El Caso del Jabón Asesino
Nadie espera lidiar con un asesinato un martes por la mañana, y mucho menos Roberto, cuya mayor preocupación era cómo pagar la luz tras ser despedido de "Tours Fantásticos S.A.". donde trabajaba como guía de turista. Pero ésa mañana un ladrón había entrado a robar en la casa de su abuela y había terminado desnucado tras resbalar con un jabón en el baño.
La policía estaba midiendo distancias y colocando cartelitos cuando la puerta principal se abrió de golpe, dejando ver una ancianita en camisón, Doña Librada, que había burlado la seguridad de su residencia con la destreza de una anguila.
¡Abuela! -exclamó Roberto, corriendo para taparle la visión del cadáver cubierto-. ¿Qué hacés acá?
Librada lo miró con los ojos entrecerrados. La demencia tenía esos días "on-off".
– ¿Abuela? Yo no tengo nietos con tan poco pelo -respondió Librada- Vine porque me dijeron que acá hay una obra de teatro y quiero la primera fila.
El sargento de policía se acercó, libreta en mano.
-Oiga, ¿esta señora es familiar de la víctima o…?
Roberto se hizo cargo de la situación de inmediato. Años de ser guía turístico no habían sido en vano. Enderezó la espalda y puso su mejor voz de presentador de tour:
¡Señoras y Señores! -dijo Roberto, haciendo un ademán exagerado – ¡Es el estreno de la temporada! "El misterio del jabón asesino". Y este es el tour del detrás de escena.
Desplegó un mapa de las Cataratas del Iguazú moviéndolo de un lado al otro para que nadie pudiera leerlo realmente, ante la mirada de extrañeza de Librada y los policías.
-Oh, claro. ¿Y porque contratan estos "actores" vestidos de azul tan poco elegantes?
Roberto miró a los policías pidiendo comprensión.
-Son… la compañía de teatro. Están armando la escena del crimen-
El sargento iba a protestar, pero Roberto le dijo: -Sígame el juego, la abuela va y viene y si se dá cuenta de lo que pasa, no lo va a resistir-
¡Bueno, las teorías van a comenzar! -gritó.
-Un poco rígidos, pero aceptables, aunque creo que el director debería sugerirles comer más lechugas. ¡Ese uniforme le aprieta! -juzgó Librada.
El policía comenzó a ponerse colorado y cuando iba a lanzar una réplica, Roberto volvió a decirle: "Es la crítica teatral, sargento, no es personal".
Roberto guio rápidamente a su abuela por el pasillo.
-Y aquí los extras y el catering – Anunció Roberto
Su esposa, Marta, que estaba llorando en la cocina por los nervios del muerto en la sala, entendió la mirada de circunstancias de su marido. A los empujones sacó a sus dos hijos adolescentes, con toallas en el brazo a modo de servilletas.
-Parece que ya se le fundió el último fusible a la abuelita- dijo el mayor.
– ¡Vos vas a terminar adentro de un fusible si no colaborás! – le dijo entre dientes Marta.
Roberto llevo a la abuela a la habitación principal tratando de evitar el cadáver, y anunció – ¡Bueno fin del tour, ahora a la casa! –
De camino a la residencia de ancianos, el silencio reinó hasta que llegaron a la puerta de la institución. Entonces Librada se giró y, por un segundo sus ojos recuperaron el brillo lúcido de siempre.
-Roberto, gracias – dijo suavemente.
Él parpadeó, sorprendido.
-Me gustó mucho el teatro de hoy- dijo guiñándole un ojo – Me enteré que estás sin trabajo y quise ir a darte ánimos y terminó siendo la mejor mañana que tuve en años- Entonces Roberto tuvo una gran idea…
Dos meses después, Roberto, la a, Marta y los adolescentes rebeldes, inauguraron su nueva empresa, con el eslogan "Misterio garantizado, ¡la lucidez es opcional!"
El negocio se convirtió en un éxito rotundo. De todos los asilos los llamaban para transformar sus salones en escenas del crimen, con actores disfrazados y guiones personalizados.
Un día al despedirse después de una larga jornada, Librada miró a Roberto fijamente y dijo –Decime la verdad, el hombre que hizo de cadáver ése día en mi casa…-
Roberto puso cara de preocupación –Abuela él…-
-Si lo supuse… no pudiste engañarme…él no se bañaba no?, tenés que decirle que por más que actúe de muerto no significa que huela como uno-
-¡Anotado abuela!- dijo Roberto alejándose sonriendo.