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EL DILEMA DE MINIA BRAUN - por Roger/NHICAP
EL DILEMA DE MINIA BRAUN
Capítulo Primero: Mañana de sorpresas.
Había aceptado acudir hoy al estudio para ver las fotografías aunque el halo de misterio en que envolvió la cita le parecía un exceso, algo típico de Ettore.
La entrada al edificio por un portal con pobre iluminación era poco acogedora, pero subió los dos peldaños y entró en el largo corredor que estaba sumergido en una penumbra enigmática. Se sintió incómoda allí y, para colmo, de pronto escuchó un ruido sordo al fondo, junto a los ascensores. Permaneció quieta, algo asustada: “No estoy sola", se dijo. Del susto pasó al temor y después al miedo. No aguantó más y regresó apresurada hacia la calle.
Al salir, consiguió tranquilizarse entre las decenas de transeúntes que se dirigían a sus quehaceres. “Soy más rara que un perro verde", murmuró mientras caminaba a recoger el coche aparcado frente a la iglesia. Aquella mortecina oscuridad del corredor generó en Minia Braun, mujer de mente lúcida y mirada serena, una repentina antipatía hacia el edificio porque la oscuridad y los ruidos bruscos le causaban miedo, y, a sus treinta y cinco años, aún no había conseguido manejar con naturalidad aquella aprensión. Minia había ascendido recientemente a redactora jefa de Local y Sucesos en el periódico Independiente.
Minutos más tarde, alguien salió del mismo edificio con un portafolios, caminó sin llamar la atención hasta la esquina con la Ronda de las Ánimas y desapareció.
Al tiempo que esto acontecía, ella se encontraba junto a su viejo Golf enfrascada en buscar el móvil en el interior del atiborrado bolso. Quería llamar a Ettore para explicarle que un contratiempo le impedía acercarse al estudio y quedaría a desayunar con el mañana, eso sí, en algún café tranquilo. Vería las fotos y podría devolverle la cartera con la documentación personal, que ayer olvidó en su despacho.
De pronto, mientras marcaba, el aullido de las sirenas de dos coches de policía le originaron un nuevo sobresalto. Al instante, arrojó el móvil dentro del bolso —ahora su mirada taladraba—, arrancó rápido y se encaminó al Peñasco de Higinio, un promontorio suave que frecuentaba para relajarse respirando mar y silencio. Con Ettore ya hablaría.
Cuando regresó a la redacción, Lola, su eficaz secretaria y, además, confidente sentimental, le comentó la llamada del comisario Torralba, el veterano jefe de información de la Policía con quién mantenía unas relaciones profesionales cordiales.
Entró en su despacho, bebió media taza de café y primero devolvió la llamada al policía:
—Comisario Torralba al habla. Dígame
—Hola Torralba, soy Minia del Independiente ¿Me llamabas para invitarme a cenar? —preguntó con voz pizpireta.
—¿Cómo estás preciosa? Ya me gustaría guapa, pero tendrá que ser en otra ocasión.
—¡Ay Torralba! estás de un aburrido que te mueres.
—Minia —su tono se volvió serio—, necesito preguntarte por Ettore Nieri, el «paparazzi» —la sonrisa de ella cambió a un gesto de sorpresa— ¿Lo conoces?
Tardó unos segundos en responder
—Sí…, claro. Es un free-lance que nos proporciona el material gráfico para reportajes. Ayer, sin ir más lejos, estuvo en la redacción ¿Se ha metido en algún lío?
—Es posible ¿Puedes pasar hoy por Comisaría? Quiero que veas unas fotos —los rutilantes ojos de Minia casi salieron de sus órbitas—; pero reaccionó rápido.
—¿Qué tal sobre las dos?
—Gracias preciosa, aquí te espero —su voz denotaba preocupación.
Cuando Minia colgó el teléfono, respiró hondo y bebió el resto del café. Después exclamó: “Joder con el «paparazzi»". Se preguntó si serían las mismas fotos de Ettore y recordó sus palabras: "Tendrás una exclusiva que causará gran revuelo en la ciudad". Surgían más preguntas: “Si son las mismas fotos ¿Cómo llegaron a la policía? ¿Por qué Torralba quiere enseñarme las fotos? Sus genes de investigadora habían comenzado a activar los centros neurálgicos de su cuerpo y se puso en marcha.
Volcó todo el contenido del bolso en la mesa, incluida la cartera de Ettore, tomó el móvil y marcó sin éxito: no daba señal. “Ayer no se interesó por la cartera ni hoy por mi plantón. Es demasiado extraño", masculló inquieta. Salió a la sala de redacción, tomó del brazo al avispado cronista de sucesos, Tito, y le pidió que localizara al «paparazzi»“ indagando hasta en el infierno", El “¡Llámame antes de las dos!", sonó a ordeno y mando.
