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Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

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Metamorphōsis - por Jean Ives Thibauth

Web: http://jeanivesthibauth.wordpress.com

Susana esperaba paciente a que aquel insecto saliera de su nariz. Hasta ese momento nadie, aparte del artesano que la había creado, había escarbado tan hondo en su interior. Lo que era sumamente incómodo. A nadie le gusta que irrumpan de esa manera tan descarada en sus entrañas.
Lo había notado cuando ya estaba dentro, despertándola de su letargo. Sabía que tarde o temprano se cansaría de subir y se marcharía, como tantos otros. Pero le hacía tantas cosquillas que no consiguió volver a conciliar el sueño. Eran unas cosquillas tan inocentes e irresistibles como la primera risa de un bebé y, aunque nunca antes lo había hecho, soltó una rotunda carcajada. Su eco se multiplicó por entre los árboles y las piedras del lugar. Escuchar su propia voz le resultó tan extraño que pensó que aquello no había estado bien. Podría estar quebrantando alguna ley.
Así que decidió obligarlo a salir. Cogió todo el aire que pudo reunir en sus rígidos pulmones y lo soltó de golpe, provocando un pequeño tornado que alborotó las hojas que se amontonaban a sus pies.
—¡Eh, que me caigo! —Protestó el insecto. Su voz era joven y alegre.
—Fuera de mi nariz el mundo es mucho más confortable —Le dijo ella de manera neutral. Aunque su rostro era el de una mujer rota por el dolor, era incapaz de sentir enfado, tristeza o felicidad.
—El mundo ahí fuera es maravilloso —corroboró él —. La hierba es de color verde, el cielo es azul, la flor del cerezo blanca…
Susana miró extrañada a su alrededor. Allí todo eran grises. De distintas tonalidades, pero gris, al fin y al cabo. Gris en las piedras, gris en el musgo sobre los árboles, gris en los rostros de la gente que iba y venía. Nubes grises sobre su cabeza. Gris en su piel y en sus ropajes.
El insecto, henchido de emoción, continuó hablando.
—… Los jilgueros se acurrucan en sus cálidos nidos de plumón, los niños corretean detrás de las cometas, los amantes se besan escondidos bajo las buganvillas…
Las imágenes que se proyectaban en la mente de Susana la confundieron más todavía. Su mundo, el único que conocía, eran lágrimas, arrepentimientos y corazones rotos.
—Si es verdad que es tan bonito ¿por qué te quedas conmigo?
El insecto bostezó y contestó:
—Tengo tanto sueño… cuando despierte te lo cuento.
—No, por favor, no te duermas ahora. Cuéntame más cosas —Insistió ella. Pero el insecto se había quedado muy quieto y muy callado.

Entonces no le quedó más remedio que esperar. Y mientras esperaba se imaginaba cómo sería el mundo más allá de los muros. El sol se puso esa noche muy despacio, bañando a Susana de reflejos dorados que se estiraban melancólicos hacia el horizonte. Parecía no querer abandonarla. Quizá porque sabía que cuando volviera a visitarla ya no sería la misma. Por el contrario, la luna salió gloriosa, resplandeciente, testigo en primera línea de aquel extraño suceso.
Pero el alba llegó y el insecto no se movía. Y luego volvió la luna. Y volvió el sol. Y aquel mágico vaivén entre el día y la noche se volvió interminable. Susana perdió la esperanza. La certeza de que aquel amigo había muerto apuñaló su corazón. Y se puso triste, muy triste. Por primera vez, su rostro inerte encajaba con sus entrañas. Al contrario de cuando se rio por primera vez, ahora hubiera querido quebrantar todas las leyes para poder llorar.

El día que dejó de esperar sintió un cosquilleo en la nariz. Una cabecita se asomó, olfateó la brisa de la mañana, y saludó:
—¡Hola de nuevo!
—Insecto, ¿eres tú? —Susana apenas creía lo que veía. Un sentimiento nuevo comenzó a aflorar en su pecho. Era fuerte y generoso, y pronto se irradió hasta la última pluma de sus alas. —Insecto, ¿me desvelarás ahora los secretos de la vida?
—Espera y verás —le dijo él. Con cierto trabajo salió por fin de su nariz. Estiró las patitas y se desperezó. Pegó un salto al vacío y, ante los ojos de Susana, reveló sus alas recién creadas en una explosión de color que se alejaba dando piruetas.
Sin duda era lo más maravilloso que había contemplado nunca.
Susana notó entonces cómo unas gotas rodaban por su mejilla. Enormes lagrimones mojaban su eterno rostro de piedra. Había quebrantado por fin todas las leyes. Y no le importó. Se sentía tan feliz que no le preocupó ser la primera estatua funeraria con sentimientos de carne y hueso.

