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Decisión - por Charola

Él estaba tranquilamente sentado, mientras ella le apuntaba con una pistola. Le había pedido que apriete el gatillo porque la vida ya no tenía sentido; estaba atrapado en una silla de ruedas y el dolor carcomiéndole el alma cada segundo. Lo habían hablado desde que se casaron, augurando, quizás, un futuro semejante para cualquiera de los dos: a él le tocó banquillo, a ella, ser el verdugo.

—No puedo —dijo bajando el arma.

Estaba temblando, tuvo el valor de apuntar la sien de su marido; pero de pronto, sintió un amor infinito, compasión, ternura, miedo, cobardía y… no pudo gatillar.

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27 comentarios

  1. 1. IreneR dice:

    Buenas, Charola.

    Una decisión muy difícil la que nos presentas. No me gustaría estar jamás en la piel de ninguno de los dos personajes.
    Creo que está muy bien llevado, muestras las dudas y el dolor que padecen, aunque el último párrafo me ha sonado un poco extraño, ese “de pronto”, sin él, y modificando un poco la frase siguiente, creo que quedaría mejor. Pero vamos, esto es mi opinión.

    Me ha hecho gracia la palabra “gatillar”.

    Nos leemos.

    Un saludo.

    Escrito el 17 junio 2019 a las 20:10
  2. 2. Jose Luis dice:

    Hola
    Relato tierno y patético a la vez. Reflejar el dolor y el amor por una persona es difícil en pocas líneas, pero creo que lo has logrado.
    Hay algunas cosas para corregir.
    que apriete ———– que apretase
    —No puedo —dijo bajando el arma. ——— —No puedo —dijo, bajando el arma.
    la sien —— a la sien
    Un saludo

    Escrito el 17 junio 2019 a las 20:14
  3. 3. Yoli dice:

    Hola Charola

    ¡Qué gusto leerte de nuevo!

    Tu micro es doloroso, está bien llevado, solo que el final, en lo personal, siento que le faltó un cierre. Talvez dándole vuelta.

    Revisa si queda mejor ponerlo así:
    …verdugo.

    Estaba temblando, tuvo el valor de apuntar la sien de su marido; pero de pronto, sintió un amor infinito, compasión, ternura, miedo, cobardía. (eliminar …y… no pudo gatillar…para que no te quede repetido con el diálogo.

    —No puedo —dijo bajando el arma.

    Mi cuento es el #4 ¡Estoy segura que lo vi! por si me quieres visitar.

    ¡Un abrazo!
    ¡Nos seguimos leyendo!
    (¯`•¸•´¯)YOLI(¯`•¸•´¯)

    Escrito el 17 junio 2019 a las 23:18
  4. 4. El Apuntador Mudo dice:

    Hola Charola

    Un tema duro el de la “eutanasia asistida”, situación difícil donde las haya. Creo que transmites bien las dudas, la desazón, las vivencias compartidas, el amor, el miedo y la debilidad en ese momento final.

    Me ha gustado tu microrrelato.

    He disfrutado y he aprendido.

    Saludos, nos leemos

    Escrito el 18 junio 2019 a las 09:00
  5. 5. Osvaldo Vela dice:

    Hola Charola.

    Me gustó tu discernimiento a una decisión final en la cual el que se despide solicita la ayuda ejecutoria acordada en un pacto de amor cuando no se sabia quien necesitaría de dicha asistencia.

    El tiempo, el amor, la capacidad infinita de ternura de una vida en común, juega un papel importante. El que sufre la mutilante calidad de vida quisiera ver el pacto cumplido.

    el ejecutor comprometido a llevarlo a cabo se ve llevado por los sentimientos que evolucionan a través de compartir una vida.
    Pero la razón de claudicar es la soledad que le espera.

    La amenaza de prescindir del compañero evade el pacto.

    Simplemente profundo.

    Te felicito.

    Un abrazo.

    Escrito el 18 junio 2019 a las 15:04
  6. 6. Otilia dice:

    Hola, Charola:
    Gracias por leer y comentar.
    El tema de tu historia es muy duro y lo has narrado bien. Buen trabajo.
    Solo es mi opinión, pero quitaría “tranquilamente”, luego “que apretase” y una manía mía, has escrito muchos gerundios.
    Nos leemos. Saludos.