De vuelta al despacho, Minia se animó a curiosear el contenido de la cartera y así encontró la pequeña llave, fijada con celo a la nota escrita que le había dejado Ettore.
Hola Roger. Comienzo comentándote dos cosas.
*con el mañana,aquí debería ser él y no el.
*El “¡Llámame antes de las dos!”, sonó a ordeno y mando. Esta frase me sonó rara. Creo que querías decir:”¡Eh!¡Llámame antes de las dos!, sonó a orden y mandato. O quizás al final hubieses preferido decir: ordenó y mandó.
En cuanto a la historia, es ciertamente interesante, está claro que estamos ante un asesinato, todavía no sabemos porqué y, la única testigo del crimen, aunque sea inconscientemente es Minia, solo que ella aún no lo sabe, pero no dudo de que Torralba enseguida la pondrá en situación. Has conseguido crear expectación con esas fotos,llamar el interés del lector. De aquí podría salir una buena novela policíaca.
Bravo, Roger/NHICAP, ya nos estás contando cuál es el dilema, no creo que podamos soportar quedarnos así en ascuas, mientras Minia se debate entre sus miedos y sus investigaciones. Seguro que lo tienes todo bien atado y resulta que nos estamos perdiendo un relato de lo más negro de Raymond Chandler, o Dashiell Hammett.
Enhorabuena por tu personaje.
Hola, Roger/NHICAP.
Tu capítulo me recordó una película llamada “Primicia Mortal”. Mientras la leía, recreaba esa película en mi mente.
Buen trabajo cumpliendo con el reto del taller.
Detalles a mejorar:
-“al estudio para ver las fotografías aunque el halo” — Creo que falta una coma entre fotografías y aunque
-«“Si son las mismas fotos ¿Cómo llegaron» — Abriste comillas, pero nunca las cierras
Espero haber sido de ayuda. Gracias por el relato entretenido. Saludos.
**Mi relato es el 195. “¿Por qué #$!@ tu perro me dice esas cosas?” -> https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-32/5108#comment-71589
Hola Roger: típicamente policial la trama tiene esos toques distintivos de los guiones cinematográficos o televisivos que nunca terminamos de entender. ¿Por qué tenía que distraerse buscando el móvil, el preciso momento en que el asesino salía del edificio. Pero si ella estaba distraída y no vio al sospechoso, ¿alguien la vio a ella salir a la misma hora del mismo edificio?
Es uno de los anzuelos y creo que nos has pescado.
Suerte con lo que viene.
Nos leemos.
Buenos días, Roger:
Enhorabuena por tu relato, sobre todo porque creo que has conseguido rematarlo con un eficaz cliffhanger que, al menos para mí, atrapa y te deja con ganas de saber a qué historia nos va a llevar. En cuanto a los aspectos formales no tengo nada que añadir a lo ya dicho más arriba.
Felicidades de nuevo y saludos desde Pucela.
Juanjo
¡Qué pedazo historia se barrunta!
Un personaje femenino en un mundo de criminales promete y mucho.
Atrapante.
Quizá, como inicio de novela, habría que estructurarlo un poco más en capítulos. Así tal cual, se da mucha información que de buen comienzo puede abrumar un tanto. En una novela, el primer capítulo sería la entrada en el portal hasta su salida. ahí desarrollar algo más la escena. Segundo capítulo: llegada a la redacción; etc…
En cuanto a detalles formales te paso los que he detectado por si te sirve:
1. …para ver las fotografías (Aquí cortaría la frase con punto). Aunque el halo de misterio en que envolvió la cita le parecía un exceso, (eso era) algo típico de Ettore.
2.La entrada al edificio por un portal con pobre iluminación era poco acogedora. (La descripción es muy larga y “pobre” “poco” es redundante.
3. estaba sumergido en una penumbra enigmática.(No sé es demasiado florido para una trama negra, algo más directo). Más adelante “mortecina oscuridad”
4. Se sintió incómoda allí y, para colmo,(te sugiero: Se sentía incómoda allí, cuando) escuchó un ruido sordo al fondo, junto a los ascensores.
5. Vigila las comillas. En castellano las que se utilizan por norma son las angulares « » “No estoy sola”, “Soy más rara que un perro verde”. La inglesas se utilizan dentro de las angulares. En esta frase “Joder con el «paparazzi»” sería justo al revés «Joder con el “paparazzi”».
6.(…) quedaría a desayunar con el (él) mañana, eso sí, en algún café
7. —Comisario Torralba al habla. Dígame (punto)
8. —Hola Torralba, soy Minia del Independiente (punto) ¿Me llamabas para invitarme a cenar? —preguntó con voz pizpireta.