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50 comentarios

  1. 1. Arsenix dice:

    Un cuento bastante hermoso, me ha encantado, especialmente el final.

    Escrito el 17 abril 2017 a las 18:04
  2. 2. marazul dice:

    Ohhhhh….!!!! me has dejado con la boca abierta Jean Ives. Que derroche de belleza y sensibilidad. Es divertido, primaveral y poético. Imaginacion le has echado, amigo. Me ha encantado. El final sorprendente.
    Te dejo porque voy a estornudar… me pica todo jajajaja….
    Saludos

    Escrito el 17 abril 2017 a las 18:50
  3. 3. M.L.Plaza dice:

    Hola.
    Como siempre, es un placer leerte. La historia me ha parecido bonita, interesante y muy bien escrita.
    Lo único que me ha chocado es que en el último párrafo hablas de plumas de alas. En el segundo párrafo dices que la estatua es de una mujer rota de dolor ¿de quién son las alas?
    Un relato estupendo.
    Saludos

    Escrito el 17 abril 2017 a las 19:11
  4. 4. ZU VAZQUEZ dice:

    Muy bonito tu relato.
    Igual que el relato del mes pasado me gusta la forma en que describes todos los detalles de la escena.
    Solo tengo una observación según yo se escribe buganvilias no buganvillas, supongo que fue un error de dedo.
    Saludos pasa por el mío estoy en el 202

    Escrito el 17 abril 2017 a las 22:48
  5. 5. Yoli dice:

    Hola, Jean Ives.
    Me ha gustado tu relato, lo he encontrado muy bonito, y como dice marazul, es muy poetico y te ha salido muy bien. Me gustó el final.
    He visto algún fallo sin importancia:
    —¡Eh, que me caigo! —Protestó el insecto. Su voz era joven y alegre. El “Protestó” se escribe con minuscula “—¡Eh, que me caigo! —protestó el insecto. Su voz era joven y alegre”
    —Fuera de mi nariz el mundo es mucho más confortable —Le dijo ella de manera neutral. Sería “—Fuera de mi nariz el mundo es mucho más confortable —le dijo ella de manera neutral.
    —No, por favor, no te duermas ahora. Cuéntame más cosas —Insistió ella. Sería “—No, por favor, no te duermas ahora. Cuéntame más cosas —insistió ella”
    Si quieres leer el mio, soy el 235.
    Saludos

    Escrito el 18 abril 2017 a las 12:57
  6. ARSENIX:

    Muchas gracias por pasarte y comentar. Me alegro de que te haya gustado.

    Me acabo de pasar por tu relato sin saber que ya me habías visitado, así que ignora mi invitación final, jejeje.

    Escrito el 18 abril 2017 a las 19:55
  7. MARAZUL:

    Muchas gracias por pasarte y comentar.

    Me alegro de que te haya gustado. Este mes buscaba algo que no creara tanta polémica como el relato anterior, algo blanco e inocente… creo que lo conseguí sin dejar de sorprender. jejeje. Todo un reto.

    También me alegro de haberte sugestionado… así me quedo contigo un ratito más.

    En seguida me paso por tu relato.

    Un saludo.

    Escrito el 18 abril 2017 a las 19:58
  8. ZU VAZQUEZ:

    Muchas gracias por pasarte un mes más.

    Me alegro de que te guste mi forma de escribir. Intento ser fiel a mi estilo, y no es fácil.

    Me has hecho mirar en la RAE jejeje, bien por ti. Pero he de decirte que buganvilla es el término correcto.

    Un saludo.

    Escrito el 18 abril 2017 a las 20:03
  9. YOLI:

    Muchas gracias por pasarte y comentar. Me alegro enormemente de que te haya gustado. Parece que algo poético es lo que le correspondía a la historia.

