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La ofensa - por Servio Flores

Desde que nací ha ido poco a poco instalándose, insultándome, ofendiéndome. Al inicio de forma sutil, enmascarando en belleza y ternura cada uno de sus improperios.

Poco a poco ha ido apropiándose, cada día, de cada una de mis fibras, de cada una de las gotas de mis fluidos, de cada una de las texturas de mis órganos.

Ha estado ahí cada día. Al inicio lo tomé como algo simple: crecer, vivir, cómo parte del todo, parte del paquete de la vida, como parte de mí mismo. Y hasta cierto punto resulta que la ofensa, la decadencia era yo mismo, pero yo no lo sabía. Hasta hoy, que ya es demasiado tarde.

En todo este tiempo los recuerdos, como en un almacén, han ido llenando los días y las noches, entonces entiendo las palabras del poeta, cuando dijo que "El tiempo es un espacio que se llena de recuerdos". Sin embargo la niebla de estos días, de todos estos otoños acumulados hacen que, como si de un irracional gorila mi entendimiento fuera y no todo resulta claro.

Confíe mi vida y moriré por esto. Resistí sin saber que resistía. Sin embargo la ejecución era la sentencia para el perdedor. Yo no lo sabía, pero al tiempo nadie le gana la batalla. Y aquí estoy, al filo de la nada, ahogándome entre tiempo y recuerdos, entre olvidos e inquietudes, entre achaques e impulsos. Casi nada queda. Casi nada soy.

Antes de mí, muchos cuerpos muchas vidas, muchos inocentes torturados, destruidos poco a poco en silencio, de una forma grotesca pero sutil, sin saberlo todos ellos fueron víctimas de sus alientos, y así nos ha tocado el turno a todos. Ahora es el mio y para este compromiso no hay nadie más que me represente.

La vejez es una maldita y sádica asesina en serie. La vejez es una ofensa en contra de la vida y yo aquí estoy, escupièndola a la cara, dándole la lucha, aunque sé que no ganaré está batalla.

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6 comentarios

  1. 1. Héctor dice:

    Felicidades. Excelente, siento coincidencia en ese final. Tú miras la vejez como una ofensa y yo a la muerte. Gracias por la cita. Te sigo leyendo

    Escrito el 16 febrero 2019 a las 21:32
  2. 2. Laura dice:

    Hola Servio.
    A medida que nos van pasando los años nuestra mirada sobre la vida, la muerte, la decrepitud van tomando parte mayor de nuestras reflexiones, y está en cada uno de nosotros como lo tomamos.
    Mis saludos y felicitaciones por el testo.

    Escrito el 16 febrero 2019 a las 21:38
  3. 3. Ulises dice:

    Hola Servio,

    Un texto basado en lo reflexivo y la traición (en palabras de García Márquez) de la muerte, así como la vejez, la cual no es más que un aviso a lo que viene después. Me gusto el texto.

    Mi relato es el 118, por si te quieres pasar

    Escrito el 16 febrero 2019 a las 23:34
  4. 4. Carlyn dice:

    Excelente!!! Me ha gustado mucho. Éxitos!

    Escrito el 17 febrero 2019 a las 00:02
  5. 5. isan dice:

    Hola Servio:
    Me ha parecido un relato muy filosófico. Un conflicto interno irresuelto que se manifiesta desde el nacimiento. Y es por eso que no entendía la relación con la ofensa. Tal vez otro título le habría ido de perlas, pero no podíamos elegirlo. Termina con la muerte que es lo que le atormenta al narrador y aquí también me resulta un tanto complicado enlazarlo con la ofensa. En definitiva, nos has presentado toda una vida de un inconformista maldiciendo su suerte.
    En cuanto a lo formal lo encuentro correcto. Tal vez no se puede considerar un relato al uso: introducción, nudo y desenlace si no consideramos que la vida es eso.
    Ha sido un placer.

    Escrito el 18 febrero 2019 a las 21:17
  6. 6. Beba dice:

    Hola, Servio:Gracias por tu visita y amable comentario.
    He comprendido la filosofía de tu cuento: la muerte es una enemiga latente desde que nacemos. Con este enfoque no es fácil definir “la ofensa”; tal vez sintiéndose agredido y no reconocido por algo tan natural como morir alguna vez.
    Buena redacción, lenguaje pulcro y buenas imágenes.

    Escrito el 20 febrero 2019 a las 00:19

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