9. —¿Cómo estás preciosa? Ya me gustaría (coma) guapa, pero tendrá que ser en otra ocasión.
10 (…) necesito preguntarte por Ettore Nieri, el «paparazzi» —la sonrisa de ella cambió a un gesto de sorpresa (esta acotación sería aconsejable tras la intervención de Torralba)— ¿Lo conoces?
11 Es un free-lance (no sé si va con guion) que nos
12 —Es posible (coma) ¿Puedes pasar hoy por Comisaría? Quiero que veas unas fotos —los rutilantes ojos de Minia casi salieron de sus órbitas—;(este guion no es correcto, basta con el punto y coma) pero reaccionó rápido.
13. Surgían más preguntas: “Si son las mismas fotos ¿Cómo llegaron a la policía? ¿Por qué Torralba quiere enseñarme las fotos? Sus (en castellano es mejor no utilizar los posesivos sino el artículo) genes de investigadora.
Un abrazo
Hola Roger/NHICAP,
Gracias por tus observaciones que para una novata como yo son muy enriquecedoras y gracias por la ilusión que me ha producido que te hayas molestado en comentar mi escrito.
He leído el tuyo, era como si estuviera leyendo alguna novela policíaca famosa. Enhorabuena.
Pienso que la frase ” sonó a ordeno y mando” está muy correcta.
Saludos
Hola Roger!
De nuevo agradecido inmensamente por tu visita a mi relato y tu comentario!
El policial es un género al que algún día me voy a animar, me parece la cima de la narrativa dramática. Por ahora estoy lejos, por eso desde ya mi admiración.
A las correcciones que te han hecho ya con lupa los duchos compañeros, agrego solo este comentario, que es un matiz: si Minia y Torralba tenían “relaciones profesionales cordiales” solamente, cómo se explica la lanzada de la chica en ese telefonema. No me molesta la lanzada, al contrario, pero lo de “relaciones profesionales cordiales” no pega, porque claramente ahí hay algo más, aunque más no sea “relaciones profesionales cordiales con asunto pendiente”, jeje.
Felicitaciones y a seguir!
¿Es posible que no te haya comentado? Que despiste más tonto, si tu texto fue de los primeros que leí!!!
Bueno, de la firma ya no te digo nada porque ya te lo han dicho todo…
De la historia. Decirte que al principio me sonó un poco a chic-lit, tan de moda ahora (y que poco me gusta!) pero después, a medida que avanzaba la historia, esa percepción cambio. Me ha sonado muy fresco, con una mezcla de ambiente entre series tipo Castle y, quizás, cómics tipo Spiderman. Una mezcla muy muy interesante.
La historia en sí, como casi todas la de este tipo, enganchan porque si. Yo también quiero saber lo que había en esa cartera….
Tienes pensado continuarlo?
Nos leemos
Hola Roger. En esta ocación, para no dejar de dar mi opinión a todos los compañeros literautas en quienes baso mis esperanzas de un buen aprendizaje, hice un enumerado: a tí te toco ser el último en dicha lista; así termino mi faena.
Tu escrito como siempre muy pulcro para mi forma de ver, para otros tenia recomendaciones que hacer.
Hay un dicho que dicta “nadie aprende de consejos ajenos”, en mi caso despuós de ver las recomendaciones sugeridas a tu escrito se aclara en mi mente que siempre hay algo que modificar. Hubo alguién que contribuyó con que la frase “sonó a mando y ordeno” le parecía rara; a mi me sonó perfecta: quizá se omitió el ante-fijo a una orden “Aquí yo mando y ordeno” porque la orden ya estaba implicita en la redacción.
En cuanto al reto, lo cumpliste con creces al dejar sembrado en mi el interés y la curiosidad por lo que sigue. Enhorabuena
Hola Roger, te paso a comentar un par de cosillas que aún no te habían mencionado los compañeros:
Hay una serie de palabras como “Local y sucesos”, “policía” y “comisaría” que las escribes con la primera letra en mayúsculas. Ahora no estoy 100% seguro, pero creo que no es necesario. Por otro lado, en el diálogo; “—¡Ay Torralba! estás de un aburrido que te mueres.” “estás” debería ir en mayúscula.
Felicidades por el relato, engancha y el final engancha más todavía. Un saludo.
Hola Roger,
Muchas gracias por pasarte por mi relato.
Se nota que tienes ya toda la historia estructurada en tu cabeza, y la verdad es que el cliffhanger está muy conseguido. Quizás como te han dicho yo habría dosificado un poco más la información y habría quitado un par de personajes, aunque como forma de ir colocando las piezas del juego está muy bien. Espero que lo continúes y que nos lo hagas saber.
Un abrazo
Hola Rober/NHICAP
Lo primero de todo gracias por aportar tu historia, y aunque ya ha sido estupendamente comentada por los compañeros, espero aportarte un par de cosas.