    Escrito el 19 junio 2019 a las 09:17
  7. 7. Avila La dice:

    Hola Charola,
    Un gran relato con u a historia triste atrás.
    Coincido con Yoli con lo de la frase final, podria ganar mucha fuerza.
    Saludos de tu vecina del 69

    Escrito el 19 junio 2019 a las 16:42
  8. 8. El chaval dice:

    hola Charola
    Tema muy delicado has escogido este mes. Se comprende perfectamente la indecisión, por otra parte muy legítima de no actuar y seguir queriendo a su marido.Aparte de las sugerencias que te han puesto los compañeros en lo formal;que coincido,también hay muchos casos conocidos y que me acuerde ahora el caso del escritor Stefan Zweig
    que decidieron juntos acabar con su vida.
    Gracias por pasar por mi texto, los niños actúan mas por intuición que por la razón. Celebro que te guste.

    Escrito el 19 junio 2019 a las 18:05
  9. 9. Charola dice:

    A los literautas que comentaron mi texto:
    IreneR, gracias por tu opinión sincera. Vamos a ver cómo queda.
    José Luis. Gracias por tu aporte. Tienes razón, ya lo cambié.
    Yoli, tendré en cuenta tu aporte cuando lo reestructure. Gracias.
    El Apuntador Mudo. Me encantó que te gustase.
    Osvaldo Vela. Gracias compañero por tus palabras.
    Otilia. Tendré en cuenta los gerundios en la versión final. Gracias.
    Avila La. Gracias por tu aporte. Iré a comentar tu relato.
    Saludos a todos. Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 19 junio 2019 a las 18:12
  10. 10. Charola dice:

    Hola, El Chaval.
    Gracias por pasar por mi texto y por tus palabras.
    Tienes razón cuando me dices que los niños actúan por intuición más que por la razón. Cierto. Eso es lo que pasó con el niño de tu estupendo relato.
    Nos seguimos leyendo.
    De nuevo, gracias.

    Escrito el 19 junio 2019 a las 18:20
  11. 11. Carla Daniela dice:

    Hola Charola! Como estas?
    Ufff que difícil la historia que presentas. Creo que es muy fácil ponerse en la piel de los dos personajes.
    Solo como opinion, creo que el sentimiento compasión, no encaja muy bien… si fuera asi, si le dispararía.
    Un gran saludo y nos leemos! (N°100)

    Escrito el 20 junio 2019 a las 03:58
  12. 12. Ryan Infield Ralkins dice:

    Saludos Charola

    Gracias por tu comentario a mi relato.
    Has escrito un

    Escrito el 20 junio 2019 a las 04:03
  13. 13. Ryan Infield Ralkins dice:

    Como decía antes de que se me enviara el comentario por error (escribo desde mi teléfono), has escrito un relato que toca un tema muy profundo. Una situación de verás muy fuerte. No quisiera pasar por eso alguna vez.
    Felicitaciones por este gran relato.

    Escrito el 20 junio 2019 a las 04:05
  14. 14. Baltasar dice:

    ¡Ah!, Dharola, qué bueno: Menos mal que era ella la que tenía la pistola…
    Aquí, hace como un año, dieron por TV la escena de un matrimonio: ella postrada en la cana, cadavérica tras una larga enfermedad incurable, pidiéndole al marido que le suministrara el veneno, para morir. Se vio como se lo daba y bebía. Murió, claro. Hoy, el marido anda en los tribunales acusado de violencia de género. Tal cual.

    Muy bonito final. Te felicito-

    Mi más cordial saludo

    Escrito el 20 junio 2019 a las 18:51
  15. 15. Pia Daría dice:

    Hola Charola, Tremendo micro, uf, muy gráfico. Me ha llegado porque conozco lo que es quedarte sin una persona querida y también lo que es tomar decisiones sobre su vida. Las observaciones de Jose Luis y Yoli son compartidas, el mensaje es el mismo y gana en efecto. Un saludo

    Escrito el 21 junio 2019 a las 11:56
  16. 16. isan dice:

    ¿Qué tal Charola?
    Una declaración de amor con todas sus consecuencias y una reivindicación que, cada día más, se extiende por todas partes y que se ha empezado a admitir. Dice un escritor de mi tierra que en la Declaración Universal de los Derechos Humanos falta el derecho a la eutanasia. Sobre esto escribí una entrada en mi blog que, con tu permiso, pongo el enlace por si quieres echarle un vistazo. https://unacapadebarniz.blogspot.com/search/label/eutanasia. Comprendo que apretar el gatillo sobre la persona amada es durísimo y crea un enorme dilema porque amar es también hacerlo siguiendo la voluntad de quien te lo pide. Eso es lo que has reflejado muy bien en tu relato.
    Te comento alguna cosilla de forma que yo cambiaría. Ya sabes opinión personal, luego tu decides que para eso es tu relato.
    Cambiaría “tranquilamente”: Él estaba tranquilo, sentado mientras ella le apuntaba con LA pistola (se cambia una por la).
    Cambiaría apriete por apretara.
    Después de temblando pondría punto. Creo que le da más dramatismo.
    “apuntar a la sien de su marido” Se añade la A. Quizás se podría suprimir a su marido porque ya se sabe que es, o por lo menos muy cercana también “de pronto” porque eso no se improvisa
    Después de cobardía pondría los puntos suspensivos y suprimiría la ye para dejar la frase final en No pudo gatillar.
    Bueno, es mi opinión.
    Un slaudo.

    Escrito el 21 junio 2019 a las 19:16
  17. 17. Vespasiano dice:

    Hola Charola:

    Gracias por pasarte por mi relato y dejar tus sugerencias para mejorar la forma de mi historia.

    Tu historia nos muestra una realidad dificil de sobrellevar, cuando se convive con una persona que sufre, sin tener una esperanza de cura.

    Al comienzo de la lectura me ha llamado la atención lo siguiente:
    “Le había pedido que apriete el gatillo”. Creo que debe ser: “Le había pedido que “apretara” el gatillo”.

    Por lo demás decirte que has tratado un tema que ha sido y sigue siendo noticia en los teledíarios.

    Decisión difisilísima de tomar en la vida real y que de momento tiene consecuencias en los juzgados.

    Felicidades. Seguiremos leyéndonos.

    Escrito el 21 junio 2019 a las 22:14
  18. 18. Charola dice:

    Hola, Carla Daniela
    Gracias por tu comentario. Tendré en cuenta tu aporte. Voy a leer tu relato.

    Ryan Infield Ralkins, gracias por pasar por mi texto y comentarlo. Es un tema muy serio y profundo.

    A Baltasar. Gracias por pasar por mi relato. Como cuentas qué difícil situación y aún en muchos países no hay leyes sobre la eutanasia. Pobre hombre el que mencionas.

    A Pía Daría, gracias por tu comentario de mi texto. Difícil decisión. Voy por tu micro.

    A Isan. De vuelta a Literautas. Gracias por pasar por mi relato y por los mejorables. Pasé por tu blog. Gracias. Yo estoy de acuerdo con la eutanasia. Nos seguimos leyendo.

    A Vespasiano
    Muchas gracias por tu apreciación de m texto. De acuerdo contigo.

    Saludos a todos.

    Escrito el 22 junio 2019 a las 00:30
  19. 19. Luis Duque dice:

    Cordial saludo Charola…

    Agradecido por las apreciaciones y aportes a mi relato.
    El suyo me ha parecido fabuloso, una gran prueba de amor: ¿Te amo lo suficiente para cesar tu sufrimiento por encima de los sentimientos que me produce tu presencia a pesar de tu condición? Ese final es perfecto, a protección del lector: ¿No pudo por que su amor por cesar su sufrimiento fue mayor a continuar con su compañía o no lo fue de forma accidental? Me ha gustado y aportado una enseñanza.

    Escrito el 22 junio 2019 a las 17:46
  20. ¡Hola Charola. ¡Vaya tema tanduro has escogido! Creo que la mayoría estamos sensibilizado con él, más aún después del caso de AngelHernández y María José Carrasco, esperemos que en España la despenalización de la eutanasia se resuelva pronto.
    Disculpa la disgresión Charola.
    Sobre el micro está bien resuelto, aunque en lo personal creo que la demostración del amor y la misericordia se demostraría mejor apretando el gatillo.
    Algún compañero te ha indicado lo de “gatillazo”, no me termina de sonar bien, y en la frase “le había pedido que apriete el gatillo”, a mi parecer quedaría mejor apretara por apriete.
    Por lo demás un tema candente con el que te has atrevido compañera.
    Un cordial saludo compañera y gracias por tu valoración a mi micro.

