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La extraña conquista de BaradSar - por Juan F. Valdivia
Web: http://juanfvaldivia.wordpress.com
Decidió visitar a la bruja. Tomar tal elección suponía una pequeña derrota para él, AbDalKhan, conquistador de naciones. Siempre se había conducido según las normas del combate marcial, lo que suponía renegar de cualquier arte mágico. Pero la rebelde BaradSar se resistía desde hacía demasiado tiempo a sus huestes. Con sus fuentes y aljibes, jardines hortícolas y silos, soportaba como ninguna el asedio. Sus muros orgánicos, capaces de repararse a sí mismos, desafiaban a los cañones; incluso los dragones perdían utilidad repelidos por misteriosos haces de energía incandescente.
Pero AbDalKhan debía someter a BaradSar. Aunque para ello tuviera que rebajarse a usar magia.
Convocó a sus consejeros y les preguntó dónde podía dar con ella, la legendaria última bruja, Yashmina. El consejo intentó convencerle de la locura que aquello suponía, tratar con la criatura más aterradora del mundo, pero AbDalKhan se mostró inflexible. La volunta del señor se impuso y un grupo de eruditos trazó un plano para llegar a la probable morada de la nigromante. Por una extraña fortuna no parecía distar muchos días de BaradSar.
AbDalKhan partió en solitario: nadie sería testigo de su humillación al pedir consejo mágico.
Según la leyenda Yashmina había devorado los corazones de todas sus hermanas para acaparar sus poderes. Sin embargo, aun con todo ese supuesto poder, AbDalKhan la encontró malviviendo en una desvencijada choza erigida entre ruinas circulares. La bruja le aguardaba despierta dentro de la chabola, sus manos tendidas hacia un diminuto fuego chisporroteante. El pobre habitáculo olía a hierbas medicinales, ungüentos, mugre y orín rancio. Sin dar a AbDalKhan oportunidad de presentarse, la bruja habló:
–Sé a lo que vienes, AbDalKhan, y la respuesta está en esta botella – dijo la mujer, extrayendo de sus harapos un botellín de cristal esmeralda–. Pero no te puedo ayudar aquí: debemos regresar hacia BaradSar, al lugar donde unirás tu destino al de la ciudad.
AbDalKhan miró a la anciana con la mirada del guerrero incrédulo que sólo confía en su arma; pero obedeció. El viaje de regreso duró seis jornadas, la bruja y el conquistador compartiendo cabalgadura. La bruja parecía tan liviana que AbDalKhan creía estar acompañado por un espectro.
Al fin llegaron a su destino, la montaña BaradMor, cuya silueta dominaba la ciudad de BaradSar.
–Debemos subir a la cima. Andando.
AbDalKhan no protestó e inició el ascenso. Al alba del día siguiente alcanzaron la cumbre. AbDalKhan se volvió para contemplar el precipicio que acababa de escalar. A sus pies se desplegó toda la magnificencia de BaradSar: erizada de minaretes, enjoyada de palacios, engalanada de parques y estanques, fustigada por avenidas y vestida con telarañas de minúsculas calles. BaradSar la magnífica.
–La conquistaré, y nadie me la arrebatará –exclamó casi tan furioso como agotado–. Será mía.
–Así sea, poderoso señor. Pero primero toma esta pócima.
AbDalKhan arrebató el frasco de las garras de la bruja y bebió. Mientras lo hacía contemplaba el objeto de su deseo, BaradSar. La botella quedó vacía, pero él no notó nada especial. Se volvió iracundo hacia la bruja:
–Y bien, ¿ahora qué?
–Ahora desciende y conquista, mi señor –y sin previo aviso le propinó una patada en el estómago. AbDalKhan se encogió con el dolor y la sorpresa dibujados en su rostro. Sólo pudo dedicarle a la bruja una mirada de absoluto odio antes de precipitarse ladera abajo.
