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Un vuelo hacia otra parte - por Jada Beaumont
El autor/a de este texto es menor de edad
Mientras el tren hacía ruta hasta el aeropuerto, fue deshaciéndose de sus antiguas costumbres y obligaciones. Cambió todos y cada uno de sus esquemas y quiso dirigirse hacia una nueva vida. Llegó al aeropuerto y aún dudaba de su decisión, ya que sabía que debía dejarlo completamente todo atrás para partir desde cero. Hacía ya meses que lo tenía todo planeado: su nueva casa, su nuevo trabajo… Sin embargo, después de eso no quería rechazar la idea de una posible vida mejor. Así que, se armó de valor y subió al avión rumbo a Italia, uno de los países que más le enamoraban. Mientras tanto, hojeaba un libro de gramática y un diccionario de italiano para ir consolidando algunos conceptos aprendidos en la academia de lenguas.
Al llegar, cogió el autobús y se dirigió a la calle correspondiente donde se encontraba su nuevo hogar. Subió en el ascensor mientras se miraba en el espejo y suspirando pensó que lo hecho, hecho estaba. La casa era preciosa, tal y como parecía en las fotografías que le envió el vendedor. Para decir verdad, no era muy grande pero no necesitaba nada más. Era moderna y tenía mucha luz natural. Eso sí, se pasó los siguientes días cambiando un poco la distribución de los muebles y poniendo sus libros en la estantería; y, por otra parte, puso sus composiciones junto con su guitarra en un rincón del salón.
Hasta el momento se sentía bien y creyó haber acertado alejándose de todo lo que tenía para vivir en un país lejano, del cual no le disgustaba nada. Además, meses después ya había hecho unos cuantos amigos en el trabajo y en la cafetería de abajo donde solía ir.
Desde entonces cree que, queriendo o no, todos deberíamos darnos un cambio de aires cuando la gente que nos rodea no para de clavarnos un traición tras otra. Con irse de viaje unos días ya sería suficiente; no obstante, quiso un cambio radical en su vida.
Hola Jada:
Gracias por compartir este trabajo. El relato cumple las condiciones hay ascensor, diccionario y traición. Resolviste el tema incorporando las palabras de forma que no chirriasen mucho, por más que la traición casi queda fuera ;-).
En cuanto a la estructura del relato, creo que el hecho de forzar la entrada de la “traición” lo transformó en una especie de moraleja , así dices todos deberíamos darnos un cambio de aires cuando la gente que nos rodea no para de clavarnos un traición tras otra.
como lector tal vez quisiera saber algo más, como fueron esas traiciones, por qué el personaje se marcha, esas cosas que hacen interesante un relato. Hay algunos saltos temporales que entorpecen la lectura, pienso que debidos al uso un tanto apurado de los tiempos verbales y la asincronía de algunas situaciones, p.e cuando escribes :
.
Ánimo y continúa escribiendo y compartiendo lo que haces, ese es un buen método. Un abrazo
Hi Jada
Me parece que lograste crear una historia que da para mucho más. Como menciona el compañero, hace falta profundizar un poco en la situación del personaje, las motivaciones que lo llevaron a tomar esa decisión, que aunque ya sabemos que fue por alguna o varias traiciones, no conocemos nada más de él, ni que hay detrás de esas traiciones ni la historia que esconde.
Parece difícil lograr cierta profundidad de ideas en tan sólo 750 caracteres, pero créeme que sí es posible, sólo hay que dar el espacio justo a cada cosa que se quiere contar.
También sentí que le faltó emoción o dramatismo. Reitero, es algo que pienso se podía lograr contando más. Por lo demás, me parece que está escrito de forma correcta, la comprensión del texto se hace fácil y sin problemas.
Saludos!!!
Hola Jada:
En primer lugar gracias por compartir tu escena con nosotros. Vaya por delante que todos los comentarios son MUY MUY personales, y se basan en una experiencia más bien escasa. Creo que es un texto escrito desde muy al fondo del corazón, con el sentimiento, como se suele decir, y eso sí que has sido capaz de transmitir al lector.
En lo que se refiere al contenido, también he notado que me faltaba algo, es decir, que quería saber más sobre el personaje, y quizá podrías haber dejado alguna pista de los motivos que le habían llevado a abandonarlo todo. En definitiva he echado en falta un elemento detonador que iniciara algo. Creo, no obstante, que tienes claro el concepto de la composición lineal (narrativamente hablando), es decir, cabeza estructurada, jeje, aunque efectivamente, como dice el maestro Don Kendall, te traiciona la mixtura de tiempos verbales, lo que puede hacer que la historia avance un poco “a trompicones”.
En cuento al aspecto puramente formal, creo que el último párrafo se podría mejorar mucho. Primero porque das un consejo, o una sugerencia, cosa no demasiado habitual en narradores omniscientes, y en segundo lugar porque introduces el presente, es decir, te traes al lector al momento actual, para al momento volver a hablar en pasado, haciendo una escala en el condicional. La última frase está un poco hueca, no dice nada.
En general, creo que tu punto fuerte ha sido la transmisión de un sentimiento, y en el aspecto formal tienes mucho campo de mejora, que espero que aproveches.
Muchas gracias por ofrecer tu texto.
Nos leemos!
Hola Jada,
En los comentarios anteriores ya te han explicado los puntos más débiles de tu relato. Yo apuntaré lo que me parece mejor: la correcta estructura y la sencillez narrativa. Además empleas un vocabulario adecuado.
El contenido del relato mejoraría mucho si introduces un elemento que tensione la acción, como mostrar la razón del viaje, esas traiciones que mencionas, y en el final nos impactas con algo imprevisto, por ejemplo: encuentra en la casa italiana una copia de la misma composición musical que él había hecho, años antes, para la persona que más tarde le traicionó.
Buen trabajo, mucho ánimo y a seguir escribiendo.
Un abrazo