    Escrito el 22 junio 2019 a las 17:55
  21. Hola Charola:
    EMDO has acertado en la elección de la voz narrativa, para evitarte complicaciones a la hora de elaborar la TRAMA. Un narrador omnisciente que sabe todo de todo en ese minúsculo universo.
    El único riesgo, es que en este tipo de relato (micro), el lector se puede sentir un poco fuera de ese “espacio íntimo y acotado”. Y si te fijas, la mayor parte de comentarios lo reflejan de algún modo: Todos cuentan sus experiencias y sentimientos particulares acerca del tema o incluso discuten con la “voz narrativa” la oportunidad o no de la manifestación de algunos sentimientos, a modo de ejemplo:el sentimiento compasión, no encaja muy bien.
    En resumen, un buen trabajo, cuidado y hecho a la medida que consideraste oportuna, sin duda.
    Gracias por compartir

    Escrito el 23 junio 2019 a las 12:29
  22. 22. Pepe dice:

    Hola charola,

    Gracias por pasar por mi relato. El tuyo da mucho qué pensar, es un tema que al que parece que nunca se llegará a un acuerdo.

    En cuanto al relato en sí, la primera parte me parece muy bien conseguida, mezclando metáfora y realidad, pero es en el diálogo cuando, para mí, puerde fuelle. Es decir, decide bajar el arma, pero después la levanta para, finalmente, volver a bajarla… Queda un poco redundante y afloja el posible giro final.

    En la parte formal ya te han dicho todo lo que reseñable.

    Me gustó mucho como planteas la historia y con los apuntes que quieras recoger y tu buen criterio te quedará algo muy bueno.

    Un saludo.

    Escrito el 23 junio 2019 a las 22:46
  23. 23. Charola dice:

    Agradecida a Luis Duque por su opinión sobre mi relato.
    A Isabel Caballero, por permitirme indagar sobre el caso Angel Hernández y María José Carrasco y darme su parecer acerca de mi texto.
    A Luis Javier Kendall Callieri, para mí, eres Don Kendall, compañero. Muchas gracias por tu paso por mi relato y por tu agudo aporte.
    A Pepe por su valoración sincera.

    Saludos.

    Escrito el 25 junio 2019 a las 07:24
  24. 24. Osvaldo Vela dice:

    Hola Charola.

    Regreso a tus dominios solo para reconocer in detalle que no tuve la gentileza de agradecer en mi primera visita.

    Tú regreso al taller es algo que me llena. Todavía cada vez que imprimo el texto “Palabras sabías” recorro las ayudas que recibí de parte tuya con las palabras que pronunció don Porfirio Díaz y que tu aclaraste que no eran de él.

    Las escribió don Nemesio García Naranjo.

    Gracias, no lo olvido.

    Recibe un abrazo histórico de mi parte.

    Escrito el 25 junio 2019 a las 08:46
  25. 25. Charola dice:

    Un abrazo histórico de parte mía también, Osvaldo.
    Yo tampoco me olvido. Y estamos tan cerca, solo una línea nos separa, pero Literautas y la amistad que trae consigo este hilo virtual nos une y unirá para siempre.
    Gracias por tus palabras.

    Escrito el 26 junio 2019 a las 05:28
  26. 26. K. Marce dice:

    Saludos, Charola

    Entramos ya a julio por lo que sigo agradeciendo las visitas a mi trabajo del mes. Devolverlas siempre me produce mucha satisfacción y sobre todo cuando encuentro compañeros de siempre.

