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El señor Matías, el director Rodríguez y la secretaria desnuda - por Rafael F. Lozano

—Hoy, en esta isla, ha ocurrido un milagro.
—¡Me importa una mierda, Rodríguez!
—¿Cómo que una mierda? ¿Qué significa eso?
—¡Te he dicho mil veces que no voy a darte el dinero!
—¿Por qué, señor Matías? No le gusta el título?
—Me parece asqueroso, igual que el guión. Lo has escrito tú, ¿no?
—Sí, señor Matías. El título hace alusión a la obra en la que está basada.
—Horrible. Necesitamos atraer a las tontas de instituto. Ellas son la clave del cine español.
—¿Cómo es eso?
—Quieres ser alguien en el mundillo, pero no tienes ni idea de cómo funcionan las cosas por aquí.
—Usted es el experto. Explíquemelo.
—¿He notado sarcasmo en tu voz?
—No, señor Matías. Usted es el salvador del cine español. No quisiera ofenderle.
—Bien, porque puedo arruinarte la carrera como director incluso antes de empezar. Escucha, las estúpidas de instituto son las más fáciles de atraer al cine. Con ellas vienen amigas, pretendientes y novios. Si forzamos la máquina, pueden acompañarles padres, que verán un buen producto para sus hijos, y que a su vez comentarán la peli en el trabajo a otros padres con niños.
—Vaya visión. Y, ese dinero, el de las entradas ¿para quién es? No me lo diga, que lo adivino. —Rodríguez se acercó a la enorme barriga de Matías y puso la oreja. El bulto tenía latidos propios.
—Maldito mariconazo. Fuera de aquí, desgraciado. ¡Arregla ese guión, u olvídate de grabar!
—Sí, sí, lo arreglaré. ¿Le meto algún pecho? Ya sabe, de estos de la Marca España.
—Hombre, eso siempre llama a las masas. Bien, me gusta. Parece que me escuchas alguna vez. Voy a dejarte pasar lo de mi barriga por esta vez.
—Sí —señaló el vientre de Matías—. Dejemos a su hijo en paz, que aún tiene mucha grasa que devorar ahí dentro—dijo Rodríguez mientras corría hacia la puerta del despacho.
—Hijo de…
Una copia pirata de “Plan 9 del espacio exterior”, un carrete de ocho milímetros de “Tesis” y un proyector digital de doscientos noventa y nueve euros, recién estrenado, fueron lanzados casi al unísono contra la cabeza de Rodríguez. Este consiguió escapar a tiempo, pero los objetos que actuaron de mortero no tuvieron tanta suerte. Lo único que sobrevivió al fuerte golpe fue la película de Ed Wood.
—Diantres, los CDs de mala calidad son a la vez los de mejor calidad —murmulló escondido detrás de la puerta, en el despacho donde la secretaria del señor Matías se rascaba horrorizada una mejilla frente a un espejo. Se había rasgado la piel con las uñas y empezaba a salir sangre—. Joder, aquí están todos locos.
Matías, respirando con dificultad, como un búfalo en celo, marcó un número que tenía guardado en la agenda. Esperó unos segundos y una voz femenina dio paso a otra masculina.
—Esteban. El guión está casi listo, aunque a Rodríguez le faltan algunos días para los últimos arreglos. Me ha hablado de no-se-qué isla de mierda, con un milagro, pero le he puesto en su sitio.
Desde detrás de la puerta, Matías no alcanzaba a escuchar lo que decía el tal Esteban.
—¿Cómo? —continuó el señor Matias—. Tranquilízate, ¿eh? Que no estarías en el Ministerio de no ser por mis putos contactos —dijo gritando.
—Ese tono, señor Matías —dijo la secretaria a lo lejos, con un pedazo de piel en la mano—. A su señora no le gusta que hable así. Tendrán que confesarse luego
—Dinero… —susurró Rodríguez.
—Joder, Esteban. Aguanta un poco. Me debes una. Sí, claro que saldrán pechos. Sí, muy gordos.
—¿Pechos? —dijo Rodríguez más alto—. Me niego a que haya pechos en mi película.
—¿Pueden salir los míos? —La secretaria se había unido a la conversación—. Mira, me los acabo de operar con el aguinaldo que me dio el Ministro.
A Rodríguez se le abrieron los ojos.
—¿Ese Esteban es el Ministro de Cultura? Maldita sea. ¡Sois todos unos mafiosos! Pero unos mafiosos de pacotilla, a la española.
—¿Con quién hablas, director Rodríguez? ¿Le enseño mis pechos entonces?
—¡No! Bueno, vale. Pero luego.
Entró al despacho del señor Matías y le arrancó el teléfono de las manos.
—¡Quiero ahí! —Le gritó a su voluptuoso jefe—. Sí, ¿el señor Ministro? Sí, soy el director Rodríguez. Habrá visto mi película… Ah, no ha visto nada de mí. Vale. Que sepa que no pienso hacer su estúpida… ¿Cómo? ¿Tantos millones? ¿Para mí solo? Entiendo. Quiere pechos…
De repente, la secretaria entró desnuda al despacho.

