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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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PÉTALOS NEGROS - por MOT

―Buenos días madre Sullivan.
―Buenos días sheriff Duncan, qué sorpresa tan agradable. Pero no se quede ahí en el portal, pase. En la casa del Señor, todos son bienvenidos.
El joven agente se quitó el sombrero, sonrió y siguió a la anciana religiosa hacia un pequeño y mugriento salón, donde le señaló el sofá. Ella se sentó en un sillón que parecía gastado por el paso de los siglos.
―Me estaba preparando una suculenta sopa de tiburón, ya sabe, esa tan buena de la marca Smith. Es mi preferida. ¿Quiere usted un plato, agente Duncan?
A punto estuvo de decirle que sí; de la cocina salía un apetitoso y más que apetecible aroma a sopa de pescado.
―Gracias madre Sullivan, pero estoy de servicio. En realidad he venido a hacerle unas pocas preguntas relacionadas con esos asesinatos que están azotando nuestra comunidad últimamente.
―Una verdadera desgracia, sí… Con el último ya van cuatro, parece ser que el Mal ha despertado entre nosotros.¡Dios nos asista! Pero no veo en qué podría yo ayudarle. Solo soy una anciana y humilde sirvienta de Dios que ayuda a pobres y a desahuciados.
―Según tengo entendido, madre Sullivan, a usted le gusta estudiar las religiones del mundo, sabe y conoce de ellas más que nadie, casi se podría decir que es usted una experta en dicho campo, ¿cierto?
―Dios es mi camino, la Religión es mi destino… Esa es mi máxima. Sí, cierto, desde pequeña siempre me ha atraído, pero sigo sin ver qué clase de ayuda puedo ofrecerle.
―Se trata de unos detalles que todavía no se han hecho públicos, y por ello es imprescindible que se comprometa a guardar silencio sobre ellos, al menos por el momento. Le ruego entienda la importancia de tal compromiso.
La madre Sullivan lo miró a los ojos y asió sus manos. Asintió en silencio.
―Continúe por favor, señor Duncan. Tiene mi palabra.
―Por un lado, bajo los párpados de todas las víctimas se han encontrado pétalos de margarita negra, una rara especie muy apreciada entre los botánicos; en el mundo deben de quedar unos pocos miles, la mayoría en casas de millonarios excéntricos.
El hombre parecía dudar, callado, unos segundos, pero continuó.
―Por otra parte, todas ellas han sido estranguladas.
La madre superiora escuchaba con atención pero relajada. A ver dónde llegaría el amable policía, a ver en qué podría quizás, al fin, ayudarle.
El joven decidió ir al grano.
―Creemos que puede tratarse de una especie de ritual. Quizás sea alguna ceremonia religiosa, algún rito de iniciación para entrar en una hermandad o en una secta. Incluso es muy probable que la persona responsable esté relacionada con el mundo de la religión.
Y paró para mirarla a los ojos y preguntarle:
―¿Cree que puede ayudarme?
La mujer, pensativa, juntó sus manos como si fuera a rezar y se besó los índices.
―Agente Duncan, durante mi larga vida dedicada a la obra y servicio de Dios Nuestro Señor, cierto es que he estudiado cientos de rituales y ceremonias, pero no recuerdo nada acerca de estrangulamientos relacionados con tan extrañas plantas, cuya existencia, dicho sea de paso, desconocía hasta este momento. Lo siento, pero me temo que no puedo ayudarle.
El educado policía le agradeció el tiempo dedicado y le tendió la mano. Recibió por respuesta un apretón cuya fuerza y firmeza no esperaba. Salió y la puerta se cerró tras él.
Satisfecha, en paz consigo misma, la mujer se dirigió a la cocina, donde dio buena cuenta de la sopa. Después, regadera en mano, se dirigió a su lugar preferido, el pequeño rincón de su habitación, su altar; era el sitio que recibía más luz del sol durante el día y era perfecto. Absorta, ensimismada, empezó a regar una floreada planta, una vigorosa margarita negra.
A una de sus flores le faltaban ocho pétalos.

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11 comentarios

  1. 1. IreneR dice:

    Buenas, MOT.

    Me ha gustado bastante tu relato. En cuanto has escrito lo del fuerte apretón de manos me he imaginado que la religiosa escondía algo, pero aun así, aunque el final no me ha sorprendido, me ha gustado.

