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Mil pedazos. - por A.R Valdivia
Él le tocaba el brazo, y ella no hacía nada por detenerlo, es más, lo miraba con esa sonrisa maravillosa que por un tiempo solo fue mía. Por un momento pensé en acercarme, aunque fuera tan solo para saludar, pero desistí. Ella ya había hecho su elección. Me equivoqué y la perdí, así de simple.
Cuando él fue al baño, ella miró directo hacia mí, como siempre hubiera sabido que yo la observaba. Y sonrió, destrozando mi corazón en mil pedazos.
Comentarios (7):
Wolfdux
24/02/2015 a las 15:45
Excelente micro.
¡Nos leemos!
María Campra Pelaez
24/02/2015 a las 16:00
Me ha gustado mucho la idea. Está muy bien.
Bego Asomadaalalocura
26/02/2015 a las 12:06
Bien podría ser el punto de vista de uno de los protagonistas de la historia que tengo entre manos, he visto en mi cabeza esta escena tantas veces desde el punto de vista de ella que leer eso aqui me ha removido por dentro…
Gracias!
Luis Ponce
26/02/2015 a las 15:31
Ambientada en blanco y negro te lleva a las películas de los años cincuenta. Me gusta el juego del trío del galán, la chica y el bueno, el tímido o el ingenuo. No termina de convencerme: “como siempre hubiera sabido que yo la observaba”, a mi entender le falta un si antes de siempre.
Te felicito, es el principio de una novela, pero funciona como micro relato.
Brenda
27/02/2015 a las 06:04
Excelente! Los triángulos amorosos son puntiagudos y uno siempre sale herido. Muy buen micro, felicitaciones!
Adella Brac
27/02/2015 a las 07:47
Muy bonito y elegante.
¡Un saludo!
Zelfus
05/03/2015 a las 01:31
Una imagen clara aunque me parece que podría dar un giro sorpresivo.
Te invito a dejar tus comentados en el #56!