Esta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las << Volver a la lista de textos
Post vida de un Presidente - por Osvaldo M. Vela
El hombre se transformó en nada; un Presidente desaparecía para dar paso a un espíritu lleno de divagares. Su esencia de transición residía en un espacio amplio, que era acopio de almas de otros ayeres. Ánimas en espera de regresar al mundo de los vivos. En aquella estancia su substancia examinaba las vivencias asentadas en su última biografía.
Las docencias, que recibió en su juventud, aparecían como historia cincelada en su naturaleza energética. En su carácter de alma vieja en transición, adquiriría una nueva categoría de conocimiento que le sería útil en la siguiente existencia.
En su aislamiento, revisaba bajo severo escrutinio los sueños que lo llevaron a buscar la Presidencia de la República. Reconocía los docentes que sembraron en él, los deseos del poder. Maestros del extranjero que le hicieron soñar el puesto supremo. El, hasta en el vagar nocturno de su mente, escuchaba voces internas que se repetían sin descanso obligándolo a no cejar en su misión.
El resultado positivo de sus sueños, respaldado por la ayuda bélica que recibía de intereses ajenos, lo hicieron sentirse un iluminado. El monto de la ayuda extranjera le permitió una trayectoria meteórica al poder. Su popularidad por encima de cualquier entendimiento.
Las promesas hechas por quienes apoyaban su movimiento lograron impactar al pueblo. En su involucramiento personal nunca analizó, que sus patrocinadores también dotaban armas y suministro de víveres a grupos opositores. No vio venir el largo periodo de enfrentamientos.
Con saberse Presidente era suficiente.
Se olvidó de las promesas hechas.
Desde el principio, su movimiento puso en evidencia a muchos políticos culpables de la situación de la supuesta inestabilidad que padecía la república. Solo que, como presidente debía armonizar primero el escenario de un buen gobierno.
Después de las confrontaciones militares que le dieron la victoria, se vio en la necesidad de usar a muchos de los mismos personajes que él censurara, pues eran hábiles para gobernar. Él no quería echar por tierra los planes de grandiosidad que heredara de su antecesor. El país continuaría por el mismo derrotero ya trazado y el cual se visualizaba prometedor.
Los militares, adeptos a él, no secundaron sus decisiones como jefe de las fuerzas armadas. La discordia entre militares y el gobierno civil solo dilucidaba una verdad. El jefe máximo traicionaba la sangre derramada por tantos caudillos en los campos de batalla para darle a los señoritos leídos, los puestos por los que ellos habían luchado.
Al Presidente Díaz, se le permitió auto-exiliarse en Francia después de firmar la renuncia. Muchos soldados de la revolución pagaron con su vida la lucha, mientras don Porfirio vivía en el extranjero desde 1910. La equidad social se tornó insuperable. El dictamen de los mandos militares no se hizo esperar: traición a la patria, condena de muerte. La ejecución se cumplió cuando lo llevaban camino al Palacio de Lecumberri (1913).
Allí, en ese ambiente que la falta de vida otorga y tras una auscultación profunda de lo sucedido, caía en cuenta que la pobreza de su país, en noticias periodísticas del mundo y en las promulgaciones de aquellos docentes que lo motivaran a pretender la presidencia, no existía. La miseria era un engaño. Las carencias inexistentes provocaron el gran desastre: la Revolución Mexicana.
No fue justo, para él, estar muerto para conocer la avería de su desempeño.
El país en 1910 gozaba de una sociedad que podía competir en grandeza económica con cualquier nación del mundo. Aunque, como democracia padeciera ausencia de una elección íntegra para respaldarlo. Treinta años de gobierno de un mismo personaje y la recuperación económica fabulosa que competía en igualdad de términos con Los Estados Unidos era motivo de preocupación para ellos. Los vecinos se auto nombraban los “elegidos” del “manifest destiny”. Política expansionista para velar el equilibrio geográfico y económico de la región.
Al momento histórico de su partida, se le conoció como “la decena trágica”. Prolongación de una lucha que con el tiempo Inmoló a una quinta parte de la población. La riqueza de antaño destruida por la confrontación interna: desastre que le llevó a México un siglo en recuperarse.
