecino, el señor Sapo, que ese día llevaba un elegante broche en forma de mosca enganchado a la chaqueta, se acercó a él.

—¿Puedo? —preguntó señalando a la mesa.

—Faltaría más —respondió el señor Conejo.

Unos minutos más tarde el señor Oruga, con su eterna pipa entre los labios, se unió. Al igual que la señorita Rata, tan elegante y conjuntada como siempre, y hasta el señor Búho, con sus gafas de montura gruesa, había bajado desde la urbanización vecina: Los Nidos sobre el Roble, para echar unas partidas. A todos les encantaba jugar a las cartas, mucho más si era apostando dinero, algo que a la señora Conejo siempre le disgustaba.

—Te jugarás el sueldo del mes y volverás a perderlo todo —le decía a su esposo en cada ocasión.

Sin embargo, el señor Conejo se negaba a aceptar que su buena fortuna hubiese desaparecido. Desde que tuvo ese accidente, y le tuvieron que operar la pata derecha, parecía que la suerte había dejado de sonreírle.

El que siempre se iba a casa con los bolsillos llenos era el señor Búho. Quizá fuese porque era el más inteligente, el más astuto o el que ocultaba mejor sus emociones pero, fuese lo que fuese, no había día en que no saliese de allí con más dinero que con el que entró.

La tarde había comenzado a caer cuando un vecino se acercó a la mesa.

—¿Po-podría unirme? —preguntó el joven Pollo.

El señor Conejo le miró durante un segundo, evaluándolo.

—¿No te había prohibido la señora Lechuza, tu psicóloga, jugar a las cartas?

—Ssssí, pe-pero…

—La última vez perdiste todos los ahorros que tus padres tenían guardados para tus ocho hermanos y para ti, ¿por qué no piensas en ellos? —preguntó la señorita Rata con reproche.

Nadie dijo nada más, el no quedó implícito, y continuaron con la partida. Pero entonces, el joven Pollo puso una enorme bolsa encima de la mesa. El golpe que dio cuando chocó con la madera hizo que todo vibrase, y los jugadores escucharon con claridad el entrechocar de las monedas.

—Lo tuyo es un problema de verdad, chaval —dijo el señor Búho con los ojos bien abiertos por la emoción.

El joven Pollo era uno de los peores jugadores que conocía, y la adicción que tenía por apostar sobrepasaba la normalidad. Cuando se metía en una partida la avaricia le podía. Lo quería todo, jugaba y arriesgaba sin mesura, y al final, aquella ambición terminaba siendo su peor enemigo.

—¿De dónde has sacado esto? —preguntó el señor Conejo con una expresión asustada en el rostro. Había abierto el saco y de su interior sacó un puñado de monedas de oro y alguna piedra preciosa—. ¡Habla! —exigió agarrándole de la pechera.

Sin embargo, antes de que el joven Pollo pudiese responder, una gigantesca sombra apareció en el suelo. Lo escucharon antes de verlo: un grave y furioso rugido les llegó desde el cielo.

—¡¿Le has robado a Dragón?! ¡Maldito insensato! —gritó el señor Conejo.

—Será nuestro fin —sollozó la señorita Rata corriendo a esconderse en su casa.

—Nos matará a todos —se lamentó el señor Búho echando a volar lo más lejos de allí.

En unos segundos la urbanización Las Madrigueras bajo el Roble quedó desierta; los vecinos huyeron despavoridos para guarecerse de la furia de Dragón. Mas no hubo nada que pudiesen hacer para salvarse, pues la ira de Dragón, un ser ermitaño y adusto, era inmensa. Todos sabían el intenso amor que le profesaba a sus tesoros; ganados a base de uñas, escamas y dientes, y eran conscientes de que haría cualquier cosa por recuperar aquello que le había sido sustraído. Arrasó con todo y con todos. Y en un abrir y cerrar de ojos, aquel tranquilo y alegre lugar quedó completamente calcinado.

