Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

La ofensa - por Aqua

La espesa niebla que cubría las calles no permitía ver más allá de un metro. Yani caminaba sin mirar atrás, nerviosa. Todo estaba desierto. Solo podía escuchar el sonido de su jadeante respiración y de su corazón desbocado. El cansancio amenazaba con asfixiarla, pero no podía detenerse. Su único objetivo era llegar al almacén. Allí estaría segura. Allí siempre estaba segura.
Dobló la última esquina como alma que lleva el diablo. Casi corría. Sus pulmones trabajaban al máximo y podía sentir como le rogaban más oxígeno. Los ignoró.
Llegó a la puerta de hierro cuando apenas faltaba un minuto para la medianoche. Buscó las pesadas llaves en el fondo del bolsillo de su raído abrigo mientras miraba hacia atrás. ¿La habrían seguido? No fue una tarea sencilla. Sus manos estaban tan congeladas que se negaban a obedecer las órdenes de su cerebro. Por fin, sacó el enorme manojo y abrió la puerta.
Dentro, todo era oscuridad. La pequeña grieta en la pared que solía dejar pasar la luz, no respondía hoy a su desesperada llamada.
Caminó a tientas por la habitación, con las manos extendidas. De repente, sintió algo suave. Sonrió.
—Aquí estás. Perdona por haberte dejado solo tanto tiempo. Te he traído un regalo. Buscaré una cerilla para que puedas verlo.
Yani se dirigió hasta una mesa, con la que primero tropezó, y palpó su superficie en busca de la caja de cerillas. La cogió y encendió una. La tenue llama iluminó su cara. Era muy guapa. Sus aniñadas facciones no se correspondían con el blanco de su cabello. Aunque menuda, Yani tenía una energía que la hacía parecer tres veces más grande.
Se acercó a una de las esquinas del cuarto y se detuvo. Suspiró. La cerilla se apagó. La mujer rio a carcajadas y encendió otro fósforo. Lo llevó hasta un candil y el lugar se iluminó un poco más.
—Tendrás que perdonar a esta anciana. El cansancio ya no me deja pensar con claridad —de nuevo aquella preciosa sonrisa afloró en sus labios.
Una peluda mano agarró la de Yani. Un sonido animal, parecido a un lamento, inundó la estancia.
—Vamos, no llores. Lo siento, pequeño. Mira —la mujer sacó del interior de su abrigo un paquetito muy mal envuelto y se lo tendió—. Esto es para ti.
El enorme gorila agarró el regalo y le quitó cuidadosamente el papel que lo cubría. Era una pequeña cajita de madera.
—Ábrela —le animó la mujer.
El animal, con una delicadeza asombrosa, abrió la caja. Una bailarina comenzó a dar vueltas sobre sí misma al son de una hermosa música.
—¿Recuerdas la melodía? Era la canción de mi número en el circo. Cada vez que la escuchaba, sentía que nada más importaba. Solo estaba yo. Ahora podremos disfrutarla juntos.
El gorila miró a Yani. Fue una mirada larga, cargada de sentimiento. Extendió una de sus gigantes manos y acarició la cara de la anciana con ternura. Entonces, se llevó la mano al corazón e hizo una cruz. La mujer imitó el gesto.
—No te preocupes. Pronto serás libre. Nunca más nadie volverá a hacerte daño. Te lo prometo.
Los dos seres quedaron abrazados largo rato. Allí estaban seguros. Allí siempre estaban seguros.

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

6 comentarios

  1. 1. Laura dice:

    Hola Acqua.
    Hermoso, me ha encantado.
    Mis màs sinceras felicitaciones. Coindices con Doralù en el tema y el enfoque.

    Mis saludos.

    Escrito el 16 febrero 2019 a las 22:19
  2. 2. El chaval dice:

    Hola Aqua.
    Una historia de fidelidad, en el que creo que ella rapta al gorila y que tratará después, de enviarle a algún sitio para que se recupere de los malos tratos..
    Creo que en el texto, abusas un poco de los punto y seguido, parece lectura telegráfica.
    Un saludo y hasta el próximo (40)

    Escrito el 20 febrero 2019 a las 10:18
  3. Hola
    Me ha gustado tu relato, haces frases cortas con lo que es rápida la lectura. El tema que has elegido esta bien, aunque le falta un poco de emoción. Tampoco veo relación con el titulo. Es una escena bastante plana .Para mi gusto y siempre con el afán de ser útil, le falta un poco de acción, por ej. “el gorila se emociona enormemente y con sus bruscos movimientos atemoriza a la anciana…”. Un cordial saludo y felicidades. Nos seguiremos leyendo.

    Escrito el 20 febrero 2019 a las 16:28
  4. 4. Media Avila dice:

    Hola Aqua
    Coincido totalmente con Ismael en el contenido del texto.La historia en sí me ha gustado, como la describes y lo cargada de emoción y ternura que está.
    Felicitaciones y a seguir escribiendo. Un saludo.

    Escrito el 25 febrero 2019 a las 00:19
  5. 5. Don Kendall dice:

    Hola Aqua. Un trabajo meritorio el que ofreces para análisis y comentario. En lo formal, no parece que haya nada llamativo, al menos para mi. En el campo de la narración, quizá merezca la pena trabajar un poco los ingredientes para que la masa tenga algo de integridad, si me permites la metáfora. Tal como presentas el texto hay, por así decir, excesiva porosidad. Como sabes cualquier texto para llegar a historia necesita sí o sí, de un TEMA, un ARGUMENTO, una TRAMA. Aparte del TALENTO del autor/a que en tu caso es evidente que lo hay. Después o a la vez, las técnicas ayudan bastante, pero ya te digo que las tres patas , tema, argumento, trama son imprescindibles.
    En el texto que presentas el TEMA , el cimiento, la almendra, la “pepita” donde se apoya la historia, no acaba de estar clara. Parece que es el amor de una anciana por un animal que tiene encerrado, ¿secuestrado? ¿atado?..
    El ARGUMENTO, sucesión cronológica de lo narrado, parece que es una mujer con prisa para llegar a un lugar donde está encerrado un gorila para encerrarse con él.
    La TRAMA, organización de los elementos anteriores, explicando motivos, causas y distribuyendo elementos para buscar la emoción del lector, queda sin definir : faltan datos, pistas, detalles sobre el TEMA y el ARGUMENTO y hay excesivos datos, tanto sustantivos como adjetivos, cerillas, candil, abrigo, caja de música, llave grande, cansancio, etc que no aportan consistencia y estructura a un posible relato que apunta tener interés a poco que le des un par de vueltas.
    Naturalmente, el trabajo es tuyo y solo queda agradecer tu gentileza en ponerlo a disposición de este taller. Por eso todo lo anterior es una opinión tan despreciable como la de cualquiera.
    Un abrazo

    Escrito el 26 febrero 2019 a las 18:27
  6. 6. Diego Alba dice:

    Hola Aqua.
    Tenés un relato muy lindo. Me lo leí de un tirón. Muy ameno y si ternura llega. No sabría como mejorarlo. Me dejó un sentimiento melancólico muy bonito.
    Me encanta, te felicito.

    Escrito el 26 febrero 2019 a las 20:15

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.