    Sobre tu relato es un tema muy delicado; del cual me declaro completamente opuesta. No creo que se sienta amor o compasión quitándole la vida a una persona que sufre, aunque lo pida. En mi caso, mi madre murió de una enfermedad que fue silenciosa y fulminante. Sus dolores, verla no comer, vomitar, cansada todo el tiempo; pero los seres humanos nos aferramos a la vida, pese a su enfermedad y sus síntomas, ella deseaba vivir. Muchos pasamos por momentos de debilidad, (he escuchado a muchos decir: ¡me quiero morir!); y he tenido amigos que han coqueteado con el suicidio sin exito. Como persona resilente, que he pasado muchas cosas, la vida sigue valiendo la pena.
    Tu texto me ha tocado mucho, porque tengo una amiga que a solo pocos meses de casada, junto a su esposo fueron asaltados. Él recibió nueve disparos, cuatro se le clavaron en su espina dorsal y él se debatió entre la vida y la muerte. Por supuesto que sobrevivió, pero su vida ahora sería en una silla de ruedas. No tenían ni treinta años de edad. Ella es una mujer maravillosa, el alma más dulce que conozco, y ama profundamente a su esposo. Son increíbles, ella se volvió empresaria y él hizo lo mismo. Su “invalidez” no lo ha limitado a que maneje un auto, a crear su propia empresa, a ser el esposo que ella necesita.
    La eutanacia es un tema tabú, delicado y muy complejo. Nadie pide nacer, y nadie debería pedir morir. Pero hay personas que su condición es tan complicada que prefieren la muerte. Pero siendo honestos, muchos lo piden porque “ven” a sus familiares “sufriendo” con “su carga”. Lo cual, me parece de egoístas, que tu ser amado, cuidarlo, darle de comer, bañarlo o pagar cuentas médicas, todo eso se convierta en una carga. Es fácil decir, “te amo, te disparo”; porque nunca nos ha tocado de verdad convivir con una persona lisiada o deshauciada. Yo lo he vivido, y jamás sentí como carga a quienes estuvieron en esa condición. Será “mal” de familia, pero pese a todo, ellos disfrutaron vivir… y por eso, se fueron con una paz incomparable cuando se fueron.
    Respeto, eso sí, cuando una persona rechaza un tratamiento por las razones que tenga. A la fuerza, ni el agua es buena, decía mi abuelita.

    Ahora, a lo tuyo.

    Un microrrelato, nos cuenta algo sin florituras, nos mete de lleno al momento del clímax, creo que el tuyo lo ha logrado muy bien. Sin darnos explicaciones de nada, nos muestras lo que podría ser la conclusión o el inicio de algo distinto. Por ello que coincido en que se obvie la últimas palabras: y…no pudo gatillar. Deja a que sea el lector, quien le de el final que ellos creen conveniente. Porque más que pensar si es o no ética la eutancia (algo que aquí no la veo, porque es demasiado violenta, con un arma). Permitirás que lo aprecie bajo su propia perspectiva y moralidad, le das la oportunidad de ser “ella”. Por eso también coincido que aunque se ha escrito en narrador omnisciente, y eso nos ayuda a ver ambos puntos de vista, podrías ensayar con la primera persona. De preferencia no le identifiques como hombre o mujer, puedes llamar al otro, conyuge, que es neutral. El ejercicio te mostratará si te parece o no dejarlo en omnisciente o si en primera persona ayuda al lector a meterse en esos zapatos.

    Coinicido con las mejoras que te han marcado. Con respecto al diálogo, en el original está correcto, ya que no se adiciona coma.
    Me ha llamado la atención los tiempos verbales que has usado. Trata siempre de mantener todo en el mismo “tiempo”, haciendo uso de los tiempos verbales más apropiados a lo que deseas retratar. Las sugerencias que te han ofrecido son correctas. En el caso que deseen intentarlo con primera persona, deberás cuidar su correcto uso.

    Aunque es díficil “mostrar” en un microrrelato, con un tema tan emotivo, apela a las emociones. Sé directa. Me parece que en lugar de “estaba temblando”, ve al grano: “Temblaba.”
    Se pide evitar las oraciones muletas, como “Derrepente”, “De pronto”, “De inmediato”. En este caso, no es algo repentino, es reconocer lo que ella siempre ha sentido. Puedes utilizar en su lugar, “reconoció ese amor infinito…”, aboga por las emociones.

    Por lo demás, un microrrelato siempre hará a los demás a pensar, incluso después de leerlo. El tuyo ha sido uno de ellos. Felicidades.

    ¡Nos leemos!

    Escrito el 2 julio 2019 a las 23:24
  27. 27. Charola dice:

    K.Marce.
    Infinitamente agradecida por tu aporte.
    Nos seguimos leyendo.
    Un abrazo.

    Escrito el 4 julio 2019 a las 07:48

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