Tan solo hubo un superviviente: el joven Pollo. Cuando Dragón se marchó se acercó a la mesa de juegos. Recogió la bolsa que había traído, así como el resto del dinero y apuestas que los jugadores habían abandonado a su suerte, se lo guardó todo en un pequeño hatillo y se marchó de la urbanización con una satisfecha sonrisa en el rostro.

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26 comentarios

  1. 1. arioMaurice dice:

    Hola Irene!
    Muy bueno tu cuento, y la moraleja de que no se debe menospreciar siquiera a los más débiles. Aunque no comprendí eso de que el dragón arrasó con todo y luego el pollo vuelve y se lleva lo que había quedado, ¿entonces el dragón no arrasó con todo? igualmente, aunque tenes que trabajar un poquito la puntuación, es una historia sencilla con una excelente descripción de los personajes. Buen trabajo.
    Si deseas leerme, el mío es el 115.

    Escrito el 17 enero 2019 a las 03:17
  2. 2. dopidop dice:

    ¡¡Buenas Irene!!

    No he tenido que buscar mucho tu relato por que este mes también lo tengo bien cerquita del mío.

    Me encanta tu texto… me imagino a los animales vestidicos con sus exquisitos trajes jugando a las cartas y me enamora la escena. Me chifla que Conejo haya perdido su suerte por que se haya roto la pata. Y adoro a ese tímido Pollo ludópata.

    El principio es muy “Alicia en el país de las Maravillas” Con Conejo y su reloj y Oruga fumando pipa, y es un aura muy idílica, muy de cuento. Después va cambiando a una historia diferente que te absorbe… Llena de detallitos y matices que hacen que sea super visual.

    Los retos 100% cumplidos y todo, como siempre, muy correcto (mira que me encanta buscar cosillas que me desentonan, pero es que me lo pones difícil) Aunque coincido con Maurice en que queda raro que si la urbanización quedó calcinada… ¿cómo se salvó el dinero?

    Un placer leerte de nuevo, y ¡un abrazote!

    Escrito el 17 enero 2019 a las 17:03
  3. 3. Gustav dice:

    Hola Irene.
    Me parece una buena fábula, bien contada, hasta el punto que me parecía estar sentado con los personajes.
    Me he liado un poco avanza de la puntuación.
    Digo lo mismo que los compañeros que te han comentado, me sorprendí cuando el pollo cogió la bolsa de monedas y se fue tan campante después del paso del furioso dragón.
    Un placer leer tu relato.
    Saludos

    Escrito el 17 enero 2019 a las 17:47
  4. 4. IreneR dice:

    Gracias por vuestros comentarios, arioMaurice y dopidop, acabo de caer en la cuenta del tremendo error de lógica que implica que todo haya sido destruido pero que Pollo se lleve las apuestas y el dinero… No había caído en eso… ¡Gracias por hacérmelo ver! Lo tendré en cuenta.

    arioMaurice, ¿me podrías decir dónde ves los fallos en la puntuación?

    !Un saludo!

    Escrito el 17 enero 2019 a las 17:49
  5. 5. Pepelu Martín dice:

    Es un cuento impecable. Los personajes, además de encantadores, son perfectos en su descripción. Los signos y la puntuación, sin errores manejando fielmente las acotaciones del narrador. Es absolutamente creíble como si fuera una fábula y lo mejor que he leído hasta ahora.
    ¡Enhorabuena!
    Saludos.