    Creo que lo has sabido llevar bien, pero me parece que hay algunas palabras que sobran, o que no deberían ser dichas por el narrador, esa máxima de los escritores de no digas, muestra.
    Por ejemplo:
    -“El educado policía le agradeció el tiempo dedicado y le tendió la mano.”. Si quieres recalcar que el policía era educado, haz que hable con extremada educación, aunque personalmente, creo que ya lo dejas bien mostrado en la conversación. Pero quizá, en lugar de que le pregunte a la religiosa “¿Cree que puede ayudarme?”, que le diga “¿Cree que podría ayudarme?”. No sé, a mí el podría me suena incluso más educado.

    Algunas veces pones bien los vocativos, pero no siempre.

    Esta frase me suena muy rara: “El hombre parecía dudar, callado, unos segundos, pero continuó.” ¿Parecía dudar, callado, unos segundos?”. Entiendo lo que quieres decir, pero no está bien expresado.

    Hay un monólogo del policía, interrumpido por el narrador para explicar algunas cosas, que no sabría decir si está bien escrito. Va desde “―Por un lado, bajo los párpados…” hasta “¿Cree que puede ayudarme?”. Ahí se van intercalando narrador con policía, pero no interviene ningún otro personaje. No estoy segura, pero creo que eso tendría que ir todo junto, pues lo que el narrador explica son las reacciones del policía ante su propio monólogo.

    Espero que no te tomes a mal mis comentarios. Son solo mi opinión, e igual pueden estar equivocados o que tú lo veas de otra manera.

    Nos leemos.

    Un saludo.

    Escrito el 17 abril 2019 a las 20:04
  2. 2. María Jesús dice:

    Hola MOT: Interesante relato el que propones, con un ritmo muy pausado y comedido. Vaya con la monjita, cualquiera se fía de quienes llevan hábito. Me ha gustado mucho como lo has escrito aunque he echado en falta saber que motivos han empujado a la religiosa para asesinar personas y por qué los pétalos aparecían bajo los párpados de las víctimas.
    Feliz Semana Santa.

    Escrito el 18 abril 2019 a las 12:06
  3. 3. MOT dice:

    Hola Irene.
    Muchas gracias por tu lectura y tus posteriores comentarios. ¿Tomármelos a mal? ¡Jamás! Llevo ya por aquí más de cuatro años y nunca he dejado de agradecer todos vuestros comentarios; es gracias a ellos que, poco a poco y humildemente, voy aprendiendo y mejorando.
    Tienes mucha razón en lo del “mostrar, no decir”, de echo intento convertirla en una de mis máximas. Tomo muy buena nota.
    En cuanto a la frase…en fin, ahí el tema es más sencillo; es la que quería poner, tal cual está, precisamente ahí, en el límite de lo correcto y lo incorrecto.
    El apartado del monólogo, como tú dices, quizás quedaría mejor todo junto…no sé…voy a retocarlo a ver qué tal…
    Nuevamente gracias, ha sido un placer recibir tus sinceras opiniones. Recibe un cordial saludo.

    Escrito el 18 abril 2019 a las 17:08
  4. 4. MOT dice:

    Hola María Jesús.
    Muchas muchas gracias por pasarte, nuevamente, por mi relato.
    Me alegro que te haya gustado, y tus comentarios son, precisamente, los que esperaba que me llegaran. Me explico.
    Se trata de una escena que quizás en el futuro forme parte de algo más extenso, pero una sola escena al fin y al cabo. Efectivamente está al aire más desarrollo de la historia, más profundidad en los personajes; no se dice nada acerca del motivo de la anciana religiosa, no se da pista alguna respecto al porqué de los pétalos… No hay información, y sin embargo me convenció como escena. Se puede pensar que no está acabada, y no sería erróneo, pero en el más amplio de los sentidos, sí está acabada.
    Uno de mis objetivos era provocar en el lector esas preguntas que te han surgido a ti, así que, al menos contigo, María Jesús, puedo decir… ¡Misión cumplida! Je je je…

    Escrito el 18 abril 2019 a las 17:26
  5. 5. M.L.Plaza dice:

    Hola MOT.
    Gracias por pasarte por mi texto.
    El tuyo me ha gustado mucho,es muy dinámico y se lee estupendamente. Consigues despistar al lector. Al principio parece una historia de monja detective y ,mira tú a la buena mujer convertida en asesina en serie. Personalmente quitaría lo del apretón de manos porque predispone al lector.”La madre Sullivan lo miró a los ojos y asió sus manos”, ahí el agente debería haber notado la fuerza de la monja.
    He visto algunas cosillas que te quería comentar:
    -mugriento salón, no parece que la monja viva entre suciedad. Anticuado, ajado (algo relacionado con el paso del tiempo)me parece más apropiado.
    -apetitoso y apetecible tan juntos resultan demasiado parecidos y difíciles de pronunciar.
    -ayudarle y ayuda están muy cerca.
    -más abajo repites usted.
    -ello y ellos están en el mismo párrafo.
    -donde llegaba. Quizás y al fin juntas suenan raras. Quitaría quizás porque lo repites un poco después.
    -ritual y rito están demasiado juntas.
    Pese a esas cosas el relato es magnífico. Desde luego que da para una historia más larga, que me encantaría leer.
    Saludos

    Escrito el 19 abril 2019 a las 21:39
  6. 6. Sirga dice:

    Hola MOT. Me ha gustado mucho tu relato. Es una buena historia que puedes desarrollar y convertir, quizás, en cuento o novela.
    Felicidades. Nos leemos

    Escrito el 20 abril 2019 a las 12:15
  7. 7. Eric Milne dice:

    Hola MOT!
    Me gusta la construcción de la historia, la ambientación, el misterio…

    El único detalle que le cambiaría es lo del apretón de manos. Y quizá hacerla un poco menos sospechosa para el lector, para que el giro final sea más impactante. Quizá ella sí comenta algunos casos parecidos de rituales con flores, pero no conoce ninguno con flores negras. Así demuestra que está dispuesta a ayudar y el policía tiene menos razones para sospechar.

    Estoy de acuerdo con Maria Jesús, pero creo que en 750 palabras no habría espacio para narrar los motivos de los asesinatos. Eso puede ser la base de otro relato.

    Gracias por pasarte por mi relato!
    Saludos!

    Escrito el 20 abril 2019 a las 18:16
  8. 8. MOT dice:

    Hola compañeros. Muchas gracias a los tres por dedicarme parte de vuestro tiempo, lo valoro mucho.
    Eric, M. L., tenéis razón. Pero no tuve tiempo de releerlo varias veces porque eran las 23:30 cuando lo presenté. Demasiado al límite… Espero que no me pase en el próximo MUE
    Gracias de nuevo y saludos…

    Escrito el 21 abril 2019 a las 19:47
  9. 9. kirjanik Maya dice:

    Hola, MOT.

    M. L. Plaza y Eric Milne, ya te dijeron lo del apretón, fue lo primero que note.

    En este párrafo:

    ―Una verdadera desgracia, sí… Con el último ya van cuatro, parece ser que el Mal ha despertado entre nosotros. “mal” iniciando en minúsculas.
    Y una duda, en los siguientes diálogos el sherif indica que son 8 víctimas, pero aquí la moja dice: “con el ultimo ya van cuatro” ¿es un lapsus del autor o parte del argumento central?

    La frase de cierre.
    “A una de sus flores le faltaban ocho pétalos” No tengo la mas mínima idea, de flores ni de jardines; así que el siguiente comentario, haz de cuenta lo que lo dijo un borracho.

    No se si a las margaritas se les caen o no, con frecuencia los pétalos, se que ya hiciste mención de ocho víctimas, pero creo que esa frase no la extrañaría el lector si la mandas a vacaciones indefinidas, es más en mi absoluta ignorancia del tema, creo que el solo hecho que la monjita vaya a regar unas flores que dijo desconocer en absoluto, es por mas SUPER INTRIGANTE (disculpa el grito con las mayusculas) a veces me emociono y como ya dije, son palabras de un alcoholico, “metáforicamente hablando”.

    Salvo esa pequeñeces, haz desarrollado un relato que da para mucho y con intensidad.

    Saludos.

    Escrito el 27 abril 2019 a las 00:24
  10. 10. Laura dice:

    Hola MOT.
    Me ha encantado tu relato, ya se veía venir lo de la monja, pero da para seguirla.
    ¿Habrá continuación?
    Me pareció muy bueno el inicio, directamente con las presentaciones.

    Mis saludos.
    Hasta la próxima propuesta.

    Escrito el 28 abril 2019 a las 11:43
  11. 11. MOT dice:

    Hola kirjanik Maya, hola Laura…
    Muchas gracias por vuestros sinceros y constructivos comentarios. Ando fatal de tiempo (temas médicos), pero intentaré pasarme por vuestras historias…
    Saludos y gracias nuevamente…MOT

    Escrito el 1 mayo 2019 a las 16:59

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