Esta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las << Volver a la lista de textos
El último beso - por Emma
—¿Cómo es el mundo tras el muro? —Preguntó Alma.
—¿Por qué me haces una pregunta que no puedo responder? Sabes que tengo prohibido hablar de eso.
—Me gustaría saber cómo es, eso es todo.
—Créeme, no te gustaría.
—Y eso ¿Cómo lo sabes?
—Lo sé. Conozco los dos lados. Tú no podrías sobrevivir allí sola.
—¿Porqué? ¿Qué puede pasarme?
—Ese mundo no es como el nuestro. Allí la vida es muy distinta.
—No puede ser tan malo vivir ahí fuera. Hay días que escucho música, voces de niños que juegan y gente que ríe. No parece que ese lugar sea tan peligroso como tú me quieres hacer creer —Alma, esbozó una sonrisa y con voz cándida y ensoñadora añadió—: ¡Daría cualquier cosa, por conocer la vida que se esconde detrás de esta infinita pared blanca!
—¡Prométeme, que nunca atravesarás la puerta del muro! —dijo temeroso—. Pues una vez fuera, no podrás volver a cruzarla, quedarás atrapada al otro lado. A lo largo de mis años, he visto como quienes osaron traspasarla, volvían derrotados y desilusionados y como ninguno de ellos, logró encontrar jamás la puerta por la que salieron.
—¿Acaso, la puerta no existe al otro lado?
—El acceso está a ambos lados del muro. Pero una vez que salimos de aquí, se hace invisible para nosotros.
—Los habitantes del otro mundo, ¿pueden acceder al nuestro?
—Si, a veces eso sucede.
—¿Y ellos? Pueden regresar si lo desean?
—Desde este lado la puerta siempre es visible, si alguno de ellos traspasa la línea, puede volver a salir si lo desea. Sin embargo, no lo tienen tan fácil, cuando se trata de acceder al interior. Para una pequeña minoría de esos seres, la puerta y el muro, solo se hacen visibles en determinados momentos de sus vidas, aunque por una u otra razón, la mayoría, dejan pasar la ocasión de atravesar el umbral. Pero para el resto, se podría decir que es invisible. Están demasiado ocupados en el devenir de sus vidas, como para pararse a contemplar las cosas que les rodean.
En esos momentos sonidos de trompetas, tambores, platillos y otros instrumentos, se escucharon a través de la tapia. Alma se puso de pié alborozada, se alzó de puntillas, pero la muralla era demasiado alta y no consiguió ver nada. Sentía una inmensa curiosidad por saber que ocurría en el exterior. Su corazón, palpitaba como nunca lo había hecho. Y deseó estar al otro lado.
—¿Qué pasa fuera? —preguntó alborotada.
—No puedo contártelo. Ya lo sabes.
—¡Por favor! —dijo Alma.
Conociéndola y temiendo que su imprudencia e irreflexión la llevara a cruzar el temido paso, él, claudicó ante su ruego.
—Parece que celebran algo.
—¿Y la música, de donde procede?
—Hay… muchas carrozas y… bandas de músicos. —dijo, dudando si debía seguir describiendo lo que veía.
—¿Puedo subirme a tus ramas y mirar?
—¡No! Eso no es posible. Podría meterme en un lío. Soy el guardián, no puedo involucrarme.
—Solo será un momento, nadie me verá.
—Está bien. Te dejaré si me prometes que nunca, ¿me oyes? nunca, atravesarás la puerta verde.
—¡Valeee…! Te lo prometo ¡Pero déjame subir, por favor!
—Y que nunca más me lo volverás a pedir ¡Ah! y también, que será nuestro secreto.
—¡Te lo prometo! ¡Te lo prometo! ¡Te lo prometo! —respondió Alma, haciendo hincapié en cada una de sus palabras—. Pero… ¿Me vas a dejar subir de una vez, antes de que pasen todas las carrozas?
Trepó a través de su amigo el roble, hasta alcanzar una gruesa rama que traspasaba la pared blanca y desde allí, pudo observar lo que sucedía en aquel territorio, hasta ahora desconocido para ella.
Carrozas de alegres colores, ataviadas con campanillas doradas y hermosas guirnaldas, que como racimos trepaban por sus varales. Marciales orquestas, cuyos alegres ritmos invitaban a bailar y saltar a su alrededor. Y entre las carrozas, una gran algarabía, vitoreaban a extraños personajes, que con sus cabriolas y malabares arrastraban a la multitud.
Alma, sentada en las ramas, observó durante largo rato. Al bajar a los pies del noble guardián, lo abrazó y besó su rugoso tronco.