    Escrito el 18 enero 2019 a las 11:37
  6. 6. Jose Luis dice:

    Hola
    Gracias por leer mi cuento y por tus comentarios
    Me acabo de pasar por el tuyo y te cuento.
    He visto alguna cosilla que se podría mejorar como:
    Nadie dijo nada más, el no quedó implícito ————— Nadie dijo nada más, el “no” quedó implícito

    Me ha gustado bastante el cuento en general, las descripciones están logradas y el tono general es de pura fábula. Tengo dudas en cuanto a la extensión, porque creo que se hubiera podido recortar o usar menos palabras para contar lo mismo. El principio, cuando se describe la situación y el contexto del cuento, es un poco largo, lo que me da la sensación de que se entra un poco tarde al meollo de la cuestión, al conflicto propiamente dicho: cuando hace su aparición el señor Pollo. Ahí es cuando comienza la historia de verdad.
    Otra cosa que me chirría un poco es la motivación del señor Dragón: si vuela para recuperar sus tesoros y lo quema todo a su paso, ¿por qué los deja al final en la famosa mesa de juego? ¿No debería descender y cogerlos sin más?
    Pero creo que de todos modos el relato está bastante logrado y entretenido.
    Un saludo

    Escrito el 18 enero 2019 a las 16:48
  7. 7. JUANA MEDINA dice:

    Hola IreneR,
    Buena historia con resabios a “Alicia”, ya te lo han dicho. También te han mencionado ciertas incongruencias del final. Se arregla fácilmente pero seguramente cambiará la intención de la autora. No entiendo por qué se salva el Pollo y no el Buho por ejemplo, que sale volando. Sí entiendo que pierda nuestro pobre conejo lisiado que es uno de los grandes aciertos de humor del cuento.
    Por lo demás, impecable y con un ritmo excelente.
    Enhorabuena.

    Escrito el 18 enero 2019 a las 17:22
  8. 8. Doralú dice:

    !Hola IreneR!

    Es un buen relato, de fácil lectura, que me atrapó hasta el final que me dejó perpleja: el dragón no se llevó sus preciados tesoros y el condenado pollo fue el único que no huyó, no se quemó; las monedas por lo menos debieron quedar ahumadas. También me sorprendió que el joven pollo fue más malvado de lo que aparentaba.
    Coincido con Dopidop y José Luis en sus apreciaciones.
    Añadiría para tu consideración, que el pollo colocó sobre la mesa una enorme bolsa de monedas de oro y cuando se marchó: recogió esa bolsa enorme, así como lo que había sobre la mesa y lo colocó en un pequeño hatillo.
    Las incoherencias, vacíos, etc a veces suceden cuando la historia va transformándose a medida que crece. Me sucede mucho. Solucionado esos detalles, la historia te quedaría redonda.
    La moraleja sería: un adicto es capaz de cualquier cosa con tal obtener lo que quiere.
    Es un texto que vale la pena realizar las mejoras que consideres pertinente.
    Un abrazo

    Escrito el 18 enero 2019 a las 19:29
  9. 9. M.L.Plaza dice:

    Hola IreneR.
    Gracias por tus comentarios a mi texto.
    El tuyo me ha parecido muy bueno: has conseguido crear una atmósfera y unos personajes muy creibles. La única pega que veo es que parece que estás contando una historia infantil y el final se vuelve muy duro y, sobre todo, injusto. Da la impresión de que la venganza del dragón, que siempre recupera sus tesoros, aún tiene que ser mayor. La que le espera al pobre Pollo.
    Aunque no soy experta he visto algunas cosas,aunque puede que sea yo la que esté equivocada. “El día se presentaba…” parece que es de mañana y luego “la tarde había comenzado a caer…” ¿Tantas horas dura la partida?
    En “Unos minutos más tarde el señor Oruga, con su eterna pipa entre los labios, se unió. Al igual que la señorita Rata, tan elegante y conjuntada como siempre, y hasta el señor Búho…”
    Después de unió pondría coma y el punto y seguido después de siempre y quitaria la y: Siempre. Hasta el señor…
    Tuvo el accidente y tuvieron…están demasiado juntos.
    En el siguiente párrafo hay tres fuese demasiado seguidos y saliese, mejor saliera.
    Chocó y entrechocó también están muy juntos.
    Creo que es enemiga porque hablas de ambición.
    En el siguiente párrafo sacado, saco y sacó.
    En el siguiente párrafo repites antes.
    Lo más lejos de allí a mí me suena raro: lo más lejos de allí que pudo.
    Puediesen-salvarse: pudieran-salvarse.
    Sabían del… o conocían el…
    Pese a esas cosas, me ha parecido un relato estupendo. Me ha gustado mucho leerlo.
    Saludos

