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Pirofilia - por Paracelsus
Eran las dos de la madrugada y la casa de los Valencia ardía por los cuatro costados. Los vecinos escucharon los gritos y salieron a la calle. Vieron un denso humo negro salir por las ventanas rotas. Llamaron a los bomberos, mientras trataban en vano de extinguir el incendio con sus mangueras de jardín, era como tratar de apagar el infierno con un par de padrenuestros.
Los bomberos llegaron en veinte minutos. De inmediato, establecieron un perímetro de seguridad. Desenrollaron la manguera principal y la conectaron al grifo de agua más cercano . Uno de los bomberos, un joven de rostro aniñado y gestos nerviosos, trató de abrir la válvula.
_ ¡Mierda!_ Gritó._ ¡No hay presión!_ ¡Capitán! , ¿Con qué quiere que apaguemos este desastre?
_Usa la reserva._ Gritó el capitán. El joven corrió hacia el camión y conectó la boquilla a la válvula de la bomba. El agua atacó con furia la casa en llamas.
Agnes y Julio, miraban con rostros desolados, como las llamas consumían veinte años de sacrificios. Habían escapado del fuego vestidos sólo con su ropa de dormir.
Alicia, la hija mayor, caminaba de aquí para allá, vestida con un camisón casi transparente. Hablaba por teléfono con Luis, su novio, alternando gritos y sollozos, exigiéndole que llegara lo antes posible.
Lucio, el hijo de diez años, se abría paso entre los curiosos, para ver mejor su casa.
Un bombero, de estatura baja y contextura gruesa, se acercó a Julio, abriéndose paso con dificultad entre la multitud de curiosos. Tenía un rostro redondo, tiznado de hollín.
_ Soy el capitán Jara. ¿Es usted el propietario?_ le preguntó. _Su voz le llegaba sofocada por el estrépito de las sirenas y el bullicio de la gente.
Julio, se acercó al oído del capitán y le contestó.
_ ¡Sí!, yo soy
El capitán, lo tomó del brazo y lo apartó de la multitud, llevándolo tras el carro de la unidad.
_ Lamento decirle que no hay mucho por hacer. El fuego está demasiado extendido. La estructura colapsará en cualquier momento. ¿Tiene alguna idea de cómo se originó?
Julio, trataba de recordar. Se había dormido temprano y profundamente, cuando lo despertó la voz angustiada de su hijo gritando: ¡Fuego, fuego, la casa se quema! Saltó de la cama, luego todo se hizo confuso. El humo irritaba sus ojos. Bajaba la escalera a tientas, detrás de su mujer e hija, rogando no tropezar. Llevaba a Lucio a su lado. Abrió la puerta y una bocanada de aire puro lo alivió de inmediato. No recordaba más. Sin embargo, tenía aquella desesperante sensación de haber perdido algo importante y no saber qué era. El capitán notó su confusión y le dijo
_ No se preocupe, el verano ha transformado esto en un horno. Todo está reseco. No es de extrañar, que hayamos tenido tanto trabajo estas últimas semanas.
Una fuerte explosión interrumpió su diálogo. Las alarmas, de los autos estacionados en las cercanías, empezaron a sonar.
Julio pensó con tristeza. Ahí va el tanque de propano, siempre creí que 360 litros eran una exageración.
Agnes, De repente, se acordó de Lucio. Su corazón pareció detenerse un instante.
_ ¡No!_ Dijo en voz alta_ ¿dónde está mi hijo?
Lucio, se había apartado de la multitud, y estaba sentado sobre un montón de escombros, con las piernas cruzadas, la mirada fija, fascinado por el poder del fuego. Su calor lo envolvía como el abrazo de su madre. Extrañado, sentía brotar de su entrepierna alguna clase de energía. Era como si el mismo fuego incendiara su cuerpo y sus sentidos. El fuego lo llamaba, y Lucio se entregó a él.
Agnes, lo vio, sentado en aquel montículo, frente a su hogar. Se acercó, lo levantó y lo abrazó con fuerza. Su hijo no lloraba, ni siquiera reconocía su voz. Sus ojos no parpadeaban y su rostro, carente de toda expresión, estaba fijo en las llamas que ya se extinguían. Agnes, desesperada, lo sacudió con fuerza, tratando que recuperara la consciencia. Lucio, pareció salir de un profundo trance. Miró a su madre y le dijo.
_Mamá, me prometes que nunca dejarás de quererme.
_Agnes, no pudo responder con palabras. Dejó que sus caricias lo dijeran todo.
Lucio, deslizó una de sus manos buscando el bolsillo de sus jeans que ocultaba la preciosa reliquia. Sus dedos acariciaron con sensualidad el encendedor de su abuelo. Sí, esta había sido la mejor noche de su vida, y estaba seguro que el futuro le reservaba muchas más.
Me agrada el argumento, aunque no sé si en realidad cumpliste con el reto del cliffhanger, en mi humilde opinión le hace falta fuerza, o más bien pasa que se puede tomar como un microrrelato que cierra con esa frase.
Hay un par de detalles que me incomodaron bastante y que intuyo pones a propósito, pero igual te los hago notar sin ánimos de que los cambies, solo porque necesito expresarlos:
»Guiones bajos para diálogos… yo prefiero los guiones largos —(Alt +0151) pero son varios los que usan guiones bajos, y no hay por qué discutir al respecto.
»Las comas después de mencionar los nombres… eso pausa mucho la lectura, demasiado para mi gusto, es algo que viole ninguna regla de escritura, así que está “bien” pero en lo personal me incomodó bastante.
