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CANAVAR - por Vardolac37

Jelena de cuatro años de edad, era la única que disfrutaba del descenso en el ascensor desde el piso 34 del hotel Mandarín Oriental en la ciudad de Nueva York. La infante, inocente de lo que sucedía, le hacía mimos a través del espejo a la joven niñera de origen francés. Su madre Irina, enojada con su esposo Pavlik, se ubicaba en uno de los extremos del elevador para evitar todo tipo de contacto con él.

La niña fastidiada, comenzó a moverse de tal manera que la joven no tuvo más opción que bajarla de sus brazos, pero al hacerlo se le cae su bolso dejando escapar todo lo que contenía, Jelena desesperada quiso asirse con el botín, mas su madre se lo impidió, a pesar de ello, la pequeña se inclinó solo para recoger un pequeño diccionario de idiomas (francés – ruso) y entregárselo a su cuidadora.

Irina lo sabía todo, era cuestión de tiempo para que la familia Zaïtsev tomara rumbos diferentes, debido a que la joven y hermosa francesa esperaba un hijo de su marido. Ella sospechaba que él siempre la engañaba con otras mujeres, sin embargo, esta traición no la perdonaría. De pronto, en el piso 21, el elevador se detuvo bruscamente, según parece algo había impactado sobre el techo de la cabina, todos se asustaron, menos la niña. No obstante, el ruido continuó, las luces internas fallaron, al igual que el sistema de comunicación. De inmediato el elevador comenzó a moverse como si se tratara de un temblor, la señora Zaïtsev asustada tomó la mano de su marido y trataron de buscar en la oscuridad a su hija, pero fue inútil.

Unos segundos después, el techo se desplomó violentamente, cayendo sobre ellos el material aislante; la niñera se situó por encima de Jelena protegiéndola con su cuerpo; la madre gritó de dolor, porque se incrustaron en sus ojos y parte de la cara los vidrios rotos de las bombillas; mientras que Pavlik tenía sobre él el resto del material aislante, así que no podía ver con claridad. En su desesperación levantó la pesada lámina echándola a un lado, pronto se dio cuenta de que había un agujero en el techo, alumbrando de manera tenue el lugar.

Irina afligida por sus heridas, llamó con voz débil a su esposo, él trató de ir hacia ella, pero chocó con algo muy fuerte, de inmediato fue empujado con violencia hacia atrás. Tirado sobre el suelo, Pavlik enfocó bien su vista, logrando así, ver en la oscuridad una figura humana de espaldas a él. Sin embargo, ya no escuchaba los quejidos de su esposa, porque esa cosa la sujetaba por el cuello, el empresario ruso no lo podía creer; ella luchaba por zafarse, pero fue inútil. Luego de varios segundos de agonía, la tomó por los cabellos y, sin perder tiempo, deslizó con violencia la otra mano por su garganta; su cuerpo cayó sobre el piso como un costal de papas, quedando colgada en su mano la cabeza sangrante.

De inmediato la terrible figura dirigió su mirada hacia el empresario, veía horrorizado como colgaba la cabeza de su esposa, la bestia la arroja en su regazo, y sin perder tiempo lo agarra por el pecho elevándolo a medio metro del suelo, Pavlik pidió piedad por su vida, pero el asesino no lo escuchó; pronto, comenzaron a caer las entrañas de su estomago abierto.

La joven se encontraba escondida entre el resto de los escombros, tenía su mano colocada en la boca de la pequeña para que no se escucharan sus gritos, pero fue en vano, el asesino sabía dónde estaban, de manera que quitó los restos y, agarró a la joven por la espalda aventándola contra el espejo, rompiendo su cráneo en cuestión de segundos.

Tumbada bocarriba sobre el suelo, quedó la niña llorando desconsolada, pero algo pesado se puso sobre su pequeño pecho, entre lágrimas y gritos ella lo toca con sus manitas y siente una mano velluda, grande y cálida. Jelena en medio de la lóbrega cabina comenzó abrir sus ojos poco a poco, para su sorpresa,la miraban unos ojos de color amarillos muy intensos; la infante había quedado embelesada debido a la belleza de su resplandor. Sin embargo, la escena fue interrumpida porque alguien llamaba desde afuera, al parecer era la ayuda; la bestia se levanta, eleva su mirada y escapa por el agujero.

En su rescate, solo encontraron tres cadáveres.

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5 comentarios

  1. 1. Jose Luis dice:

    Hola
    Me paso por tu relato para leerlo y dejarte un comentario.
    He encontrado esto:
    pero al hacerlo se le cae su bolso ———– pero al hacerlo se le cayó su bolso (se te coló un verbo en presente)
    Tu relato está lleno de momentos espeluznantes, hay tensión por todas partes, y la ambientación es agobiante y sórdida. Es un “thriller” en toda regla. Los momentos caen como machetes. Buena narración, tu cuento es muy entretenido.
    Un saludo

    Escrito el 17 marzo 2016 a las 21:36
  2. 2. Wanda Reyes dice:

    Hola Vardolac, te confiezo que tuve que leer tu relato dos veces pues empece con un relato de traicion y de repente se convirtio en algo completamente diferente a lo que me habias preparado para leer. Me sorprendio y me gusto mucho. Te invito a que pases por el mio aqui te dejo el link: https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-33/5296

    Escrito el 18 marzo 2016 a las 00:21
  3. 3. ortzaize dice:

    hola
    espeluznante esta narracion
    parece la matanza de los zares, en el siglo xxI que pobres.
    bueno me ha ¡sorprendido! la imaginacion al poder.
    gracias

    Escrito el 18 marzo 2016 a las 14:12
  4. 4. Osvaldo Mario Vela Sáenz dice:

    Hola Vardolac. Deseo antes que nada darte las gracias por tu visita a mi trabajo. En tu trabajo anterior mi comentario era una felicitación por saber captar el interés del lector; en esta ocasión repites de nuevo la hazaña. Al final me pareció que apresurabas el desenlace, por lo que me imagino que tu relato es un comprimido de un trabajo mas extenso. Por lo que leí tienes mucho material donde trabajar. Te felicito.

    Escrito el 19 marzo 2016 a las 01:48
  5. 5. Vardolac37 dice:

    Osvaldo, muchas gracias por comentar mi trabajo. Es cierto, se trata de un relato mucho más extenso de aproximadamente 9 páginas y como bien sabes, solo tenemos 750 palabras, aunque es importante resaltar que esta técnica de limitación, me está ayudando en mis relatos a ir al grano, a ser directo y evitar el aburrimiento tanto para mí, como para el lector, es por eso que sigo esta página.

    Gracias nuevamente

    Escrito el 19 marzo 2016 a las 20:13

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