    Muchas gracias por tus correctísimas observaciones. Yo no lo había visto, y mira que corrijo hasta la saciedad… Yo y mi maldita manía de poner mayúscula cuando se inicia una frase…
    Intentaré prestar más atención a este problemilla mío. Muchas gracias.

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 18 abril 2017 a las 20:06
  10. 11. lectora70 dice:

    Hola Jean Ives!

    Sencillamente, maravilloso… Este mes te has superado. Es un relato precioso y bien narrado. Se lee muy fácilmente gracias a esa prosa tan clara y sencilla que utilizas. Con unas descripciones perfectas has hecho que la trama fluya de manera natural hasta el sorprendente final.

    Felicidades!

    Te sigo leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 10:46
  11. 12. Otilia dice:

    Hola Jean Ives Thibauth,
    Este mes no somos vecinos, pero como me gusto tu historia de curas, he venido a leerte.
    Tu relato me ha gustado mucho. Las descripciones son fantásticas.
    Los ángeles de mi relato esconden historias, tu ángel una bella mariposa. Felicidades.
    Por poner un pero, al comienzo escribes “…a que aquel…” creo que puedes escribirlo mejor.
    Buen trabajo. Saludos.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 11:28
  12. LECTORA 70:

    Muchas gracias por pasarte una vez más y por tu comentario.

    Me alegro de que te haya gustado. Me encanta cuando me dicen que la prosa es clara y sencilla. Precisamente quiero conseguir que mi estilo se caracterice por la sencillez y la naturalidad.

    Creo que este mes lo he conseguido 😉

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 12:36
  13. 14. Evelyn dice:

    No somos vecinos, pero te busqué expresamente porque no he podido sacarme de la cabeza al chico en el confesionario pasando su dedo por la raya del pantalón… me encantó tu cuento del mes pasado, lo narraste con maestría. Este está bien, pero es culpa tuya, has puesto el listón muy alto y mi favorito sigue siendo el de los mentirosos.

    Si te da tiempo, pásate a despellejar mi relato, es el 198, me serán útiles tus comentarios.

    Un abrazo, felicidades.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 12:42
  14. OTILIA:

    Muchas gracias por pasarte y comentar.

    Me alegro un montón de que me hayas buscado gracias a mi anterior relato.
    Solo espero no haberte defraudado con este otro y que dejes de leerme, je je je.
    Intenté irme al otro lado y evitar las polémicas, pero reconozco que los curas dieron más juego…

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 16:55
  15. EVELYN:

    No sabes lo que me agrada que me busques ente tantos compañeros. Sobre todo, teniendo en cuenta la alta calidad que hay en este grupo. Es todo un honor. Sois unos cuantos los que os acercáis cada mes y es todo un reto tratar de no perderos.
    Es curioso que tu favorito sea el relato de los mentirosos, el de mi lector beta casero es el de “Simón”, dice que será difícil de superar. Je je je. Yo en cambio no sabría cual elegir. ¡¡Cada mes les doy vida como si los estuviera pariendo!!!

    Te doy la razón, este relato de abril está “bien”. Nadie me ha dicho lo contrario, pero no da tanto juego como el del mes pasado. Es lo que pasa cuando inclinas la balanza hacia el lado contrario. Tan blanco e inocente quise hacerlo…

    Nos seguimos leyendo.
    Un saludo.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 17:33
  16. 17. SBMontero dice:

    Me ha gustado. Personalmente yo no habría retrasado lo de introducir que era una estatua funeraria, porque se ve venir, pero conste que es una apreciación personal, no maltrata el argumento para nada, eh.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 19:31
  17. SB MONTERO:

    Gracias por leer y comentar.

    Yo también creo que se veía venir. Sobre todo porque en la segunda frase ya lo pongo claro con eso del “artesano que la había creado”, pero creo que cerrar con la certeza de que es una estatua es atar los cabos para quien aún no se hubiera dado cuenta (como mi lector beta casero, que se sorprendió y todo, jejeejj)

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 19 abril 2017 a las 20:01
  18. 19. Paola dice:

    Hola Jean

    He disfrutado con tu relato. Bien escrito, bien montado y simpático. Al principio pensé que era una carcoma en la nariz de una marioneta, hay que ver la cabeza de uno como emprende camino por su cuenta!

