El Halcón de la Noche - por Yokeeto

La chica de rojo tiritaba en la barra, solo tenía una taza de café frente a ella. Yo la observaba desde el otro lado. Era costumbre mía pasar todas las noches por el diner, siempre era lo mismo un par de tipos sentados fumando y yo ordenando el sándwich clásico. Aun así ella tenía algo que me causaba cierta incertidumbre, como si la hubiera visto antes, pero no aquí en “Phillies”
– Phil – llame al dueño del local – ¿Quién es la chica?
– No lo sé, detective – continuo limpiando la barra con el mugroso paño – apareció esta noche.
Me levante apenas termine de comer el emparedado, tome mi taza de café y camine hacia ella.
– Hola- salude – Soy el detective Harlson.
– H…Hola – titubeo.
– No hay porque estar nerviosa – dije en broma, de hecho era una reacción típica cuando me presentaba a alguna chica – ¿Podría saber tu nombre?
– ¿Por qué? – me pregunto a la defensiva.
– Oye – reí – tranquila solo quiero conversar – Note que su taza de café ya estaba fría – Phil, tráenos dos café más por favor.
La chica tomo su pequeña cartera de la silla continua.
– ¿No te iras? – Pregunte rápidamente – Al menos acepta el café.
Se acomodó nuevamente en la silla. Saco un cigarro y lo prendió en sus labios perfectos pintados color rojo intenso.
– Roxane, mi nombre es Roxane.
– Encantado Roxane – dije recibiendo una de las tazas de Phil – ¿Que te trajo aquí esta noche?
– Esto es un interrogatorio.
Ambos reímos, en ese momento sentí que había dejado atrás el nerviosismo o su postura defensiva.
– Supongo que accidentalmente asesine a alguien – rio en tono de burla.
– Muy astuto – dije – ¿Y con que lo hiciste?
– Con el arma de mi marido.
– Eso no es muy cliché – murmure – Es la típica historia de la chica que quiere vengarse de su maltratador marido que la engaña.
– No – respondió rápidamente a una pregunta inexistente – Él no me engaña, yo lo amaba.
– ¿Entonces?
– Supongo que no me dejaba florecer.
– Si tienes razón, y sin embargo aquí estas contando un crimen a un detective.
Apago el cigarro, y rio nuevamente.
– Eso creo – dijo – Esto parece el juego de “Clue” y supongo que por ser la chica vestida de rojo…
– Serias la primera sospechosa – dije en broma – Entonces…
– Fue la chica de rojo, con la pistola, en el cuarto.
– Sabes, serias una buena detective.
– Siempre me fascinaron esas historias – me dijo – pero no era por resolver los casos, más bien por no encontrar al asesino.
– Si esos casos son los que rompen la cabeza. Son callejones sin salidas.
– Creo que ya es tarde me debo ir.
– Un gusto conocerte asesina Roxane.
– Igualmente detective Harlson – me dedico una sonrisa tentadora – Mejor llámame Halcón de la noche.

Reí mientras la veía retirarse para tal vez nunca volver a verla. El teléfono sonó en “Phillies”
– Detective – llamo Phil en lo alto – tiene una llamada urgente.
– Diga.
– Detective Harlson, han hallado un cuerpo sin vida de un hombre, a simple vista asesinato con arma de fuego.
Todo se vino abajo, sentí un mareo un sudor que recorría mi espalda, un sudor frio. Salí rápidamente, pero Roxane ya no estaba por ninguna calle. Solo había un labial rojo carmesí en el suelo con una “R” grabada en él.
– Roxane “El Halcón de la noche” – susurre.