Ahora, valorando la historia como tal, a pesar de ser un fragmento corto, se intuye quién provocó el incendio, entiendo que no es tu intención ocultarlo dado que básicamente lo gritas con el título.
Me parece que pinta para ser una historia muy prometedora dependiendo de qué tan bien esté construido el personaje de Lucio, y de si se presenta algún antagonista o no. Me ha parecido un gran inicio para una novela y te animo a continuarla hasta darle fin 🙂 ¡Saludos!
Yo difiero del primer comentario, a mi parecer es un buen inicio para una novela, pues yo lo veo como el comienzo de un piromaniaco y de todas las terribles cosas que sucederán.
En cuanto a los diálogos, son muy cortos es verdad pero con 750 palabras es suficiente.
En conclusión en mi humilde opinión descartando errores de puntuación a mi si me gusto la trama.
Saludos
Y yo coincido con el primer comentario. En verdad no da la impresión de ser el primer capítulo de una novela, sino que luce más bien como un microrrelato. El final así lo parece sugerir, ya que más que aportar una sensación de continuidad, parece realmente el remate de la historia. Por otra parte, sería una buena historia creo yo, si fuera algo más sustancial quizás y si llegase a transmitir algo. Además, el texto está bien escrito, las frases están bien construidas y los diálogos están muy bien presentados. La verdad es que me gusta cómo se suceden las voces de los personajes y del narrador, parece hecho por un escritor profesional.
El capítulo desde la primera frase se ve que está bien escrito. Además, por todo el texto, y esto demuestra buenas cualidades tuyas como escritor, hay bastantes imágenes muy bien hechas, como lo de que “las llamas consumían veinte años de sacrificio”.
Y volviendo a coincidir con el primer comentario, lo de las comas después de los nombres no es que quede mal, sino que es horrible y además es totalmente incorrecto. Una sugerencia: las pausas en el texto no requieren necesariamente una coma; éstas se usan con funciones concretas, como poner aclaraciones o situarlas delante de ciertos adverbios.
Gracias por sus comentarios, me serán muy útiles. No hay nada más difícil que terminar con un vicio. Ja Ja.
Respecto a la historia, mi intención fue escribir, no sobre un pirómano, sino sobre: “el amor al fuego”, en tanto su profundo simbolismo. La idea era. ¿Cómo sería la psiquis de un ser humano que literalmente ama al fuego?, ¿qué ocurriría con su familia cuando lo descubrieran?, ¿cómo sería su vida? Etc.
Hola, Paracelsus.
Me gusta mucho tu estilo, el tono, y en general, la historia.
Estoy de acuerdo (y al mismo tiempo no) con los que dicen que tu historia no parece cumplir con el taller. Sí, ese final lo convierte en un microrrelato, pero como tú bien dices, se convierte en una novela porque hablamos solo del nacimiento de su amor por el fuego. Resumiendo, para mi, cumples con los requisitos y el reto del taller (pero intenta marcar una mayor diferenciación para la próxima).
Respecto a la frase “paso entre los curiosos”, me parece que se repite muy seguidamente. Cuidado con esas repeticiones, porque incomodan la lectura, los sinónimos podrían ayudarte.
Me gustaría conocer el desarrollo de tu personaje. Confío en que sabrás desarrollarlo. Saludos
**Mi relato es el 195. “¿Por qué #$!@ tu perro me dice esas cosas?” -> https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-32/5108
¡Hola Paracelsus! Me gustó tu relato, pero creo que no cumple con el reto. Es un microrrelato con una muy buena historia, bien contada, me gusta tu estilo.
Paso a decirte los errores: en los diálogos no debes utilizar guión bajo. Se utiliza la raya. Además están mal utilizadas. Te paso el link de Literautas: https://www.literautas.com/es/blog/post-10363/como-representar-un-dialogo-graficamente/
Aquí no lleva raya de diálogo, creo que fue un desliz: “_Agnes, no pudo responder con palabras”. Por lo demás, si hay otras fallas no las vi. Felicitaciones. Si gustas pásate por el mío #5.
Hola, Paracelsus:
Yo también veo un microrelato, con un personaje siniestro que oculta su responsabilidad. Si bien cuando le pregunta a la madre si lo querrá siempre se filtra su sentimiento de culpa,el final es su satisfacción frente al fuego.
Es un relato muy interesante y has manejado muy bien su ritmo;tienes buen vocabulario y escribes con pulcritud.
Es incorrecto que separes el sujeto y el predicado con coma.
Saludos. Adelante.
Cuando un inciso del narrador comienza con verbo de habla, este se escribe con minúscula._ ¡No!_ dijo en voz alta_ ¿Dónde está mi hijo?
Las rayas de diálogo se pueden hacer con una combinación alfanumérica, cuando tienes teclado numérico. En mi caso, no lo tengo; los copio de cualquier otro texto, y los pego cuando los necesito
Hola muy buenas. Desde hace tiempo me gusta casa el enigma que lleva el titulo y aqui esta mas que explicito.Eso esta bien. los dialogos son algo pobres. el cliffhanger me ha gustado aunque lo he pillao a la 2 vez de leerme tu historia.las descipciones estan muy bien. ciertas frases son muy de novela y otras me resultan menos
Hay historia para una novela, pero yo cambiaría el punto de vista. Lo centraría más en Lucio. Quiero saber cual fue la chispa inicial que lo llevó a esa enfermedad, que ve representado en ese fuego, como lo planeó o tal vez de quien aprendió.