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Ofender - por Vespasiano
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Ofender
Sus gestos amanerados; su voluminosa barriga y su cuello extremadamente largo propiciaban las burlas de sus compañeros que le humillaban, llamándolo “dinosaurio maricón”.
El hueco abierto, profundo y negro, de un ascensor se le apareció entre sueños. Voces de ultratumba le instaban a que se arrojara por él.
Despertó sobresaltado en aquella cama del hospital. En la penumbra de la habitación veía brillar, horrorizado, el filo ensangrentado de una daga.
Una tras otra iban llegando a su memoria escenas cotidianas de acoso en el Instituto.
Entonces percibió que tenía las muñecas vendadas. En su cabeza ya todo cobraba sentido.
Hola Vespaciano.
Otra obra tuya que merece una inclinación de cabeza como reconocimiento.
El efecto mas apabullante del bulling dentro de la formación escolar que, al pasar del tiempo, se torna inaguantable para una mente duramente castigada. Excelso.
Admiro tu habilidad para marcar dolencias de vida que merecen nuestra atención.
Recibe un abrazo grande de mi parte
Buenas, Vespasiano.
La frase de “escenas cotidianas de acoso” me ha podido. Nadie debería sentir los insultos, humillaciones o golpes como algo cotidiano.
Una pena.
No he llegado a entender lo del filo ensangrentado de la daga.
Un saludo.
Buenos días Vespasiano: un microrrelato muy crudo que muestra una realidad que nos persigue, que la hablamos, que la tratan los especialistas pero que desgraciadamente está ahí, mostrándose impúdicamente y sometiéndonos.La última oración nos compromete a interpretar el suceso junto al protagonista.
Saludos.
Galia
Cordial saludo Vespaciano.
La brevedad no es obstáculo para ambientarnos en el estado psicológico y el escenario en resolución. Bien logrado.
Hola, Vespasiano. ¡Muy bueno tu relato!
Voy a irme a la forma:
-Las comillas, de preferencia , debes usar las angulares o latinas.
-instituto con la letra inicial con minúscula.
¡Felicitaciones!
Qué gusto estar, otra vez, en Literautas.
Hola Vespasiano, buen relato donde en pocas palabras, narras el triste caso del acoso.El reto tambien conseguido y la ortografia como gramatica ya deberias de saber que las dejo para otros compañeros mas puestos en ello.Un saludo y espero seguir leyendote mi relato es el 148
Hola, Vespasiano:
Me ha gustado tu trabajo. Estoy de acuerdo con lo que dicen los compañeros. Has transmitido una idea compleja y terrible con muy pocas palabras. Bravo.
¡Saludos!
Mario (153)
Hola, Vespasiano:
No te voy a decir nada nuevo que los otros compañeros no te hayan dicho ya, pero tengo que expresarte mi admiración. Has logrado transmitir ese sufrimiento e injusticia con tan solo cien palabras. Increíble. Tu relato es prueba de que cien palabras breves y sin necesidad de descripciones detalladas son más que suficientes para hacer sentir.
Sobre todo me gustan las últimas frases, esas que nos dejan interpretar junto al personaje lo sucedido.
Voy a tener que esforzarme más si algún día quiero alcanzar tu nivel y el de otros compañeros a la hora de realizar microrelatos 🙂
Un saludo,
Elena S.H.
¡Hola, Vespasiano!
No puedo decirte nada en lo formal que no te hayan dicho ya.
Consigues transmitir de forma sublime lo que pretendes en muy poco espacio, para lo cual, como ya te han dicho, hay que tener un nivel…
¡Ha sido un disfrute leerte! ¡Saludos!
Hola, Vespasiano
Solo me queda decir que vuelves una situación desafortunadamente cotidiana en un muy buen micro que transmite y llama a la reflexión.
Saludos!
Saludos Vespasiano
Has logrado plasmar la realidad de muchas personas que sufren por el acoso en solo cien palabras. Breve pero efectivo. Al leerlo, uno siente el coraje al reconocer que cosas así todavía suceden en el mundo.
Mis felicitaciones por este tremendo micro relato.
Hola Vespasiano.
Una cruda historia, y muy bien lograda! En pocas palabras supiste transmitir la angustia del Bullyng. Y usaste las palabras del reto y todo! Muy buen trabajo.