Hoy, el país ocupa el quinceavo puesto de aceptación mundial en inversión.
La solidez económica vuelve a preocupar a los vecinos del norte. ¿Serán los estadounidenses capaces de iluminar al nuevo gobernante para que cause otro detrimento económico?
Sus labios pregonan una miseria inexistente que corre de boca en boca. Además, persiste una violencia bélica injustificada: escenarios que son los dos lados de una moneda que está en el aire.
Hola caballero Osvaldo Vela.
Ay. Cuanto dolor por Latinoamérica. Y ni te digo si vives como yo en el paìs que sigue tristemente a Venezuela.
Yendo a lo formal, hay varias veces la palabra presidente y el adjetivo posesivo su. Tal vez podrían eliminarse en algunos casos.
Mis saludos.
Hasta la pròxima propuesta.
Hola Osvaldo,
Un texto duro. Me ha dado la ligera impresión de que empezabas con un tema sobre el alma del presidente y su transición (yo entendí que palmó) y acabas disertando sobre la gestión política y económica suya y de los dirigentes anteriores, tratando de retratar la situación actual e insinuando que EEUU podría hacer que la historia se repitiera. Tal vez se “fué de madre”. Me esperaba que siguieras por el tema más esotérico.
Como correcciones, quizás es tu estilo y no quiero decir que no sea correcto, pero abusas de palabras muy rebuscadas. Está bien usarlas, yo lo hago a veces (según el texto), pero si las dosificas creo que tienen más impacto.
Hay por ahí alguna coma, algún acento, alguna construcción sintáctica, que creo que se te han ido escapando. Repasa varias veces el texto y tu mismo las verás. Leelo en voz alta para situar bien las pausas con las comas.
Un placer leerte de nuevo.
Alex
Hola Osvaldo, he leído varias veces tu trabajo y te soy sincera, me ha resultado difícil analizarlo. A lo mejor me falta conocimiento del personaje y los hechos históricos, pero al tratarse de un texto literario pienso que eso no sería problema.
El hombre se transforma en nada, por lo tanto siento cerrarse la historia… Luego suceden
hechos,que llevan a otros muy graves, llegando a una situación insostenible. Terminas en un planteo que no es, a mi modo de ver el final de un cuento.
Perdona si no he comprendido tu verdadera intención, es primera vez que te leo.
Saludos. Tengo el lugar 77.
Laura:
La visita que, mes con mes, haces a mi texto es algo que agradezco infinito. Siempre contribuyendo a la mejora de mis letras.
En este reto, el tema es nuevo para mi: Historia. La vida activa de un Presidente que padecía de visiones de grandeza y escuchaba voces que le comandaban buscar la presidencia.
Este tipo de personajes (iluminados) están expuestos al engaño. Cuando ya el engaño cumplió su cometido simplemente lo asesinaron.
A él, lo convierto en un alma en pena, para darle una oportunidad de darse cuenta que fue usado. Los motivos que lo llevaron a crear una revolución no existieron, pero el los veía.
La Analogía que trato de crear es: engañar a un hombre es mas fácil, que convencerlo que ha sido engañado.
Desgraciadamente, su esencia energética es la única que se da cuenta de ello cuando ya no es. Por eso la expresión: “no fue justo para él, estar muerto para conocer la avería de su desempeño”.
El fue un gran hombre de noble cuna quien se creyó predestinado a hacer historia. El mismo escenario de progreso que existía en su tiempo se presenta hoy en día. Ahora, tememos que la historia se repita.
Trato de manejar el tema con la mayor delicadeza posible. Este hecho dilucida como ciertas las palabras de Don Porfirio Díaz durante su exilio en Francia: “Pobre de mi México tan lejos de Dios pero tan cerca de los Estados Unidos”
Gracias.
Hola Alex:
Agradezco tus palabras y tus aportaciones a mi texto. Voy a tratar de bajarle un poco a un lenguaje muy rebuscado. La usé tratando de evitar malos entendidos en tiempos tan sensibles como los que vivimos.
Si encentro varias excesos y decesos en la puntuación. Ya los corregi Gracias.
