Esta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las << Volver a la lista de textos
La maldición - por Adella Brac
Web: http://www.adellabrac.com
—¡Mecachis!
—¿¿Cómo??
—Se me ha resbalado el cuchillo, casi me quedo sin un dedo.
—¡Mecachis! ¡Malo el cuchillo! ¡Malo, malo, malo!
—Ja… Fui a un colegio monjas, ¿vale?
—¡Sufres la maldición del colegio de monjas, que obliga a hablar como si fueses una niña por siempre! Pero, ¿qué haces? ¿Vas a comer eso?
—No, lo preparo para echarlo a la basura, ¡no joroba! No me mires así, cuándo me pongo nerviosa me da hambre.
—¡Y hablas muy raro! De verdad, no sé cómo haces para no engordar con lo que comes.
—Genes de buena calidad. ¿Envidiosa?
—Ya sabes que sí, ¡mala pécora! Coge esa llamada, anda.
—PizzaMan, dígame… No, es una pizzería… Pues aquí no le podemos ayudar… Sí, es ese número, pero le aseguro que aquí no vendemos cremas para los hongos… Nada, no se preocupe. ¡Qué pesada, concho!
—¿Concho? ¡Vaya colección de palabras casposas! Que se van a llevar bien, ¡ya verás!
—¿Me lo juras?
—A ver, que los hombres no son como las mujeres, no se complican… ¿A qué hora le has dicho que viniera?
—A la salida, a las ocho.
—Igual que yo. Ya son menos cinco.
—Van a llegar a la vez… ¡Ay, nena! Y si no se caen bien, ¿qué hacemos?
—Pues vamos solas. Es algo que ya habíamos planeado. Y deja de limpiar eso, que le vas a borrar el logo.
—A ver, que a mí me molaría ir con ellos, pero no quiero que nos den el viaje. Mi novio es un poco especial a la hora de conocer a alguien.
—¡Pues anda que el mío!
—Me alegro de que por fin le vayas a poner cara. ¡Y viceversa!
—¡Predigo que va a ser una cena genial!
—Ojalá… Ya verás qué ojos verdes más preciosos.
—Seguro que no son más lindos que los de mi peque.
—¿He dicho ya que usa gafas?
—No. El mío las lleva siempre. ¡Le dan un aire muy sexi!
—¡Sí! Mi chico ha comprado un abrigo de pana marrón de segunda mano, y cuando se lo pone, parece un profesor.
—Mi novio usa uno igual. Creo que lo consiguió en… ¿No huele a quemado?
—¡Corcholis! Me había olvidado del horno.
—Cuidado…
—Um… ¿Dirías que se puede comer?
—Diría que roza lo cancerígeno. Mira, ahí viene mi novio. ¿Pero…?
—¡Sorpresa!
—¡Somos gemelos!
—¡Joder!
—¡Vaya con la del colegio de monjas! Has acabado con la maldición.
Hola Adella,
Muy divertido, parecía que iban a compartir novio al final 😀 Muy bueno, como siempre. ¡Felicidades!
Un saludo.
Hola Adella Brac.
La idea de que todo el relato sea un diálogo muy acertada, lo agiliza y lees con énfasis, como si fueras las protagonistas.
Además, de muy divertida, muy bien escrita.
Enhorabuena!
Adella, el texto en dialogo, llevado de esa manera y omitiendo además la letra “te” es un escrito que deberé volver a mirar, para aprender a narrar de una manera dialogada. A mí, se me ha hecho un poco difícil involucrar los diálogos, pues casi siempre hago una narración que por la carencia de estos, corre el riesgo de ponerse tediosa.
Hola Adella,
Me ha gustado mucho, la sorpresa final esta muy bien , que sean gemelos, y el hecho de que sea dialogado, pero creo que en el final, nadie habla diciendo “Somos Gemelos!” habria que haber utilizado otra artimania para decir que lo eran..
Nos leemos!
Saludos Adella.
Primera línea, una sonrisa mía. Me encantan los diálogos, así que por ello ya te doy felicidades.
Una escena muy bien lograda, sin las t, realista y cómica como lo es siempre entre pláticas con las amigas. Lo he leído y lo he disfrutado.
Me pongo el del lado de Diego, esa frase de entrada me descuadró un tantito, primero porque tienes una hilera de diálogo solo entre dos, (sin notas narrativas) y entra en escena en apariencia un tercero… que resultara siendo tercero y cuarto.