—¡Sé que sabrás perdonarme! —dijo a modo de disculpa.
El roble y yo, comprendimos que igual que hicieron otros antes que ella, aquel beso sellaba su despedida. Que para Alma, ya no había marcha atrás. Y la vimos atravesar la puerta verde, para penetrar en el universo desconocido de los hombres. Dejando para siempre, el mundo de la fantasía, al que hasta entonces había pertenecido.
Hola Emma
Ingenioso tu cuento y sobre todo asumir los diálogos siembre difíciles de abordar. todo encierra una metáfora, el paso de la vida que es lo que quedó en mi retina
Te felicito.
Solo puntualizar algo breve. en la siguiente oración ” si alguno de ellos traspasa la línea, puede volver a salir si lo desea”
El ” puede volver a salir si lo desea” se refiere a ellos por lo que debería decir, “pueden volver a salir si lo desean”. Incluso el verbo “volver” lo puedes eliminar.
Revisa el uso de adjetivos hay algunos que densan el relato.
Desde mi punto de vista lo que sí eliminaría sería la fase
“y otros instrumentos”
Saludos Emma
Gracias Tavi por entrar en mi texto y comentarlo. Te agradezco mucho tus sugerencias y correcciones. La verdad es que hice algunas modificaciones en el texto final pero cuando lo envié pegué sin querer el texto sin modificar, en fin, eso me sirve para tener más cuidado la próxima vez.
Sobre el uso de los adjetivos, sigo pecando en su exagerado uso. Gracias por recordarme que tengo que ser más parca con ellos.
Es increíble lo que una misma historia puede sugerirle a cada lector. Me parece muy bonito la interpretación que tú has hecho de ella, no lo había pensado. Pero lo que realmente he querido describir en la historia, es a un personaje fantástico que traspasa la frontera existente entre el mundo de la fantasía y la realidad del mundo de los hombres.
Al revés de lo que sucede en Alicia en el País de la Maravillas o La Historia Interminable, entre otros muchos cuentos.
Espero nos sigamos leyendo en próximos talleres.
Hola Emma.
Me mantuviste en suspenso esperando más descripciones, pero no hubieron así que al final cuando va cerrando el relato, me imaginé un hada o una ninfa escapando de su mundo, para entrar al mundo del humano.
En cuanto a los errores, pues ya has aclarado y estoy seguro que en los siguientes tendrás más cuidado.
Por si te apetece leerme, me asignaron el número 210. Es mi primer relato, así que espero no seas tan cruel. jajaja No es cierto, pega con todo, ya que es la única manera de aprender.
Saludos
Hola Emma,
Un relato que comienza con diálogo de por sí me gusta porque me crea interés inmediato y es importante que el avance del diálogo siga, si cabe, incrementando dicho interés. Tú lo has logrado, muy buena utilización del mismo, hasta prácticamente el final se mantiene ese interés sobre qué personaje es ese que se muestra desconfiado en mostrar a Alma el otro lado, me ha sorprendido gratamente que fuera un árbol, muy original. Quizá me ha faltado saber en ese mundo de fantasía qué tipo de personaje era Alma, pero ahí puedo pensar lo que quiera, un hada, por ejemplo.
Comentarte que hay varios párrafos en los que tratas sobre las puertas que hay en uno y otro lado y cuando son visibles o invisibles y para quién que lo he tenido que leer varias veces y me siguen confundiendo bastante.
Sobre la utilización de las comas, a mi parecer y cuando lo he leído en alto, creo que has utilizado demasiadas.
Me gusta el relato, me ha sorprendido el guardián, has usado muy bien el diálogo, original y la pena es que Alma ha decidido venirse con nosotros. Parece ser que sea quién seas, lo desconocido a pesar del temor que puede causar atrae para bien o para mal.
¡Bien hecho Emma!
Saluditos.
Hola Emma
Vine de nuevo a tu relato porque respecto al mío hiciste una consulta, y me encontré que hay un párrafo en que hablas de mi comentario y ahí se contesta un poco tu pregunta.
conseguiste que yo le diera una interpretación distinta a lo que tú querías decir, y esa es la idea, que cada uno la interprete a su gusto de acuerdo a su estado de ánimo y a los sentimientos que en ese momento le embargan. Para mí sigue siendo una gran metáfora y ojalá tenga mucho mas interpretaciones.
Hemingway decía que lo importante es lo que no se cuenta y por eso admiré tanto tu cuento.