Hola Osvaldo, para mi resulta un poco difícil leer el texto si escribes como piensas ,me explico soy español y hay algunas palabras que no entiendo ,es lo mismo que si yo escribiera en Andaluz por eso
creo que deberías escribir lo más claro posible dejando expresiones y palabras que no se utilizan habitualmente en otros lugares ,buen relato o para mi un articulo de lo que pasa en la historia cuando se mete el tío Sam de por medio y la historia se repite ,una y otra vez en America del sur,siria,irak,afganistan…..un saludo
Hola María Esther, agradezco tu comentario que me obliga a releer mi escrito. Ya lo hice.
Creo haber olvidado dos consejos primordiales de la escritura. Aportación que recibí de KMarce el mes pasado. Programa con cuidado tu trama y revíselo hasta el cansancio.
La lectura en voz alta también hubiese ayudado.
Como puedes ver nunca hay que echar en saco roto los consejos de nuestros compañeros.
Gracias.
José Maria. Gracias por pasar a mi relato. El comentario que dejas me abre los ojos a cosas que un escritor no debe olvidar.
El trabajo plasmado no se obliga a tu conocimiento o tus letras sino a un lector que espera un relato llevadero.
La historia de México ha sido parte de mi formación, pero como dices es como escribir andaluz para alguien que vive en México.
Saludos, gracias y Dios primero nos leemos el próximo mes.
Hola Osvaldo:
Cuando te enfrentas a un relato tuyo hay que hacerlo con el doble propósito de desentrañar el significado profundo de lo que lees y el de disfrutar de tu peculiar estilo. Así que hay que tomarse su tiempo.
Nos has deleitado con la azarosa historia del siglo pasado de un país impresionante. Digo deleitando por la manera de narrar no por el fondo de la historia que cuentas.
Tenemos a un pelele, que se siente un iluminado, al servicio de los intereses yanquis. ¡Qué peligrosos son y cuánto daño hacen! Siempre jugando a dos bandas como bien apuntas. Lo malo es que los tenéis al lado. Ahora parece que se abre un periodo ilusionante, creo yo, aunque nunca llueve a gusto de todos.
Me ha gustado el repaso que da a su vida cuando ya es demasiado tarde para rectificar y cómo reconoce “la avería de su desempeño”.
Te comento un par de cosillas para cambiar que he visto:
“. El, hasta en el vagar nocturno…” Falta la tilde en Él como bien está después.
“…país ocupa el quinceavo puesto…” Debe ser ocupa el DECIMOQUINTO puesto.
Decimoquinto es un número ordinal, es decir, de orden. En este caso el puesto 15 de un ranking. Quinceavo es número partitivo (una parte de algo). Si divides una tarta en quince trozos y tomas uno tendrías un quinceavo de tarta.
Bueno, Osvaldo, he disfrutado mucho con el estilo y el lenguaje de tu relato.
Un saludo.
Hola Isan. Agradezco tu visita a mi texto.
La finura o debiera de decir fineza, una por hablar de delicadeza y otra de elegancia, con las que captas mis letras es de agradecerse.
Hoy en día nos agobia una amenaza muy parecida a la de hace un siglo; la diferencia es que el primero era un hombre de noble cuna iluminado por las alabanzas que recibía. El de hoy es un auto-iluminado que lo convierte en un peligro latente a una democracia, con las instituciones del balance de poderes, aún no consolidadas.
Captaste con exactitud lo que quise comunicar: La solidez económica vuelve a preocupar a los vecinos del norte. ¿Serán los estadounidenses capaces de aumentar la auto estima del nuevo gobernante para que cause otro detrimento económico?
cambié un poco el desenlace. “La historia se repite. Hay de nuevo, labios que pregonan una miseria inexistente que corre de boca en boca. Además de una violencia sin par fustigada por armas de contrabando del país vecino: escenarios que son los dos lados de una moneda que está en el aire. Hay poca probabilidad que la suerte termine de canto”.
saludos y un abrazo.
Hola Osvaldo,como profesional de las Ciencias Sociales y amante de las letras tu trabajo me ha gustado muchísimo. No redundaré en las observaciones. El usar algunas cosas que algunas consideran “rebuscadas” creo que nos edifican como escritores y como lectores. Admiro tus escritos, siempre te leo, de hecho te debo el comentario de los dos anteriores. Mi nuevo empleo me agobia, pero eres de los de mi lista. Admiración y aprecio. Te sigo leyendo y me pondré al día.