Me recordó mucho una puesta en “escenario” con una obra en mi trabajo anterior en donde dos “niñas” se la pasan peleando diciendose lo horrible que es una y otra, y al final decian: ¡Ay ya no peleemos, si somos gemelas! Y esa frase, es anormal a la hora de hablar con naturalidad.
Tienes una creatividad muy interesante y sé que si se te antoja, podrías modificarlo. Pero así con todo, eso no le resta mérito a lo ameno del relato.
Nos leemos.
Pense con J.Sfield, que las dos hablaban del mismo hombre. Ya estaba pensando que habria una pelea y todo asi que me sorprendiste con la entrada de los gemelos. Como dicen Diego y KMarce, eso de somos gemelos me parece raro pero es lo unico. El relato esta excelente y mas que cumpliste el reto opcional y lo escribiste en dialogo. Mis mas sinceras felicitaciones y como dice Leonardo, mirare nuevamente tu relato para asi pulirme mas en mis dialogos que a mi me dan problemas.
Felicitaciones y saludos.
Y gracias por tu comentario en mi relato.
Mala mia y se oye raro. Aclaro: pensé como J.Sfield. Error mio por escribir rapido y no revisar antes de enviar.
Sorry.
Hola Adella, primero gracias por pasar por mi maldición, y segundo me ha gustado mucho, muy ágil y fácil de leer. a mi se me ha notado que el tema no era lo mio pero la verdad es que me ha gustado salir de mi zona de confort aunque el resultado no haya sido el mejor.
Felicidades por tu relato!!
Por fin te encuentro. Me tocó comentarte, y sigo pensando igual, genial.
Un saludo.
¡Ese final no me lo esperaba! Un relato ágil y divertido. A veces me he perdido un poco con quién era la que hablaba, y tuve que leer el principio un par de veces para entender de qué iba el asunto, pero en cuanto me situé ya todo fue como la seda.
Buen relato, me ha gustado. Las historias con diálogos me apasionan y lo has hecho bien.
Por lo demás ya está todo dicho y coincido con los comentarios anteriores, sobretodo con lo del final “somos gemelos”, queda un pelín raro.
Saludos
Adella por un momento me dominaron las mismas deducciones de J. Sfield y de Ryan. Pensé que se trataba del mismo novio. Pero algo te faltó para completar la faena de los gemelos: dos gemelas. Enorme. Felicidades.
Jajaja, que bueno Adella! Una conversación muy ágil y desenfadada. Solo me hubiera gustado aclaraciones de vez en cuando, para saber quien era quien.
Gran final!
Felicidades.
Buenísimo el diálogo, Adella, no pueden ser gemelas, porque ellos sí estarían peleados pensando que era la misma chica. Lo que no entiendo es lo de la maldición de las monjas, es como si los que estudiamos en colegios de curas…, ¡Dios, qué maldición!
Un abrazo.
Hola, Adella:
Felicidades por cumplir el reto.
Has logrado un relato ágil y alegre con diálogos muy sencillos, manteniendo siempre el registro adolescente actual.(O joven; hoy por hoy los límites etarios son muy imprecisos)
Comparto las observaciones que te efectuaron sobre algunas cosas mejorables; aunque no empañan la calidad del trabajo.
Me ha gustado.
Saludos.
No
Me encantó tu historia. De lleno a la escena. Cumpliste con el reto y la lectura fue ágil y fluida. Desde el principio mantenés las curiosidad del lector en la búsqueda del tan ansiado final. Yo también pensé que era el “mismo novio”. Buen giro final”gemelos”
¡FELICITACIONES!!!!!
Te invito a comentar 106
Hola Adela,
Yo también pensaba (como la mayoría) que tenían el mismo novio, me ha gustado mucho más este final. Y la dualidad entre mecachis/joder está muy bien.
Un abrazo
Hola Adella
Un relato ágil y con gran dominio de los diálogos. Divertido y con final sorprendente. Es verdad, Adella, las que nos hemos educado en un colegio de monjas somos incapaces de soltar un taco contundente. Y si en alguna ocasión lo he soltado te puedo asegurar que me escucho rara…..y los demás me recriminan. Es realmente una maldición ya que soltar un buen “coñ-” o un oportuno “jod–” relaja un montón jajajaja……Un relato muy ocurrente
Un relato dialogado es algo que está reservado a quien tiene un dominio narrativo como el que tu tienes, Adella. Los personajes, perfectamente retratados, ¡Fantástico el recurso de la maldición! Con él cierras con gracia el relato y, además, te sirve para poner voz propia a un personaje.