Respecto al mío reconozco que es críptico, pero lo hice así con intención, que cada cual hiciera su propia historia ( tal vez se me pasó la mano)pero tu suposición es correcta, aunque como tu cuento lo que quise decir en el cuento te lo aclaro a continuación:
Grisel es una mujer inestable, ese dato lo voy dando con sus actuaciones intempestivas, lejanas a una persona normal. Eso producto de una perdida como tú dices, salvo que lo que perdió fue su hija pequeña. De ahí su afinidad con las pequeñas. Grisel sonríe cuando las gemelas van a su casa y al final.
En todo caso este es el resumen de un cuento un poco más extenso y a pesar que algunos compañeros al igual que tu supusieron una historia, en el original colocaré la clave que está en el retrato.
Emma espero haber respondido tu pregunta. Después de esto el cuento perdió su encanto (jajaja) pero quería aclarártelo, ya que tu relato me impulsó a ello.
Espero el próximo mes para leer una nueva historia tuya. Dejaste alta la vara.
Saludos
Hola Emma!!
Me ha gustado tu historia, muestras perfectament la inquietud de Alma de conocer el otro mundo y como su amigo el roble intenta convencerla de que se quede con él.
El uso continuo del diálogo hace muy dinámica la lectura.
Me ha desconcertado el ‘yo’ del último párrafo, pues solo he visto los dos interlocutores y el narrador.
Sólo destaco una cosilla, en algunas frases sobra la coma que has puesto, un par de veces separas el sujeto del verbo con ella. Te pongo unos ejemplos donde yo no pondría ninguna coma
“Alma, esbozó una sonrisa y con voz cándida y ensoñadora añadió—: ¡Daría cualquier cosa, por conocer la vida que se esconde detrás de esta infinita pared blanca!”
“volvían derrotados y desilusionados y como ninguno de ellos, logró encontrar jamás la puerta por la que salieron “.
—¿Acaso, la puerta no existe al otro lado?
“El roble y yo, comprendimos que igual que hicieron otros antes que ella, aquel beso sellaba su despedida”.
Te paso el enlace de mi relato.
Un saludo!!
https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-31/4781
Hola Emma:
Tu relato encierra mucha filosofía y me gusta el sentido que le has dado. Los personajes no son humanos y lo encuadro dentro del género del cuento.
El ritmo es muy bueno porque en ningún momento se hace lento. Todo lo contrario, los diálogos ayudan a seguir leyendo y, aunque para los más avispados el final es previsible, sabes mantener la intriga; o por lo menos atrapas al lector curioso, como yo.
Me ha pasado como a Carolina que el “yo” del último párrrafo desconcierta. ¿Quién es?. Entendí que Alma dialogaba con el roble, pero de repente aparece otro personaje. Tal vez al querer conseguir el reto el final sea un poco confuso.
Si tienes un momento acláramelo, por favor.
Seguimos escribiendo y aprendiendo y por supuesto nos leemos.
un abrazo
Gracias a todos por dedicar un poco de vuestro tiempo a leer y comentar mi relato.
Voy a intentar aclarar lo del “yo”. Efectivamente como dice Marazul, intenté conseguir el reto y quise dar a entender que el narrador estaba presente en la escena entre Alma y el roble, aunque solo aparece al final del relato como testigo de la salida de Alma del país de la fantasía.
Soy profana en el arte de escribir y no acabo de entender muy bien las diferencias entre los distintos narradores, bueno si creo entenderlo, pero ponerlo en practica es mucho más difícil, ja,ja,ja.
Tuve mis dudas sobre si conseguía el reto del mes, tal y como estaba escrito, pero aún así quise enviarlo porque, en su defecto, esperaba que alguien me lo corrigiera. Es la mejor forma de aprender.
Carmelilla, es cierto que el tema de las puertas resulta un tanto confuso. Como he comentado en mi anterior contestación a Tavi Oyarce, hice unas correcciones sobre el primer escrito, y este punto precisamente estaba retocado, ya que también me resultaba un poco enrevesado.Lo que pasó fue que tomé el archivo equivocado a la hora de enviarlo. De todas formas os agradezco todos vuestros consejos, porque me hace ser más observadora y más exigente conmigo a la hora de revisar lo que hago.
Tengo mucho que aprender sobre los signos de puntuación y vosotros me ayudáis cada mes con vuestros comentarios.
Gracias a todos. Un abrazo.
Espero que nos leamos el próximo mes.
Hola, Emma:
Es muy bonita tu historia. Me encantan los personajes, en especial el roble, un abuelo temeroso pero condescendiente. Así es la vida: la experiencia ajena quiere mostrarnos que no hay rosas sin espinas, pero uno prefiere vivir, aunque a veces duela.
La forma es pulcra; muy buena ortografía y puntuación. Acerca de la observación sobre “puede volver a salir si lo desea”, es correcta tu escritura, ya que “puede” concuerda con “alguno”.