Hector agradezco tu visita, pero mas que eso, la intención tan profunda que encierran tus palabras. Gracias
Sabes que mi pueblo de origen, tiene una historia que ya no puede cambiar. Su geografía y su historia inmolados por la construcción de la Presa Internacional Falcón.
Acuífero que vino a dar al traste con el arraigo histórico de Villa de Revilla o de la Antigua Ciudad Guerrero. La nueva ciudad Guerrero construida en los inicios de los años cincuenta, no fue capaz de detener el abandono de sus habitantes. un pueblo con quince mi habitantes a principios del siglo pasado hoy solo viven poco mas de tres mil.
Esta historia ha forjado en mi el deseo de devolverle al pueblo y a la región el lustre de antaño. pero que corta es la vida y que largo es el camino por andar. Espero un día lograrlo.
Tus palabras alimentan mi sueño o debiera decir son el postre de mis añoranzas. Gracias de nuevo.
Un abrazo y saludos.
Hola Osvaldo!
Un texto muy interesante sin duda. Me siento intimidad por tantas palabras complejas, pero a la vez, el texto me atrapó y no me dejo ir.
Poco se sobre la historia de Mexico, y es sumamente interesante leer al respecto. EEUU interviniendo creo que se repite más de una vez en toda la historia y en varios países (Lamentablemente).
El estilo de tu escritura es envidiable y el personaje del presidente me pareció muy bien “retratado”, me gustaría leer más sobre él.
Un gran saludo y nos leemos!!
Osvaldo, eres un pedazo de escritor, para quitarse el sombrero. Eso lo primero.
El experimento de historia te ha salido genial. Vaya tela.
Tu nivel de abstracción es tan elevado que no llego a entender ciertas expresiones. Pero esto creo que es problema mío. No suelo leer historia, luego te entiendo hasta cierto punto.
Lo que sí he captado es el amor a tu tierra de origen, y la delicadeza y respeto con que la tratas.
Te felicito. Muchos granos de arena forman una playa extensa y bella. Puedes conseguirlo.
Gracias también por leer mi humilde relato y comentarlo.
Felicidades!
Hola Carla Daniela.
Me da gusto ver qué la reciprocidad dentro del taller es cada día más notable.
Cuando alguien deja un comentario sea cual fuese, hay que procurar buscar en el listado de recopilación a quien lo hizo. Respuestas de este tipo, permiten con el tiempo, un acercamiento entre compañeros Literautas.
Se aprende mucho más de lo que comunican los comentarios ajenos a un texto, que los que se reciben en el propio.
Entre más inentendible parezca un escrito hay que procurar dar una opinión y desmenuzar las aportaciones de otros Literautas.
Gracias por tu granito de arena en la playa literaria del taller. Todos contamos.
Un abrazo y saludos.
!Ay Lunaclara!
Que vibras tan portentosas, comunican tus palabras. De pronto me sentí pavo real.
Dicen que las alabanzas son la mejor medicina para el alma, las tuyas me hacen tan bien que las veo como la cereza de un pastel de letras.
Gracias me siento agraciado y bendecido por la vida que viene de arriba.
Un fuerte abrazo y saludos.
Hola Osvaldo,
Gracias por pasarte por mi relato.
El tuyo me ha parecido un texto muy intenso, denso, cargado de emoción, rebosante de sentimientos, repleto de penas con arrepentimientos y desesperos finalmente conformados… En conjunto hace que sea un relato muy profundo. Por ese motivo es totalmente normal que tu español regional impere sobre el que se suponga castellano puro y duro; para conseguir esa profundidad debe ser necesario sumergirse y escarbar en lo mas profundo de uno mismo, como parece que has hecho, Osvaldo, y el resultado es un estilo con caracter y lleno de esclusividad.
Me gustó mucho ese estilo y su manera de convinarse con tus conocimientos y sobrado vocabulario. Así, aunque el tema sea un poco duro, es fácil sumergirse dónde sea.
Nos leemos, yo por lo menos sí tengo ganas y curiosidad de volver.
Un saludo.