Durante unos instantes voló en caída libre. En su estómago notaba un intenso bullir, un revoloteo de mariposas. Rozó una roca que sobresalía del precipicio y sus huesos crujieron. Las mariposas de su estómago estallaron. Un intenso calor cubrió a AbDalKhan: sus brazos, sus piernas, su torso, todo él estaba envuelto en una bola de fuego. Siguió rodando ladera abajo. Allí donde su ardiente y descoyuntado cuerpo tocaba las rocas éstas se fundían. En apenas un puñado de latidos AbDalKhan se había convertido en el corazón viviente de una enorme e imparable colada de lava. La avalancha crecía a medida que descendía directa hacia la ciudad.
AbDalKhan apenas tuvo conciencia de los gritos, los llantos, la huida. Estaba desconcertado, alma consciente y agonizante de un mar de fuego. BaradSar cayó. Bajo un ejército de lava, pero cayó: murallas derruidas, palacios arrasados, parques devastados, avenidas y calles sepultadas.
Pasaron años, siglos.
Una única figura solitaria recorría las ruinas de BaradSar, un enorme gólem de basalto. Patrullaba la ciudad, lento pero implacable. En su mente ardía un único deseo: expulsar a los forasteros; o, si podía, torturarlos, matarlos…
–Es mía, sólo mía –bramaba–. Nadie me la arrebatará. Nunca.
Genial, el vocabulario, la escena y el final, en cierto modo me ha recordado a las leyendas de la Alhambra, tien esa mezcla entre para niños y para adultos.
Hola, Aurora.
Gracias por tu comentario. Me alegra mucho que te haya gustado el cuento. Si te animas a seguir leyendo textos míos tienes un puñado más de historias en http://juanfvaldivia.wordpress.com/category/creaciones/.
Recibe un cordial saludo y gracias de nuevo por tus palabras.
Juan.
Soy nuev@ en Literautas y no se si mis comentarios sean los esperados. 🙂
Ahi van:
El título: “La extraña conquista de….” encaja a perfección.
Las descripciones son muy completas y me permitieron imaginas las escenas con mucha riqueza.
Me gusta leer textos de vocabulario poco coloquial y este es uno de ellos.
Slds Juan F.
Hola, Marier.
Muchas gracias por tu comentario. Como ya pongo en mi blog agradezco todo comentario, ya sea positivo o negativo: siempre se aprende algo. Me alegra que te haya gustado mi cuento.
Aciertas en lo que dices del ‘vocabulario poco coloquial’: hasta ahora, las veces que alguien ha leído algo mío, muchas veces me decía eso, que uso palabras ‘raras’. Supongo que se trata de un defecto que me cuesta mucho evitar. Al menos que a alguien le guste precisamente eso, los ‘palabros’.
Como ya le puse a Aurora si te animas a leer más cosas mías (‘palabros’ incluidos) estás invitado a pasarte por la sección de mi web donde he empezado a colgar algunos textos: http://juanfvaldivia.wordpress.com/category/creaciones/
Un saludo y bienvenido a este diminuto universo de Literautas.
Juan.
Que guay! Una peli total! Has escrito algun libro? Esta historia se lo merece, y ese final tambien se lo merece… Despues de escribir paginas y paginas de increibles aventuras. Felicidades!
Hola, Lunaclara.
Pues no, nunca he escrito historias largas (mucho menos novelas). De hecho no considero vital dar ese paso para poder considerarse como poseedor de calidad literaria (hablo un poco de ello aquí: http://juanfvaldivia.wordpress.com/2013/10/10/autores-noveles-y-la-injustificada-obligatoriedad-de-la-novela/). De hecho ni siquiera había pensado en que esta historia pudiera tener capacidad para dar a luz una novela. Si alguna vez un editor me pone en la mano un buen fajo de billetes (lo suficiente como ‘estimularme de manera continua en un única historia’) quizá me centre en algo tan contrario a mi filosofía de escribir como una novela.
Recibe un saludo y me alegra que disfrutaras con la historia (puedes leer un poco más de ella en el ‘Comentarios a’ que le tengo dedicado http://juanfvaldivia.wordpress.com/2013/10/28/comentarios-a-la-extrana-conquista-de-baradsar/ y el próximo ‘Acerca de’, que con suerte lanzaré mañana o pasado mañana).
