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CONSUMACIÓN - por LLUMM
Anuncian cada día las campanas el rosario, y a diario forja el camino a la iglesia. Andar, ¡esfuerzo infinito! Todo su peso depende del bastón.
Es el suelo su paisaje más lejano, allá por debajo de sus pies, adoquines borrosos, confusos.
Su mano desenreda temblorosa su pelo almidonado. De entre su rostro arrugado brotan letanías y lamentos. Va dejando un halo de desesperanzas y desengaños.
Día a día su paso es más cansado, poco a poco se va apagando.
Hoy no responde a los tañidos, se esconde, se acurruca en el vacío, con los ojos cerrados apura su terminal aliento.
Me encanta cómo se describe al protagonista, se siente realmente su cansancio de la vida. Y cómo el título define el final desde el principio. 🙂 😛
Hola Llum,
Me has dejado boca abierta. Tu texto rebosa talento, tu forma de describir tanto con tan poco es admirable. En verdad espero seguir leyendo en los meses próximos.
Llumm me gusta tu micro, logra transmitir una atmósfera y un estado muy vívidos.
me encanta. Pregunto: ¿ porque no has usado las palabras sugeridas en el ejercicio? Me parece que tienes el talento para hacer cualquier cosa. Eso se nota. Felicitaciones
Hola LLUMM.
Me ha gustado tu relato, me recuerda escenas vividas en mi pueblo. Como decia mi padre: “Antes mi cuerpo me llevaba a todos los sitios, ahora le tengo que llevar yo a él”
Veo que has tenido el mismo fallo que yo, no veo el reto.
Saludos
Hola Llum,
tienes un estilo muy poético, felicidades. Todas las palabras que eliges nos añaden algo, una nota, un matiz, y en conjunto retratan una foto muy vívida.
Muchas gracias por tu relato
Abrazo
Si te apetece leerme estoy en el 128.
Hola Llum: El final de la vida descrito de una manera muy poética, me ha gustado.
Saludos desde el 142.
Hola Llum. He dejado reposar un poco mi mente después de leerte y antes de escribirte estas palabras. También yo me he quedado sin aliento. Por tanta belleza en tan poco espacio, por tanto talento, por una poesía en prosa, por un mensaje tan duro envuelto en algodón.
Enhorabuena. Te seguiré leyendo. Merecerá la pena sin duda.
Si quieres pasarte por mi escrito estoy en el #108.
Un saludo y gracias
Hola Llumm:
Te comento primero un detalle del principio que no termino de verlo bien.
“…y a diario forja…” no queda claro quién es el sujeto que forja el camino. Parece que deberían ser las campanas —que son las que anuncian—, pero está en singular, así que, con lo que leo, solo queda el rosario, pero eso no se dice. Otra opción mejor (supongo que la buena) es que quien forja el camino sea el anciano, pero eso lo suponemos cuando ya hemos leído el relato.
Se repite “a diario” y “cada día” que, dependiendo de lo comentado anteriormente sobraría o no.
El relato me ha parecido estupendo, de mucha sensibilidad, tristemente real. Un lenguaje muy logrado y preciso para lo que se pretende. Tiene un ritmo decadente y suena a muerto como las campanas. Me quedo con una frase que es muy visual: “el suelo es su paisaje más lejano.
Felicidades porque has reflejado mucho en poco.
Un saludo.