    Escrito el 18 enero 2019 a las 23:14
  10. 10. beba dice:

    Hola, Irene R: Gracias por tu visita y amable comentario. Me ha encantado tu fábula, tan clara y dinámica y tan precisa en la descripción de los animales y su simbolismo. Nada para señalarte para mejorar. Un saludo.

    Escrito el 19 enero 2019 a las 03:39
  11. 11. Otilia dice:

    Hola IreneR:
    Gracias por leer y comentar.
    Tu fábula me ha gustado mucho. Detalles como la mosca en el sapo y la pata del conejo enriquecen el relato.
    Sobre Alicia y el dinero después de estar todo calcinado, ya te han dicho. Buen trabajo.
    ¡Ah! Yo hubiera puesto señora oruga.
    Nos leemos Saludos.

    Escrito el 19 enero 2019 a las 10:53
  12. 12. Labajos. dice:

    Hola Irene:

    Pues parece que el más listo de todos era el Sr. Pollo, al que los demás subestimaron. Más listo incluso que Dragón, que dejándose llevar por la furia y la ceguera que da la venganza, olvida incluso recoger su tesoro. Yo no veo mal el final. La violencia del impulsivo es aprovechada por el astuto y taimado que seguramente conocedor de la previsible impetuosidad del primero tuvo tiempo de esconderse y salir ileso. Los perdedores se lo tienen merecido, pues su intención era desplumar al Pollo que, por una vez, no terminó asado.

    Un saludo.

    Escrito el 19 enero 2019 a las 11:09
  13. 13. Galia dice:

    Hola Irene: muy agradable tu fábula. Como ya lo mencionaron, al principio me vino a la mente el conejo de Alicia en el país…, pero luego me fui metiendo más en tu historia que se lee con fluidez. Bien caracterizados los personajes y un final sorprendente ya que al dragón lo movió sólo la venganza y no recuperar su tesoro.La debilidad del Pollo y su adicción forma un esterotipo.
    Respecto a lo formal, yo corregiría el último párrafo:Tan solo hubo un superviviente: el joven Pollo.
    Cuando Dragón se marchó, se acercó a la mesa de juegos, recogió la bolsa que había traído, así como el resto del dinero y apuestas que los jugadores habían abandonado a su suerte, se lo guardó todo en un pequeño hatillo y se marchó de la urbanización con una satisfecha sonrisa en el rostro.
    Nos seguimos leyendo.
    Saludos.
    Galia

    Escrito el 19 enero 2019 a las 21:40
  14. 14. IreneR dice:

    Muchas gracias a todos por vuestros comentarios y propuestas de mejoras, las tendré en cuenta.

    Ha sido muy agradable regresar a Literautas y encontrarme de nuevo con que los comentarios que se reciben siempre son instructivos y bien intencionados. ¡No cambiéis nunca, gente!

    Nos leemos.

    Un saludo.

    Escrito el 20 enero 2019 a las 08:16
  15. 15. Luigi Callieri dice:

    Hola Irene R,
    Es un buen trabajo de acuerdo con lo establecido, bien llevado con todo en su sitio, salvo ese fallo señalado que en este caso es demoledor, ya que se pierde verosimilitud. Como bien sabes no es tanto que sea verdad lo que se cuenta, sino que tenga coherencia.
    En este sentido, la desaparición del último párrafo EMDO no quitaría la belleza formal del texto y aportaría la coherencia perdida.
    Naturalmente la obra es tuya y eso es lo que debe primar.
    Gracias por compartirla.