Juan.
Hola, Lunaclara.
Pues no, nunca he escrito historias largas (mucho menos novelas). De hecho no considero vital dar ese paso para poder considerarse como poseedor de calidad literaria (hablo un poco de ello aquí: http://juanfvaldivia.wordpress.com/2013/10/10/autores-noveles-y-la-injustificada-obligatoriedad-de-la-novela/). De hecho ni siquiera había pensado en que esta historia pudiera tener capacidad para dar a luz una novela. Si alguna vez un editor me pone en la mano un buen fajo de billetes (lo suficiente como ‘estimularme de manera continua en un única historia’) quizá me centre en algo tan contrario a mi filosofía de escribir como una novela.
Recibe un saludo y me alegra que disfrutaras con la historia (puedes leer un poco más de ella en mi blog, en el ‘Comentarios a’ que le tengo dedicado y el próximo ‘Acerca de’, que con suerte lanzaré mañana o pasado mañana).
Juan.
Hola, Lunaclara.
Pues no, nunca he escrito historias largas (mucho menos novelas). De hecho no considero vital dar ese paso para poder considerarse como poseedor de calidad literaria (hablo un poco de ello aquí: http://juanfvaldivia.wordpress.com/2013/10/10/autores-noveles-y-la-injustificada-obligatoriedad-de-la-novela/). De hecho ni siquiera había pensado en que esta historia pudiera tener capacidad para dar a luz una novela.
Recibe un saludo y me alegra que disfrutaras con la historia (puedes leer un poco más de ella en mi blog, en el ‘Comentarios a’ que le tengo dedicado y el próximo ‘Acerca de’, que con suerte lanzaré mañana o pasado mañana).
Juan.
Buen relato, de corte muy fantástico. Me han gustado los nombres, le agregan un plus a la historia.
Felicidades!
Excelente, y gracias por haber decidido dejarlo en cuento, así como está es perfecto. Es más, leí el comentario que te hicieron sobre el final, y es verdad que la transición entre la erupción y lo que pasa después es quizás algo brusca, pero en lo personal, se entiende perfectamente.
Hermosa la descripción de la transformación (y lo de “gólem de basalto” me pareció perfecto).
Hola, Servio y Cibeles.
Muchas gracias por vuestros comentarios. Me alegro que os haya gustado el cuento. Comentarios como los vuestros y los del resto que ha opinado me animan a seguir.
Si queréis podéis leer más en mi web, en el libro recopilatorio del taller (en ese parece mi primera colaboración, redactado para la escena 9), y en la escena 10 (https://www.literautas.com/es/taller/textos-escena-10/653).
Como siempre agradezco los comentarios así como las críticas (sobre todo esas, que es de donde más se aprende).
Un cordial saludo.
Juan.
Me has dejado atónita con tu relato. ¿Eres profesional en esto de la escritura? No sé si te gustará el comentario que te voy a hacer pero ahora que está tan de moda George R.R. Martin a mí me has recordado un poco a él. ¡Enhorabuena por tu talento! Envidia me das…
Me ha gustado mucho la trama. Me ha dado mucha pena el desenlace. Pero me ha encantado. Y el vocabulario, exquisito.
Hola, Olaya y Montse.
De nuevo muchas gracias por vuestros comentarios. No soy profesional, no: ¡ya me gustaría! Quizá con el tiempo, si suena la flauta, o si algún editor lo considera oportuno… 😉 No puedo negar que tengo a gente como Carlos Sisi o Blue Jeans como ejemplos a emular.
Mientras tanto trato de sacar tiempo de donde puedo para escribir. Si os ha gustado de verdad y queréis leer más cosas mías tenéis unas pocas en mi blog: http://juanfvaldivia.wordpress.com/category/creaciones/ Si os pasáis por ahí y leéis algo que os guste, o que os disguste, o todo lo contrario, estaré encantado de recibir vuestros comentarios y críticas. En la medida que pueda y sepa os contestaré.
Un saludo.
Juan.
PD: Os dejo que tengo un personaje paralizado que descubrir y describir 😉