La escena es de diez. Para evitar ese: “¡Somos gemelos!” Te propongo que eso lo diga la mujer “maldita”:
-¡Sorpresa! (lo dice uno de ellos)
-¡Son gemelos! Joder…(lo dice ella)
-¡Vaya con la de…
Un abrazo. como siempre es un gustazo leerte
Que bueno! Se lee de pasada.
Gran lección para aprender diálogos.
Bien hecho, felicidades
Hola Adella, yo vengo a dejarte una flor tambien. Me ha gustado mucho el dialogo, ligero y ameno. Coincido con Luna que tal vez una acotacion por si alguno andabamos perdido, pero de ahi genial… y sin Ts
Solo le tengo una pega pequeña:
“—Um… ¿Dirías que se puede comer?
—Diría que roza lo cancerígeno. Mira, ahí viene mi novio. ¿Pero…?
—¡Sorpresa!
—¡Somos gemelos!
—¡Joder!
—¡Vaya con la del colegio de monjas! Has acabado con la maldición.”
No se si en vez de “somos” hubiera quedado “son” ya que es el dialogo entre ellas. Pero tal vez sean cosas mias.
Felicidades y gracias por tus palabras a mi relato y por la promocion en tuiter del 5 lineas.
Un beso.
¡Gemelos! Por un momento pensé que serían el mismo tipo.
Muy bueno el diálogo, me ha hecho reír muchísimo. Y el cierre de la maldición… hilarante.
Hola Adella, ahora comprendo digas mi texto es denso. He de reconocer el tuyo el ligero, casi volatil, y se lee en un plis plas hasta su final.
Y he de reconocer me ha sorprendido más el taco de la chica, tan modosita ella hasta entonces :), que el que fueran gemelos, idea también muy original y sorpresiva.
Un saludo, enhorabuena por haber cumplido con el reto y gracias por tu comentario. (He tomado nota de mi falta, tenias razón en la errata)
Relato ágil, ameno para leer, con una historia simpática, sin uso de “T”, y para finalizar, cuando todos pensábamos que serían la misma personas, ¡Paf!, gemelos.
Saludos.
Muy divertido, y muy ágil concho :). Me encantan las historias con muchos diálogos.
Hola Adella,
Muy bueno, relato con mucha chispa, muy divertido. Me gusta emplear los diálogos en los textos pero llegar al 100% como tu has hecho, me parece genial. No es sencillo,y mas aún sin T”.
El final inesperado, la maldición de 10.
Una sugerencia: ayudar un poco al lector con alguna anotación, para saber quien habla, se agradecerìa. Nos exigido una concentraión extrema.
Buen trabajo Adella.
Un abrazo
Ya te lo han dicho todo y estoy de acuerdo. Me pasé todo el relato pensando, ya veras, ya veras, esto tiene pinta de acabar mal, teniendo en cuenta el titulo. Me sorprendió el final gratamente. Y en cuanto a la forma, los diálogos me encantan
Felicidades, buen trabajo.
Adella, gracias por las palabras expresadas sobre mi texto “la Maldición” sos muy generosa.
Ratifico mi comentario hecho más arriba sobre tu relato. Saludos.
leonardo_ossa@hotmail.com
¡Hola Adella!
Buen realto. La verdad es que la situación era digna de decir “Joder” ¡y varias veces a demás! jajaja
Un abrazo, ¡nos leemos!
J.Sfield, A.E. Pole, Leonardo Ossa, Diego Manresa Bilbao, KMarce, Ryan Infield Ralkins, Bego Asomadaalalocura, PAULATREIDES, Carla, Troya, Osvaldo Mario Vela Sáenz, lunaclara, ILLARGUIA, beba, grace05, Peter Walley, marazul, David Rubio, Servio Flores, José Torma, A. Losa, Leosinprisa, Pato Menudencio, Ratopin Johnson, Roger/NHICAP, Miranda e Iracunda Smith, ¡gracias por dedicar vuestro tiempo a leer y comentar! 🙂
Siento la ausencia de acotaciones, el reto que me impuse fue armar una escena simplemente con líneas de diálogo.
Tomo buena nota de vuestros (muy acertados) consejos.
¡Nos leemos!
Saludos 🙂
Una conversación muy entretenida. Cerca del final, tras creer que serían la misma persona he pensado que no era propio de ti, y tras desechar esa idea he pensado que la protagonista era alguien con doble personalidad y que hablaba consigo misma de su nuevo novio. Pues al final resulta que ni una ni la otra, jajaja. Pero eso si, muy divertido e inesperado. Felicidades Adella.