Madre, padre... - por DreamxAlchemist

Aún puedo verles sonreír, acariciándome, cuidándome… aún puedo percibir sus besos cálidos durante el invierno. Sus recuerdos, sus enseñanzas y su sacrificio han sido los motores que me han dado fuerza hasta ahora, pero… ¿Cuánto tiempo más podré aguantar estando solo? ¿Cuánto tiempo habré corrido esa noche? No sabría decirlo, corrí hasta que mis pulmones parecían reventar y aún después seguí corriendo. Estaba casi petrificado por el horror que acababan de ver mis ojos consternados ante tan cruel carnicería.Hoy he vuelto a escuchar ese escalofriante ruido, ya han pasado dos años desde que se llevaron a mamá y papá. No sé de dónde vinieron, no sé qué es lo que quieren, esos monstruos me han robado todo lo que era importante para mí. A veces quisiera tomar venganza por lo que han hecho, pero no lograría nada. No tiene caso resistírseles… atacan en grupo de forma audaz y despiadada. Lo único que sé, es que si me quedo aquí tarde o temprano también seré víctima de su insaciable sed de sangre. No sé qué hacer, no sé a dónde ir… me pregunto si alguien más sobrevivió, si existe alguien más sobre la faz de la tierra que comprenda lo terrible que puede ser la completa soledad. Si no me hubiesen protegido ellos podrían haber escapado, si yo no existiera quizá ellos estarían vivos, ¡maldición! Escuché de nuevo el escalofriante ruido que anuncia su llegada, ya están mucho más cerca… será mejor que comience a moverme o me encontrarán pronto.
El sol está a punto de salir, ellos se mueven más rápido de día… ya puedo escuchar sus voces, esas terribles voces que hablan en un idioma extraño. He vivido el último tramo de mi vida escapando de ellos, luchando por sobrevivir, aterrorizado, quisiera que todo esto acabara ahora mismo. Quiero volver a ver a mis padres, quiero volver a sonreír… hay tantas cosas que aún deseo hacer y que parecen imposibles, así que tengo que seguir adelante o todo lo que ellos hicieron por mi será en vano. La nieve del bosque dónde me oculto es un poco más rígida de lo normal, si piso con cuidado no dejaré ningún rastro que puedan usar para encontrarme. Mi respiración está agitada, el vapor en mi boca lo delata, ya he corrido un kilómetro al menos y he dejado de escuchar esos endemoniados ruidos… estoy hambriento, es un poco difícil conseguir comida estando en este bosque… me estoy quedando sin energía, pero debo avanzar unos cuántos kilómetros más. ¿Qué es ese ruido? no puede ser… es uno de ellos, se estaba ocultando entre los arbustos… yo, yo… tengo que correr pero mis piernas no reaccionan. Aún no me ha atacado… sólo me observa, parecer ser uno de los más jóvenes. Quizá me tenga miedo, ¡sí! ¡Eso debe ser! Tengo que aprovechar la oportunidad para escaggh…
Ahí está de nuevo, la imagen que he visto en mis sueños durante todo este tiempo… ese relámpago saliendo de ese agujero, ahí está de nuevo… asesinando a mis padres, persiguiéndome. Ahí está, ese rostro bañado en triunfo que me ve con satisfacción y alegría como si disfrutara lo que hace. No fue el joven que encontré entre los arbustos, éste parece ser de los adultos. Madre, padre… de nuevo siento el calor de sus caricias en mi pecho, siento como se desborda en todo mi cuerpo. Lamento no haber podido escapar durante más tiempo, de veras… lo lamento… madre… padre… ésta será la última vez que escuche ese desgarrador estruendo.

(…) El asesino recogía el cuerpo de su víctima de entre la nieve… – Pagarán bien por sus cuernos y piel, muy pronto tendremos que cambiar nuestra zona de caza. – Dijo a su hijo, quién permanecía perplejo ante la escena.