    Escrito el 20 enero 2019 a las 09:54
  16. 16. El chaval dice:

    Hola IreneR
    Mi percepción del escrito a medida que lo iba leyendo, me parecía estar viendo el comienzo de una partida de cartas entre humanos. No me parece una fábula de animales, solo cambian los nombres y que un espabilado que ante tanta trifulca se lleva los cuartos. Me suena raro que el dragón venga a liquidar y lo deje todo.
    Me ha gustado el detalle de el señor Sapo, con su broche de mosca, como la elegancia de la señora Rata. Veo que las puntuaciones están bien llevadas.
    Un cordial saludo (106)

    Escrito el 20 enero 2019 a las 14:12
  17. 17. Paola Panzieri dice:

    Hola Irene

    Lo que te iba a comentar veo que ya ha sido dicho.

    Me queda contarte que he disfrutado con los detalles de las escenas y la construcción tan cuidadosa de los personajes. Me han recordado la época de las buenas pelis de dibujos animados…

    Un saludo

    Escrito el 20 enero 2019 a las 19:41
  18. 18. Pepelu Martín dice:

    Hola Irene:
    Mi comentario, sobre tu comentario:
    Yo creo que existen diferencias literarias, definidas por los expertos, entre RELATO, CUENTO, FÁBULA… (Todas exigen una determinada estructura). Es lo recomendable para aprender.
    Por otro lado LITERAUTAS proponía lo siguiente: Reto opcional:
    Como reto alternativo os proponemos que el relato sea una fábula protagonizada por animales. El reto opcional es voluntario. De manera, como casi siempre, escribimos con cierta libertad y yo así lo he hecho. La primera parte mía habla socialmente del hoy y no de fantasía.

    Escrito el 20 enero 2019 a las 21:32
  19. 19. Osvaldo Vela dice:

    Hola IreneR al parecer el 2019 ya te recibió con una imaginación despierta y y una emotividad de fábula. Felicidades.

    Decirte que me gustó la trama es poco, me encantó. Tiene picardia y comicidad. Solo que al llegar el desenlace, salvas al pollo pillo de la ira del dragón cuando todo lo demás se chamuscó. Aunque en redacciones todo se vale hay que cuidar lo creíble contra lo posible.

    Te felicito y adelante.

    Escrito el 21 enero 2019 a las 16:35
  20. 20. Anael dice:

    ¡Hola, IreneR!

    Aquí vengo a devolverte la visita, aunque después de tanto estupendo comentario, poco queda que decir. Ya te han dicho muchas cositas y me he quedado sin muchas lentejas que repartir, jejeje. Eso sí, te recomendaría que revisaras la puntuación más allá del primer tercio del texto que es donde está más confusa. A lo mejor este artículo que tengo en mi blog te sirve: https://simplyanael.wordpress.com/2018/12/18/recetas-mortales-puntos-o-comas/

    Por lo demás, el texto me ha gustado mucho. Me chocó un poco el final, pues si todo queda calcinado, no comprendo cómo se ha salvado nuestro amigo el señor Pollo (el muy astuto debió de esconderse requetebién) y el tesoro que utiliza para robar impunemente a sus vecinos con tan astuta estratagema.

    La amósfera es idílica, muy apropiada para un fábula. Me gustan los nombres sencillos de los animales que nos llevan a lo infantil y al origen de este género. He oído el sonido del saco contra la madera y he visto el brillode ambición en losojos del señor hó. Muy buen trabajo.

    ¡Un abrazo, nos leemos!