Muchas gracias por tu visita y tus conceptos.
Buenas Emma,
Me ha gustado el relato y la idea de fondo sobre la necesidad de satisfacer la curiosidad aún asumiendo el riesgo. Creo que está bien escrito, con un manejo bueno de los diálogos aunque me uno a varias de las cosas que te comentan los compañeros, principalmente al tema de las puertas que se hace enrevesado si no lo lees varias veces y a no sobrecargar con adjetivos. No se si era tu intención, pero me ha gustado el nombre que has escogido para la protagonista, creo que encierra un matiz que hace mucho más profunda la historia.
En cuanto a cosas que mejorar, como no soy muy experto no estoy seguro al cien por cien de lo que te voy a comentar así que me gustaría que si otros compañeros lo saben a ciencia cierta nos lo aclaren. El tema es que me da la sensación de que el narrador no es realmente un narrador testigo porque en varias frases parece que habla de los sentimientos como si los conociera, no solo los supusiese (“Conociéndola y temiendo que su imprudencia e irreflexión la llevara a cruzar el temido paso”;”dijo, dudando si debía seguir describiendo”,”Su corazón, palpitaba como nunca lo había hecho. Y deseó estar al otro lado”) Es algo a lo que yo le di muchas vueltas en mi relato y aún así no se si conseguí, y entiendo que los que hemos intentado cumplirlo queremos saber si lo hemos conseguido o no,¿no?
En cualquier caso eso no desmerece el relato para nada, solo lo comento porque como estamos para aprender me parece importante. Muchas gracias por compartirlo.
Un saludo!!!
Saludos Emma.
En primer lugar, gracias por pasar por mi relato y tus amables palabras.
El tuyo me ha gustado mucho: es fresco, dinámico y encierra cierta moraleja.
Estoy de acuerdo con los otros comentaristas sobre la puntuación inadecuada en ciertos casos, como cuando separas el sujeto del predicado dentro de la frase.
Contestando a Wiccam (ya que soy la siguiente en orden de comentario a la duda que ha planteado), voy a contestarle. Podría ser un narrador testigo y conocer los sentimientos de la protagonista por sus reacciones. Vamos a imaginarnos que el narrador testigo de esta historia fuese otro árbol del mismo jardín, y que estuviese alejado de la tapia. Conoce perfectamente al viejo roble y a Alma, pues está claro que la niña pasa muchas horas con él. Un día cualquiera oye esa conversación y añade los comentarios sobre la personalidad de la niña, que ya conoce de antes. Tal vez Emma, hubieses conseguido el reto si lo hubieses enfocado de esta manera, añadiendo un pequeño párrafo al principio explicando esta situación.
Aparte de esto he visto unas cuantas faltas de ortografía:
* ¿PORQUÉ? interrogativo va separado.
* “SI, a veces eso sucede”, ese “SÍ” de afirmación va acentuado.
* “PIÉ”, monosílabo, no lleva tilde.
Respecto de los diálogos, perfectos.
En cuanto al contenido, al principio pensé en una princesa china en su jaula de oro, ya me entiendes, apartada del mundo exterior y del contacto de la peble. Fue una grata sorpresa el giro que cogió la historia cuando descubrí el roble.
Solo una contradicción. En mi fuero interno quisiera creerme que nuestro mundo supere al mundo de Alma. Por desgracia no es así y para aprender perder.
Me alegro mucho de haber pasado por aquí.
Un saludo. Nos leemos.
Gracias Wiccan y Earendi, por vuestros comentarios; siempre bienvenidos y aleccionadores.
Respecto al narrador testigo, tal y como lo explica Earendi, se trata de un personaje, que está presente en toda la conversación entre Alma y el roble, que a la vez narra la historia. Solo participa al final, como testigo del abandono de Alma de su mundo.
Es cierto que debería haberle dado presencia al principio del texto, pero ya lo tenía prácticamente escrito, cuando quise arriesgarme a cumplir con el reto.
También es cierto que el tema de los narradores no lo tengo muy claro y aún a sabiendas que quizás no lo hacía bien, quise darle vida a ese personaje de la forma que pude (por la limitación de palabras). Además contaba que alguien de vosotros me haría la rectificación, me gusta aprender de los errores, y para ello hay que cometerlos, ja,ja,ja.
Sobre las faltas de ortografía, y signos de puntuación os agradezco vuestras rectificaciones. Soy algo despistada y a veces se me escapa alguna que otra tilde, y la puntuación ha sido siempre mi punto débil. Gracias a todos por hacerme ver que tengo que fijarme más en lo que escribo y envío.
