Cookie MonsterEsta web utiliza cookies. Si sigues navegando, entendemos que aceptas las condiciones de uso.

Do you speak english?

¿If you prefer, you can visit the Literautas site in english?

Apuntes, tutoriales, ejercicios, reflexiones y recursos sobre escritura o el arte de contar historias

<< Volver a la lista de textos

ALBA, ALIAS BUDDY-025 - por María Bonmatí Serrano

– Era más que un simple robot – lo dijo con la mirada perdida en el suelo – era…

En la sala se hizo un silencio cargado, cargado de pensamientos, de palabras que no se dicen, de sentimientos. Atendí a su expresión y antes de poder hablar continuó respondiendo a la pregunta que le había hecho antes “¿qué significaba para ti BUDDY-025?”

– Yo no la llamaba así, suena tan triste con esos números. ¿Tiene usted un compañero? – ahora me miraba fijamente.

– No, no me hace falta – respondí negando con la cabeza –, pero estamos hablando de usted, no de mí. Siga hablándome de su compañera- dije invitándole.

– Ella era especial, me conocía y yo a ella, nos fuimos haciendo el uno al otro, era tan real que perdí la noción de lo que lo es y lo que no. Sus gestos tan humanos, su tacto, su piel suave, sus manos… Claro, usted no lo puede saber– hizo una nueva pausa sin dejar de mirarme fijamente. – Deje que le cuente todo bien – había un deje desesperado en su voz-, para eso estoy aquí ¿verdad? Quieren saber por qué lo hice, asegurarse de que no lo volveré a hacer. Deje que le explique, seguro lo entenderá.

»Ella era especial. Me esperaba en casa cada tarde al volver, me abría la puerta con una sonrisa brillante y me abrazaba con todas sus fuerzas, era más bajita que yo así que podía acunarla contra mi pecho y bailar con ella sobre mis pies, sin música, al ritmo del latido de mi corazón. Cada semana hacíamos algo nuevo juntos y cada noche paseábamos de la mano haciendo el idiota; eso es lo que he sido, un completo idiota. Ella era todo para mí y yo todo para ella ¿qué hay mejor que abrazar a la persona que amas, notar su cabeza apoyada en tu pecho, acariciarla y dejarse llevar? Yo me dejé llevar por aquellos roces tan cálidos, sabía que me engañaba a mí mismo pero no quise pararlo.

»Un día, en uno de nuestros paseos, íbamos jugando como siempre. No me di cuenta porque iba andando de espaldas pero tropecé con el final de la acera, me iba a caer y podía oír el coche acercarse a toda velocidad, el chirrido de sus ruedas al tratar de frenar. Supe que mi cara reflejaba horror y la miré, esperando ver en su expresión el mismo temor, pero apenas vi su rostro, la atisbé seria e impasible abalanzándose sobre mí, apartándome, cayendo. Después solo hubo trozos de un poco de todo. ¿Me entiende? Tornillos, cables, piel, pedazos imposibles de identificar. También mucho ruido, el del acero rompiéndose y saliendo disparado junto con el de mis gritos.

Se le quebró la voz, boqueaba intentando articular palabras que no salían. Le vi esforzarse por respirar y, a la vez, por continuar hablando. Le escuché desahogarse de manera ruidosa, sollozaba su nombre “Alba”.

– Me encerré durante días, sin querer saber nada de este mundo que había perdido el significado para mí. Y entonces… – paró, boqueando de nuevo.

– Dígame, ¿qué pasó entonces?.

– Llamaron al timbre.

»No habría abierto esa puerta pero su voz era tan dulce y tranquila, muy parecida a la de Alba, una extraña casualidad ¿no cree?. Dijo que cuidaría de mí, que la enviaban para eso, ya sabe, mis padres. Ellos viven muy lejos pero me la enviaban para cuidarme, menuda ayuda. ¡Qué rabia! Por venir de ellos, por tan desconsiderada “ayuda”, por no venir en persona a verme en un momento así, porque no necesitaba ni quería a esa otra compañera. Nunca nadie sustituirá a mi Alba ¡¿Lo entiende?!.

» Sí, me inundó la rabia y le abrí la puerta. La dejé pasar y después saqué el cuchillo. Pero no vi cables ¿sabe?, solo salía sangre.

¿Te ha gustado esta entrada? Recibe en tu correo los nuevos comentarios que se publiquen.

6 comentarios

  1. 1. Servio Flores dice:

    Hola, María.
    Gracias por leer mi relato y por sus palabras.
    En cuanto a su escrito, de entrada puedo decirle que me ha gustado y mucho. Lleva ese elemento sorpresa que deja una excelente impresión.
    Plantea además esa sustitución de nuestras tareas y responsabilidades por otros, en este caso, aparentemente, por los robots.
    Siento que apuntamos en general, (y esto lo concluyo por los pocos cuentos que hasta ahora he leído,) hacía una sociedad futura donde humanos y máquinas tendrán una vida complementaria, desde la ayuda en los quehaceres hasta acompañamiento sentimental.
    Únicamente apuntaría, para mejorar el relato revisar la puntuación, el entrecomillado y el uso de los guiones largos. Solo lo que una pulidita le agrega en mejoría.
    Felicidades.
    P.S. este link lleva a una escena anterior donde desarrollé algo relacionado
    https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-39/6781

    Escrito el 19 octubre 2017 a las 15:20
  2. 2. Héctor Romero dice:

    María, agradezco tus comentarios a mi relato a la vez que te felicito por el tuyo el cual me ha parecido muy interesante con ese factor sorpresa al final. También te sugiero un poco lo referente a la puntuación, detalle que no opaca la esencia de tu relato. Tu compañero literauta 76.

    Escrito el 19 octubre 2017 a las 22:58
  3. 3. Naoko Marcapasos dice:

    Hola María, me gustó tu historia, es fácil de leer y me mantiene intrigada desde el primer momento. No me esperaba ese final, cosa que le da aún más puntos al relato.

    Escrito el 20 octubre 2017 a las 00:20
  4. 4. Ane dice:

    Hola María me ha gustado mucho tu relato. Está narrado con suma sensibilidad y logras transmitir muy bien el estado de desazon por el que pasa aquel que pierde su otra mitad.

    Si acaso como dice mi compañero en el anterior comentario, el pero lo pondría en los signos de puntuación. Nada que no se pueda solucionar con un breve repaso.

    Te felicito.

    Ane.

    Escrito el 20 octubre 2017 a las 07:33
  5. 5. María Bonmatí dice:

    ¡Muchas gacias a los cuatro por vuestros comentarios! Le daré un repaso para arreglar los errores que me habéis señalado y que no se quede así. Me paso por los vuestros pronto Anne y Naoko.

    Escrito el 20 octubre 2017 a las 15:05
  6. 6. R.J. Esperanza Pardo dice:

    Hola, María

    Me ha gustado mucho tu historia, has creado un ritmo ascendente perfecto. Lo que más me ha gustado es el desenlace, el arrebato que le da a la prota es sorprendente pero es que además es muy creíble.
    También has elegido un título que no revela, que ya es bastante para estos cuentos tan cortos. Pero en el aspecto formal me ha gustado más la parte en la que la protagonista cuenta su relato de su propia historia, que en realidad es la que lleva el peso del todo.

    Enhorabuena y un cordial saludo

    Escrito el 22 octubre 2017 a las 12:21

Deja un comentario:

Tu dirección de correo electrónico no será publicada.