    Solo un apunte que viene a cuento de lo de la marioneta. Al principio dices, como no podía haber sido de otro modo, Susana esperaba.
    Si es una estatua de piedra no puede llamarse Susana, en todo caso la estatua de Susana. Le he dado mil vueltas a una solución pero no es fácil. Si lo cuelgas en el blog puedes cambiar el inicio y poner algo como: en la oscuridad de la noche la figura esperaba…… La oscuridad de la noche te permite usar la palabra figura con el doble sentido que buscamos. El lector pensará que has usado figura porque no se puede distinguir bien mientras que tú la usas en el verdadero sentido de la palabra.

    Saludos

    Escrito el 20 abril 2017 a las 16:46
  19. 20. Isan dice:

    Hola Jean Ives:

    Empiezo a leer y me encuentro una estatua que piensa y un título que augura que tome vida. Muy bien, este relato promete. Buen comienzo.

    En principio pensaba que la estatua tomaría vida, pero la metamorfosis se refería al visitante.

    Todo lo que sigue me ha parecido de una finura exquisita. De una simple piedra y un insignificante bichejo has sabido sacar un bello relato. En realidad no es la piedra, es saber qué hacer con ella, como el Moisés o la Piedad. Hay que tener imaginación y sensibilidad para ello y este cuento tiene a raudales.

    Al final descubro que está en el cementerio, algo que no había pensado.

    Respecto a las plumas que te ha comentado M.L.Plaza, a mí también me había chocado, pero al terminar y ver que estaba en un cementerio, me he imaginado un ángel alado.

    Jean Ives, una vez más demuestras tu capacidad para sorprender a lo grande.

    Salud.

    Escrito el 20 abril 2017 a las 17:26
  20. 21. Berundgaar dice:

    Hola, Jean.

    Me ha pasado como a Paola. Al decir artesano he pensado que era una construcción de madera.

    Es muy bonito como planteas que precisamente dentro de una estatua funeraria, un monumento a la muerte, la larva se desarrolla y se transforma en una explosión de vida.

    Precioso de verdad.

    Si quieres pasarte por el mío y comentar, estoy en el 240. También va de “vida”, pero desde un punto de vista totalmente diferente. 😉

    Nos leemos, compañero. Un saludo.

    Escrito el 21 abril 2017 a las 07:56
  21. 22. Javier López dice:

    Hola Jean Ives, aquí una vez más.
    Deliciosa fábula, que me recuerda a un microrelato que escribí hace unos años sobre una estatua de un ángel que se enamora en un parque del chico que desayunaba en un banco frente a ella cada día. En este caso, parece un alegato a favor de la vida y la naturaleza, que una figura de piedra es capaz de anhelar mientras de muestra ante ella. Me ha encantado.

    Y qué decir de la técnica, soberbia. He visto algunas cosillas pero que ya te han comentado tanto Yoli como Otilia, y estoy de acuerdo con Paola en cuanto al tema del nombre, pero ¡oye!, que es una fábula…

    Espero volver a leerte.
    Un saludo.

    Escrito el 21 abril 2017 a las 11:50
  22. 23. Marián dice:

    Hola Jean Ives:
    ¡Que bonito! Tal cual he exclamado al terminar de leer tu relato.
    Has conjugado con maestría y delicadeza una relación imposible para alcanzar la belleza en un relato precioso. Un canto a la vida.
    Las cosas que te han corregido son pequeños detalles que ni siquiera molestan en la lectura.
    Un gusto leerte.
    Saludos, (223)

    Escrito el 22 abril 2017 a las 02:29
  23. 24. Osvaldo Mario Vela Sáenz dice:

    Hola Jean Ives, !que regalo! de letras tan grande nos obsequias.Tiene todo lo que un lector pueden pedir.

    Entre las expresiones leí “reveló sus alas” que podría ser “desplegó”

    La otra seria “develarás” en Lugar de “desvelarás”
    Ya para terminar me uno al clamor de las buenas vibras expresadas por los compañeros literautas quienes te colman de felicitaciones.

    Enhorabuena

    Escrito el 22 abril 2017 a las 05:08
  24. 25. Pepe Illarguia dice:

    Enhorabuena por tu sencilla historia, tan repleta de bellas imágenes, no es fácil hacer una fábula y lo consigues, es curioso que cuando la estatua deja de esperar sucede el milagro de la vida.
    Me ha parecido visitar otra vez el jardín del museo Rodin.
    Un placer, compañero.