Hola Osvaldo:
Gracias por el comentario que hiciste a mi cuento. He leído la historia del taller #39 que me indicaste. ¿Quién pudiera caminar durante horas por la costa de ese río disfrutando de la naturaleza y tener la bendición de ver jugar a unas crías de zorro? Muy linda experiencia y contada con sentimiento.
También he leído tu actual relato de no ficción, cuyo género creo ubicar entre la biografía y la crónica periodística. En definitiva, es una narración histórica que toma cierto contexto político-ideológico como punto de partida.
En la literatura política no se debe caer en el mensaje panfletario, siempre debe prevalecer lo artístico, y eso lo logras con creces.
Para mí, que no conozco la historia de Méjico, se volvió confuso. Al comienzo de la lectura pensé que te estabas refiriendo a Porfirio Díaz, que después de treinta años de presidente se transformó en nada.
El tercer párrafo comienza: “En su aislamiento, revisaba…”. Pensé que el aislamiento era por su exilio en Francia. Recién en el séptimo párrafo me doy cuenta de que el personaje no nombrado es Madero porque fue ejecutado en el año 1.913, pero más adelante, en el noveno, se vuelve a 1.910 y al gobierno de Porfirio. Eso me vuelve a confundir, pero enseguida dice: “Al momento histórico de su partida, se le conoció como la decena trágica”. Ahí ya no me cabía duda que se trataba de Madero. Era él quien se había transformado en nada…
El hecho de no nombrar al personaje, más mi desconocimiento de la historia me confundió bastante.
Una observación:
“En aquella estancia su substancia examinaba…” Estancia y substancia riman.
Por lo demás, ya está todo dicho por quienes me precedieron.
Un abrazo, nos seguiremos leyendo
Hugo
Hola Pepe.
Agradezco tu visita y soy recíproco al último comentario que plasmas yo también tengo ganas y curiosidad de volvernos a leer.
Para mi escribir sobre un tema, nuevo para mi, acerca de la historia de mi país ha sido revelador. Muchas veces el conocimiento de tu escritura no es garantía de quien lo lea sea conocedor de ella.
Estoy escribiendo una corrección aumentada de la misma historia para ir llenando los huecos de datos necesarios que hagan la lectura mas ligera.
Te agradezco y nos leemos.
Un abrazo y un saludo.
Hola Hugo.
Agradezco de sobremanera los comentarios que dejas en mi relato del mes de marzo.
En verdad creo que he sido bendecido por dios al concederme una vida con tantos matices.
Mi primer trabajo de taller se dio a mis sesenta y tres años. nunca antes había escrito historias. Debo de agregar que aunque no estaban plasmadas en papel. las historias estaban en mi.
Estos últimos ocho años han sido una revelación. Una vida llena de afanares es la base de mis escritos.
Mi convivencia con la naturaleza se dio en los años de la niñez. es increíble que esos años son los que han permanecido mas claros en mi conciencia.
Gracias de nuevo. Tu aportación me ha hecho deambular por los muchos ratos buenos que las letras regalan.
Un Abrazo y saludos desde México.
Hola
Gracias por pasarte por mi relato
Más que un cuento, lo que has escrito es una crónica periodística, una especie de alegato o un manifiesto político. No se trata de un cuento al uso, por lo que encima transpira un cierto aire de amargura. Por desgracia, desconozco gran parte de la Historia de México, por lo que he tenido que echar un vistazo en la wikipedia.
Yo creo que, con un cuento, con un relato, se trata de entretener al personal, contar una historia que divierta de alguna manera a los lectores. Pero supongo que es muy lícito intentar hacerles pensar sobre algo más profundo, de vez en cuando.
Viene al caso, también, de lo que se está viviendo ahora en Venezuela, supongo.
Un saludo
Gracias José Luis.
Un amigo a quien se lo mandé me dió la misma opinión: que no era un cuento.
Yo le expliqué que para mí fue un nuevo reto de escritura. Poder contar una vida como si fuera un relato de expiación por los errores cometidos en su gesta.
Y que al darle voz al narrador, este pudiera conectar la historia con los sucesos actuales.
Todavía me falta acomodar los acontecimientos, pero con la ayuda de los compañeros Literautas, creo que el contar de una alma en transición pueda comunicar mi objetivo.
