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El mentiroso - por Venida de la luna
Web: http://enelmediodelatormenta.blogspot.com.es/
El autor/a de este texto es menor de edad
En cuanto la vi supe que era la persona indicada; la chica que necesitaba para contribuir al caos que ya había formado en toda la ciudad.
Esa noche había decidido invitarla a casa. No me conocía, y a decir verdad, yo a ella tampoco, pero no me importaba, no era algo que necesitase para llevar a cabo mi plan, por lo que decidí no dejar pasar ni un solo día más aquella oportunidad que se me presentaba frente a la puerta del bar cada viernes por la noche.
Solamente había hecho falta recibirla con un trago de whisky para que enseguida perdiera el sentido de lo que era la realidad y lo que no, por lo que me resultó mucho más sencillo el llevarla hacia mi cama y recostarla sobre ésta, mientras ella se removía entre las sábanas con una sonrisilla característica de ese tipo de borrachos que pierden la vergüenza nada más beber un trago de licor.
Me desvestí con una sonrisa dibujando mi rostro y entonces ella hizo lo propio con su ropa, tirando prenda por prenda al suelo, hasta quedarse al completo desnuda, excepto por la pequeñísima tela que cubría su sexo.
Mis labios rodaban por su piel de color sumamente pálido; un pálido enfermizo que me recordaba al color de la pureza. Y fue esa pureza la que me hizo perder el control cuando descubrí un tatuaje en sus costillas en el que se podía leer claramente la palabra Lie. En ese momento me acomodé sobre ella y comencé a acariciar con delicadeza su intimidad, haciéndole soltar algún que otro gemido. Sus manos, mientras tanto, recorrían con ansia mi espalda con la yema de sus dedos, y después con sus uñas al notar que había introducido un primer dedo en su interior y más tarde el segundo.
Me disponía a unirnos de la mejor forma que existía, pero antes de eso paré toda aquella diversión de la que disponíamos y busqué en el interior del armario una fina y larga tela negra que utilicé de antifaz. Me animé a retirar con los dientes la última prenda que me privaba de la belleza del cuerpo desnudo de una mujer.
Mis dedos caminaban por el sendero de su piel mientras que mis labios dejaban un rastro de saliva sobre la misma, propinándole besos e incluso algún que otro mordisco. Notaba su cuerpo tensarse bajo el mío y eso no hacía más que excitarme, tanto que mi miembro erecto luchaba por salir de la presión de la ropa interior, completamente pegada a mi piel.
Jadeaba. Sabía que iba a disfrutar como nunca.
Lentamente fui introduciendo mi miembro en su interior, pausándome de vez en cuando para que se acostumbrara a la sensación de sentirme dentro de ella. Su cuerpo al completo temblaba y la estrechez en la que se veía oculto mi glande me hacía querer cada vez más.
Dejé escapar un leve suspiro de mis labios y coloqué ambas manos en su cadera, alzándola para poder introducirme más en ella. Me vi envuelto por la lujuria del momento y de una única embestida me adentré por completo en su interior, haciéndola convulsionar de placer. Mi cuerpo entero se estremeció ante tal situación. Agaché la cabeza hasta el torso de su cuello y lo mordí con ansia, saboreando su piel, embriagándome de su aroma; mezcla de jazmín y sudor.
No sé cómo ni cuándo, pero acabé por perder la poca cordura que me quedaba embistiéndola una y otra vez, haciéndola gemir en mi oído. Pero había que ser sinceros, y es que se sentía tan jodidamente bien esa sensación…
Una última estocada fue la que hizo que mi miembro estallara, cubriéndola al completo de mí. Su cuerpo temblando entre mis brazos al borde del delirio… fue un cúmulo de acontecimientos los que me hicieron rugir de placer al correrme en su interior.
Desabrochándole el antifaz que minutos antes le había colocado en los ojos, se lo até al cuello, apretando con fuerza mientras rastreaba su cuerpo, aún cálido por el ejercicio que habíamos realizado.
Una vez su cuerpo dejó de moverse y sus ojos se tornaron completamente blancos, como su piel, la dejé tumbada sobre la cama, e inspeccioné su ropa. Debía tener algún recuerdo que quedarme de aquel día; algo que me recordara al mayor orgasmo de mi vida. Y así fue: una entrada de cine que guardé con delicadeza entre las páginas de uno de los libros de mi estantería; el diccionario de latín.