    Escrito el 22 abril 2017 a las 19:09
  25. 26. María Kersimon dice:

    Hola Jean Ives, me alegra constatar que sigues avanzando por el camino de la auto superación. Esta vez,me han sorprendido la sensibilidad y poesía que hay en tu texto. La primera frase me impactó muchísimo. Pensé “algo fresco, algo nuevo”. Me pareció un inicio de una originalidad y una fuerza extraordinarias que causan un efecto intenso. Claro que esta intensidad se pierde a medida que se va desarrollando la historia, es inevitable, pero para entonces ya has enganchado al lector. En, digamos, la segunda parte del texto, los registros se vuelven más románticos, un punto demasiado para mi gusto personal, y el relato en mi opinión, pierde fuerza. Otra cosa es que me parece que el insecto sale de la nariz de la estatua y esta cree que ha desaparecido. ¿Como puede ser que cuando reaparece salga otra vez de su nariz y no se haya dado cuenta de que estaba allí?
    En cuanto a forma, aquí: “Y luego volvió la luna. Y volvió el sol. Y aquel mágico vaivén entre el día y la noche se volvió interminable”, encontré demasiadas veces “volvió”.
    Bueno, date por despellejado. En global, es un texto hermoso. La primera parte hasta “se había quedado muy quieto y muy callado” me pareció muy buena. A partir de aquí, sigue siendo bueno pero un poco empalagoso para mi gusto, aunque sigo encontrando el tema de la estatua que cobra vida muy original. Tienes frases totalmente poéticas y bellas “El sol se puso esa noche muy despacio, bañando a Susana de reflejos dorados que se estiraban melancólicos hacia el horizonte. Parecía no querer abandonarla”. Me gustó el contraste entre el mundo gris de la estatua y el mundo colorido que describe el insecto. Una muy grata lectura. ¡Sigue mejorando!
    Gracias por tu visita. Un abrazo.

    Escrito el 22 abril 2017 a las 21:51
  26. 27. Larahan dice:

    Hola Jean Ives Thibauth,

    Una historia preciosa y delicada.

    Comentarte que “—Protestó” , “—Le dijo”, “—Insistió” debería ir los verbos en minuscula ya que son verbos dicendi o declarativos. Además, tendría que haber un punto antes de la raya si no fueran verbos dicendi, creo.

    Un saludo.

    Escrito el 22 abril 2017 a las 21:53
  27. PAOLA:
    Muchas gracias por leer y comentar.
    Me ha hecho mucha gracia que te pensaras que era una marioneta. Mi lector beta casero creía que era un zombi en estado de putrefacción… Je je je.
    El asunto del nombre también me preocupó a mí. Pensé en un primer momento decir que era la inscripción de la tumba que tenía bajo sus pies, y que ella lo había adoptado como suyo, pero era mucho rollo explicar tanto y pensé que, puesto que pensaba y hablaba, que por qué no iba a tener un nombre propio.
    Aún así muchas gracias por tu a aporte, me parece un razonamiento y un recurso muy interesante.

    Nos seguimos leyendo.
    Un saludo.

    Escrito el 23 abril 2017 a las 13:38
  28. 29. Menta dice:

    Hola Jean Ives Thibauth: Me ha gustado mucho tu relato de este mes.

    Entre todos los que he leído es el más poético. Te felicito por cambiar tan fácilmente y tan bien de registro.

    Lo he seguido con facilidad y he sabido desde un principio que era una estatua. Me he imaginado que después del sueño saldría un bello insecto y que esta experiencia humanizaría a la estatua.

    Muchas gracias por compartir tu relato con todos nosotros. Un saludo, Menta

    Escrito el 23 abril 2017 a las 13:50
  29. ISAN:
    Muchas gracias por tus amables palabras. Me has sacado los colores.
    Tu primer pensamiento fue muy intuitivo porque la metamorfosis está claramente enfocada al insecto pero si te fijas Susana también sufre una transformación. Quería darle una doble intencionalidad al título.
    Me alegro mucho de hacerte sorprendido, solo espero tener la capacidad para seguir haciéndolo.
    Nos leemos.