Un gran saludo y nos leemos (N°100)
Hola Vespasiano
Qué gusto leer tu micro! Aprovechas con excelencia el escaso espacio del micro relato para mostrar un tema preocupante.
Aplausos!
Agradecimientos:
Para Osvaldo Vela por leerme y comentar mi historia cuyos elogios por supuesto agradezco; aunque modestamente me parecen excesivos. No obstante continuaré escribiendo en esa línea de remarcar, como bien dices, dolencias e injusticias de vida.
Para IreneR por haberle llegado a su conciencia la crueldad de las “escenas cotidianas de acoso”.
Para no influenciar en los próximos lectores que pasen a visitarme, más adelante me dirigiré de nuevo a ti, para disipar la duda que me planteas.
Para Galia por encontrar el relato crudo y real y por interpretar que esos lamentables hechos merecerían un programa exhaustivo de educación y control del acoso dentro de los colegios e institutos.
Para Luis Duque por leerme y considerar el relato bien logrado.
Para Charola por encontrar el relato muy bueno y por haberme llamado la atención sobre:
1º—El tipo de comillas a emplear.
2º —La forma correcta de escribir la palabra ”instituto”, cuando no compone la denominación completa de instituciones, organizaciones, asociaciones, partidos políticos, etc. Ejemplo: “Instituto Cervantes”.
Para Josè maría por haber encontrado bueno el relato y por subrayar el reto conseguido.
Para Mario Fernández por haberle gustado mi relato y por resaltar el contenido terrible de la historia.
Para Elena S.H. por sus amables comentarios y haber captado el sufrimiento del protagonista.
Para Solidsteel por haber disfrutado de la lectura de mi relato.
Para Kein V. Raad por haber encontrado bueno el micro y principalmente por haberle hecho reflexionar.
Para Ryan Infield Ralkins por resaltar la realidad de un problema que desgraciadamente parece que va en aumento.
Para Carla Daniela por haber encontrado la historia bien lograda y resaltar la consecución del reto.
Para Ofelia Gómez por haberme leído y haberle gustado la trama preocupante de la realidad de la historia.
Pasaré a leeros y comentar vuestras historias que seguro serán interesantes.
Felicidades para todos.
hola como siempre estupendo relato de la vida real.
Hola Vespasiano
Un relato impactante. Te va llevando de a poco, agregando información con cada frase hasta que descubrimos lo que pasa. Excelente!
Lo único que no me cierra es lo de daga.
Saludos
Agradecimientos:
Para ortzaize por seguirme puntualmente semana tras semana y valorar mis historias siempre positivamente.
Gracias Mariela por leerme y comentar mi relato.
Si piensas porqué tenía las muñecas vendadas podrás asociarlo a una daga ensangrentada.
Pasaré por tu relato.
Felicidades
Buenas Vespasiano,
Paso por aquí, pues el mes pasado me dejaste un agradable comentario en mi texto, y aunque leí y disfruté el tuyo, por problemas familiares no pude devolverte el comentario.
La verdad es que me ha sorprendido mucho tu micro. Es un relato que evoca sentimientos desde la primera línea. Sentimientos crudos y dolorosos. Y te entristeces por que por desgracia, es el día a día real de mucha gente. Y es algo que inevitablemente que ha existido siempre.
Me encanta como mezclas los recuerdos de su acoso, con los oscuros pensamientos del protagonista. Y como al final, tanto él, como el lector, se dan cuenta a la vez de lo que ha pasado. Es un final muy contundente. No veo que falte ni sobre nada.
Creo que “Dinosaurio Maricón”, debería de ir en mayúsculas, pues se trata de un mote. (No te lo ha señalado nadie, así que posible que me confunda – ¡que alguien me corrija si estoy equivocada!).
Por lo demás, un verdadero placer dejarme caer por aquí. Seguro que seguiré leyéndote por estos lares.
¡Un abrazo!
Hola Vespasiano.
Cumples de forma brillante con el reto. Y el relato es un espejo espléndido donde cualquier niño o adolescente podría mirarse. Y con ello atreverse a denunciar la injusticia que pueda estar sufriendo. Me ha gustado.
Me parece un muy buen relato.
He disfrutado y he aprendido.
Saludos, nos leemos.