En cuanto al contenido, lo único que me gustaría comentarte que no se haya dicho ya está en relación con la descripción de los ambientes. Me explico: al lector le gusta llegar a la conclusión de que una cita está envuelta en un halo de misterio por sí solo, o sea que el escritor le debería describir ese halo para que a él llegue a sentir ese misterio. De este modo se lo estás “imponiendo”, en el buen sentido de la palabra por supuesto. Pasa lo mismo con la “penumbra enigmática”: ¿por qué lo era? Quede claro que es una apreciación muy muy personal.
En cuanto a ese elemento misterioso del final (la llave) me parece una especie de elemento desencadenante de acción posterior muy acertado como cliffhanger, me parece que tiene mucho juego, y que deja esta historia de novela negra en un punto bueno para que el lector pida más y más…
En lo que se refiere a la forma, la verdad es que David Rubio y otros compañeros han hecho un análisis tan profundo que no tengo más que añadir, a no ser un expreso agradecimiento para ellos por ese trabajo tan minucioso. A mí lo que más me rechinó fue el uso que haces de los diferentes tipos de comillas. Solo un apunte: en lo que se refiere a la famosa frase de:
El “¡Llámame antes de las dos!”, sonó a ordeno y mando.
A mí me hubiera sonado mejor así:
El “¡Llámame antes de las dos!”, sonó a “ordeno y mando”.
En general, y para terminar, me ha gustado la historia, también opino que cumple perfectamente con el reto, y envuelve en ese ambientillo de novela negra.
Espero que mis comentarios te puedan ayudar en algo y servir de acicate para seguir escribiendo.
Enhorabuena ESCRITOR/A, y gracias.
P.D. Si te quieres pasar por mi relato, sería un placer, es el 196
Hola Roger/NHICAP, me ha parecido un capítulo con mucho enganche, creo que varios coincidimos en el futuro que tiene la historia, es genial.
El titulo me parece muy sugerente, y nos habla de lo que habrá de venir, así que es muy acorde, muy bien nombrado el texto.
Te agradezco además la lectura y el comentario que hiciste a mi texto. Estoy de acuerdo con la sugerencia que me dejaste. De nuevo muchas gracias. Un abrazo.
Estimados colegas, os agradezco la lectura de mi texto y las observaciones y sugerencias que habéis planteado. Tomo buena nota por el despiece del texto, en cuanto a aspectos formales, que han realizado David y Bastián así como la advertencia de algunos en facilitar abundante información en este primer capítulo. Meditaré este aspecto. Gracias a todos y me alegra que os haya gustado la historia.
La propuesta de este mes, me ha permitido recuperar la idea que tenía en mente desde hace un año, de construir un thriller con ingredientes policíacos, periodísticos y amorosos. He de reconocer que no pude dedicar el tiempo debido a pulir el texto pero no lo lamento; por vuestros comentarios, veo que puedo intentar llevar adelante la idea de una novela corta a partir de esta idea.
En esta semana, terminaré de leer y comentar los relatos de todos vosotros.
Gracias de nuevo y hasta el próximo mes.
Un abrazo
¿Qué tal Roger?
Un poco tarde llego pero ha merecido la pena. Me parece un primer capítulo para una novela de lo más conseguido. Con tu estilo directo y correcto consigues que el lector se sienta cómodo en la lectura y además que se interese y disfrute porque entretienes.
Destaco los personajes que has creado. Ya de entrada que haya una periodista y un paparazzi es un acierto para una novela de intriga; la curiosidad y la primicia les puede meter en mil enredos. Describes a Minia con pocos detalles pero muy acertados (mente lúcida y mirada serena….prudente que no miedosa, con sentido del humor y un poco coqueta. Y además tiene un golf viejo…..). El lector empatiza con ella enseguida. También me gusta el comisario, algo más mayor tal vez y que mantiene una buena y simpática relacion con Minia.
Lola, la eficaz secretaria y a la vez confidente, es otro personaje que puede sorprendernos.
Tienes mucho argumento para una buena novela y, sospechando la suerte que ha corrido el paparazzi, consigues intrigarnos de verdad. Yo quiero seguir leyendo tu novela, Roger.
Te felicito. Me ha gustado mucho
Un saludo
Marazul, gracias por las observaciones y me alegro que te haya gustado.
Es bastante probable que finalmente me anime a construir una novela, pero con calma porque tengo que desarrollar más la idea. En mi opinión, la descripción de los personajes conviene dejarlo para más adelante y dedicar el primer capítulo a centrar al lector en la historia,y captar su interés.
Efectivamente, el personaje de la periodista dará mucho juego. A pesar de su juventud, Minia tiene un pasado…
Espero leerte el próximo mes.
Un abrazo.