Ya veré que resulta.
Gracias de nuevo,
Saludos y un abrazo.
Hola Osvaldo, me parece un gran trabajo para ofrecer en el taller. Muy cuidado y adecuado al enunciado que nos trae aquí y que a veces olvidamos : Móntame una escena.
Está presente no solo la biografía del personaje, sino la crónica, pero además, y aquí está el mérito muy valorable de arroparlo con un manto de ficción, sin disimulos y muy bien logrado. Me parece un acierto la elección de la voz narrativa omnisciente total, que permite presentarlo como un género didáctico que resume y trasciende a los anteriores.
Buen trabajo. Gracias por compartirlo
Hola, Osvaldo: Sorprende la valoración del personaje: nada; un indigno trepador, ansioso de triunfos políticos.Coincido con quien opinó que tu relato es más bien un texto periodístico, un alegato. Tal vez la historia sea muy cercana y te enciende con párrafos muy largos y detallistas.Tu lenguaje, como siempre, es muy rico y pulcro.
Gracias por tu visita y amable comentario.
Me perdí a la mitad del relato, podía haber seguido con las disertaciones del, en este caso, aun presidente, porque a pesar del golpe de estado, lo seguía siendo. Encauzar un poco más hacia sus motivaciones, tal vez justificar un poco su traición a los que en verdad expulsaron a Diaz del país.
Al final no entendí si fue Madero quien se creyó una marioneta del imperio {o imperios} o si es tu apreciación de que no existía la miseria en México, porque aun cuando Fco fue un señorito, conoció de cerca las motivaciones de los rebeldes, dudo mucho que al final haya pensado que fue solo una maniobra política para expulsar a Porfirio.
Hola Luigi Callieri.
Gracias por tu visita y por la aportación que haces a mi texto. Para mi el poder contar una historia que no viene de un libros
de texto escolar sino del propagar, de boca en boca, una historia diferente a la escrita. y tal como lo mencionas, yo estoy montando una escena con datos recibidos en mi juventud-madurez al ser portador del interés en la compra de un rancho en Tierras del estado de Coahuila.
Región en la cual residía la familia Madero. terratenientes y empresarios de mucha valía a principios del siglo pasado.
Ojala y yo pueda, con la ayuda de los compañeros literautas, redondear el relato para darle validez a una historia diferente pero que merezca ser conocida.
Agradecido y un abrazo.
Hola Beba.
Gracias por pasar por mi texto y aportar.
Aciertas con el hecho de que es una historia muy cercana. La familia Madero poseía grandes extensiones de tierra en el Estado de Coahuila, cuna de Francisco. Mi padre, en 1973, adquirió en propiedad un rancho que la madero vendió en 19l0. A mi me tocó el ser portador del interés en comprarlo. Un norteamericano ya muy mayor me mostró la propiedad. De él recibí el relato que ahora cuento.
Quizá un día pueda yo compactar un ensayo mas extenso para dar a conocer el comunicar de un hombre que llegó a las tierras de Coahuila siendo un niño. Louis tenia muchas cosas que contar.
agradecido y admirado de tu percepción de las letras.
Un abrazo y saludos.
Hola Rafa Frisby.
Gracias por visitar mi texto. Tus apreciaciones son correctas; es muy aventurado aseverar que la llegada de Madero se haya debido a querer exiliar a Porfirio Díaz.
Don Porfirio llegó a la presidencia dos décadas después de una invasión norteamericana que le costó a México mas de la mitad de su territorio. La gesta bélica, terminó con el tratado de Guadalupe y el adueñamiento de ese territorio aparecía como la “Cesión Mexicana”.
Díaz, tomó un país en ruinas y a la vuelta de treinta años de gobierno (dictadura) logro emparejar el valor del peso con el dolar. ademas de tener grandes inversiones ferroviarias en Texas. los norteamericanos no tenían dudas de su capacidad.
En este territorio con el Español como lenguaje predominante. La precaución les decía que otra invasión se vería mal a los ojos del mundo, tomaron una ruta diferente: promover una revolución. Las armas que se usaron en la revolución eran de procedencia norteamericana y las tenían a manos llenas los bandos opositores.