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17 comentarios

  1. 1. Julieta Blanco dice:

    Hola! Voy a felicitarte porque los diálogos están muy bien logrados. Se aprecia claramente en cada uno de ellos la personalidad de los personajes, que son bien marcadas.
    La temática fue interesante. Nada de islas jajajaj.
    Si tengo algo para criticarte (siempre constructivamente), es que el título le da cierta importancia a la secretaria, que no se ve hasta el final y de hecho termina por ser un hecho algo.. no se si confuso, pero tal vez no logro acomodarlo en la historia.
    Te invito a comentarme!
    https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-21/2254

    Escrito el 28 diciembre 2014 a las 17:43
  2. 2. beba dice:

    A mi alma setentona la pueden la moral y las buenas costumbres; se resiste a dejarse llevar a la risa por esta dura realidad ética y estética que plantea tu sátira.
    ¡Pero, qué se le va a hacer! ¡Me encantó! Excelente manejo de la situación y del lenguaje,
    Y ahí va mi carcajada. Ja, ja, ja, ja.
    Feliz 2015

    Escrito el 28 diciembre 2014 a las 21:01
  3. 3. Cesar A. Martin dice:

    Tengo que felicitarte en primer lugar por el título que ha sido lo que me ha traído hasta aquí, y en segundo lugar por el relato. Una crítica ácida y divertida del mundo de la política y la cultura. Igual me equivoco pero el estilo y tus conocimientos hace pensar que tu formación está directamente relacionada con los medios audiovisuales. Si es así, enhorabuena por aprovecharla tan bien y si no es así, enhorabuena por convercernos de que es posible esa realidad.
    Un saludo

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 00:04
  4. Muchas gracias a todos por vuestros comentarios, anónimos y públicos. Es un placer saber que tu escritura ha hecho sonreir al menos a una persona. Tengo que disculparme por algún error que cometí (El título de la película o alguna interrogación suelta), pues lo escribí con prisas y lo envié sin revisar.

    Julieta Blanco: Utilizar siempre una sucesión de TRES elementos llama mucho más la atención al lector que una de dos o de cuatro. Al menos, eso tengo entendido. Esa fue una de las razones para inculir a la secretaria en el título. En cuanto a su aparición, me pareció un final que iba acorde con todo el ambiente del relato. No quería que el Ministro de Cultura (Esteban), el director Rodríguez o el señor Matías tuvieran la última palabra. Muchas gracias.

    Anónimo 1: Gracias por lo de “unísono”. No sé cómo de unísono pueden lanzarse dos o más cosas. Lo revisaré. Me encanta que te haya evocado a los hermanos Marx o a los Monty Phyton, pues no era esa la intención. Lo consideraré como un pequeño éxito.

    Beba: Muchas gracias. Mi alma ochentera se complace con tu carcajada.

    Anónimo 2: Estoy de acuerdo, seguro que se me coló con las prisas algún guión de más. Sí, puede que los diálogos se enreden a veces, pero ten en cuenta que el señor Matías está hablando por teléfono y no oímos lo que dice el Ministro Esteban. No quería hacerlo fácil. En cuanto a la secretaria como objeto sexual, es eso y mucho más. Es TeleCirco, es el tapar problemas reales con otras actividades que nos distraigan y es el enchufismo y la influencia. Todo eso y más es la secretaria, la verdadera protagonista.

    Cesar A. Martin: Muchísimas gracias. Tu comentario (y el de los demás) me anima a seguir escribiendo en clave de comedia. Pero siento defraudarte: soy economista y enamorado del cine. No obstante, espero poder dedicarme pronto a la escritura.

    Anónimo 3: Gracias, gracias y gracias. Como he comentado más arriba, Esteban no es la misma persona que el señor Matías o el director Rodríguez, sino que es el Ministro de Cultura con el que habla el orondo Matías por teléfono. Sé que era arriesgado hacer una conversación por teléfono con solo un interlocutor, pero me pareció que tenía más chispa si el lector imaginaba las barbaridades que estaba diciendo el Ministro Esteban.

    Muchas gracias a todos. Me pasaré por vuestros escritos, a ver qué milagro ha ocurrido en vuestras islas. El próximo taller será más absurdo, pero más real.