    Escrito el 21 enero 2019 a las 19:19
  21. 21. Anael dice:

    Perdona, que se me fueron los dedos de vacaciones en esta última frase: he visto el brillo de ambición en los ojos del señor Búho 😉

    Eso es lo que quería poner ^^’

    Escrito el 21 enero 2019 a las 19:20
  22. 22. V. Arenas dice:

    Hola, Irene R.!
    De tu relato me ha encantado la manera en la que describes el lugar, y me has hecho transportarme a ‘Las Madrigueras bajo el Roble’. Creo que el vocabulario que utilizas y la forma en que construyes las frases es muy adecuada para darle ese tono de fábula.
    Estoy de acuerdo en que resulta algo confuso lo que ya te han comentado de que el adicto al juego Pollito pueda irse de allí con todo lo que había sobre la mesa después de que hubiera sido calcinado el lugar.
    No me ha llamado tanto la atención que el Dragón se vaya sin llevarse el botín, puesto que los dragones puede ser muy impulsivos y vehementes y, llevados por la ira, no recordar cuál era el propósito de lo que estaban haciendo jajaja.
    Estoy segura de que haciendo algunos arreglos, te queda de maravilla.

    Enhorabuena por lo conseguido, como te he dicho, creo que es una buena fábula en la que sobre todo destacaría la descripción de la escena.

    ¡Un abrazo!

    P.D.: muchas gracias por tu comentario y apreciaciones 🙂

    Escrito el 22 enero 2019 a las 05:43
  23. 23. Leosinprisa dice:

    Hola, IreneR, ahora comprendo mi animadversión congénita que tengo contra los pollos :), fuera de bromas me ha gustado mucho tu texto aunque considero que el dragón es un tanto extraño, pues abandona el tesoro que ha robado trabajosamente para dejárselo al pollo ¿?, después de armar semejante trifulca ¿? Me hubiera gustado, esto es una opinión personal, que dragón y pollo se hubieran repartido el botín, como buenos matones y hermanos de delito :). Creo que eso fuera más lógico que olvidar el tesoro en manos de otro.

    Por lo demás nada que reprocharte, ha sido una interesante lectura y muy entretenida, que eso tiene su mérito.

    Agradecerte los comentarios en mi texto. Ha sido un placer leerte, un saludo.

    Escrito el 22 enero 2019 a las 08:37
  24. 24. isan dice:

    Hola Irene:
    Bonita fábula. Una narración exquisita en lenguaje, diálogos y personajes. Tiene buen ritmo y sonoridad y tiene moraleja. Cuando he visto que recogía la bolsa, me he imaginado una complicidad con Dragón, por eso estaba esperando un guiño final, lo que habría justificado la aparición de Dragón que no sé si la imaginaste así, pero no se ve.
    En cuanto a la forma un par de apuntes.
    En estos dos casos no hay que poner coma delante de la ye: “…conjuntada como siempre, y hasta el señor Búho…” “…que tuvo ese accidente, y le tuvieron…”
    “…una satisfecha sonrisa en el rostro.” Creo que mejor es “sonrisa satisfecha” ya que lo que tiene en el rostro es una sonrisa. Bueno, esto es una tontería, si así lo has puesto es porque te ha gustado.
    Ha sido un placer. He disfrutado con un magnífico cuento.
    Un saludo.

    Escrito el 23 enero 2019 a las 10:22
  25. 25. Menta dice:

    Buenas noches IreneR: Me ha gustado mucho tu fábula porque has creado de manera muy lograda unos personajes-animales muy creíbles.

    He leído los comentarios que te han hecho los otros compañeros y pienso que si haces las modificaciones que te sugieren, la fábula te va a quedar perfecta.

    Un saludo y hasta pronto. Menta

    Escrito el 24 enero 2019 a las 22:42
  26. 26. El Apuntador Mudo dice:

    Hola IreneR, con gusto paso a leer tu relato.

    Me ha gustado tu cuento, me ha dado la impresión que hay una interesante mezcla de personajes partícipes de otros relatos clásicos. Los detalles de caracterización del sapo con su broche, así como la pata rota del conejo y su pérdida de suerte, le dan “profundidad” a los protagonista. Todos los personajes están muy bien caracterizados.

    Poco que aportar a los añadido por los compañeros. Me ha gustado leerte. Creo que cumples sobradamente con los retos de este mes.

    Saludos, nos leemos.

    Escrito el 26 enero 2019 a las 12:17

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