    Escrito el 23 abril 2017 a las 14:43
  30. 31. Jean Ives Thibauth dice:

    BERUNDGAAR:
    Muchas gracias por pasarte a comentar y por tus amables palabras.
    Me alegro de que te haya gustado.
    Nos leemos.

    Escrito el 23 abril 2017 a las 21:20
  31. 32. Jean Ives Thibauth dice:

    JAVIER LOPEZ:
    Muchas gracias por pasarte y comentar.
    La palabra soberbia me ha llegado al alma. Aunque creo no merecerla. Gracias igualmente.
    Me intriga leer el micro del que me hablas. ¿Lo tienes en el blog?
    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 23 abril 2017 a las 21:34
  32. 33. Jean Ives Thibauth dice:

    MARIAN:
    Muchas gracias por haberte pasado y dejar tus amables palabras.
    Me alegro de que te haya parecido bonito.
    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 23 abril 2017 a las 21:54
  33. 34. Jean Ives Thibauth dice:

    OSVALDO:
    Muchas gracias por considerar el relato como un regalo. La verdad es que una vez que salen a la luz, las historias dejan de ser del autor para formar parte de la vida de sus lectores. Por lo tanto si que pueden ser consideradas un regalo. Totalmente altruista.
    La palabra reveló fue deliberadamente escogida frente a la palabra desplegó, la esperada, la fácil. Para mi tenia un significado mucho mas apropiado.
    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 23 abril 2017 a las 22:11
  34. 35. Anael dice:

    ¡Hola Jean!
    Qué bonita historia 🙂 Me ha encantado, al principio pensaba que estábamos ante una nueva versión de Pinocheta y su pepito grillo (y en el fondo no lo descarto), pero creo que tu relato va más allá de las puras comparaciones.
    A continuación te señalo los detalles que me han gustado y te hago algunas sugerencias, que son como las lentejas, si las quieres las tomas y si no las dejas 😉 :
    1. “Eran unas cosquillas tan inocentes e irresistibles como la primera risa de un bebé”
    Precioso y sencillo, como a mí me gusta.
    2. Putuación y Diálogos:
    a) “—¡Eh, que me caigo! —Protestó el insecto.”
    —¡Eh, que me caigo! —protestó el insecto.
    b) “—Fuera de mi nariz el mundo es mucho más confortable —Le dijo ella”
    —Fuera de mi nariz el mundo es mucho más confortable —le dijo ella
    c) “—… Los jilgueros se acurrucan en sus cálidos nidos de plumón, los niños corretean detrás de las cometas, los amantes se besan escondidos bajo las buganvillas…”
    Pondría el inicio en minúscula para dar la sensación de que no ha parado de hablar en ningún momento, lo que añade al entusiasmo de lo que está contando 😉
    —… los jilgueros se acurrucan en sus cálidos nidos de plumón, los niños corretean detrás de las cometas, los amantes se besan escondidos bajo las buganvillas…
    d) “—Si es verdad que es tan bonito ¿por qué te quedas conmigo?”
    —Si es verdad que es tan bonito, ¿por qué te quedas conmigo?
    e) “—No, por favor, no te duermas ahora. Cuéntame más cosas —Insistió ella.”
    —No, por favor, no te duermas ahora. Cuéntame más cosas —insistió ella.
    f) “—Insecto, ¿eres tú? —Susana apenas creía lo que veía. Un sentimiento nuevo comenzó a aflorar en su pecho. Era fuerte y generoso, y pronto se irradió hasta la última pluma de sus alas. —Insecto, ¿me desvelarás ahora los secretos de la vida?”
    —Insecto, ¿eres tú? —Susana apenas creía lo que veía. Un sentimiento nuevo comenzó a aflorar en su pecho. Era fuerte y generoso, y pronto se irradió hasta la última pluma de sus alas—. Insecto, ¿me desvelarás ahora los secretos de la vida?
    3. “Por el contrario, la luna salió gloriosa, resplandeciente, testigo en primera línea de aquel extraño suceso.”
    Reordenaría, porque si no parece que antes has dicho que la luna no va a salir gloriosa…
    La luna, por el contrario, salió gloriosa, resplandeciente, testigo en primera línea de aquel extraño suceso.
    Así ordenado sí que opones la luna al sol (que creo que era tu intención)
    4. Me gusta que al fina aclares que es una estatua funeraria, porque de repente la escena delos grises, los lamentos que presencia, todo cobra sentido. Porque nosotros sabemos que está basada en un cementerio, pero un lector ajeno no, y to de hecho pensaba que era una muñeca rota o una marioneta. Así que me gusta la aclaración, porque además la das con delicadeza y fluye con el texto, redondeando el final. En el caso de que, por aqgún motivo y comentarios que veo, quisieras quitar la aclaración final, te recomendaría que también cambiaras la palabra artesano por escultor, eso puede llevar a pensar más en piedra y menos en madera, como he visto que nos ha pasad a varios.
    Preciosa historia, me ha encantado ver como Susana puede dar vida en un cementerio y siendo una estatua. Toda una paradoja. El final inesperado y feliz, de las cosas que considero más complicadas en la escritura, así que mi más sincera enhorabuena. Poético y cuidado, sin grandes florituras, haciendo sencillo lo complicado. Salvo alguna cosilla de puntuación que no he podido evitar señalar en la forma (ya sabes cómo soy, jejeje), el relato me parece soberbio en su contenido, personajes y final. ¡Incluso has conseguido que me picara la nariz! Me he tenido que sonar después de leer el principio, jajaja
    Espero que las sugerencias te sean útiles 😉 Sólo si tienes tiempo (que ya sé que este mes estás más liado), me encantaría que te pasaras por mi relato a repartir las collejas literarias que consideres necesarias 🙂 https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-43/7740
    He disfrutado mucho, ya lo he leído tres veces, y probablemente caiga alguna más 😉
    ¡Un abrazo, nos leemos!

