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El camión de Thomas - por LwriterL
El autor/a de este texto es menor de edad
Eran más o menos las siete de la tarde cuando todo ocurrió: los juguetes de Thomas habían desaparecido.
Recuerdo que ayer a esta misma hora, el niño jugaba con su camión de bomberos en la terraza del piso superior. Sus padres lo cogieron para darle la merienda, no estuvo más de quince minutos ausente, pero al volver, el camión no estaba.
Recuerdo también que lo buscaban por todas partes, pero nadie sabía nada. Si fueran un poco más atentos, sabrían que el niño lo escondió entre dos macetas.
Saludos LWriter,
Creo que eres nuev@ participando en el taller, asi que bienvenido.
Me ha gustado tu relato, una por que eres menor de edad y estas portando tu grano de arena en este mar de letras, y segundo porque escribes muy sencillo, claro y sin ser pretencioso. Me ha gustado que la sencillez del micro se base en que no pasó nada, sino lo mismo que hacen todos los niños, y es el adulto que crea todos las exageraciones.
Bien hecho.
Tenemos una propuesta que llamamos Reto beba, porque nuestra compañera lo sugirió, es leer a diez compañeros antes de tu relato y los diez que siguen después.** Es así como te he encontrado**
Te invito a hacerlo, es bueno escribir, pero tambien darte a conocer, es tu forma de decir hola, ya verás cuantos más te devuelven el saludo.
Suerte. ¡Nos leemos!
Hola LWriter,invitada por KMarce, me encuentro realizando el reto Beba. Al leer tu relato me he sentido niña otra vez, viendo cómo los mayores dan demasiada importancia a algo que realmente resulta absurdo. Has reflejado muy bien la perspectiva infantil, una perspectiva que todos alguna vez en la vida hemos tenido.
Me ha gustado mucho tu relato sobre todo por la claridad del mismo.
No sé exactamente la intención que tienes al escribirlo pero yo cambiaría “si fueran un poco más atentos” por “si estuvieran un poco más atentos” ya que creo que una cosa es ser atento y otra estarlo, muchas veces se confunde el verbo “ser” con el “estar”.
Felicidades.
Hola LwriterL, hermoso cuento, es cierto, a veces los mayores no vemos lo obvio porque al crecer vamos perdiendo la sencillez natural que teníamos cuando niños, y ellos suelen enseñarnos cosas que en la vida pueden resolverse sin complicaciones, tu relato lo muestra claramente, una verdadera lección. ¡Gracias!