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El crimen perdido - por Lucy J.S
El autor/a de este texto es menor de edad
Lo primero que pudo ver fue una potente luz en su rostro que impedía que pudiera abrir los ojos por completo. Luego de parpadear varias veces, comprendió que estaba en posición horizontal hacia una lámpara del techo, así que se sentó en la cama donde se encontraba, sintiendo un fuerte dolor en la cabeza, y observó donde estaba. Era una habitación pequeña, con un color grisáceo en las paredes, compuesta por una mesa pequeña, un inodoro y la cama. Pero se percató de que no estaba solo en la habitación, había un hombre sentado de brazos cruzados en el otro extremo de la misma, observándolo con atención. Cuando vio que él se había despertado, acercó su silla y se sentó enfrente suyo.
—Buenos días, por fin ha despertado. Bueno, mejor comienzo rápido con las preguntas-dijo revolviendo los papeles de su maleta, hasta sacar una libreta.
—Disculpe, ¿dónde estoy?-preguntó sosteniendo su cabeza.
—Estás en un lugar acomodado exclusivamente para ti, ya que te encontramos desmayado-afirmó con tono burlón.
— ¿Quién es usted?-indagó preocupado.
—Me llamo Felipe, soy un agente de policía. Me enviaron para interrogarlo, así que dígame ¿conoce a Enrique Morales? -preguntó anotando en su libreta.
—No, señor-dijo generando que el policía frunza el ceño.
— ¿Conoce a Juana Méndez?
— No, señor-afirmó, aunque le sonaba familiar
— ¿Tiene algún vínculo con Federico Suarez?-preguntó impaciente.
—No. Mire, no puedo contestar a sus preguntas porque sufro de amnesia, ni siquiera recuerdo mi nombre. Lo único que sé es que tengo una familia que está en problemas y la he estado buscando todo este tiempo, mientras unos hombres me perseguían; creí haberla encontrado, pero no fue así-dijo esto último con un nudo en la garganta.
Ese recuerdo lo azotó con gran dolor. Había descubierto que debían estar en un hotel a las afueras de la ciudad porque él les dijo que fueran allí. Pero cuando llegó a la respectiva habitación, descubrió que el cuarto estaba vacío y no había señales de que alguna vez alguien hubiera estado allí. Recordó cómo sus esperanzas parecían derrumbarse y que se sintió atraído por la única puerta que había en el lugar, pero antes de abrirla por completo sintió un golpe en la nuca y luego nada.
—Dijo que es policía, si pudiera ayudarme a encontrarla se lo agradecería-pidió suplicante.
— ¿Cómo es físicamente la familia de la que hablas?
—Mi esposa es rubia de ojos celestes, tengo un hijo de 10 años con pelo enrulado marrón y una niña de 5 años con cabello rubio largo, o al menos es lo que recuerdo.
El policía se lo quedó mirando con mucha atención, como si quisiera creerle. Pero no era así.
—Si no fuera porque sé la verdad, le creería lo que me ha contado. Sabemos que perdiste la memoria, así que te contaré lo que realmente sucede. Tú no tienes una familia, sino que te dedicas a matarlas. La familia que recuerdas es la de un hombre rico llamado Enrique morales al que extorsionaste para recibir dinero. A pesar de que te lo entregó jamás le devolviste a su familia, por lo que contrató hombres para buscarte. El cuarto que me cuentas es donde tuviste a la familia, hasta que la mataste y escondiste en el armario. Tu plan no salió como uno esperaría, pero eres un criminal y pagarás por lo que hiciste.
Me ha encantado! El giro en el final está muy bien, no me lo esperaba en absoluto. Me ha dejado una sensación de bastante asombro e incluso malestar al leerlo, está muy bien. Enhorabuena!
Me encanto el titulo, aunque la tematica de los asesinos no es lo es lo mio el giro sorpresivo del final es muy bueno ya casi me estaba encariñando con el personaje. Tal vez me hubiera gustado conocer como es que el policia lo sabia todo o si es un detective famoso. Buen relato, muy entretenido.
Saludos
Me ha parecido interesante y lo único que veo a corregir es que debes usar el guión en la acotación, así como lo haces en el diálogo.
Hola Lucy J. S.
Muy interesante el giro final de los acontecimientos pero veo algunos aspectos mejorables. Por ejemplo, el policía pregunta por tres personas diferentes pero solo se menciona una al final. No queda clara la función de las otras dos. Por otra parte, el protagonista no debería saber que sufre amnesia, ese diagnóstico correspondería al narrador o al policía.
Son pequeñas cosillas que me parecen mejorables. Pero tu relato mantiene la tensión hasta el final. Enhorabuena.
¡Hola Lucy! Comparto las apreciaciones que hace Chus Gallego. En general me gusta el texto pero intentaría corregir esos detalles para que funcione mejor y el giro del final sea más impactante de lo que ya es. Saludos y gracias por compartir tu relato.
Hola Lucy J.S., me ha gustado tu relato, tanto que me he quedado con las ganas de seguir leyendo, de descubrir nuevos detalles sobre la historia y sus personajes.
He de acotar cosillas mínimas. Primeramente lo mismo que Esteisy Capellán sobre los guiones, segundo lo que también ha mencionado Chus Galego sobre las personas por las que pregunta el policía durante el relato, ya que al final quedan dos en el aire, y generan algo de confusión pero tienes una buena historia aquí a la que podrías seguirle añadiendo. Si decides continuarla avísame.
Un saludo y feliz escritura!
Hola, Lucy.
Realmente tu relato es intrigante. Tienes imaginación.
te digo lo mismo que los otros comentaristas sobre los guiones y sobre esas personas por las que pregunta el policía.
Ánimo! sigamos escribiendo y ayudándonos a mejorar con nuestros comentarios.
Saludos
Hola. Me gustó el contenido aunque sea necesario trabajar un poco en la forma. En cuanto al primero: ¿Para qué lo interroga el policía si sabe toda la verdad? ¿Para qué le explica?
Mi relato está en el número 20, por si quieres comentar.
Hola Lucy: Buen relato al estilo de la novela negra, ameno y que se lee sin tropiezos, puede servir perfectamente como introducción a otro relato más largo. Un saludo.