¡Ah! y muchas gracias por vuestros halagos.
Seguro que seguiremos leyéndonos.
Un abrazo.
Hola Emma!
Me ha gustado mucho tu historia, me parece muy tierna y sobre todo tiene un trasfondo precioso y triste a la vez… Me encanta como has sabido plasmar la sociedad aburrida, sin creatividad, gris, marcada por el reloj, en la cual vivimos. Al igual que a mis compañeros en algún momento me ha despistado el tema de las puertas y los colores. Hablas del gran muro gris, la puerta verde… Es un poco enrevesado para una narración de menos de 750 palabras.
También me ha confundido un poco el narrador, que solo aparece al final y no me ha quedado muy claro quién es. Como dices que es el mundo de la fantasía, para retocarlo un poco más podrías haber dicho que era un duendecillo de los árboles o algo por el estilo, que está entre las ramas del roble y presencia la conversación.
Por lo demás, como ya te digo me ha gustado, es una idea muy original. Felicidades y por si te apetece pasarte, mi relato es el 118.
Un abrazo y nos leemos!
Enhorabuena, bonita historia.
Saludos!
Me gustó mucho la historia. Sobre todo el personajes del árbol.
Felicidades.
Ah y aprendiendo de tus diálogos.
Una cosita chiquitita, es que no entendí quien contaba la historia.
Hola Emma, me paso por tu relato por que Earendil me lo recomendó, pues me dijo que el narrador era como el mío… ¡un árbol!
Decirte que me ha gustado mucho y que tienes una buena imaginación. Lo único que me he quedado con ganas de saber si el árbol hablaba con un hada, una niña, una ninfa… Me hubiese gustado una breve descripción.
Felicidades por el relato, sin duda te invito a que leas el mío, nº 92.
Felicidades.
Es un relato fantástico. Te engancha a las primeras lineas y no puedes parar de leer. Es un muy buen trabajo ya que (al menos para mi) los diálogos son la parte mas difícil de escribir.
Saludos y te invito a que pases por mi relato, soy el 218.
Quiero daros las gracias por ese ratito que habéis dedicado a leer y comentar mi relato, se que no es fácil con tantos donde elegir.
A Coral. Es verdad que el tema de las puertas ha quedado un poco enrevesado, pero como dije en un anterior comentario, había realizado algunas modificaciones al respecto, entre otras. Pero cometí el error de enviar el archivo equivocado, no podéis imaginar el coraje que pasé cuando me dí cuenta de ello, pues para mas inri, lo envié con una semana de antelación al cierre.
El relato forma parte de un cuento que estoy escribiendo, del cual he extraido este diálogo, que es el que marca el antes y el después en la vida de Alma. Es cierto que quizás me faltó describir al narrador y a Alma, pero intenté cumplir con el reto, sin dar muchas pistas sobre los personajes. Quise que la imaginación de cada cual hiciese el resto.
Y os aseguro que me habéis ayudado con vuestras sugerencias y dudas sobre la personalidad de ambos.
Muchas gracias de nuevo por vuestras correcciones, sugerencias, y halagos.
Hasta el nuevo taller.Un abrazo.
Hola Emma!
Muchas gracias por dedicarle un ratito a mi relato y por tu comentario.
¡Me ha gustado mucho tu relato! Los diálogos estan muy bien y como ya te han comentado hacen que te enganches fácilmente a la historia y que la misma fluya. Me ha encantado el giro al descubrir que el que hablaba era el árbol, al principio imaginaba que eran dos personas y ha sido divertido comprobar que no era así. Muy buen golpe de efecto.
Reitero el tema de las comas. Me han parecido excesivas en alguno de los párrafos.
Ya ha salido en algunos de los comentarios, el tema del narrador testigo esta incluido de una forma muy forzada, y en el relato, tal como esta escrito no era para nada necesario. Si realmente querías introducirlo debías haber pensado antes quien lo iba a narrar, porque y cómo se entera de la historia ya que teoricamente el narrador testigo es un mero espectador.
De todas formas insisto, en tu historia tal como esta contada no es para nada necesario, ya que esta muy bien, si bien es cierto, que también es bueno investigar nuevas formas de escribir introduciendo los riesgos para ir aprendiendo.
Muy buen relato. ¡Muchas felicidades!
Hola, Emma:
Después de tanto comentario no tengo mucho que añadir. Estoy de acuerdo con lo que te han dicho ya los compañeros sobre los signos de puntuación y el narrador testigo. De todos modos no quería dejar de decirte que lo había leído y que me había gustado un montón.
Seguiré leyéndote.
Un saludo