Buenas tardes: buena construcción del relato, bien escrito, faltan algunas comas a mi parecer, pero con una pulida cuidadosa.se ssoluciona, creí que en un principio me enfrentaba a un cuento de terror o de suspenso, por como sucedían las.acciones y lo enigmático de los personajes, y te invito a que lo trabajes de pronto desde este punto de vista, es tan solo mi opinión, pero creo que la trama podría dar para mucho más, me parece que la forma en la que esta escrito hace que se queda en lo meramente anecdótico, ahora vuelvo a repetirlo es tan solo mi opinión, pero bien relato. Nos seguiremos leyendo. Cualquier cosa estoy en el 36. Saludos
Estupendo relato erótico, me ha sorprendido el final, aunque te ha faltado desvelar lo que significa el tatuaje de la chica, ese “Lie”. El final cuadra muy bien con ese caos que mencionas al principio y que sorprende. Esta bien redactado también.
Únicamente que te centras demasiado en el acto sexual, (ya veo que te recreas), y desde fuera o casi veo que quedaría mejor abreviar esa parte un poco y volcarte en el asesinato. Es solo una idea, pero ya está muy bien así.
Estoy en el 138, por si te apetece.
Quería decir: desde fuera creo… esta tablet tiene vida propia
Hola Venida de la Luna.
Me ha resultado un muy buen relato con un final totalmente inesperado.
Al igual que Pilar, ¿Qué significado tiene el tatuaje?
Sigue escribiendo.
Bueno, yo no soy fan, precisamente de los relatos eróticos, porque me parecen demasiado recurrentes, pero reconozco que hay que saber escribirlos sin llegar a la chabacanería,y ese es tu caso. En cuanto a lo del tatuaje, “Lie” es mentira o mentir, pero no aclaras por qué la chica lo lleva. Quizá sea para dar título al texto, ya que el protagonista es un psicópata, mas que un mentiroso. Un saludo.
Hola Venida de la luna.
Me ha parecido muy bueno el relato. En mi opinión la presentación causa intriga, el relato erótico está muy bien escrito y esa segunda utilidad que le da al antifaz me ha sorprendido. Yo acortaría un poco la parte erótica para presentar un poco más al asesino, aunque tampoco le daría mucha importancia a esto ya que está muy bien escrito y narrado. Simplemente las 750 palabras a veces se hacen cortas.
Nos leemos.
Por cierto mi relato es el 2 por si te apetece leerlo.
Hola venida,
La historia es una escena de sexo, ok, está bien escrita. Ahora, final que pasa sin pena ni gloria.
Pasate por el mío el 128.
Saludos.
Hola Venida de la luna!
En cuanto a la forma y estructura mejoraría ciertas reiteraciones “trago de whisky””trago de licor”.
En el siguiente párrafo “Pero había que ser sinceros, y es que se sentía tan jodidamente bien esa sensación…
Una última estocada fue la que hizo que mi miembro estallara, cubriéndola al completo de mí. Su cuerpo temblando entre mis brazos al borde del delirio… fue un cúmulo de acontecimientos los que me hicieron rugir de placer al correrme en su interior.”
1o no entiendo el sentido de la primera frase
2o dices cubrir y luego en su interior
Respecto a la historia, me ha gustado aunque quizá sería necesario saber más sobre las motivaciones que le llevan a cometer un asesinato en un caos de ciudad formado por no se sabe quién ni cuando.
Estoy de acuerdo en que se ha desarrollado en exceso el acto sexual que está bien escrito en general
Mis saludos cordiales, @Venida de la Luna. Me ha sorprendido tu relato, fundamentalmente por lo adulto de su contenido y lo intenso en su narrativa, siendo que eres una menor de edad, según advierte Literautas. Por tales razones me parece un texto meritorio que cumple con el reto exigido y posee un encanto muy especial y oscuro de morbo sexual y fetichista muy válidos. ¡Felicitaciones, colega! Me intriga conocer o leer tus propias impresiones con toda seriedad y respeto. Tienes futuro en las letras, créeme. Sigue escribiendo.
¡Hola, Venida de la luna!
Confieso que me sorprendió leer un relato de este género en la recopilación, pero bueno…, siempre me apasionó lo imprevisible.
La estructura es excelente para el cuento erótico, aunque las frases deberían ser más cortas para no perder el hilo de la historia; no sé, quizá interponer un poco más de “punto y coma” o “puntos seguidos”
Ahora, como lector hay dos aspectos que no comprendí siguiendo la técnica narrativa: Primero, ¿que le hizo perder el control al protagonista?, ¿la pureza blanquecina o el nombre Lie tatuado en su piel? Segundo, y esto con algo de comicidad: ¿cómo hace para introducir sus dedos en su interior mientras está encima de ella?
En lo demás, me impresiona una acabada y entretenida historia de lujuria y morbo. Buena idea.