    Escrito el 24 abril 2017 a las 12:22
  35. PEPE ILLARGIA:
    Muchas gracias por pasarte y dejar tan amables palabras.
    Me alegro de que te hayas fijado en que uno cuando deja de esperar aparece aquello que desea. Es como el que encuentra lo que perdió cuando deja de buscar. jejeje.
    Gracias a ti ahora me apetece a mí conocer el museo Rodin y su jardín.
    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 24 abril 2017 a las 22:05
  36. MARÍA KERSIMON:
    Muchas gracias por tu despelleje.
    Me ha hecho mucha gracia que te pareciera empalagoso, jejeje. La verdad es que quise hacer algo tan blanco, tan lejos de polémicas, que me pareció un poco soso. Pero me gusta el resultado porque en cada relato intento cambiar de registro, ponerme contra las cuerdas y ver hasta dónde soy capaz de llegar.
    Gracias por decir que voy mejorando poco a poco. Esa es mi intención y realmente me siento con fuerzas para aprender cada mes un poco más gracias a vuestros valiosos comentarios.
    Por cierto, el insecto en ningún momento se había ido de su nariz, simplemente había hecho su crisálida y se estaba metamorfoseando. Por eso se durmió y se quedó muy callado y muy quieto.
    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 24 abril 2017 a las 22:13
  37. LAHARAN:
    Muchas gracias por pasarte por primera vez a uno de mis relatos y dejar tu comentario.
    Es muy acertada tu corrección.
    Me alegro de que te haya gustado.
    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 24 abril 2017 a las 22:23
  38. 39. Estel Vórima dice:

    Me ha gustado mucho este pequeño y conmovedor relato. Las metamorfosis tienen un algo especial que no sé definir muy bien pero que gusta.
    En cierto modo tu historia me ha recordado a la de aquel clásico Pinocho. Al tratar de dar vida a un ser sin vida como la estatua, y como has narrado las cosas desde la perspectiva de la oruga y de la estatua, sus distintas formas de ver el mundo.
    Un saludo de tu vecina del 218.

    Escrito el 25 abril 2017 a las 23:15
  39. 40. Wolfdux dice:

    Poco más puedo añadir a lo dicho. Solo una sugerencia, en la frase: “Y mientras esperaba se imaginaba cómo sería el mundo más allá de los muros. ” cambiaría el “imaginaba” por imaginó. Pero por lo demás, una maravilla de relato.

    Un saludo. ¡Nos leemos!