De una población de quince millones en 1910 para 1923 cuando se dio el final de la confrontación, solo quedaron doce millones. Ademas de un país agobiado con un nuevo tratado que tuvo que firmar:”Tratado de Bucarelli”. Según la historia nunca existió. Pero nos ha mantenido atados al mercado norteamericano por cien años: dicho pacto fenece en el 2023. Por eso la violencia tan fuera de entendimiento. Una nueva invasión de armas, del mismo lugar, propiciadas por el proyecto (secreto) “rápido y furioso” en 2009 esta dando al traste con la estructura solida de hoy día.
Espero dejar claro y no haberte aburrido, al tratar de aclarar tus apreciaciones.
Gracias.
Abrazos y un saludo.
Hola amigo (permíteme que te llame así) Osvaldo:
Gracias por haberte pasado por mi relato y dejar, como siempre, tu amable comentario.
Para mí, amante de la Historia, tu relato me ha parecido excelso y tu particular estilo literario excelente.
Pués si, donde los americanos meten la mano, la cosa se tuerce y no hay manera de enderezarla. Veamos si no: Corea; Irak; República Dominicana; Cuba; Chile; Brasil; Venezuela, etc.
Felicidades.
Bueno Osvaldo, lo primero gracias por enseñarme parte de la historia de tu país. Como solo tengo unas breves pinceladas de conocimiento del Porfirio Díaz, me he informado un poco más, y mira, eso que me llevo 😉
Supongo un gran trabajo de trastienda, no solo de conocimiento, sino de archivo.
Escrito desde la corrección, me refiero al modo, la ortografía y los aspectos formales, aunque me suena extraño los plurales, creo que no aceptado por la RAE “Divagares” y “ayeres”, aunque ya me dirás, Osvaldo, si es debido al habla español-latino.
Pues nada más compañero, le deseo a tu país la mejor de las suertes, aunque teniendo de vecino al todo poderoso país intervencionista belicista, radical con la política migratoria de Trump… lo tenéis difícil.
Un cordial saludo desde Canarias a los amigos mexicanos, y uno especial para ti.
Hola Osvaldo, amigo:
Muchos relatos cortos hemos leído de ti a lo largo de todos estos años por literaturas. Los temas han sido variados, pero hay una tónica general y es el compromiso que tienes con tu país: implicado en la conservación de la naturaleza, en las tradiciones, en la familia, incluso te has aventurado en los relatos de humor… Ahora, en “post vida de un Presidente” nos presentas al personaje “iluminado”, como tú lo defines. ¡Qué Dios nos libre de los que se creen elegidos!, de los que se aferran al cargo, de lo iluminados, al fin y al cabo no son más que ególatras y soberbios. Una especie muy peligrosa, Osvaldo, y te puedo asegurar que me vienen a la memoria unos cuantos.
Tu estilo es, como siempre, culto. Escribes bien y te expresas con una gran riqueza de vocablos. La diferencia entre el castellano de México y el nuestro, el europeo, es evidente. Simplemente es maravilloso comprobar que hablamos la misma lengua con estilo, acento y vocablos diferentes.Es de lo más enriquecedor.
Saludos, Osvaldo, deseo siempre lo mejor para tu “lindo” país.
Amigo Vespasiano.
Que me llames amigo, para mí, sería una gran distinción. Petición a la cual yo soy recíproco, al referirme a ti, con el mismo título.
Nuestro mutuo gusto por vivencias e Historia nos ha unido en este taller tan adecuado a dicho comunicar. Gracias.
Se dice que como muestra basta un botón, Al documentar la redacción del mes, incursioné en una parte de mi propia vida. Durante nueve años yo fui estudiante de Secundaria, Preparatoria y Universidad en el Estado de Texas. Me tocó recibir el amable trato de la gente con la que tuve contacto. Mi trabajo de este mes va enfocado a la política exterior del Gobierno Federal de la región vecina. El ejemplo a continuación muestra la inconsciencia de su trato.
Un día, mientras cursaba la materia de Ciencias Políticas, el maestro me preguntó algo sobre mi país. Su cuestionamiento-curiosidad era el porqué de las carencias en México, siendo una región tan rica en recursos naturales.