Agradecimientos:
Para dopidop por haber sentido al leer el relato, la mezcla de los recuerdos del acoso sufrido por el protagonista y sus oscuros pensamientos, hasta llegar al trágico desenlace.
Felicidades. Seguiremos leyéndonos.
Agradecimientos:
Para El Apuntador Mudo por haber encontrado la historia como un espejo donde cualquier niño o adolescente podría mirarse.
También por resaltar el cumplimiento del reto por mi parte.
Nos seguiremos leyéndo en futuros retos.
Felicidades.
Hola, Vespasiano.
Tu relato trata un tema interesante y actual, sin embargo creo que ha quedado demasiado resumido. Cuentas muchas acciones, tanto que es complicado ahondar en la profundidad que requiere un tema delicado. Creo que enfocarte en un único momento hubiera resultado más productivo.
Saludos.
Agradecimientos:
Para Ichabod por leerme y dejar tu comentario siempre bienvenido.
Hola Vespaciano.
Regreso a tus dominios solo para agradecer esa aportación que yo tanto aprecio. Ciertamente tengo la tendencia de ser historiador y en otras ocaciones biográfico. En este caso es la autobiografía de un sueño de la niñez.
Aquí te envió mi sueño. Docencia de antaño.
El niño atestiguó la devolución del dinero que el tendero había cobrado a don Celestino y acalló su curiosidad con gesto dudoso. Ya a solas con su abuelo preguntó: ¿para qué pagabas un adeudo que no tenías?
—Mira hijo; cuando un dinosaurio del comercio, íntegro y cabal como don Benigno, te cobra algo pendiente, primero pagas y luego aclaras hechos. El hacerlo de otra manera sería clavar una daga que crearía confrontaciones.
La visión de otros tiempos del senador Uribe se disipó al salir del ascensor. La tribuna del edificio legislativo le esperaba para discutir la deuda externa del país.
El niño soy yo.
Don Benigno es el tendero.
Don Celestino Vela es mi abuelo.
El Senador Uribe; soy ese personaje distinguido de mi pluma, que es producto del deseo infantil de un día alcanzar un peldaño en el Senado.
Oficio noble a los ojos de un pequeño y sueño de patriotismo infantil incumplidos por un entorno filial que nunca fue otorgante de tierra fértil para florecer.
Sueño que para no morir queda plasmado en un micro de Literautas.
Hola Vespasiano. Has bordado una situación social compleja. El burlarse del diferente, del que no entra en el cánon (de belleza, comportamiento, popularidad etc…), y lo has llevado a sus últimas consecuencia en un micro incluyendo las palabras propuestas ¡Un crac!
Te felicito.
Hola Vespasiano.
Me encantó el modo en cómo presentas toda una vida de no saberse aceptado, ni siquiera por él mismo, en tan pocas palabras. Es increíble tu capacidad para contar toda la pesadilla que ha sido su vida.
Te espero por mi microrrelato.
¡Un abrazo!
Hola, Vespasiano: Mil gracias por tu visita y sugerencias. Excelente trabajo que aborda una problemática social, con gran poder de síntesis y excelente manejo gramatical.
Hola, Vespasiano.
Me ha gustado tu relato, aunque “gustar” no es realmente la palabra adecuada para un texto que impacta, sobre todo por el final, en el que te das cuenta de que las burlas y humillaciones lo han orillado a buscar la única posibilidad de escape, la única que, por desgracia, encuentran muchos adolescentes en dicha situación.
Me parece muy bien logrado el reto. Has conseguido usar en tu micro las tres palabras de forma bastante natural para la historia que cuentas o al contrario, has descubierto la historia adecuada para que encajaran las tres palabras del reto 😉 Felicidades.
Saludos
Agradecimientos:
Para Isabel Caballero por elogiar mi historia y la inclusión de las palabras propuestas.
Para Beatriz Emilia por haberle encantado la presentación de la vida y el sufrimiento de la víctima.
Para Beba por haber encontrado excelente el trabajo realizado y el manejo gramatical de la historia.
Para Hilda G.M. por haberle impactado el relato y el resultado final. También por encontrar bien logrado el reto.
Efectivamente, la historia la he construido sirviéndome de las tres palabras propuestas y no al contario. Creía que haciéndolo al contrario sería más difícil encajarlas. Sobre todo la palabra “dinosaurio” y más aún si quería darle algún protagonismo a semejante bestia prehistórica..