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 13:27
  5. 5. Job Peró dice:

    Jejejeejjejee. Felicidades, Rafael. Un divertido reflejo del mundillo que seguro no se aleja demasiado de la realidad.

    Escrito el 29 diciembre 2014 a las 20:41
  6. 6. Darkristal dice:

    Lo siento, no estoy acostumbrado a este tipo de lecturas, me he confundido un montón XD
    Pero me he reído un tanto después de entenderlo, creo que es bueno, triste y divertido.
    Felicidades 😀

    Escrito el 30 diciembre 2014 a las 01:55
  7. 7. lunaclara dice:

    Hola Rafael:

    Unos diálogos muy divertidos, sí señor. Me recuerdan a las de Andrés Pajares y Fernando Esteso, como la de “Los liantes”, con secretarias pilinguis y esas cosas, jajajaja….

    Felicidades!!

    Y Feliz Año Nuevo!

    Escrito el 30 diciembre 2014 a las 10:39
  8. 8. Diego Manresa Bilbao dice:

    Rafael,
    Buena metafora del cine espaniol, podria ser una escena de una Peli de Almodovar… Divertido y buenas referencias cinefilas!

    Escrito el 30 diciembre 2014 a las 13:58
  9. Muchas gracias, Job Peró, Darkristal, lunaclara y Diego Manresa Bilbao. Cada buen comentario aumenta mis ganas de seguir criticando lo que veo y no me gusta de nuestra querida España. Pero, ojo, también espero y deseo críticas negativas (de las de “podría mejorarse…”, o “a mí me ha parecido un zurullo de hipopótamo”), pues así se aprende mucho más.

    En cuanto tenga un ratito me paso por vuestras historias, y tengo pendientes las de beba y Cesar A. Martín.

    ¡Feliz Año!

    Escrito el 30 diciembre 2014 a las 20:31
  10. 10. Ratopin Johnson dice:

    Hola, me confieso, yo soy Anónimo 1. Igual faltaba más gente para parecerse al camarote de los hermanos Marx, pero sí que me recordó a ellos

    Escrito el 31 diciembre 2014 a las 14:27
  11. 11. juanjohigadillo dice:

    ¡Enhorabuena! Me encanta que de vez en cuando alguien aporte un poco de humor, y creo que es de agradecer. Si sigues por ese camino me tendrás entre tus seguidores.
    Saludos y felicidades.

    Escrito el 2 enero 2015 a las 08:26
  12. 12. Anoide dice:

    Qué divertido, Rafael, me has hecho reír bastante con esos diálogos tan logrados y con la barriga de Matías.

    Se nota un poco que le falta una revisión. Aquí: “Desde detrás de la puerta, Matías no alcanzaba a escuchar lo que decía el tal Esteban.” me confundiste un poco; imagino que quien estaba detrás de la puerta era Rodríguez.

    Aparte de eso, no hay nada que me sacara de la lectura. Una crítica muy divertida, como te digo 🙂 ¡Felicidades!

    Escrito el 3 enero 2015 a las 20:15
  13. 13. Ángel Gabriel dice:

    Pienso que el relato esta escrito en un lenguaje muy regional de España, y por eso leyendo algunos comentarios pues dicen que lo entendieron, yo no soy de allá, por tanto no entendí nada, pero si es un relato fluido y divertido. Los peersonajes se me perdienron entre quien era cada quien. ¡¡¡¡¡¡BUEN TRABAJO, BUEN HUMOR!!!!!!!!!
    eL MIO ES EL 106 LOS BALSEROS. COMENTALO.

    Escrito el 5 enero 2015 a las 05:42
  14. 14. Pato Menudencio dice:

    Los diálogos más ágiles que flash yendo al baño.

    Me gustó el humor del relato, haciendo una crítica al mundo del cine.

    Por cierto, el título tiene bastante gancho. Me recordó a los títulos de “La que se avecina”.

    Saludos.

    Escrito el 5 enero 2015 a las 22:11
  15. 15. Ángel Gabriel dice:

    Para Pato Menudencio, Me gusto eso de los dialogos más ágiles que flash yendo al baño. Seguimos en la lucha.

    Escrito el 6 enero 2015 a las 02:49
  16. 16. Ryan Infield Ralkins dice:

    Admito que entre a leer tu relato por el titulo pero me encontré con un excelente relato. Se hizo rápido de leer, como si fuera a mucha velocidad debido a que los diálogos están tan bien hechos que uno se imagina como sucede todo.
    P.D. Lo de la secretaria también lo imagine…
    Saludos y felicidades.

    Escrito el 7 enero 2015 a las 20:03
  17. 17. Wolfdux dice:

    Un relato original. Me ha gustado, si señor. Felicidades.

    Escrito el 17 enero 2015 a las 12:51

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