Como respuesta yo tomé de mi cartera un billete veinte pesos (un dólar con sesenta centavos) y lo puse sobre su escritorio. Le pedí que si traía algún billete de a dólar lo pusiera al parejo del mío. Cosa que, lleno de curiosidad, así lo hizo.
Yo Acomodé ambos billetes y apunté justo al centro en la parte de abajo del papel moneda de su propiedad y le insté a leer la frase: él claramente dijo: “In God We Trust” (en Dios confiamos). Igualmente, y apuntando al mismo lugar del billete de mi propiedad le pregunté lo que decía. Leyó de nuevo “American Bank Note Company” (billete impreso por el Banco Americano).
Mi comentario entonces fue: “para ustedes, su moneda recibe un endoso directo de Dios y a la nuestra del Banco Americano. Bendiciones muy lejanas una de otra”.
Su comentario fue, “de las muchas veces que he hecho la misma pregunta, esta ha sido la mejor respuesta. Creo que no necesita más explicación”.
Gracias por tu visita, petición y comentario.
Un abrazo y saludos.
Hola Isabel y gracias por tu visita a mi texto.
Te agradezco el haber planteado una “incógnita desconocida para mi”(pleonasmo fino). No sabia la no aceptación de la RAE en este tipo de expresión, pero si me puso a pensar.
El verbo es la acción de: contar, divagar, gritar, etc. Y el acto de cumplirla es el nombre. Cuando se antecede “el” a la acción: el contar, el divagar. el gritar; la acción se convierte en nombre y como nombre admite el plural.
Los Gritares de la multitud, los divagares de su mente, los contares en el pueblo decían; se vuelven frases entendibles del acto que se lleva a cabo. Por eso nunca analicé a profundidad su uso. Ademas con el tiempo este quebrantamiento del lenguaje ha dado paso a un estilo diferente que me atrae. Espero de todo corazón que un día se estudie a fondo como estilo regional.
Los deseares de mejores tiempos para mi país yo lo pido en mis oraciones. Dios nos escucha.
Saludos y un fuerte abrazo, desde un rinconcito lleno de sueños y de Historia.
Entendibles claro que sí, Osvaldo, desde el primer momento. Aunque yo lo diría así: Gritos por gritare; divagaciones por divagares. Pero no me hagas mucho caso compañero, una cosa es como yo la haría, y otra la correcta, que la verdad, no estoy segura de como se hace.
Es bueno esto de debatir sobre las cosas de la lengua 😉
Hola Marazul por la repasada que le das a mi participación en el taller. Me recordaste todas las buenas vibras y las correcciones que he recibido de mis compañeros literautas. recuerdo que en la primera media docena de escenas las aportaciones se limitaban a los tres comentarios obligatorios y dos o tres en la pagina de recopilación.
Siento un agradecimiento especial por varios compañeros, incluida tu, porque nos hemos mantenido fieles a una reciprocidad que nos llena de recuerdos de todo tipo.
Agradecido y listo a continuar en la brega en meses venideros.
Saludos y un abrazo.
Osvaldo, entiendo que este relato nada tiene que ver con la fantasía sino que es Historia de un pueblo. Pobres Pueblos que deben soportar a tiranos o títeres que solo trabajan para sí cuando no son sicarios de intereses ajenos. En todo caso, suele ser la misma empresa la que recibe las gabelas en detrimento del resto. Y si los desfavorecidos se rebelan, el castigo infligido es mucho mayor y desproporcionado. salu2
Amilcar, Un millón de gracias por tu comentario.
Aunque parezca una cantidad exagerada, a nuestra edad nos esta permitido ese despilfarro. Me di una vuelta por tu blog para ver si habías recibido el comentario que me permití escribir el mes pasado.
Lo primero que me encuentro es un audio de la interpretación de Pedro Infante con el corrido de “la calandria y el gorrioncillo”
Que tiempos aquellos. Yo tenia nueve a;os cuando recibimos la noticia de su fallecimiento. Se ha repetido esta medida del tiempo por mas de sesenta veces y en mis oídos todavía suena el timbre de su voz y su canciones.
Escogiste una interpretación de las mas queridas por mi.
Agradezco tu visita a mi texto.
El terruño duele, pero mas duele el no poder detener lo que se ve venir.
Un abrazo.