Muchas felicidades para todas. Seguiremos leyéndonos
Hola Vespasiano.
Gran relato, con un final inesperado.
A mi juicio sobra la palabra ya del final, pero es algo más que personal. Simplemente no creo que agregue nada al texto.
Mis saludos.
Hasta la próxima propuesta.
Excelente relato. Invita a la reflexión sobre nuestra propia vida.
Gracias
Hola Vespasiano:
Buen relato, seco y cortante, la tercera persona del narrador evita el sentimentalismo en un tema de mucha actualidad.
Saludos
Agradecimientos:
Para Laura por, en su opinión, considerarlo un gran relato.
Sin embargo aceptando, como no podía ser de otra manera, su opinión con relación al uso de la palabra “ya”; no puedo estar de acuerdo ya que no creo que dicha palabra esté sobrando, y sí agrega el sentido de inmediatez al seguimiento de la acción.
Del diccionario de la RAE:
ya
Del lat. iam.
adv. Inmediatamente, ahora mismo. U. t. en sentido enfático.
adv. Luego, inmediatamente. U. cuando se responde a quien llama. Yavoy. Ya van.
interj. coloq. U. para denotar que se recuerda algo o que se cae en ello.
Para Héctor M por encontrar el relato excelente.
Para Noemi por haber encontrado bueno el relato y en su opinión, la ausencia de sentimentalismo.
Felicidades para todos/todas.
Seguiremos leyéndonos en futuros retos.
Hola Vespasiano: La verdad es que has hecho un trabajo increíble con tu micro, que relatas con un lenguaje rico en matices. La verdad es que tus trabajos no suelen dejar indiferente a nadie.
Saludos desde el 142.
Perdón por repetir la verdad dos veces, eso me pasa por no repasar el comentario antes de enviar.:(
Gracias Maria Jesús por encontrar increible el trabajo realizado.
Felicidades.
Hola, Vespasiano.
Excelente micro, lo de la daga aunque no le han encontrado sentido algunos compañeros, yo lo veo más que oportuno, necesario y además reforzado con la frase final.
Lo que no me llegó fue el título, debería aportar, cerrar o reforzar el relato. Talvez el hecho que esté en infinitivo es lo que no suena.
Te sugiero: Ofensas.
Pero es tu relato y el título podría tener una intención personal que los lectores no sentimos ni apreciamos, así que es tu decisión.
Saludos y gracias por traer tus ingeniosas letras al taller.
Gracias Kirjanik Maya por los comentarios tan amables hacia mi relato.
Con relación al título, agradezco tu aportación pero, sin ánimo de contradecirte te apunto las razones que me llevaron a titularlo así:
1º – Ya hubo un reto en esta página de Literautas que debía titularse: “La ofensa”. Por lo cual no quería repetirme´.
2º – Lo de utilizar el verbo en infinitivo me pareció oportuno, pues mirando en el Diccionario de la RAE vi ambas definiciones (Ofensa y Ofender) y me pareció que reflejaba mejor lo que quería mostrar en el relato en el sentido más amplio.
OFENDER
Del lat. offendĕre.
1 tr. Humillar o herir el amor propio o la dignidad de alguien, o ponerlo enevidencia con palabras o con hechos.
OFENSA
Del lat. offensa.
1 f. Acción y efecto de ofender.
Espero haberme explicado satisfactoriamente´
Felicidades.
Hola, Vespasiano.
Más que satisfecho con tu intención al presentar el título.
Y no hay contradicciones, solo puntos de vista diferentes (afortunadamente), eso es lo que alimenta el taller y lo que nos ayuda a crecer en nuestras creaciones literarias.
Y reitero excelente micro.
Saludos en septiembre buscaré tu relato seguro nos sorprendes con algo ingenioso.
Saludos, Vespasiano
Muy agradecida y aunque ya se sumen días al mes de julio, no podía dejar de visitar y agradecer a quienes me comentaron por el trabajo del mes anterior.
He leído a bien tu microrrelato y a tus comentaristas con mucho entusiasmo. Coincido con las sugerencias ofrecidas para mejorar o clarificar el texto que aportas. Coincido que “instituto” va en minúsculas, ya que no detallas exactamente a cuál en particular se refiere.