    Escrito el 26 abril 2017 a las 09:51
  40. 41. Cryssta (Madrid-España) dice:

    Hola Jean Ives, a estas alturas del mes ya no corrijo relatos y solo leo por placer así que he querido pasarme por tu relato. Tengo que decirte que me ha gustado mucho, me parece un cuento muy bonito.

    Espero leerte el próximo mes.

    Un abrazo.

    Escrito el 28 abril 2017 a las 11:50
  41. 42. lilian ht dice:

    Hola
    Me encantó tu cuento es muy bonito. La habilidad con la describes los actos de los personajes y los sentimientos que proyectan son fascinantes. La trama está bien estructurada y disfruté leyéndola. Espero que leas el mío para compartir criterios y darme algunos consejos ya que es la primera vez que participo soy el Nro. 178.
    Saludos

    Escrito el 2 mayo 2017 a las 20:53
  42. 43. Ratopin Johnson dice:

    Hola Jean Ives,
    buena historia, lo de la estatua me lo estaba oliendo, pero creo que sólo porque en algún momento me vino a la mente el cuento “El príncipe feliz”, aquel de la estatua y la golondrina. Precioso, por cierto. Lo has escrito muy bien, lenguaje poético, fluido y se lee estupendamente.
    En algún párrafo, sin embargo, creo que has estado menos inspirado.
    Por ejemplo: “…bañando a Susana de reflejos dorados que se estiraban melancólicos hacia el horizonte.” “..Se estiraban melancólicos”, no sé, me choca un poco. Quizá “…que se proyectaban melancólicos”. O “Por el contrario, la luna salió gloriosa, “, quizá mejor otros verbos: “la luna apareció gloriosa”, o “la luna surgió gloriosa”, dan más empaque. Bueno, son dos chorradillas. Es lo que tiene que cuando escribes bien, se te cuela alguna palabra más “sencilla”, por decirlo de alguna manera, y canta un poco.

    Saludos

    Escrito el 3 mayo 2017 a las 19:39
  43. MENTA:

    Muchas gracias por pasarte a leer mi relato y comentar.

    Me alegro de que lo hayas disfrutado. Cambiar de registro es un reto que me propongo cada mes para exprimir al máximo este taller.

    Nos seguimos leyendo.

    Escrito el 9 mayo 2017 a las 21:15
  44. ANAEL:

    Muchas gracias por pasarte por mi relato y por tu ración de lentejitas, siempre tan caldositas.

    Está claro que tengo un problema con la puntuación de los diálogos. Me voy a tener que hacer un cuadro con las normas y ponérmelas a un lado cuando escribo. Este texto lo cuidé al máximo y corregí todas esas cosas, pero está claro que me lio un montón.

    Me ha gustado mucho tu aporte con la reordenación de la frase de la luna. Tienes toda la razón de que el significado cambia.

    Me alegro de que te haya gustado. Que te haya picado la nariz es todo un orgullo. Y que lo quieras leer más veces un honor.

    Nos seguimos leyendo.
    Un abrazote.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 11:53
  45. ESTEL:

    Muchas gracias por pasarte y comentar.

    Me alegro de que te haya gustado. Tienes razón las metamorfosis tiene algo especial. A mi me encantan las de los anfibios. Verles crecer las patitas y convertirse en ranas me parece cosa de magia.

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 12:00
  46. WOLFDUX:

    Muchas gracias por pasarte y comentar.

    Me alegro de que te haya gustado. Muy oportuna tu sugerencia.

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 12:06
  47. CRYSSTA:

    Me alegro de que elijas mis textos para leer por placer. Es todo un honor.

    Muchas gracias.

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 12:12
  48. LILIAN HT:

    Muchas gracias por leer mi relato y comentar.

    Me alegro de que hayas disfrutado con la lectura. Todo un honor.

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 12:18
  49. RATOPIN JOHNSON:

    Muchas gracias por pasarte y comentar.

    Me encanta el cuento del príncipe feliz. Es melancólico y muy triste pero bonito.

    Gracias por las flores. La verdad es que procuro escoger con cuidado cada palabra y la de “estirar” los rayos de sol es una de ellas, me parecía un símil muy plástico que le otorgaba fuerza. Pero está claro que no todo el mundo pensamos igual, jejeje.

    Nos seguimos leyendo.

    Un saludo.

    Escrito el 18 mayo 2017 a las 12:24

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