Pero, si coincido, aún leyendo tu explicación sobre el título, lo que mencionó Kirjanik Maya. Aunque comprendo a cabalidad tu defensa a las razones del porqué lo has usado, sigo creyendo que el impacto de un microrrelato recae en el círculo entre título e historia.
Al usar el verbo de forma tal cual y de manera tan llana, no siento que encaje con la fuerza que transmite el contenido. Recuerda que un verbo tiene múltiples formas que cada una expresa una “condición particular”. Por lo que yo me inclino al participio: Ofendido.
El participio es la forma no personal del verbo, que al igual que el gerundio y el infinitivo, suele emplearse para organizar tiempos compuestos como el presente perfecto o el pluscuamperfecto. *El participio también puede ser usado como “adjetivo calificativo”*. Por este segundo uso, me inclino ya que aunque la ofensa, o el acto de ofender, es lanzado por un tercero, quien la recibe puede rechazarla o aceptarla. Nuestro protagonista la recibe, la acepta y deja que esa situación lo afecte de la forma en que lo hace. Es decir, que no es tanto lo que le “ocurre”, sino como él “se siente”. Espero darme a entender.
cotidianas (del) acoso en el (instituto). /o/ cotidianas de (su) acoso en el (instituto).
En el caso de los apodos o motes, se debe dejar con mayúsculas, y solo si lleva artículo éste se escribirá de igual manera. La RAE pide que no se use las comillas cuando no se utiliza el apodo junto con el nombre. Es decir, que la frase debe escribirse: compañeros que lo humillaban, llamándolo Dinosaurio maricón.
Contrario si llevara el nombre de pila: conocido como Carlos «Dinosaurio maricón» Membrillo. Por preferencia al idioma se utilizarán las flechas españolas.
Llevaría las dos mayúscula si fuera El Dinosaurio, o El Maricón, pero en apodos compuestos sin artículo solo la primera irá en mayúscula: vimos a Ojo morado pelearse de nuevo con El Tigre.
Aunque en algunas regiones de España y Latinoamérica se use el “LE”, se pide que se mantengan los artículos acordes al sexo de a quien se indica. (la llame, lo vio), o en su defecto de sostenerlo, darle el uso a las aplicaciones utilizadas: compañeros que le humillaban, llamándole “dinosaurio maricón”.
Mi opinión sobre el tema elegido, es una realidad latente en cualquier ámbito. El acoso físico y sicológico se presenta de cualquiera a cualquiera. Muchos jóvenes son incapaces de sobrellevar tales tratos, sintiéndose ellos mismos acosados por sus propios pensamientos, que parecen respaldar los vituperios sufridos. Muy triste en realidad.
Como siempre, has utilizado muy bien el reto, que ha sido introducido sabiamente. Has sabido plasmar una realidad sin paternalismos, ni florituras, usando el lenguaje más apropiado para que el lector sienta lo que desee sentir, y no que siga a puntillas lo que el autor le indica. Bien por tí.
Enhorabuena. ¡Nos leemos!
Estimada KMarce:
Que lujo tener por compañera una comentarista tan conocedora de nuestra lengua; que ayuda a cada uno de nosotros a mejorar nuestras historias y que dedica su tiempo de manera altruista. Eso solo se puede agradecer de corazón ya que esa forma de proceder es impagable de otra manera.
Por ello, gracias por haberme leído y comentado tan sabia y generosamente.
Leeré minuciosamente todas y cada una de tus recomendaciones para corregir mi texto antes de enviarlo para la recopilación del libro antes de la fecha estipulada.
En esta primera lectura de tus consejos deduzco (no sé si correctamente), que a pesar de las diferentes maneras de escribir una ofensa/mote/o apodo; la forma en que yo lo hice: “dinosaurio maricón”, ¿estaría bien solo escribiendo “Dinosaurio” con mayúscula?
Aprovecho esta entrada para decirte que he leído tus comentarios al relato de charola y al margen de las mejoras sugeridas, me ha encantado la reflexión que ha hecho sobre ese tema tan delicado y tu posición contraria a esa solución del problema, resaltando vivencias sobrellevadas generosamente por amigos de tu entorno y valorando la paz de aquellas personas que abandonaron este mundo sintiéndose verdaderamente queridas.
Por eso reitero nuevamente el lujo de tenerte como compañera en este taller.
Felicidades. Seguiremos leyéndonos en futuros retos.